Estaba sentado en una de las mesas más apartadas del lugar, teniendo una buena vista de la persona a la que su amigo amaba. O bueno... ex-amigo, considerando cómo estaban las cosas actualmente.

¿Cómo fue que se había enamorado de Heeseung? ¿Cómo es que no se había dado cuenta antes?

Bueno, puede que una parte de él lo supo todo, todo este tiempo. Incluso cuándo fingía no soportarlo y entenderlo, cuándo le decía cosas hirientes por chat y se burlaba deliberadamente de él mediante publicaciones inmaduras..., incluso con todo eso Sunghoon sabía bien que en realidad, puede que existiera la pequeña posibilidad de que le hubiera gustado ser a quién Heeseung realmente mirara.

La verdad es que ni él mismo se entendía.

Una parte de él quisiera admitir lo obvio, que a él le gustaba mucho, demasiado Heeseung. No era loco. Heeseung era naturalmente atento y atractivo, con una sonrisa hermosa y un corazón tan bello que era imposible no querer protegerlo todo el tiempo. Honestamente, entendía perfectamente a Jake, a Sunoo y a cualquiera que se hubiera interesado en Heeseung aunque sea en lo mínimo.

Pero otra parte de él no quería ser uno más de ellos. Uno más de la fila que estuvieran embobados por el chico mayor. Eso no era lo suyo. A él no le importaban los sentimientos. Él estaba bien con salir y tirarse una persona nueva todos los fines de semana, preferiblemente chicos bonitos y delgados, con cuerpos ardientes que le hicieran olvidar al idiota enamorado que tenía cómo amigo y sus grandes y hermosos ojos.

Sí, tenía serios problemas.

La primera vez que sintió algo por Heeseung fue cuando, en una fiesta, había perdido a todos sus amigos de vista, y aunque esto fuera algo normal ahora, seguía siendo nuevo en el grupo de Jungwon en aquel momento; por lo que no conocía a nadie más en la ciudad y se sentía muy fuera de lugar. El alcohol nublaba su mente, dejándolo mareado con cada paso que daba. Sentía manos toquetear de más por cada parte de su cuerpo, pero no le afectaba. Caminaba cómo un muerto vivo sin saber a dónde se dirigía realmente.

Casi cae de no ser por alguien.

Heeseung no sólo lo sostuvo fuertemente para sacarlo del lugar, también lo trató cómo nadie lo hizo antes y se quedó a su lado hasta que finalmente le pidió que se fueran, ya que definitivamente Sunghoon se estaba sintiendo mal ahí. Y Heeseung nunca lo dejó, ni siquiera cuándo lo llevó a su departamento y tuvo que acompañar a Sunghoon en la misma cama para que este pudiera pegar un ojo.

Y fueron los pequeños detalles, la constante atención, que lo hicieron sentirse cómodo con ese sentimiento, temiendo volver a sentirlo. El amor. Lo que es querer que esa persona se quede a tu lado por el resto de tu vida.

Pero todas sus esperanzas cayeron ese día, cuándo Ni-Ki hizo la estúpida pregunta en una noche de juegos y Hee mostró aquella foto. La del chico con el que estaba saliendo.

Su nombre es Jake.

Tiene veintisiete.

Lo conocí hace unos meses.

Él es perfecto.

Sunghoon sintió nauseas cada vez que Heeseung habló de Jake y de su relación con ese tipo. ¿La peor parte? Había tenido que ver con sus propios ojos el inicio de todo. Cuándo Heeseung y él desaparecieron por las puertas y Sunghoon lo supo, supo lo que se vendría a continuación porque él no era ningún santo y mucho menos Heeseung.

Había querido tan malamente ser aquel a quién Heeseung tocara y besara. Quería ser quién realmente probara la piel del mayor, sus perfectos labios. Quería ser aquel a quién Heeseung mirara y llamara por apodos. Quería ser quién recibiera los halagos del mayor y le hiciera sentir bien.

