Linduras, les recomiendo no leer esto, les aviso desde ahora que existe contenido +18. Si vas a leerlo te recomiendo hacerlo lentamente para entender todo.

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Zodiac, la empresa en la que trabajas, aquella empresa dedicada a la organización para actividades propias de idols, no una que los entrene y los haga debutar, lo sabes, no es eso, solo se encargan de la organización de algunos shows de estos; no sólo de ellos, también se encargan de organizar eventos de modelos e incluso de algunas figuras públicas para que estos compartan cortos momentos de intercambio con fans o simples civiles, lo sabes al derecho y al reves, tu mismo eres parte del staff, organizas o intentas hacerlo junto a tus compañeros limpiando o ayudando siendo parte del grupo de seguridad, lo haces, haces todo lo que está en tu mano, día y noche, no sólo tu, porque tu amado amigo también, tu menor que se encarga de impulsarte y motivarte para seguir pese a tu pobre sueldo, juntos lo intentan por sus familias, tu más que nada lo haces por tu amada madre, por esa mujer llena de calidez y dulzura a la cual quieres mantener aún a tu lado, por la cual serías capaz de dejar tus estudios, aunque ya lo has hecho y está bien, porque a pesar de tu pobre modo de vida tu sigues ahí sonriendo, llenando los corazones de calidez de todo aquel que tenga la dicha de tenerte a su lado, tu, Sagitario que eres capaz de eso y más con tu pálida piel, tu iridiscente mirada junto a tus perlados dientes, apolineo definitivamente, o así te llama tu amado amigo, porque así te considera él, tan lleno de belleza con tus labios abultados que incitan a lo más morboso e impensable junto a tus extremidades largas y delgadas puras y sin mancillar, epítome de cordialidad y candidez te repite aunque no lo crees, porque tú, Sagitario, no crees ser merecedor de ningún alago no con tu piel que crees llena de impurezas aunque para otros sea tan fina y cremosa, tan dulce, tan antojable, con tu rostro, tu rostro que tu ves tan normal como cualquier otra persona común, porque no sabes, no notas como podrían perder la cabeza con sólo mirar tu lindo rostro, como es que para evitar pensar en tu sola carita son capaces de recurrir a las más hermosas mujeres sólo para quitarte de sus memorias, como alguien tan loco de amor sería capaz de hacer eso, lo hacen, Géminis lo hace.

Aquel modelo de talla mundial, aquel hombre maldito para el que trabajas no sólo tú, no sólo tu amigo, toda tu empresa e incluso más, aquel sonriente hombre que a pesar de tener tu edad ha sido capaz de hacerse espacio en un campo tan competitivo como lo es el modelaje, él, que en tu ignorancia crees que te odia con toda su alma, porque a pesar de siempre tener una mirada cándida siempre acompañada de una sonrisa afable apenas sale del escenario o set de fotos lo ves, ves como se transforma al llegar a su camerino el cual estas encargado de custodiar, al menos sólo ahí puedes verlo de frente, tan caliente, tan perfecto, destilando poder y superioridad, dominante a más no poder, seco y frio casi siempre, o así lo ves tu cuando cruzan miradas al escoltarlo a su camerino, con su actitud de perro rabioso y sabes que está mal, que es estúpido y aunque lo sepas no cambia el hecho de que lo has mirado demasiado, como te has hecho mil y un cuentos románticos con él, con apenas esos pequeños actos amables que ha tenido para contigo, esos tan pocos que puedes contar con sólo los dedos de una mano, eso no quita que sigas haciéndolo, deseando que te mire con esa gran sonrisa, con sus ojos cafés llenos de felicidad que siempre trae en público, sabes que está mal, esta mal enamorarse de ese hombre aunque a un así lo haces, caes perdido cada día que lo ves, lo admiras desde la pantalla de tu televisión vieja o cada lunes que sin falta viene a tu trabajo a coordinar eventos relacionados con su trabajo, sabes que es sólo eso, su trabajo, y es tan buena suerte verle aunque no tan buena suerte cuando lo notas mirándote con sus ojos llenos de un sentimiento que no entiendes, que consideras que es odio porque su alegre sonrisa desaparece al verte mientras hablabas con tu amado amigo Escorpio.

