Capítulo largo!

También, he decidido  mejorar un poquito de ortografía y cambiar de táctica para escribir, así que ahora en adelante me voy a trata de acostumbrar para usar guiones más largos en los diálogos.

[...]

—Zim inservible!. Suéltame ya!.–Tak murmuró entre regañadientes mientras forcejeo por liberarse del agarre y de los labios de Zim, los cuales no dejaban de invadir la piel de su mejilla.

Se levantó del suelo, quitándose las manchas de polvo de su uniforme y sin desviar sus ojos en dirección a ese Zim, el cual parecía estar locamente enamorada de ella.

—Tak. ¿¡Me puedes dar explicaciones?!.–pregunto aquel líder de colores rojos.

—Yeah, nos prometiste que veríamos a un Zim mejorado y mucho menos molesto, pero ahora está peor.–Purpura lloriqueo cómo un menor de 5 años mientras hacía pucheros.–Me siento muy ofendido!.

—N-no!.-se escudo ella negando con su cabeza.–esto no debería ser así!. D-debe de haber alguna explicación lógica para esto!. Eh trabajado en esto durante días, no puede simplemente salir mal!.

—aparentemente te a salido mal.–protesto Rojo con amargura.

—¡Arg!.–la irken de ojos morados zapateo con frustración.–¡Computadora, exijo que me muestres el código del chip que te ordene programar!.

Y cortando su llamada con sus Más Altos, aquella inteligencia artificial empezó a cargar toda esa larga orden de dígitos que pidió y narro Tak hace tiempo atrás.

Agarrándola desapercibida, Zim se relajo sobre los hombros de Tak, aferrándose en un cálido abrazo, cosa por la cual ella gruñó llena de rabia, sonando como si fuese un Tigre apuntó de entrar en una pelea.

—Tak, mi cielo, ¿cual es el problema?.–Dijo Zim con dulzura impregnada en su voz.

—¡Quítate de mí!.–se dirigió al contrario cruelmente.

—Ama, lo lamento pero no hay nada que corregir, la orden que usted me pidió no a sido alterada, sigue estando tal y como me lo pidió. Que el afectado terminará siendo su amante.–explicó la computadora.

Tak quedó estupefacta con un rostro lleno de frustración e histeria.

—Maldita chatarra vieja!.–murmuro tocándose las sienes conservando toda su ira.–te dije "que el afectado termine destruyendo a su Amante" no que SEA mi amante!.

—Oh... Perdone.–dijo desinteresado.

Enseguida Tak empezó a zapatea y a dejar ir fuertes gritos de sus labios, los cuales eran una mezcla de rabia y la poca paciencia que le quedaba, prosiguió a golpear el teclado de su computadora, haciendo que algunas teclas salieran volando mientras que Zim la miraba con una cara de preocupación y temor.

Cuando la temperamento se le empezó a bajar, la chica dejó caer su cabeza sobre aquella mesa, murmurando cansada, de sostenía fuertemente de sus antenas y todo su cuerpo estaba inmóvil, maldiciendo cada célula y mecanismo que había en esa computadora.

—Perfecto, simplemente perfecto!.–golpeo el teclado ahora con la falta de algunas teclas.–eh trabajado días en esto y mi estúpida computadora la tiene que cagar...ahora mis más Altos están decepcionados de mi y tengo a un Zim enamorado de... –levanto la cabeza con un rostro lleno de shok, procesando todo lo eso último dicho por ella implicaba.–...mi...

Se dio la vuelta. Zim estaba ahí mirándola con una sonrisa, esperando a que la contraria ya le diera permiso para darle cariño. Por ende, la irken abrió los brazos y presenció como este se acercaba y la rodeaba con sus brazos y enseguida besaba su mejilla.

—oh por la madre de Irk...Zim si esta enamorado de mi ahora.–dijo con los ojos bien abiertos, aun encerrada en el shok.

—por supuesto Tak...estoy seguro de que te amo!.–y enseguida de eso, la beso en su frente.

—un Momento...–se apartó de ese abrazo y dio unos cuantos pasos hacia atrás, evadiendo más el tacto de Zim.–Emm,Zim, quédate ahí, voy a hablar con Mimi.

—como quieras.–afirmó y se quedó parado justamente en ese lugar.

—Da un paso hacia atrás.–ella le ordenó

Y este lo hizo.

No solamente estaba enamorado de quien le disparo con esa Arma, sino que también estaba bajo esa programación de sirviente al cual le tenía que obedecer por vez que ella le ordenaba...tal vez esto no fuese tan malo después de todo. Espera... ¡No lo era!, realmente era una idea y oportunidad maravillosa.

Tak sonrió con maldad y una diminuta risita se escapó de sus labios la cual la tapó con su boca.

