—¡Ja!.–Tak exclamo con victoria mientras dejaba caer todas esas piezas tecnológicas sobre su mesa de trabajo, al igual que Zim.–¡listo!, tenemos todo lo que ocupamos para arreglar mi nave. –con una sonrisa volteó a ver a Zim y rápidamente lo tomó de su mejilla con dulzura.–y todo gracias a Ti Zim, muchas gracias por ayudarme.

Pero en el momento que su delgada mano acarició la suave Piel del irken, Zim se encontraba algo distraído y hasta despistado e irónicamente, siendo esta vez él quien se negaba a aceptar esas muestras de cariño de parte de su pareja.

—¿Zim, que pasa?.–Pregunto la irken de ojos morados con cierta angustia.

—ese humano cabezón que me llamó en ese lugar donde estábamos, en cuanto lo vi…–se silencio por unos cuantos segundos, aun con un vacío enorme en su pecho y mente.–¿nunca as tenido esos momentos donde tu mente te dice o te hace pensar que ya as visto a cierta persona?.

Tak abrió los ojos sorprendida y de inmediato desvío la mirada, tratando de no parecer muy obvia ante la respuesta de esa situación, parecía que aunque este se encontraba bajo la programación de ser su Amante, los recuerdos originales de Zim aún seguían vivos en alguna muy profunda parte de su cerebro y eso era lo que menos quería que sucediera en momentos como estos, por lo que, volvió a mirar a Zim y dejó ir una cálida y despreocupada risa y prosiguió a tomar sus manos.

—Zim, hay millones de humanos en este planeta, en general, este está invadido de estos, junto a algunas bestias y criaturas peludas, con escamas y otros con plumas, pero casi todos son iguales, seguramente que es por eso que lo recuerdas.–se escudo esta, esperando a que su ahora pareja mordiera el cebo.

—¿pero como es que sabe el nombre de Zim?. Es como si nos conociéramos.–explicó este con mucha duda.–Zim tiene muy vagos recuerdos de este humano, a mi mente llegan recuerdos, casi como proyecciones en la pantalla de la computadora, pero no se ve, hay una especie de estática. Zim recuerda unos lentes y chaqueta negra sobre el cuerpo de un humano

—Zim…–llamó su atención, esta vez con un tono más demandante.

—Zim no sólo recuerda su apariencia…también recuerda haber vivido algo a su lado, una especie de aventura o hasta más de una aventura…pero lo que más recuerdo es la especie de relación que tuve con dicho humano…No…¿no serás que me estás mintiendo?.

Parecía estar recuperando su verdadero yo.

—¿por qué te mentiría querido?.–Tak habló con un tono un tanto desinteresado y egocéntrica.–te puedo garantizar que ese chico ni lo conoces, de seguro que ya lo viste por algún otro lado y ahora que lo vuelves a ver, por ello llegan estas reacciones de parte tuyo.

—…supongo…–susurro el irken ya rindiéndose en toda esta rara situación.

Al ver que este ya había accedido a su hipótesis, arqueo la ceja con picardía y lo acercó hacia ella y luego tomó de su cadera, quedando cara a cara, Zim con el rostro teñido de azul por la vergüenza y Tak con grandes deseos de besarlo.

—supones bien amado mío…–La irken elogió mientras acariciaba sus mejillas suavemente.

—Tu también lo eres mi amada invasora.–hablo atontando y derritiéndose ante ese tan hermoso tacto y poniendo un rostro de perrito consentido.

Con su rostro cerca del otro, la Alien de ojos morados, se fue inclinando, mientras que con sus manos acercaba más el rostro de Zim, cerró sus ojos y unio sus labios, lista para formar un beso.

Y parecía que de verdad lo iba a hacer pero para su desgracia (y para Zim:su suerte) aquel pequeño robot se metió entre ellos dos.

—¡AMO!.–chillo Gir con locura.–¡AMO!~

—¿¡Gir, que no ves que no sabes que es la privacidad!? .–Zim se apartó muy molesto mientras le plantaba unos ojos de regaño sobre este.

—¿eso se come? Por que la verdad tengo mucha hambre.–el pequeño robot asistente comento con una sonrisa de oreja a oreja.