Te asustas y te emocionas al mismo tiempo bajando tu mirada avergonzado mientras el rojo escala rápidamente por tus mejillas, es ahí cuando vuelves a la realidad por el llamado de Escorpio que te esta hablando y aunque levantas la cabeza él, tu amor imposible ya no está así que sólo te limitas a seguir levantando las sillas para el próximo evento que es la presentación de un nuevo grupo y mientras piensas que el blanco del mantel combinaría tan bien con el traje que trae tu imposible, con su perfecto cabello ébano tan bien peinado y es ese momento en el cual la voz de Escorpio vuelve a hacer eco. "¿Por que crees que siga llamándose Géminis?"pregunta con genuina curiosidad y es que personas con tal estatus social tienden a adoptar un nombre menos común, ellos pueden hacerlo, tener un nombre que demuestre su superioridad y poder, elegir y dejar de lado el patético nombre con el que son llamados, por su signo zodiacal, aunque él no lo haya hecho, te preguntas el porque si la mayoría que alcanzaba la fama a tal nivel tendía a cambiar su nombre a algo más majestuoso y singular, derecho que el tiene, pero que tu no, tu no puedes hacerlo, Sagitario permanece como tu nombre aunque no tengas problema con eso, naciste en el tiempo exacto, con los planetas alineados para serlo. "No lo sé" le respondes después de un largo silencio, ya que es cierto, Géminis no ha cambiado su nombre, él y su íntimo amigo que siempre lo acompaña no lo han hecho, aunque eso te destroza ya que esos dos son tan cercanos que puedes esperar que en cualquier momento revelen una relación aplastando tus sentimientos en el proceso.

El tema se deja por la paz y sigues con tu trabajo deseando ver al sonriente Géminis de nuevo, de apariencia dulce pero vacía, es por eso que te distraes con facilidad logrando tropezar con una de las tantas sillas, estas dispuesto a hacer una reverencia y a soltar una de tus dulces pero divertidas sonrisas pero el agarré que alguien mantiene en tu trasero te abstrae, alguien te esta sosteniendo de ahí con una mano y con la otra rodea tu dulce cintura, estas apunto de levantarte pero lo ves, ves sus ojos, él, Géminis te ha visto a lo lejos mientras salía de una oficina y es ahí cuando lo notas, se acerca a paso veloz y violento lleno de furia, temblando de ira capaz de consumir todo a su paso, ves con pánico como se acerca, notas como ha perdido la razón, ha perdido su humanidad junto a su raciocinio en cuanto ha visto a alguien tocarte, es ahí cuando su fuerte tacto aleja al desconocido de tu lado impotandole una mierda lastimarlo, lanzándose a él lleno de descontrol, reventando de celos, por que alguien que no ha sido él o tu amada madre te ha tocado y notas con pánico como suelta golpes a diestra y siniestra y para en un corto tiempo él ya te jala bruscamente del brazo pasando con facilidad a esos pocos guardias de seguridad que intentaban detenerlo y como no hacerlo si le tienen pánico a ese hombre que ha dejado al descubierto su otro rostro lleno de celos y ambición por ti.