—¡Mimi!.–Tak lo llamó.

—¿Si Ama?.–llego de inmediato.

—¡esto maravillo Mimi!.–ella habló bajo, no solamente tengo a Zim bajo mi control. Ahora que está enamorado de mi, estará disponible a protegerme y a hacer lo que yo le diga...sino que además. Dib acaba de perder su recurso más valioso: Protección.

—Usted podrá tener más posibilidades de destruir este planeta ahora con este irken de su lado.–El robot le mencionó.

—exactamente!.–Volteo a ver al anteriormente mencionado, mirando y caminando alrededor de la Computadora, parecía que quería arreglar el teclado de este.–creo que ya es hora de empezar la fase 4 de mi plan...¿Zim?.

—¿Si amada mía?.–este volteó a verla con felicidad.

—Zim, verás.–ella se acercó amablemente.—quiero hacer un trato contigo, ¿Que tal si ambos destruimos este planeta?.

Los ojos del Irken se iluminaron con Alegría al igual que una gran sonrisa se formó en su rostro.

—¡Por supuesto que sí mi amada Irken!.–tomo sus manos con alegría.–a Zim le fascinaría conquistar este planeta con el ser que más adora en ese universo.

—Hm.-Curveo sus labios con victoria y cerró los ojos algo más relajada.–que bueno que digas que si...por que ahora mismo necesitamos ir a una tienda humana a conseguir unas cuantas cosas para reparar mi nueva nave y no voy a poder hacer el ataque sola.

[...]

—Y ¡Poof!. ¡Salto al techo de aquel edificio y desapareció!.–Dib exclamo en completo pánico, moviendo locamente sus manos en el aire, tratando de poder explicar al pequeño robot que se encontraba tirado sobre ese rojo sofá, comiendo papas tostadas.–Gir,¿tu no sabes en dónde es que pudo haber ido?.

—¡Cerdito quiere jugar a ser Superman!,¿tu quieres ser Lex Luthor?.–Gir Exclamo alegremente, mostrándole a aquel humano su pequeño cerdo de peluche.

Ante esto, el azabache con Lentes solamente gruñía desesperado por el malogro que se tenía con el pequeño robot asistente del ahora secuestrado Zim, era tan inútil explicarle algo a Gir y lograr con éxito de que este comprendiera y entrará en acción, pero no sucedía o entendía pero no le Importaba o no entendía y se ponía a jugar.

—Gir, por favor. Esto es enserio.–Dib comentó ya muy cansado de tener esa interminable conversación.–Tak secuestro a Zim y yo no se donde esta ella, no se cual es su guarida, no se por que ha vuelto a la tierra y tampoco se que quiere de Zim. Acaso tu no tienes algo, no lo sé, un radar, un GPS, algo para localizarlo.

—No se preocupe por el amo, Mary. Él es muy fuerte e inteligente, le puedo garantizar que de seguro en cualquier momento  lo va a encontrar en la ciudad creando explosiones y desastre por toda la ciudad, como el gran Invasor que es.

Qué conveniente, justamente Gir hablando de destrucción y fiascos, se escucho un fuerte bombardeo a lo lejos de aquella guarida donde se encontraba el azabache y el robot de ojos azules, parecía ser una bola de demolición chocando contra un gigante centro comercial, justamente en los vidrios de esta.

Dib se dio la vuelta, prestándole atención a los gritos de horror que soltaban los demás. Rápidamente salió de aquella guarida y por la puerta se asomo para ver que a unos cuantos metros, aquella tienda de tecnología, cableado y otros aparatos electrónicos, estaba echando humo gris y se veía a las personas saliendo de ahí aterrados y hasta cayendo al suelo debido a la desesperación que tenían de escapar ese lugar en ruinas.

Eso no pasaba mucho en aquella ciudad, mucho menos algo tan catastrófico como lo era este aparente atraco, esto solamente podía ser obra de ese siniestro y narcisista Alien  o al menos, eso deseaba Dib.

—¡Gir, sígueme!. Vamos a jugar un juego en la tienda de ahí.-Dib le ordenó al contrario mientras salía corriendo hacia dicho lugar.

—¡Si, un juego!.-Gir chillo con euforia mientras daba pequeños saltos de alegría.

Con una rápida y ardua velocidad que poseía en sus piernas, el humano corrió por la acera sin cuidado alguno, chocando contra todas las personas que habían en su camino, las cuales escapaban de aquel ataque en la tienda de tecnología ahora destruida, ni se molesto en ver el semáforo cambiar a rojo, cosa que le pudo causar hasta una posible muerte, siguió su camino hasta estar frente a la tienda, se detuvo de golpe al ver como esta tenía los vidrios rotos y por dentro, muchos puestos y productos estaban prendidos en fuego o  destruidas en el suelo, se detuvo de golpe y quedó parado frente a esta, con sus ojos ámbar bien abiertos al igual que su boca.