¿Qué tanto le costaba haber llegado antes? ¿Qué tanto le costaba a Heeseung darse cuenta que a su lado tenía a alguien literalmente muriendo por su atención? ¿Tan difícil era amar a alguien de su edad? ¿Qué tenía ese chico que no tenía él?

Dudas y más dudas, que dieron a luz a inseguridades y luego lo único que sabía era que Heeseung se había convertido en su mascota de burlas y que disfrutaba de hacerlo sentir culpable por amar a alguien que no era él.

Yo soy mucho para él.

Yo soy increíble y soy inalcanzable. Él no me merece realmente.

Cada parte de mí es perfecta, nadie me puede hacer sentir inferior.

No volveré a dejar que un chico acabe con mi autoestima y confianza una vez más.

Eso no pasará.

Y se había alimentado la cabeza de esas ideas, porque es lo que estuvo haciendo hasta ahora y lo mantuvo a salvo todo este tiempo. Es lo que su doctora había querido que lograra, de todas formas. Recuperar la confianza en sí mismo. No iba a dejar que Heeseung ni ningún otro chico que no merecía su atención arruinara eso.

Pero dolía. Dolía ver cómo su amigo se alejaba cada vez más de ellos solamente porque su querido noviecito no podía pasar ni un día sin él. Y aunque Heeseung quiso ocultarlo de ellos, todos ellos sabían que Heeseung comenzó a cambiar en muchos aspectos gracias a Jake.

Ahora ya no salía de fiesta. Ahora se dormía temprano. Ahora casi no usaba el celular durante las noches. Ahora controlaba su lenguaje y evitaba usar grosería en exceso. Ahora comía más saludable, y mantenía limpio y ordenado cada parte en la que él estuviera ubicado sin darse cuenta.

A su parecer, una estupidez.

Jake tenía dominado a su amigo y siempre intentó hacer que este abriera los ojos y se diera cuenta.

Pero Heeseung estaba enamorado.
Muy enamorado.

Sus ojos viajaron nuevamente al mesero que llegaba acompañado de un gran número de niños a otra mesa alejada. Por un momento creyó que se trataba de unos clientes, pero rápidamente entendió de quiénes se trataba realmente.

—Manténganse sentados y en silencio hasta que yo vuelva. No quiero que vayan a ahuyentar a los clientes.— ordenó con voz dura y señalando a cada uno de ellos, quiénes asintieron obedientemente. —Hagan sus tareas mientras regreso con su almuerzo.

Los niños soltaron unos quejidos, pero Jake rápidamente les dedicó una mirada de advertencia, por lo que todos guardaron silencio de inmediato y sacaron sus libros de mala gana. Sunghoon contó un total de tres niños pequeños (entre ellos una niña), otra niña que se veía de unos diez años aproximadamente, luego otra adolescente parada de brazos cruzados y finalmente una bebé que Jake cargaba en sus brazos. Sunghoon se sorprendió al ver la cantidad de hermanos menores que tenía Jake.

La chica adolescente soltó un bufido y se encaminó a la salida trasera sin que Jake se diera cuenta, pero cuándo lo hizo, rápidamente llamó su atención.

—¡Minji!— gritó en un susurro. Sus cejas se fruncieron. —Minji, ¿a dónde crees que vas?

La tal Minji frenó sus pasos y le mostró la pantalla de su celular a su hermano, la cual tenía un chat abierto.

La chica sopló una burbuja con su chicle. —Iré a verme con Marcus. Me invitó a salir.

—¿Ah sí? ¿Y con el permiso de quién?— Jake se veía molesto e irritado. Cansado.

Minji alzó una de sus cejas con obviedad.
—¿Acaso necesito de algún permiso? No eres mi mamá.

—Exacto, y tú no eres mi hija. Pero aquí estoy cuidándote y evitando que termines secuestrada por cualquier chico que hayas conocido virtualmente.— contestó el pelinegro, acercándose para arrebatar el teléfono de la chica.

—¡Oye! ¡No puedes hacer eso! ¡Devuélvemelo!— ella intentó tomarlo de vuelta pero Jake lo guardó rápidamente en su pantalón. Luego miró a la chica con cansancio.

