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𝐄𝐌𝐏𝐈𝐄𝐙𝐎 𝐔𝐍𝐀 𝐀𝐕𝐄𝐍𝐓𝐔𝐑𝐀
(𝐄𝐍 𝐂𝐎𝐍𝐓𝐑𝐀 𝐃𝐄 𝐌𝐈
𝐕𝐎𝐋𝐔𝐍𝐓𝐀𝐃) | 𝐀𝐂𝐓𝐎𝐍𝐄 𝐎𝐍𝐄

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❝Irse de un lugar, el comenzar una nueva vida y lanzarse al abismo de la incertidumbre siempre es uno de los pasos más difíciles de seguir en esta vida; generalmente nunca me preocupé por estos, debio a que siempre estuviste ahí, lista para sostenerme si me caía.

¿Qué se supone que haga ahora que no tento a mi lado, mamá?

¿Cómo sobreviviré a la inminente y gélida soledad y las tortuosas pesadillas sin tu abrazo, sin tus palabras reconfortes o sin tu simple pero necesaria e iluminadora presencia?

¿Siquiera podré sobrevivir al abismo?
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Python's Pov

𝐏𝐄𝐑𝐒𝐄𝐔𝐒 𝐇𝐀𝐁Í𝐀 𝐂𝐀Í𝐃𝐎 𝐃𝐄𝐒𝐌𝐀𝐘𝐀𝐃𝐎 𝐀𝐋 𝐒𝐔𝐄𝐋𝐎, supongo que era su primera vez siendo mordido por una bora.

──¡¿Por qué no despierta?! ──me preguntó Annabeth alterada, mientras Grover le hablaba al cadáver ─ok, no es un cadáver, pero es divertido fingir que si─.

Mi interés en el estado de Perseus era, bueno, inexistente, solo me importaba Niragi y Kara, ¿dónde estarán?

──¡Oye, te estoy hablando! ──escuché los pasos de Annabeth, pero solo confirmé que eran en mi dirección por la vibración. Mi oído aún estaba en proceso de recuperación.

¡Pero, hey! Mi vista estaba perfecta...., creo, no la puse a prueba.

Aunque Annabeth parecía que se moría por ser voluntaría, ¿que no es bien linda?

──Escucha ──le dije, volteándome en su dirección tratando de no arracarme mi propia cabeza por el dolor en mis oídos, era casi tan molesto como ella──, tu "amiguito" no despertará si sigues dedicándome insultos silenciosos, te recuerdo que él juró que ustedes dos no me atacarían de ninguna forma.

La sonrisa victoriosa en mi rostro se me hizo imposible de esconder cuando solo recibí el silecio como respuesta.

Era, o sonreir arrogantemente o sacar a pasear mis ojos.

¿Creen que escogí bien?

──El rubio ese va a despertar, tarde o temprano ──le dije, aunque no estaba tan segura de mis propias palabras, tampoco es que hacía juramentos todos los días──. Así que mejor respira y toma una hamburguesa de arriba, son para ustedes después de todo.

Las ultimas palabras salieron con más odio del que hubiera planeado, fué inconsciente, pero no por eso falso.

El silencio inundó el lugar, llenándolo de incomodidad, escuchándose solo los ronquidos de Percy. ¿Acaso se quedó dormido?

《Odio no hacer nada.》pensé, moviendo mi pierna impaciente ante la falta de acción en mi sistema, ante la falta de caos.

──Emfanízomai. (aparezcan) ──demandé con impaciencia ente el silecio, refiriéndome a las serpientes que crubían la decapiada cabeza de mi mamá.

Durante la pelea mi mamá..., su cabeza, pudo haberse perdido, la necesitaba de vuelta. Su cuerpo tal vez se descompuso, pero su cabeza, siendo groseramente usada como premio de guerra, debía seguir intacta; y no se las dejaría a estos insensibles.

Escuché a alguien pegar un grito seguido de un serpenteo. Joder, necesitaba saber si el grito fué de Annabeth o Grover, era material de burla futura.

Me acerqué a donde se escuchaba el serpenteo con más fuerza, me atreví a abrir los ojos, encontrándome con la cabeza sin vida de Medusa ahí, con una gorra azul a su lado.

Mis ojos se llenaron de lágrimas, supongo que eso ayudó a lo reseco que se encontraban.

