En este y muchos más universos miles de seres viajan entre planetas supervisando la vida que dieron o en la que decidieron intervenir por razones diferentes. Algunos de estos solo buscaban como entretener su existencia, otros se sentía solos y buscaron la compañía, miles más nunca explicaron sus motivos mientras que otros tantos solo creaban cosas hermosas para deleitar sus pupilas con novedades. Pero no todo merece vivir ¿O si?.

Después de miles de años e intentos fallidos por establecer la paz en el planeta al que llaman tierra los dioses tomaron la desición de retirarse prohibiendo la interacción con cualquier ser vivo que habitara ahí, ¿el motivo? La humanidad y su aparente sed insaciable de autodestruirse junto con lo que les rodea. Esta desición aprobada por la mayoría de las llamadas deidades provocó la depresión y la locura de algunos dioses que dieron todo por tratar de salvar una parte de ese mundo, mientras que la usencia de seres superiores que ayudaban a equilibrar la humanidad provocó caos pues la balanza se inclino a la conveniencia propia y el hambre de poder de muchos que se hacían llamar líderes destruyendo así la vida y los valores que mantenía en la humanidad el delicado hilo de la cordura.

Los años pasaron y la lucha no acabó pues de una u otra forma la humanidad se traicionaba sin conseguir la paz. Asesinos, violadores, manipuladores, narcisistas y muchos más caminan entre las multitudes cegadas por la ignorancia de la verdadera realidad pues los monstruos siempre saben ocultarse y los niños no se atreven a revisar debajo de la cama por el miedo a enfrentarse a algo que no puedan controlar.