Por un lado, Zim tapó su rostro con la palma de su mano y cerró sus ojos con pesadez no pidiendo soportar el comportamiento tan idiota de su mejor amigo, por el otro lado al escucha esa precisa palabra, la irken de ojos morados trono sus dedos con una nueva idea para pasar el tiempo con Zim, llamar mas su atención y hacer que se concentre en sus planes, necesitaba mantenerse lo más lejos posible de ese oloroso humano azabache y de su hermana gotica, tal vez algo como una actividad humana le servirá.

—Zim, estaba pensando, ya que tu robot tiene hambre, por que no vamos a conseguir algo de comer en algún lugar de la ciudad, yo conozco un lugar que vende pizza y otras comidas chatarras que a Gir de seguro le van a gustar.–y se inclino hacia Zim para susurrarle Seductivamente.–y mientras el se divierte, tu y yo podemos pasar tiempo de calidad.

Era imposible para aquel irken negarse ante esa petición tan tentadora.

—que no se diga más, Que Tak y Zim salgan a ese lugar de comida entonces.–le correspondió a ella, tomando su mano con elegancia y plasmando un beso sobre esta, La contraria río con lujuria ante ese gesto tan romántico.

—Mimi, Gir, pónganse sus disfraces, vamos a comer.–Ordeno Tak, aun concentrado en su pareja.

[…]

En la sala de aquel ruidoso y asqueroso restaurante, lleno de niños, gaseosa derramada y pizza pegada a la pared y suelo, la peli morada gotica de largas pestañas se encontraba revisando su consola, de vez en cuando metiéndose un bocado de aquella masa de pan cubierta de tomate, queso y excesivo peperoni a su boca y tomaba un rápido trago de gaseosa.

—Agh, estupido rey mono. Ya dejate golpear!.–maldijo Gaz mientras veía ese primate hecho de pixeles en la pantalla de esa pequeña consola la cual usaba ahora mismo, rápidamente preparo sus pulgares y marcó un rápido código que le garantizaría una victoria, una vez escrita la convinacion, aquel mono gigante perdió energía y vida, un golpe más y ganaba.–Si así es. Solo un poco más y esa corona será mi-

—Gaz!

El cuerpo de su hermano mayor callendo sobre el de ella, la hizo perder el equilibrio en su silla, aquella consola de videojuegos se escapó de su agarre y cayó al suelo, quedando frente a su portadora, donde con sus propios ojos, miró como su personaje era atacado por aquel mono digital y quedó en un "game over" instante.

los ojos de Gaz se abrieron como si de ventanas se tratasen ,viendo como esta había caído humillada al haber perdido en ese videojuego donde ella se consideraba experta, con los mismos ojos abiertos que esta vez pintaban de Ira, Odio y rabia, apretó sus dientes como si fuesen lijas, lista para soltar el primer grito, pero el chico con lentes y chaqueta negra, se le adelanto.

—¡Gaz,por favor espera!.–Dib la detuvo y sentó en su lugar, con cierta inseguridad en su rostro, el sabia lo explosiva que podía llegar a ser su hermana menor.–necesito que escuches lo que voy a decirte, es demasiado importante.

—algo me dice que tiene que ver con la llamada de antes y eso implica que tiene que ver con Z-

—¡Tak le hizo algo a Zim!.–revelo con euforia el de ojos miel.

—lo sabia.–comento Gaz desinteresada.

—Pero Gaz, esto es diferente, ese no es el Zim que yo conozco y quier-se silencio abrupta mente, mientras que la sangre empezó a hervir en sus mejillas, volteo a ver a su hermana, quien levanto la ceja con sarcasmo.-Eh, quise decir, odio, al Zim que yo conozco y odio!.

—¿y que tenia de diferente?, ¿su peluca era de Micheal Jackson?.–pregunto la gótica, nuevamente con sarcasmo incluido.

—No, estaba con Tak, la estaba ayudando a destruir una tienda de electrodomésticos, parecían en equipo...y lo mas asqueroso...hasta parecían pareja.–se notaba la incomodidad y temor de Dib mientras narraba todo lo que había visto.-hasta los vi agarrándose de la mano y hablándose como gente casada. Zim y Tak,¡ZIM Y TAK!.

—aja...–Gaz le dio otro mordisco a su Pizza, era bastante notorio su carencia de interés  y paciencia ante la historia de su hermano.