──Oh, mamá. ──dije en un hilo de voz, arrodillándome frente a ella ─o lo que quedaba de ella─ y sosteniendo su cabeza sin vida entre mis brazos.

Su mirada, antes repleta de amor se encontraba completamente vacía y fría, y las serpientes de su cabeza con las que jugaba de pequeñas lloraban, lloraban como yo lo hacía.

──Mamá...

《Párate, te vez patética frente al enemigo.》 dijo una voz en mi cabeza, y me obligué a tragarma las lagrimas y morderme la lengua para no soltar sollozos. Me aferré con fuerza a lo que alguna vez fué el pilar de mi vida y me encederé, no queriendo lucir más debil e indefensa de lo que ya lo había hecho.

──¿A dónde vas? ──preguntó Grover cuando comencé a dirigirme hacia las escaleras.

Creo que puedo escuchar el cascabel de Niragi arriba, pero mis sentidos parecen ligeramente drogados todavía. De igual forma, necesito salir de aquí.

──Tengo que encargarme de la Furia que trajeron ──le respondí, sin voltearme a verlo mientras tomaba mi espada──. ¿O pretendían invitarla a tomar malteadas?

No iba a dejar a la Furia ahí como si nada.

Aunque ahora que lo pineso, ¿no querrá un banquito? Llevamos un rato aquí, debe estar incomocodísima.

Sin esperar respuesta, subí hacia mi casa, siendo un insulto llamarlo "hogar" sin la persona que le daba ese título.

Para este punto me había dado cuenta que estaba en "piloto automático", sin permitirme pensar demasiado, sin permitirme sentir el represivo brazo de la soledad.

Llevé a Medusa a su habitación, dejándola sobre lo que alguna vez fué su cama, con sus ojos sin vida pero igualmente mortales apuntando directamente hacia la puerta.

Sentía que Niragi y Kaira estaban subiendo por mi pierna, en completo siliencio como toda la casa.

《Estan vivas》 pensé con alivio, alivio que no tuve fuerzas para demostrar; pues no había nada que celebrar frente a la muerte de un ángel.

Me quebraba verla así, como solo la cabeza de un monstruo, representando todo lo que ella repudiaba y siempre se esforzó por no ser.

Me acerqué a su cabeza, deposité un pequeño beso sobre su frente y un susurro lastimoso le prometí:

──Volveré por ti, mamá, y ambas viviremos.

Había vuelto a llorar, pero ya no me preocupada por esconder mis lágrimas.

──Cuídenela. ── le ordené a las serpientes de todo tipo que entraban por la ventana de su habitación,  rodeándola como un trono, protegiéndola, asegurándose de que cuando yo volviera ella siguiera ahí.

Cada quien enfrentaba el duelo de formas distintas, esta era mi forma: evadirlo.

Evadir lo obvio hasta que ya no pueda más, tragarme mis palabras hasta que explote.

Había experimentado el dejarse sumergir por la tristeza y la pérdida en el pasado, no había sido una linda experienza, y por nada del mundo deseaba repetirla.

(...)

──Pero miren nada más. ──exclamó la Furia cuando me vió.

Su tono sonó burlezco, confiado, amenazante en cierta forma, todo lo contrario a como hubiera reaccionado si fuese mi mamá.

Porque yo era una mini versión de ella, alguien a quien no temer. Después de todo, no le temes a los osos bebes, sino a la mamá oso.

──Si saliste tu quiere decir que el plan de tu madre no ha funcionado muy bien que digamos... ──decía la Furia, regozándose de felicidad ante la inexistencia de un "verdadero" enemigo──. Pobre niña huérfana, no temas, te llevaré con tu madre.

Sentí como el suelo retumbó cuando se alzó por los aires, contra mi.

Tal vez debí sentir miedo al tener la muerte soplándome en la cara, tal vez tristeza al recordar que ahora no habría nadie a mi espalda que me protegiera si algo llegara a salir mal; o tal vez ira, porque me subestimaron, porque asesinaron a mi mamá frente a mi.

Pero no sentía nada.

No sentí nada cuando abrí los ojos, viendo por primera a la horrible bestia. No sentí nada cuando sus ojos malévolos se llenaron de pánico al estar consiente de su inminente muerte.

No sentí nada cuando su cuerpo infernal se cubrió de piedra y cayó al suelo en múltiples pedazos, reduciéndose su terrorífica majestuosidad en cenizas.

