Chanyeol siempre había pensado que nunca sería el tipo de chico que correría desesperado por la ciudad en pleno verano y a plena luz del día por amor. Sin embargo, ahí estaba él, esquivando a la multitud y tratando desesperadamente de llegar a tiempo al recital de SooHee.

— Permiso, permiso — repetía mientras se abría paso entre las personas.

Se le había hecho tarde.

El chico del siguiente turno se había retrasado diez minutos, obligándolo a cubrirlo durante ese tiempo.

Estúpido Byun Baekhyun.

Había comprado un ramo de flores como SooHee había sugerido. Esas flores terminarían en su cabeza si no llegaba a tiempo.

Finalmente llegó al teatro donde se llevaba a cabo el recital. Corrió hacia la sala indicada y se detuvo dentro, tomando aire debido al cansancio. Justo en ese momento, su ángel aparecía en escena con ese hermoso vestido de cisne.

La muchacha miraba por toda la sala y, aunque su rostro no lo demostrara, Chanyeol sabía que estaba molesta por su impuntualidad.

Caminó por los asientos buscando uno que le permitiera ver a SooHee claramente desde el escenario. Ella le sonrió levemente al encontrarlo entre el público.

SooHee empezó a bailar como el ángel que era haciendo que se sintiera orgulloso de ser su novio.

Le encantaba verla bailar; parecía un ángel moviéndose con tanta naturalidad. A veces no entendía cómo una chica como ella había aceptado salir con alguien como él.

Conoció a SooHee en la secundaria y supo que la amaría para siempre.

Ella no era una chica popular pero gracias a su belleza había ganado un pequeño club de fan, del cual él era miembro en secreto.

Que ambos se enamoraran y terminarán juntos era algo imposible, pero sucedió.

A pesar que la gente no le daba mucho tiempo a su relación, ya llevaban juntos 2 años.

Chanyeol era el tipo de chico relajado del que nadie espera nada. Ni siquiera los maestros esperaban nada de él, y tal vez tenían razón. No había logrado nada hasta ahora, pero se seguía esforzando para hacer a su ángel feliz.

SooHee quería ser una gran bailarina de ballet y haría lo necesario para cumplir su sueño.

Chanyeol sólo tenía un sueño, hacerla feliz y estar siempre a su lado.

Tal vez si seguía haciendo horas extras podría ayudar a pagarle esas clases con aquel maestro extranjero del que tanto hablaba.

Una vez que el recital terminó, SooHee entró al vestuario recibiendo felicitaciones de algunas de sus compañeras.

Se sentó frente al espejo y empezó a retirar el maquillaje. De pronto frunció el ceño al ver quién estaba detrás de ella.

—SooHee...

—Llegaste tarde —lo acusó cruzándose de brazos.

—Lo siento, se me hizo tarde —empezó a explicar—. No podía dejar el puesto botado, mi compañero demoró en llegar.

—¿Al menos me trajiste algo? —exigió con un pequeño puchero.

—Tulipanes —extendió el ramo de flores, las cuales ya se encontraban marchitas—. Se maltrataron en el camino —se disculpó.

La chica miró a su alrededor y pudo ver las miradas curiosas y algunas sonrisas burlonas de algunas de sus compañeras.

—¿No puedes hacer algo bien? —se quejó—. Parece que no te importa.

—Eso no es cierto. Eres lo más importante en mi vida.

—Entonces demuéstralo. Llegaste tarde a mi presentación y tus flores son horribles.

—Te invitaré un helado... en tu heladería favorita.

—¿En serio? —a SooHee le brillaron los ojos—. Es un lugar caro.

—Vamos —le sonrió extendiéndole la mano.

Chanyeol deseaba darle el helado más grande y caro de aquel lugar, pero por desgracia su economía solo le permitía el vasito más pequeño. SooHee observaba con decepción el pequeño vasito de helado que Chanyeol le había comprado. No era el tamaño ni el tipo que ella esperaba, pero era lo que él podía comprar.

—Cuando reciba mi paga te compraré uno más grande —sonrió el chico en disculpa.

Ella asintió resignada y empezó a caminar a la salida junto a él.

Esa heladería solía ser visitada muy a menudo por sus compañeras, si la veían así moriría de la vergüenza.

—¡SooHee! —la voz aguda y sorprendida de una de las chicas del teatro resonó en la heladería.

SooHee sintió un nudo en la garganta al escuchar la voz de una de sus compañeras del teatro. Cerró los ojos por un instante, consciente de que su mayor temor se estaba haciendo realidad.

La muchacha se acercó sonriendo, mientras ella no sabía dónde meterse.

—¿Qué haces por aquí? —preguntó, curiosa.

—Vine por un helado —explicó.

La chica observó el vasito y quiso reír.

—¿Y tú?

—Mi novio me trajo —comentó señalando a su mesa donde un chico vestido con ropa cara se encontraba sentado—. ¿Y él quién es? —preguntó dándose cuenta de la presencia de Chanyeol.

—Soy su...

—Es un amigo —contestó rápidamente SooHee.

