-Hola- le sonreí coqueta a Dean.

-Hola- sonrió el mientras se acercaba a mi presionando sus labios contra los míos.

-¿Qué hora es?

-Las 11- respondió mirando su reloj de muñeca.

-¿Porqué no nos quedamos aquí todo el día?- susurré mientras repartía besos por su cuello.

-Porque tenemos un caso- oí a Michie decir desde la puerta.

-¿Es en serio?- me quejé- acabamos de llegar.

-Deja de quejarte y mueve tu enorme culo de la cama de una vez, os esperamos abajo.

Y sin mas se fue.

-Te juro que ahora mismo la estoy odiando- miré a Dean.

-Vamos- dijo divertido, me dio un azote en el trasero y se levantó entrando al baño.

Después de darnos una ducha y prepararnos fuimos al garaje donde dentro del impala ya se encontraban Michie y Sam.

-Dirty, rotten, filthy, stinkin...- Gritó Michie desde el asiento trasero del auto.

Corrí hasta el coche y me senté al lado de ella para empezar el concierto.

-¿Preparada?- preguntó ella divertida.

"she's my cherry pie

Cool drink of water such a sweet surprise

Tastes so good makes a grown man cry

Sweet cherry pie"- empezamos a cantar ambas.

"Swingin on the front porch

Swingin on the lawn, swingin where we want

Cause there aint  nobody home

Swingin to the left 

And swingin to the right

If i think about baseboll, i will swing all the night yeah"- se unió Dean

Y entre canciones antiguas llegamos a Basehor una ciudad ubicada en el condado de Leavenwoth.

-¿Y que se supone que es lo vamos a cazar?- pregunté mientras mordía mi hamburguesa.

Ya habías pedido las habitaciones en el motel y nos habíamos acomodado. Ahora nos encontrábamos en un mar cercano que hacían unas hamburguesas riquísimas.

-Una sirena- respondió el hermano menor.

-Una...¿sirena?- preguntó divertida Michie

-Si

-Tenemos que ir a visitar a los familiares de las victimas, haber si pueden decirnos algo- habló esta vez Dean.

-Odio el traje de federal- me quejé  haciendo una mueca de asco.

-Te queda sexy- sonrió el mayor.

-¿Tu crees?- pregunté coqueta.

-Oh Dios no empecéis ahora- suspiró exasperada Michie haciéndonos reír.

 And if I say to you tomorrow,
"Take my hand, child, come with me."
It's to a castle I will take you
where what's to be, they say will be.-Oí mi teléfono sonar.

(Y si mañana te dijera:

«coge mi mano, niña, ven conmigo».
Te llevaré a un castillo
donde dicen que lo que ha de ser, será.)  

Lo saqué de mi bolsillo pero este no sonaba, ni si quiera marcaba que me hubiesen llamado, no le dí importancia y volví a guardarlo.

-Vamos a ver a los familiares entonces- murmuré.

Subimos de nuevo al impala después de pagar la cuenta y nos dirigimos al motel.

-Despierta...- susurró Michie.

-¿Qué?- pregunté con el ceño fruncido mirándola.

-¿Qué de que?- preguntó esta vez ella mirándome divertida- no e dicho nada.

-Oh... me pareció que...- me interrumpí a mi misma- da igual.

-Hemos llegado- avisó Dean, bajamos del coche y nos dirigimos a la puerta de la casa, ya vestidos de federales.

Sam llamó a la puerta.

-¡¿Señor y señora Williams?!- preguntó después de un rato sin obtener respuesta, volvió a llamar a la puerta y esta se abrió sola.

Dean fue el primera en entrar con su arma en la mano, seguido de Sam y de mi, por último Michie ya que esta iba desarmada.

-¿Hola?¿Hay alguien?- Volvió a preguntar Sam.

-Vuelve por favor - me giré de golpe al oír el susurró de un hombre en mi oído, pero allí no había nadie.

-¿Te encuentras bien?- dijo Michie mirándome preocupada.

-¿No has oído eso?- pregunté confundida.

-¿El que?

-No... nada, da igual- susurré negando con la cabeza.

-Soy la heroína de la historia, no necesito ser salvada...- la voz de una mujer se escuchó a mis espaldas, era la mía... Me giré, nada...

-Un brindis por todos los besos que nos dimos, y un brindis porque te quiero y no dejaré de hacerlo- esta vez volvió a ser la voz de un hombre la que habló seguida de un sonido parecido a un choque de copas que provocó un fuerte dolor de cabeza.

-Dea, Dea- agarró mi hombro Dean- ¿Qué te pasa?

Me limité a negar con la cabeza y seguir caminando.

Bajamos las escaleras que daban hacia el sótano y abrí la puerta, delante de mi se encontraban un hombre en el suelo, inconsciente, y al lado de este una mujer con una herida en la cabeza aunque consciente.

-Vamos, hay que sacarlos de aquí- Avisó Sam, ayudamos a aquella pareja y sin perder el tiempo los llevamos a el hospital mas cercano, que se encontraba a apenas 4 manzanas.

-¿Entonces su marido intentó matarla?- pregunté a la señora una vez que nos permitieron entrar a verla.

-Si, yo estaba ordenando el sótano y de repente el me golpeó con algo, no sabía que hacer así que le golpeé con el bate de béisbol que había en la pared- explicó ella- Es raro ¿sabes? justo una semana antes mi hija...mi... mi hija, su novio la mató- sollozó.