No sentí nada cuando Annabeth me contó los detalles de su misión y de la cual ahora yo era participe; mi cuerpo no se inmutó cuando mencionó el Inframundo como nuestra parada final o cuando Kaira y Niragi lloraron silenciosamente ante la muerte de Medusa, ellas también habían perdido una madre esa tarde.

Y tampoco sentí algún rastro de miedo o nostalgia al empacar, otra vez, mi vida en un pequeño bolso.

No sentía nada porque no valía la pena sentir ahora que mi mamá, que Medusa, no estaba en este mundo.

El mundo era gris, triste, desolado, vacío y carrente de motivo de seguir existiendo más allá que la esperanza de revertir el pasado.

La esperanza de obtener venganza me mantenía con vida.

(...)

Percy's Pov

𝐃𝐄𝐒𝐓𝐄𝐋𝐋𝐎𝐒 𝐃𝐄 𝐋𝐔𝐙, 𝐕𝐎𝐂𝐄𝐒, 𝐒𝐎𝐍𝐈𝐃𝐎𝐒 𝐃𝐄 𝐌𝐎𝐓𝐎𝐑, toda esa información llegaba de golpe y sin presedentes, no sabía de dónde provenía o dónde estaba.

Lo único que recuerdo es mi mano entrelazada con Python antes de ser mordida por una serpiente, algunos gritos lejanos de Grover y tal vez Annabeth ─aunque lo dudo─.

──¿Por qué esta demayado?──preguntó alguien que no conocía, su voz sonaba tan distante pero sabía que estaba cerca, frente a mi para ser exactos.

──¿Alguna vez comió comida rápida de dudosa procedencia? ──dijo otra voz, y su tono serpenteante y a la defensiva me hizo reconocerla al instante como la de Python──. ¿No? Pues no se lo recomiendo.

La respuesta de la señora nunca llegó a mis oídos, todo se escuchaba demasiado fuerte o demasiado lejos, no exitía un punto intermedio.

──Python...──murmuré por lo bajo cuando su aroma a fresas y chocolate amargo me llegó a la nariz.

¿Ella estaba bien, cierto? Digo, se veía muy grave cuando pasó..., eso, pero cuando me estaba desmayando ya no se veían tan desorientada y en su voz no había rastros del dolor de antes.

Poco a poco fuí recuperando los sentidos, notando que alguien me estaba ayudando a caminar, aunque más bien me estaba arrastrando. Entre los flash de luz del lugar divisé a mi lado dos patas de cabra ocupando unos shorts.

──Grover...──murmuré, sintiendo mi voz seca como el desierto mismo.

──¿Qué es comida rápida? ──preguntó otra voz después de dar miles de vueltas; por el tono mandón supe que era Annabeth.

¿No sabía que era comida rápida? ¡Ja! La iba a molestar con eso cuando pudiera decir más de una palabra.

──Por el amor de Afrodita, ¿qué les enseñan en ese campamento? ──exclamó Python, aparentemente ofendida.

Annabeth le contestó de vuelta, pero el intenso y repentino dolor en mi cabeza que apareció paralelo a sus palabras me impidió escucharla.

¿Qué habrá dicho?

Después caminamos otro rato, las voces de las personas me resultaban aturdidoras y molestas.

──¿Seguras que es aquí? ──preguntó Grover, deteniéndose de pronto.

──Sí. ──respondieron Python y Annabeth a la vez, y hubiera dado lo que sea para ver la cara que pusieron.

Entramos a lo que creía que era una habitación y, cuando me animé a abirir los ojos completamente, fuí cegado por la luz del sol dándome directamente a la cara, haciéndome desmayar de nuevo.

Genial, pasaré más tiempo desmayado que cumpliendo la misión en sí.

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HOLAAAA 💗💗

Actualización tal como lo prometí

Python, mi bebé, esta sufriendo mucho para tener solo 14 😭

Por otro lado, vieron como Percy la reconoció al instante? MIS PAPIS

Al fin terminamos el cap de Medusa, se viene el de la madre de los monstruos❗❗

Aunque si vienen de tiktok ya deberán tener una idea de lo que pasa.

PERDÓN LO TENÍA QUE HACER JAJAJAJAJAJ

Nos vemos en el próximo cap, los quierooo💗💗💗