—Por si no lo has notado, estoy en medio del trabajo, Minji, y tus hermanos necesitan que alguien los vigile. ¿En serio eres capaz de irte así sin más?

—Cuidarlos es tú trabajo.

—No recuerdo recibir paga alguna por hacerlo.— respondió él con amargura, ocasionando que los niños, y tanto Sunghoon como Minji lo miraran con sorpresa. —Tampoco recuerdo haber recibido un 'gracias' de parte de su mamá, ¿saben? Ni siquiera un miserable dolar. Pero aquí estoy. ¡Aguantando los berrinches de una adolescente que me odia, esperando a que a los demás les vaya bien en la escuela para evitar pagar más tutorías, tratando de pagar las clases de ballet de Hanni y criando de una bebé que ni siquiera es mía, sin saber absolutamente nada de maternidad mientras al mismo tiempo tengo que atender a todos estos clientes y lidiar con una separación!— su voz se rompió —¿Entiendes ahora cómo me siento?

Los pocos clientes que habían alcanzado a oír se sorprendieron por lo dicho por aquel chico tan bien arreglado y maquillado que habían visto trabajar ahí desde hace mucho tiempo atrás. Nunca imaginaron que en realidad tenía una responsabilidad muy grande en su familia, mucho menos Sunghoon lo imaginó, y es ahí cuando finalmente se da cuenta de las cosas.

"Jake nunca me prohibió salir con ustedes. YO lo decidía por cuenta propia."

Jake simplemente estaba acostumbrado a hacer siempre las cosas bien y en orden. Al ser el mayor en su familia, era quién solía mandar y decir qué hacer a sus hermanos, por el bien de ellos y porque se estaba haciendo cargo de todos quién sabe porqué razón.

Probablemente el regañar y ordenar cosas a Heeseung se debía únicamente a mera costumbre suya, cómo solía hacerlo en su hogar. Y Heeseung, siendo el hijo menor de su casa ya estaba acostumbrado a hacer siempre lo que decían los mayores sin rechistar.

Heeseung no era un "dominado" cómo él siempre creyó.

Ellos simplemente llevaban su relación en orden y en calma.

Minji no sabía qué decir, al igual que ninguno de sus demás hermanos quienes estaban con la cabeza gacha, culpables. Jake alejó su rostro un momento para limpiar una sola lágrima traicionera que recogió con su dedo.

—Te necesito aquí ahora. Necesito que cuides a tus hermanos por mí mientras mi turno termina.— siguió diciendo ahora más tranquilo, sus ojos llorosos. —No te estoy pidiendo algo que no puedes hacer.

Minji hizo una mueca. —No sé cómo hacerlo...

Jake alejó a la bebé adormitada de su hombro y se la pasó con cuidado. Minji la tomó con algo de miedo y lo miró cómo si estuviera loco.

—Pues aprenderás. — contestó simple, arreglándose su uniforme agresivamente. —Algún día me iré de casa para comenzar a vivir mi vida, y entonces tú serás quién se quedará a cargo de todo.

—Jakey... ¿Te irás a vivir con Heeseung..?— preguntó con tristeza y miedo una de sus medio-hermanas. La más pequeña que hablaba.

Jake no pudo evitar sentirse mal por su pregunta. Sí, esos eran sus planes antes de que todo se arruinara, pero viendo ahora todo desde otra perspectiva, desde la perspectiva de un medio-hermano mayor...

—Quizás algún día lo haga. O quizás no necesariamente sea con él,— respondió con simpleza, —pero eso no quiere decir que vaya a abandonarlos a ustedes. Eso es... algo que jamás me permitiría hacer.— sonrió con tristeza.

Pudo ver en los ojitos de sus hermanos el miedo que sentían porque sus palabras fueran vacías, tal cómo las de su madre. Soltó un suspiro y se acercó lentamente para abrazar a cada uno de ellos, aunque sea incómodamente por la mesa. Minji fue la última, y aunque esta no quiso aceptarlo al principio, Jake terminó en el espacio libre de su cuello acariciando su espalda.