Resistes todo lo que tus débiles piernas permiten mientras tiemblas viendo como a lo lejos tu amado amigo intenta llegar a ti, notas como el agarré en tu brazo se hace más fuerte y como chasquea con su lengua mientras tu amigo es interceptado, apenas salen del edificio te dedica una mirada llena de impaciencia indicándote en implícito silencio que debes entrar al auto deportivo y aunque intentas no hacerlo él te empuja dentro, piensas en gritar como debiste haber hecho antes pero antes de siquiera abrir la boca sonríe alegremente no sólo a ti, a los guardias que ven algo inusual pero deciden dejarlo pasar tras recibir esa sonrisa, tu, tu por otro lado te quedas mudo porque a pesar de lo que has visto recién, tu corazón martillea dentro y sin desearlo tu rostro vuelve a cubrirse de rojo, ya es tarde cuando le ves entrar y acomodarse en el lugar del piloto mientras arranca con violencia pero no dices nada, como puede verse tan bien en estos momentos te preguntas ya que el sigue con la mandíbula tensa y es en ese momento que te das el valor de hablar "S-señor" le llamas atragantandote con tus propias palabras "¿Q-que ha pasado?" Vuelves a hablar mientras el no quita la mirada del camino; por fin ves como es que él te esta mirando, mirando de reojo tus labios rellenitos y gorditos labios tan lindos y suaves, tan dulces, listos para dar acceso a esa boquita tuya que lo está trayendo loco y por fin te habla "No lo ves, no lo notas, todo esto es por ti, he perdido contra ti, he dejado de ser humano en el momento el que te han tocado, tocado lo que me pertenece, tan mío y tan dulce, como es que he perdido antes de empezar" Es allí que las cosas se te van de las manos porque el ya no aguanta, apenas han salido a la carretera y deja sus palabras al aire mientras vuelve a salir del auto, mientras te saca de ahí con sus fuertes brazos que te cargan como a una princesa, su reina, y te arrastra hacia su mansión, tan grande y lujosa, no ves a ningún sirviente al menos en los dos metros que han avanzado ya que con esos mismos brazos te ha depositado en el suelo sin darte a tiempo de nada porque apenas te suelta comienza a desgarrar tu ropa comenzando desde los botones de tu camisa siguiendo mientras vuelve a empujarte enpotrandote contra la pared de uno de los pasillos, más violento y fuerte, sabes que es inútil suplicar.

Puedes sentir su tacto fuerte junto a sus resoplidos en la parte de tu nuca mientras saca tu cinturón y baja tus pantalones junto a la ropa interior, lo último que cubría tu acendrado cuerpo, sientes como recorre con desesperación tu cintura pulcra, como recorre tu pecho y como deja mojadas mordidas sobre tu blanquecino cuello mientras tú, lo único que puedes hacer es respirar para no desmayarte y es que en que sueño tan idílico y faltó de sentido como aquel, ese poderoso hombre está dejando tantas marcas sobre tu cadera mientras se restriega entre tus nalgas erecto y mojado con líquido preseminal, mientras abre esos dos montículo de carne tan pura y blanda mientras lo amasa junto a tus muslos que aprieta mientras levanta una de tus piernas con un brazo y recién te das cuenta de que con el otro brazo había liberado su miembro del pantalón hace rato ya, es así que intentas removerte y parece que le das ternura pues mordisquea tus labios gracias a los movimientos que hacías al intentar girarte y se separa sólo para soltar resoplidos y gruñidos cuando se hunde en ti, violento y fuerte, sin haberte preparado si quiera, y lloras y gritas mientras sientes un agarré más fuerte en tus caderas y él suelta maldiciones mientras espera un momento a que te acostumbres, apenas pasan unos momentos cuando comienza a moverse sin contenerse, sin pensar, su lado animal ha tomado el control y lo sientes, porque esta tan dentro de ti bombeando con tanta fuerza que sientes cada una de sus venas mientras va llenando tu antes casto túnel de miel, mientras se entierra a velocidad errática tocando tu punto de dulzura, como puede sostener la posición en la que estan aún levantando una de tus piernas mientras sigue empujando dentro de ti, no lo sabes, no lo entiendes, no notas que ese arranque es sólo el desquite de todo lo que siente y ha sentido desde el primer día en el que te vio, ese amor cruel y violento que que lo han tragado a tal nivel de no dejarte ir, de no permitir que su empresa cambié de lugar sus entrevistas, a tal nivel de controlar cada una de tus pisadas, de mover cielo mar y tierra si alguien osaba a dañarte, o al menos no lo sabías hasta que te lo dice al oído mientras sigue taladrando dentro de ti a pesar de que se ha corrido ya una vez dentro de ti manchando tu vientre y llenandote de manera opulenta, te lo dice entre gemidos que son mezclados entre tus jadeos, mancillando tu vientre en esa nueva posición donde tus piernas son abiertas a su máximo nivel, donde esos sonidos de toque melifluo que salen de tus labios ya que tus piernas han cedido hace unos momentos pero a él no le importa por que sigue metiéndose una y otra vez nuevamente erecto haciendo chapotear el semen que aún está dentro de ti, apenas tu cerebro capta tal información, apenas entiendes que ese hombre que te mantiene con el trasero en alto metiendo tan dentro su masculidad sin dejar de tocar todo tu cuerpo creando marcas en tu cuello y caderas que no se borrarán de tu memoria, al igual que la información que sigue recibiendo mientras él te cuenta que quien ha hecho aumentar tu sueldo es él, que quien ha reducido la cuota del alquiler de tu casa es él, que quien ha evitado que tus dulces ojos lo envuelvan ha fracasado, porque lo admite, admite que te ama hasta el nivel de perder su sonrisa, cambiarla por celos y agonía de no tenerte y tu no lo crees, no crees que tu amor te corresponda aunque no te queda de otra porque ya te ha reclamado como suyo mientras te da la vuelta manejado tu antes intachable cintura con facilidad, mientras te vuelve a mirar y ves en esos ojos oscuros total devoción, a ti, sólo a ti, esta perdido entre tus piernas y con ello con sólo dejarle llenarte de él, de su semilla, mancharte de sus deseos, te entrega todo, todo lo que es, todo lo que tiene, te entrega su poder y raciocinio porque ese hombre vive y muere por ti, sólo para ti y no puede hacer nada y tu tampoco es así que con el nuevo y doloroso orgasmo todo para, el líquido espeso mezclado con sangre sigue recurriendo de ti pero el sigue dentro sólo respirando mientras te aprieta sobre el suelo metiendo su cabeza en el espacio de tu cuello aspirando tu aroma y parece que no le importa que su vientre y el tuyo estén manchados por tu esencia, parece que no le importa tampoco tu respiración errática pues sigue concentrado en perderse en tu aroma.

