capítulo uno
❛ ¿TIENES UNA PLUMA? OLVIDÉ LA MÍA ❜

Era un idiota, de eso estaba bastante seguro. Debía de hacer una investigación para la clase de pociones que el inservible de Snape les había ordenado que hicieran para aprobar a la mayoría de los estudiantes a los que les había ido pésimo en los exámenes previos a los famosos TIMOS, pero en cuanto llegó a la biblioteca y colocó los libros sobre la mesa y buscó en su morral, notó que su pluma no estaba allí, aunque realmente no era suya sino de Percy Weasley, quien se la había prestado en la mañana.

No había ningún estudiante cerca como para conseguirse una pluma para escribir la estúpida investigación y regresar a la sala común de Hufflepuff no era una opción para Broderick debido a su lejanía. Estaba frito, no podía hacerlo el día siguiente porque ya no le quedaba más plazo y la primera clase que le tocaba era con el inútil de Snape. Si tan solo los libros que necesitaba para hacer su informe no fueran pesados, de seguro que el moreno los tomaría prestados para realizar dicha tarea en su sala común, pero ni siquiera eran livianos como una pluma.

Y hablando de ellas, necesitaba realmente una.

── Broderick, no creí que te vería tan temprano por aquí.

Ese era Oliver Wood, se llevaban bien porque a ambos les apasionaba el Quidditch, pero Nott era demasiado vago como para formar parte del equipo de su casa. Estaba mejor en la banca.

── ¿Temprano? Las clases han terminado hace más de una hora.

── No, solo han pasado veinte minutos ¿Te sientes bien? Quizás tu poca percepción del tiempo se deba a que estés enfermo ¿Has ido a la enfermería?

No quería menospreciar su amable y desinteresada preocupación, pero en verdad no estaba de ánimos para sus recomendaciones.

── Lo único que necesito en estos momentos es algo para escribir ── respondió, mientras dejaba caer su cabeza sobre la mesa ¡Ahí estaba! Quizás esa era su única esperanza. Broderick se incorporó y preguntó algo enérgico ── ¿Tienes una pluma que me prestes?

Ciertamente, Oliver no conocía la reputación de Broderick cuando de plumas y lápices se trataba, pero si lo supiera, no podría haber sido de mucha ayuda.

── No, te juro que las dejé todas en la sala común. Solo vine a dejar unos libros antes de mi entrenamiento con el equipo ── se lamentó. Le habría encantado ayudar a su amigo en esa situación tan crítica en la que se encontraba, lo peor era que iban contrarreloj y el tiempo era sumamente valioso ── ¡Tal vez Percy tenga una pluma de sobra!

La señora Pince lo calló debido a que su tono había aumentado al hablar. Oliver se disculpó en silencio, apenado.

── ¿Percy?

── Sí, está en el otro pasillo estudiando para los TIMOS. Ven, vamos a hablarle ── Wood hizo que el moreno se levantase de la silla y al agarrarlo del antebrazo, lo arrastró de un pasillo al otro.

Y era verdad, allí estaba aquella cabeza rojiza que Broderick conocía demasiado bien porque se sentaba delante suyo en la mayoría de clases que compartían. El prefecto alzó la vista al sentir a dos presencias invasoras; le regaló una mueca de fastidio a Oliver, pero prontamente sonrió disimuladamente al ver a Nott junto a él.

── Weasley, amigo mío...

── No tengo ni cinco knuts, así que no te atrevas a pedirme dinero ── sentenció sin siquiera dejarlo terminar la oración.

── ¡Nadie viene a pedirte dinero! ── una vez más, Pince hizo callar al muchacho. Oliver tragó en seco, asustado ──. No puedo creer que pienses que yo te pediría algo como eso.

── Pero es que tú siempre me andas pidiendo eso ── y era cierto, pero, de todas formas, a Oliver le gustaba fingir estar ofendido ──. Hola Broderick.

── ¡Claro! A él sí que lo saludas.

── Sí. Él no es una molestia como tú ── ¿En verdad creía eso? Siempre estaba molestándolo cada que le pedía plumas, así que claro que lo era. Hasta él sentía que estorbaba ── ¿Necesitan algo?

── Bueno, como puedes ver, Nott está en el pasillo contiguo haciendo un ridículo informe de no sé qué, pero olvidó traer su pluma, así que...

── Sí, por supuesto que tengo una pluma ── el pelirrojo ya había extendido su mano con el objeto en ella.

Oliver no podía creer lo que estaba viendo.

Percy Weasley estaba sonriendo ¡No! Le estaba sonriendo a alguien ¡Mucho peor! Percy Weasley le estaba sonriendo a Broderick Nott.

── Gracias ── masculló el moreno ──. Si me disculpan, iré a comenzar mi informe antes de que se me haga mucho más tarde.

Y regresó a su mesa, al otro lado de la estantería.

── Oh por Merlín ── susurró Wood, mirando sorprendido a su amigo.

── ¿Qué?

── Estás enamorado de él ── su voz se mantenía en un nivel bajo.

── No lo estoy ── aseguró el chico ──. Solo soy amable.

── Por favor, no eres amable ni con los de tu familia.

Y quizás sí tenía un poquito de razón.