—¡y no solo eso!. Zim actuaba como si no me conociera, me vio con extrañase y confusión y se sorprendió cuando lo llame por su nombre, es como si le hubieran lavado el cerebro o algo así.–la histeria se apoderaba de el, este rompecabezas era tan difícil de solucionar para la mente de un solo humano.

—¡Wow,que aterrador!.–Gaz exclamo poniendo una cara de terror fingida, sosteniéndose de sus mejillas con una voz muy burlesca.–¡Zim y Tak se hicieron novios y van a destruir la tierra robando electrodomésticos–y enseguida lo encaro con un rostro nuevamente desinteresado.–Dib, Tanto Tak como Zim, los dos tienen el cerebro del tamaño de una nuez, ninguno podría destruir o gobernar la tierra y si llegase a pasar, solamente será el estacionamiento de una tiendita.

—¡Gaz,no me estas escuchando!–Dib reclamo haciendo pucheros.

—Dib, ¿por que no mejor te sientas aquí y comes pizza y me dejas terminar este nivel que por tu culpa no pude completar?.–la pelimorada le ofreció amablemente y prosiguió a tomar de su bebida y seguir con su juego.

Dib gruño con frustración y se dejo caer sobre el asiento de lado de su hermana menor y tiro su cabeza contra la mesa y tomo una rebanada de pizza y empezó a masticar tristemente.

—es que no lo entiendo Gaz. Zim puede ser alguien que no me agrade, pero si algo se es que yo lo conozco lo suficiente como para saber que preferiría morir que trabajar junto a Tak y es muy raro que no me reconozca, yo soy el humano que mas debe saber y ahora de la nada, me vuelve a ver y se atreve a decir que no sabe quien soy...ese no es mi Zim...que paso con mi Zim?.

y mientras que Dib se ahogaba en sus penas y nube llena de dudas, una chica de cabello morado venia junto a un chico de cabello negro azabache, el cual tenia puesta unos shorts azules y una sudadera rosada con capucha y unas botas negras con tacón, estaban tomados de la mano y venían junto a un gatito negro y un perro visco y verde.

—¿cual mesa deseas usar?.–Tak le pregunto a su pareja, mirando a su alrededor.

—Ugh,este lugar esta muy sucio.–Zim reclamo asqueado, mirando hacia todas direcciones ante los restos de comida que estaban ahí pegadas.

-Mmm, ¿que tal te parece esa mesa junto a esos dos humanos?, se ve bastante limpia.

con sus dedos, Tak señalo hacia dichoso lugar, por lo que en modo de respuesta, Zim volteo a mirar en donde apuntaba su compañera, para tomarse la amarga sorpresa de ver otra vez al chico que vio en aquella tienda, ahora estando triste y comiendo pizza.

nuevamente ese sentimiento de repetición, recuerdos, imágenes, voces que se proyectaban en su mente y esta vez con algo gritándole que Tak le mentía, que solamente era su rostro lo que se le era familiar, cuando realmente no era así, algo dentro de el le indicaba que no estaba bien, que el conocía a ese chico, que era familiar suyo ,que habían sentimientos raros, unos sentimientos que el recordaba y que claramente aun sentía.

—¡Zim!.–Tak llamo otra vez su atención.

—S-si...Zim quiere sentarse en ese lugar...–hablo algo decaído.

—¡quiero pizza con sabor a Pollo!.–Exclamo Gir con entusiasmo y una gran sonrisa, mientras que torpemente se dirigía hacia la mesa en la que señalaba su otra dueña y Mimi le siguió el paso.

Tak dejo ir una risita.–tu robot ayudante es tan ingenuo y estúpido, no se como le haces para soportarlo. ven vamos a sentarnos.
y jalándolo de la mano,Zim solamente veía con una denotada tristeza al humano desesperado sobre esa mesa.

-¿quien es ese humano?.-se preguntaba  Zim con inseguridad en forma de murmuro.

-¿que paso con mi Zim?.-se pregunto el humano en voz baja.

-¿por que lo reconozco?

-¿por que ya no sabe quien soy yo para el?.

-¿por que siento que esto esta mal?

-¿por que siento que todo esto esta mal?.

-¿porque tengo estos sentimientos?

-¿que es todo esto que siento ahora por el?

-¿por que somos enemigos?

CONTINUARA

Próximamente, una pelea, Angst y corazones rotos👍.