Pasan algunos segundos y te mira nuevamente a los ojos esta vez sin su cara de repudio y sin esa sonrisa falsa que siempre lleva, te mira con un cariño indescriptible recalcandote que te tiene y no puedes hacer nada a por evitarlo "Sagitario..." pronuncia tu nombre mientras sale de ti y se acuesta a tu lado y tu te mueves ligeramente para poder mirarlo, decides que es momento de preguntar algo que se te ha venido a la cabeza "¿Donde está Escorpio?" Preguntas y es que lo único que alcanzaste a ver antes de ser sacado de las instalaciones fue a tu amado amigo siendo agarrado por el compañero de Géminis, el gruñido que deja salir de sus labios el otro te llama la atención "¿No lo entiendes? ¿No lo has captado? Escorpio no tiene más que ver, ustedes no son compatibles, acaso no lo ves Sagitario, me perteneces, somos totales opuestos, naciste para estar conmigo, sólo conmigo" Es lo que escupe con obvios celos y de cierta forma te da ternura mientras te atreves a tocarle la mejilla y el se acuna como un niño, sientes por fin el calor abandonar tu cuerpo mientras el se levanta de su lugar en el suelo cubierto por la alfombra y como sin nada te vuelve a levantar como su reina, su idilio, a pesar de que ambos están cansados antes de dejarte sobre la cama besa tu frente con un toque tan delicado como si tuviera miedo de quebrarte, vuelve a abrazarte ahora en la cama y te duermes mientras una y mil promesas de amor, salen de sus labios sin estar dispuesto a cederte a nadie nunca.

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¡Muy fuerteeeee! Mi primer Sagiminis (?

Si tienen alguna duda sobre las palabras que he utilizado voy a dejar los significados en los párrafos correspondientes (los comentarios)

Debo recalcar de nuevo que este estilo de escritura está basado en un one shot llamado "Ducha"

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