-Mucho gusto-Saludó la chica-Nos vemos luego Soo, debo volver con mi novio.

SooHee estaba apunto de llorar, habia negado a su novio por culpa de esa arpia.

-¿Por qué dijiste eso?—preguntó Chanyeol sintiendose dolido.

-Ahora no, Chanyeol-dijo ella saliendo rápidamente de la heladería.

-Soo...

-Esa zorra encontró la oportunidad perfecta para reírse de mi-Lloriqueó la chica-Ella me odia.

-Soo...

-Tu no entiendes. No soy igual que ellas. Ellas pueden gastar en helados caros o ropa y yo debo esperar a que recibas un bono o caminar a casa para ahorrar dinero,

-Claro que lo entiendo. No te preocupes, cariño. No peleemos por esas tonterías —le consoló Chanyeol, tratando de calmarla.

-Vamos a casa-pidió ella limpiando sus lagrimas.—Estoy cansada.

Chanyeol tomo su mano y empezó a caminar.

Ella sollozaba en silencio.

Iba a demostrarle a todas ellas que no era una perdedora.

Ella podia tener todo lo ellas tenian.

[...]

-Ella es increíble. Es talentosa,hermosa y buena.-Comentaba Chanyeol, recostado en el mostrador de la tienda-Se merece lo mejor por eso he empezado a trabajar horas extras, para poder darle lo que merece.

-Hmm-gruñó Baekhyun saliendo del almacén-Bueno , por que no empiezas por poner esto en su lugar y dejas de hablar.

Chanyeol asintió, acostumbrado a las interacciones sarcásticas de Baekhyun. Tomó lo que Baekhyun le entregó y se dirigió al almacén para organizar las cosas.

-¿Tu tienes novia?-preguntó.

—No, tengo cosas más importantes que hacer que estar cumpliéndole los caprichos a una chica —respondió de manera despreocupada.

-Cuando te enamores no pensaras igual-sonrió.

El sensor de la entrada sonó avisando que había entrado alguien a la tienda.

Chanyeol se asomó hacia la entrada de la tienda para ver quién había entrado, dejando la conversación con Baekhyun momentáneamente.

Un muchacho estaba parado en la entrada mirando alrededor, parecia no tener mas de 19 años tal vez aún era un escolar aunque no tenia un uniforme puesto.

—Hola, ¿puedo ayudarte en algo? —preguntó Chanyeol.

—Sehunnie, estás aquí —Baekhyun salió del almacén y corrió hasta el chico, sonriendo ampliamente.

—Hola hyung —Sonrió Sehun.

Baekhyun se giró hacia el mostrador y entregó su delantal.

—Me voy primero —comunicó—. Nos vemos mañana —añadió antes de aferrarse al brazo de Sehun, que lo esperaba en la puerta, y salir.

-¿Dónde quedo su espíritu trabajador?-Se quejo Chanyeol antes de volver a sus labores, moviendo algunas cosas en el almacén y asegurándose de que todo estuviera en orden.

[...]

SooHee caminaba junto a Chanyeol por el centro comercial, pero su mente estaba atrapada en un remolino de pensamientos turbios. Las luces brillantes y la bulliciosa multitud parecían distantes mientras ella se perdía en sus preocupaciones.

Chanyeol notó la expresión preocupada de SooHee y le apretó suavemente la mano para llamar su atención.

—¿Estás bien, Soo? —preguntó con voz suave.

-Tuve un mal día-comentó ella-Papá volvió a quejarse por el dinero que gastamos en mis clases de ballet. Dice que no sirve de nada, no ganaré nada en el ballet. Dice que debería buscar un empleo

-Soo, eres la mejor bailarina que conozco . Cuando seas un bailarina famosa tu papá estara orgulloso de ti y se tragara sus palabras.

-¿Tu crees que llegue a ser famosa? 

—Claro que sí, Soo. Tienes un talento increíble y una dedicación admirable. No hay duda de que llegarás lejos en el ballet —respondió su novio con sinceridad mientras caminaban juntos —Nadie es tan talentosa como mi hermosa SooHee.

-Yeollie-se cubrió el rostro actuando de manera tierna para él.

Chanyeol sonrio y siguió avanzando a su lado.

Amaba ver a su angel feliz.

Caminaba feliz conversando con su novia , hasta que alguien captó su atención.

-¿Pasa algo?-pregunto SooHee cuando su novio se detuvo de la nada.

Chanyeol se habia colocado estrategicamente detras de una de las columnas para observar.

-Ese chico trabaja en el minimarket conmigo-Señaló cautelosamente.

SooHee observó hacia donde Chanyeol señalaba y vio a un chico de estatura baja caminando junto a un joven que parecía ser más joven que él, pero con una actitud despreocupada y alegre, ambos reian juntos.

-¿Cuál de los dos?—preguntó.

—El chico de estatura baja. Baekhyun. El niño de al lado siempre lo viene a esperar a la tienda.

Ambos seguian observando a la pareja escondidos detrás de la columna hasta que los vieron entrar al cine, compartiendo risas y charlas animadas mientras se dirigían hacia la taquilla.

