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YohaDiaKanan

Era mía, siempre lo había sido pero ahora llegaba esa estúpida niña rica a quitármela.

Era muy perfecta, sabía que Kanan quedaría encantada. Nueva, extranjera, rubia, ojos color oro, blanca sonrisa, extrovertida y graciosa, era agradable estar a su lado, conversaba amenamente con todos, hasta con ella, con Kanan, MI Kanan. Pero le dejaría muy en claro eso, no era propio de mí hacer esas cosas pero no importaba, valía la pena.
Llegué a dónde estaban ambas conversando sonrientes, me planté frente la peliazul para colocar una mano sobre su mejilla y acercarme dejando un beso sobre sus labios. Era mi primer beso. Estaba por moverlos cuando sentí su alejamiento. Desvío su mirada y tomó su nuca... Empecé a sentir una presión en el pecho, creo que no respiraba.

Kanan: Dia... Yo... Ya sabes que eres como mi hermana y ...

Dia: Eres una estúpida.

Kanan: Vamos, no te enojes.

Dia: Acabo de confesarte que te amo desde lo más profundo de mi corazón, me rechazas, ¿y tú me dices que no me moleste? ... Pues perdóname por tener el jodido corazón roto por alguien a quien parece importarle muy poco apesar de que soy su maldita mejor amiga, como su hermana y con quien a compartido toda su vida! (no sabía desde cuándo pero estaba gritando) Púdrete Kanan, no me vuelvas a hablar.

Voltie dispuesta a irme cuando sentí si mano tomar la mía. Le di un manotazo seguido una buena bofetada y estaba por lanzar otra cuando solo quise salir corriendo a quien sabe dónde. Estuve unos minutos hasta encerrarme en un cubículo a llorar...
Llorar, y llorar por tanto tiempo que comenzaba a dolerme la cabeza, tan intenzo que ardía más y más mis ojos, tan desesperación por sentir alivio que comenzaba a golpear mis piernas, las rasguñaba, se ponian rojas, se levantaban poco a poco las capas de piel y parecía que sangraba pero en realidad frente a mi solo caían lágrimas.

Kanan: ¿Dia?!

Me detuve, sin hacer ruido subí los pies y esperé escuchando sus pasos, sus bufidos y suspiros. Una vez cesaron, suspire y mordí mi labio. Lo que había hecho resultaba insoportable, ardía mucho y no sabía que hacer. Toqué con la punta de mis dedos, estaba cálido, era agradable pero dolía y no quería eso. Soplé, toque y hasta salí del cubículo para mojar con agua fresca... Poco a poco cesaba. Miré la hora. Faltaban cerca de treinta minutos para el cambio de clases. Mirando a todos lados y procurando que al caminar mis pasos no se oyeran, llegué a la enfermería, ¿Cómo proseguir? Miré a mí alrededor, había una chica de cabello azul oscuro que ya se encontraba mirando mis muslos.

Dia: ¿Qué miras?

X.X: ¿Qué no miro?... Wow ¿Y por qué tal belleza se lastima de esa forma?. Deja que te cure, solo siéntate.

Dia: Claro, supongo que necesito ayuda. (Me senté en una camilla y esperé a que se acercara)

Dejó varias cosas a mi lado y solo hacía lo que había dicho, me curaba... Lo cual no era muy cómodo ya que contantemente tenía la oportinidad de pasar sus manos por debajo de mis falda. Desvíe la mirada. Un pequeño viento cálido chocó contra mi cuello erizando toda mi piel. Luego de eso algo húmedo.

X.X: Antes de que digas algo, solo deja que te cure... Hasta el último pezado de tu corazón...

No era muy delicada pero solo dejé que tocara mi pecho como se le ocurriera, tal vez funcionaria y no dolería. Me besó, traté de seguirle el rirtmo pero notablemente ella tenía toda la experiencia que escaseaba en mí. Nunca pasó a otro nivel, solo tocaba de la cintura para arriba, su boca no se despegaba de mi piel. Comenzaba a inquietarme, movía mis piernas, hasta las apretaba un poco. El corazón estaba como loco, respiraba con dificultad, no ivitaba soltar cuanto mi boca quisiese. La inquietud aumentaba, subía por mi vientre y me movía más, escuché su risita. Sabía que me estaba pasando, solo que nunca lo había sentido y era por mucho muy intenso. Mordía mi labio, suspiraba. Disfrutaba lo que estaba haciendo, en especial cuando bajó por mi torso para detenerse en mi abdomen. No retenía nada, ningún gemido, ningún movimiento, me estaba retorciendo pero se detuvo.

X.X: Hablamos esta noche. (Me dio un papel con su nombre y número)

Dia: Claro emm... Yoshiko.

Yoshiko: Dia~ espero recibir tu mensaje, bonita.

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