-¿Sabe porque?- preguntó Sam

-El dijo que... fue por otra mujer, la mujer de sus sueños- su voz cada vez se hacia mas aguda- el dijo que ella, aquella chica, le había pedido que matase a mi hija, y así... aquella mujer y el estarían juntos para siempre.

-Esta bien, muchas gracias por responder, lamentamos mucho su perdida- Michie le dio un pequeño apretón en el hombro.

-No hay ninguna duda de que ha sido una sirena- Dijo Sam una vez que salimos de la habitación, al marido no nos habían dejado verlo- ¿Y ahora que?

-Ella volverá- aseguró Dean- querrá que el termine su trabajo.

-Hola, quería saber cual es la habitación de Led Williams- Todos nos giramos al ver a una mujer joven de cabellos rubios preguntar a una enfermera por el hombre.

-¿Eres familiar?- preguntó la enfermera.

-Si, soy su novia

-215- dijo no muy convencida la enfermera.

Esperamos unos cinco minutos después de que la rubia subiese por el ascensor y luego subimos nosotros.

La puerta de la habitación estaba entre-abierta.

-No lo hiciste Led- murmuró la mujer- Acaso no quieres estar conmigo para siempre...

Dean abrió la puerta de golpe.

-No la escuches Led- advirtió este- es una impostora, ella fue la causante de la muerte de tu hija.

-¿De que están hablando Su?- le preguntó el hombre a la mujer- ¿Susie?

-No les escuches, están mintiendo- gruño ella.

-Coge esas alas rotas y aprende a volar- volví a oír el murmuró de un hombre en mi oído, maldita sea creo que me estoy volviendo loca.

-Mira su reflejo Led...- le ordenó Michie.

Miro hacía en espejo de la pared y al instante su cara se desfiguró al ver el verdadero rostro de la mujer.

-Algún día encontrarás a alguien a tu medida alguien que te levante, que te perdone, que te cuide, alguien que te haga sentir especial...-esta vez era la voz de Michie la que resonó en mi cabeza, pero ella... no había abierto la boca...

-Hola... soy Jason...- otra vez la voz de aquel hombre, pero esta vez fue diferente, vi imágenes como flashes, era un chico de mas o menos mi edad, ojos azules y una sonrisa preciosa.

En cuanto aquellas imágenes se fueron lo primero que vi fue a aquella mujer, susie, apuntándome con un arma.

El sonido de un disparo resonó por toda la habitación seguido de un fuerte dolor en el vientre y el chillido de Dean diciendo mi nombre...

Caí de rodillas al suelo al no poder mantener mas mi peso, puse mis manos en mi abdomen del cual salía una gran cantidad de sangre.

-Nena, por favor aguanta- sollozó Dean tirándose a mi lado en el suelo. Otro disparo resonó y el cuerpo sin vida de la sirena calló al suelo.

-Dea... no...- Michie se arrodilló a mi otro lado, lentamente mi cuerpo fue cayendo hasta que mi cabeza quedó apoyada en las piernas de Dean.

Sentía que mis parpados pesaban como si de piedras se tratares, mi abdomen ya no dolía.

-Despierta por favor, debes intentar levantarte, se fuerte, por favor Dea te amo, vuelve cariño- otra vez la voz de aquel chico, Jason... cada vez se oía mas cercana.

-Dean...- susurré con voz ahogada, sentía que el aire no entraba en mis pulmones- te amo...

Y todo se volvió negro durante un tiempo, hasta que empecé a oír voces cada vez mas cerca, lentamente fui abriendo mis ojos.

-¿Dea?- preguntó alguien a mi lado

-Jason...- susurré mirándolo, al instante sus ojos se empañaron en lágrimas y sus labios se presionaron contra los míos.

Contemplé sus ojos azules, su tez pálida, tenía unas ojeras como de no haber dormido en bastante tiempo, su cabello rubio oscuro estaba mas largo y tenía barba, tenía una expresión cansada pero a la vez feliz.

-¿Qué a pasado?- mi voz casi no se oía, aunque el se las apañó para escucharme.

-¿Dea?- esta vez era Michie la que habló, miré hacia la puerta y allí estaba ella, parada, mirándome fijamente.

-Wazup- susurré divertida.

Esta chilló con fuerza y corrió hacia mi abrazándome con cuidado.

-Te e echado tanto de menos- murmuró una vez que se separó

-¿Qué?¿Por que? ¿que a pasado?- Dije confundida, ¿Donde estaba Dean, y Sam? ¿De donde había salido Jason? ¿Porque no reconocí su voz al oírla en mi cabeza?

-Tuviste un accidente en moto Dea...- me susurró Jason con cuidado- Has estado en coma.

-¿Qué? ¿e...en coma? ¿cuánto tiempo?

-8 Meses...

8 Meses... Había estado en coma 8 malditos meses... todo había sido un sueño... Nada fue real...

FIN

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Y aquí esta en final de esta historia, ¿Qué os a parecido? ¿Os lo esperabais? porque sinceramente yo no xd Bueno si habéis leido alguna de mis historias ya sabréis que me encantan los finales sorpresa así que...

Bueno eso es todo, dejadme en los comentarios que os a parecido. Aquí os dejo unas fotitos de Jason (uno de mis tanto platónicos xd):