Gir lo seguía con su traje de Perrito, aún dando muy alegres saltos, creyendo de verdad que estaban jugando, pero en el momento que Dib se detuvo, chocó contra la pierna derecha del humano.

-P-pero…¿Qué a sucedido aquí?.-Se preguntó Dib mirando la tienda hecho a ruinas.

-¡ORDENÓ QUE LE DES A MI AMADA TAK ESA PANTALLA CON DIBUJOS COLORIDOS AHORA!.-exclamo una voz distorsionada y llena de ira, una la cual Dib pudo reconocer fácilmente y la cual hizo que se le pusiera la piel de gallina y se le formará un nudo en el estómago.

Miró por aquella entrada rota de vidrio y logró presenciar como Zim estaba ahí, con un arma láser en sus manos disparando en todas direcciones mientras reía salvajemente, no poseía su típico traje de niño humano, literalmente estaba expuesto, todos podían ver que el era un Alien.

Mientras que este destruía lo que estaba a su Alrededor, había otra irken a su lado, la cual estaba destruyendo una pantalla plasma hasta sacarle aparentemente la pieza que le hacía falta, una vez con esta pieza entre sus manos, la metió a un saco que está tenía entre sus manos el cual parecía estar lleno de diferentes piezas de diferentes electrodomésticos que habían destruido en esa tienda.

—¿Listo, amada mía?.–Zim habló dulcemente a la irken de ojos morados.

—ya tenemos todo lo que necesitamos para arreglar mi nave.–Exclamo la contraria tirando aquella pantalla lejos y aproximándose a Zim para tomar sus mano.–vámonos cariño mío.

—¿¡Zim!?.–Pregunto Dib con estupefacción.–¿Q-que haces aquí, por qué estás con Tak?

—¿Eh?.–Él se dio la vuelta para mirar quien lo llamaba y cuando localizó a aquel humano, sus ojos se abrieron por completo.–¿Dib-cosa?.

—Zim, ¿que haces aquí con Tak?.–dio unos cuantos pasos hacia adelante.–que te a hecho ella?

—¿por qué no lo estaría?.–Zim replicó ante ese comentario dicho por el humano.-ella es mi enamorada.

—¿¡Tu enamorada!?.–Dib reclamo aterrado.–¡lo último que yo recuerdo era que yo era tu secreto y debilidad!.

—¡Ah!.–Tak abrió la boca muy nerviosa y prosiguió a tomar del brazo de Zim y jalar lo a su lado.–Amor mío, creo que ya es hora de irnos, hemos hecho suficiente en este lugar y si seguimos aquí este sucio humano nos va a traer enfermedades.

—¡pero ni siquiera estoy enfermo!.–Dib hablo con cierta molestia.

—¡Amo!.–Gir grito alegremente para enseguida correr en los brazos de su mejor amigo.–¡lo he estado esperando en casa por horas!.

—cambio de Planes Gir, ahora estaremos ocultos en la guarida de Tak.–el Alien afirmó mientras lo sostenía entre sus manos y alcanzaba el tele transportador en su muñeca.–despídete de este humano apestoso.

—De acuerdo, ¡Adiós Mary!.–Gir grito a los cuatro vientos mientras movía su mano en señal de agradecimiento.

—No, ¡Espera!.–el de lentes corrió en dirección a ellos, pero cuando estaba por derrumbar a Zim, este desapareció junto a Tak y Gir.

Dib quedó tendido en el suelo, gruñendo por el tremendo golpe que se acaba de dar contra el suelo.

Se incorporo rápidamente, dándose la vuelta y viendo cómo el Dúo de aliens ya no estaba, su mente empezó a dar vueltas, las preocupaciones volvieron a su cabeza y  su estómago dio muy horrendos giros.

Qué acaba de ver, su enemigo se había unido a Tak, como que ahora ella era su amada, por que estaban robando piezas tecnológicas. Esto debía ser una broma. Simplemente tenía que ser una broma, necesitaba respuestas de inmediato.

Sacó su teléfono de su chaqueta negra y empezó a marcar el número de su hermana gótica y mientras tenía el teléfono entre su oreja y mano, salió corriendo hacia el lugar donde su hermana dijo que estaría esa noche.

—¿Hola?,Gaz, soy Dib, algo malo le esta pasando a Zim!

CONTINUARÁ.

El siguiente capitulo se viene con feels, pelea y corazones rotos.

Y también va a hacer un capítulo bastante pero bastante largo, así que les pido un poquito de paciencia 😅

Gracias por leer!.