—No hagas nada estúpido, ¿de acuerdo?— dijo contra su oído y la chica soltó un jadeo ofendido que lo hizo sonreír.

•••

Cuándo el turno de Jake terminó y salió del restaurante con todos sus hermanos, sus ojos se cruzaron con los de un chico misterioso apoyado en la entrada del lugar. Lo ignoró durante unos segundos hasta que este lo tomó fuertemente del brazo, asustándolo.

—¿Qué crees que haces? ¡Suel-

—Soy amigo de Heeseung.— lo cortó el contrario y sólo eso logró acallarlo. —Me llamo Sunghoon, y yo... fuí quién en realidad ocasionó su separación.

Jake parpadeó un par de veces mirando el menor con sorpresa. Sus hermanos también parecían sorprendidos y algo perdidos, pero si lo que Heeseung le había explicado era cierto y este chico era quién había enviado realmente la foto, la conversación que se vendría era realmente muy larga e incómoda. Definitivamente no apta para niños.

—Cualquier explicación que tengas no la quiero oír.— dijo fríamente.

—Por favor, sólo esta vez. Prometo... que no me acercaré más a Heeseung y a tí. Me alejaré de ustedes luego de esto. — rogó. Se veía realmente arrepentido. —Pero quiero que realmente me escuches. Quiero que sepas la verdad y sepas que Heeseung no tuvo la culpa de nada. Toda la culpa fue mía. Todo lo ocasioné yo. Por favor...

Jake le dió una ultima mirada a sus hermanos, quienes parecían cansados pero atentos a las palabras del chico. Lo pensó bien durante unos segundos. Pensó en lo que le había dicho Jungwon sobre Heeseung y sobre cómo la estaba pasando estos días desde que terminaron. Sabía que necesitaba hablar con él y verlo, pero lo único que quería era aclarar su mente y saber la verdad.

Este chico la tenía.

No podía simplemente dejarlo ir.

—Escucha, yo realmente no tengo mucho tiempo ahora.— dijo después de unos segundos. Sunghoon le miró con ilusión. —Pero quiero escuchar lo que dices, así que...

—Puedo llevar a los chicos a casa, no te preocupes.— para su sorpresa, Minji habló.

Jake la miró con curiosidad. —¿Qué?

Ella acomodó a la bebé en sus brazos. —Sí, sé cómo llamar a un taxi y llegar a casa. Me he escabullido muchas veces sin que te des cuenta.

Ahora Jake la miró con la boca abierta y todos los niños soltaron unas risas por su cara.

—Tú, pequeña-

—Shhh, estaremos bien, no te preocupes. Además, míralo cómo una forma de demostrar que realmente puedo ser confiable para cuidar a mis hermanitos también.— dijo la chica con una sonrisa y Jake se vió obligado a aceptar porque tenía un muy buen punto. Le devolvió el teléfono para asegurarse de que no les pasara nada de camino a casa.

—Bien, supongo que esta vez confiaré en tí. No vayas a decepcionarme.— le advirtió y esta resopló.

—No te preocupes, lo haré bien. Además, quiero que ese chico y tú hablen.— Jake enarcó una ceja —En realidad, todos nosotros queremos que vuelvas cuánto antes con Heeseung. Desde que ustedes terminaron te has vuelto más enojón sin darte cuenta. Así que si esto va a ayudar a que ustedes vuelvan cuánto antes, estamos dispuestos a ayudar.

Dicho esto, se encogió de hombros y se dió la vuelta para caminar junto a sus hermanos a la orilla de la carretera, dejando a Jake con una sonrisa congelada por lo que acababa de oír.

¿Él? ¿Enojón...?

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yo en lo personal no perdono a sunghoon y eso que soy la autora lol, así que no los juzgaré si deciden no perdonarlo también o si deciden hacerlo. amor y pas chikis 🙏  

por cierto si no entendieron bien la situación familiar de jake hagan sus preguntas pq siento que no lo expliqué bien eh