-No tiene tiempo para chicas pero si para ese niño-se burló Chanyeol.

SooHee frunció el ceño levemente ante el comentario de Chanyeol, observando aún la escena con curiosidad.

— No lo puedo creer... — murmuró para sí misma.

Chanyeol la miró sin entender a qué se refería.

-Tu compañero lleva a su novio al cine y tu me dices que no tienes dinero-Se indigno y siguio su camino fingiendo estar molesta.

Chanyeol iba detrás, rogándole a SooHee que sonriera, pero ella lo ignoraba y seguía caminando con los brazos cruzados y un puchero en los labios.  Y eso le encantaba, por que sabía que la única manera de calmar su enojo era llenándola de besos, una táctica que siempre funcionaba.

[... ]

SooHee salió de su clase de ballet con el corazón aún pesado por la discusión que había tenido esa mañana nuevamente con su padre. Las palabras ásperas resonaban en su mente mientras caminaba por el campus, ignorando las llamadas de sus compañeras que se acercaban hacia ella.

— ¡Soo!

Se detuvo al escuchar que la llamaban. Se giró y encontró a sus compañeras acercándose a ella.

— Saldremos a tomar un café. ¿Quieres venir?

— No, gracias.

— Vamos Soo!

— No chicas, debo de...

—Dejenla, seguro no trae dinero—se burló una de ellas

— Vamos Soo, nosotras invitamos —se ofreció otra.

Odiaba a esas chicas. Siempre estaban esperando la oportunidad para humillarla. SooHee bajó la mirada y asintió ligeramente.

— Está bien.

Se sentó con sus compañeras en la cafetería, aunque su mente estaba en otro lugar. Intentaba mantener una sonrisa, pero no podía evitar sentirse incómoda. Las chicas hablaban animadamente sobre temas superficiales, pero SooHee no podía participar. Aunque lo deseara, no pertenecía a ese mundo. No había viajado al extranjero ni tenía ropa de diseñador.

—¿Estás saliendo con un Chaebol? —preguntó una de sus compañeras a Hanna, la chica que más odiaba entre todas.

— Es el heredero de Fresh, los fabricantes de bebidas energéticas más grandes de Corea —comentaba orgullosa Hanna.

— Wow, tienes mucha suerte —comentó otra de las chicas.

SooHee escuchaba cómo su amiga hablaba orgullosa sobre su novio. Mentiría si dijera que no sentía envidia. 

Tomó un sorbo de su café con la mirada perdida. Sabía que era diez veces mejor que ellas en todo. Más talentosa, más inteligente y más bonita. Se merecía un novio como el de Hanna.

—¿Y tu, Soo?—preguntó Hanna, sonriendole con burla.

—¿Yo?

—¿Sales con alguien?

SooHee no necesito pensar en una respuesta, por que tenia claro sus objetivos.

—No.

[...]

—En un par de semanas, SooHee y yo cumpliremos 2 años juntos —comentaba Chanyeol, mientras caminaba al lado de Baekhyun—. Cuando empezamos a salir, la gente decía que no duraríamos. Incluso yo llegué a pensarlo. ¿Un ángel como ella saliendo con alguien como yo? No parecía real —comentaba mientras Baekhyun fingía arcadas—. Pero míranos, dos años después seguimos tan enamorados como el primer día.

Chanyeol se giró para mirar a Baekhyun, quien dejó de burlarse y adoptó una expresión más seria.

— Eso es genial, hyung —respondió Baekhyun finalmente.

— ¿Y tú? ¿Cuánto tiempo llevas con tu novio? —preguntó Chanyeol.

—¿Novio? No tengo un novio.

— No lo niegues. Te vi en el centro comercial con el chico que viene a verte al minimarket.

— Oh... Sehun —dijo Baekhyun, sintiéndose algo avergonzado—. Él no es mi novio.

—Pero parecían muy cercanos. ¿No es tu novio?

—Es mi roommate. Estudió con mi hermano en Bucheon. Para mi, Sehun es como mi hermano menor.

—Se ven bien juntos—dijo Chanyeol burlándose.

—Ya basta hyung—Se quejo el más bajo, golpeándolo un poco.

— No te pongas así, Baekhyun. Sehun parece ser alguien especial para ti —comentó Chanyeol con una sonrisa traviesa.

Baekhyun suspiró, resignado ante la conversación inevitable sobre su relación con Sehun.

— Sí, es importante para mí. Es como mi familia, sabes. Pero no me gusta de otra forma.

—Esta bien, no te estoy cuestionando. Supongo que es como SooHee para mí —dijo Chanyeol con una sonrisa cálida, cambiando el enfoque hacia su relación con SooHee.

Baekhyun sonrió un poco incomodo con la comparación y decidió no tocar más el tema.

[ʚ♡ɞ]

Hola, les traigo un nuevo fanfic.

En realidad no es nuevo es la adaptación de un fanfic antiguo mio, que publique hace mucho años con otro fandom y decidi adaptarlo y mejorarlo.

Espero lo disfruten.

¿No es Chanyeol el novio perfecto?