Al llegar observó todo con cierta fascinación, si bien no era la primera vez que visitaba la empresa, si había estado lo suficientemente emocionado como para soltar un par de grititos a la hora de encontrarse a chicos que llegaba a observar por televisión.

Namjoon se encargó de mantener una conversación entre ambos que gracias a mucho esfuerzo implicado por parte del más bajo, logro fluir.

El chico de hoyuelos se había mostrado lo suficientemente feliz y satisfecho con los consejos que le había dado un par de semanas atrás, justo a tiempo para su muy conocida cita con Kim Seokjin.

Habían platicado durante el camino a la oficina del azabache, antes de que aquella salida apresurada por parte de su novio le despertasen pensamientos que no aprecian muy correctos.

Era extraña la constante presión que le provocaba aquella sensación de aislamiento mental, donde su mente divagaba y simplemente observaba a las personas sin mantener su atención en algo real.

En ese instante todo parecía no tener importancia si no ayudaba en su propósito, tomando aire y caminando con velocidad hacia el salón donde su amigo el bailarín estaría entrenando al chico que podría ayudarle en ese absurdo plan.

A una corta distancia pudo divisar un par de figuras muy conocidas, ignorando por completo los chasquidos y toqueteos entre su par de amigos, decidió acercarse con sutileza.

—Chicos... —Hablo medianamente audible. —Chicos... —Quizá no era su culpa, aquel par estaba lo suficientemente concentrado en los labios del otro como él lo había estado en los de Yoongi unos minutos atrás, antes de que se marchara con tanta rapidez que no se percatara de su pequeño error. —¡Chicos!

Hoseok saltado en su lugar, mordiendo con fuerza el labio contrario hasta provocarle una ligera abertura. —Hobi, eso dolió. —Taehyung logró separarse y alisar sus ropas con mucha rapidez, algo en lo que tenía bastante practica, si podía presumir.

El mayor aclaró su garganta y se apresuró a cuestionar la intervención del rubio. —¿Que sucede Jimin? ¿Necesitas algo? —Indagó, observando el marco en el que Jimin se encontraba recargado, mientras él posaba su mentón en el hombro del chico castaño y le rodeaba sutilmente la cintura.

—Si. Uhm, esperaba poder hablar con Taehyung. —Sonrió un tanto incómodo por la situación, porque incluso si él no debía interferir en la relación de sus tres amigos, no podía evitar pensar cosas que en ocaciones le hacían sentir mal.

—¿Yoongi te pidió que nos vigilaras? Ya hablamos sobre eso y mi tiempo de entrenamiento acabo, ahora puedo disfrutar de una linda tarde al lado de Hobi.

—No es sobre eso, necesito un favor... de minino a minino.

La sencilla expresión del actor cambió, mostrándose sorprendido e intrigado por lo que tuviese que conversar con su mayor.

Suspiro y se giró, encarando a su profesor de baile. —Tengo que ir con Jimin. ¿Te importa esperarme, puedo intentar preparar la cena en tu apartamento y quizá... ¿quedarme a dormir? —Sonrió.

—Creo que yo cocinaré. —Ambos rieron y unieron sus labios por unos segundos más, dejándole al espectador una sensación extraña.

¿Como podía salir con tres chicos al mismo tiempo? Jimin no consideraba que eso fuese malo, sin embargo, siempre se preguntaba la manera en cómo Taehyung dividía su corazón al punto de lograr no desmoronarse.

—Bien, estaré fastidiando un poco a Namjoon Hyung . —Comentó al momento que recogía sus cosas del lugar. —Me llamas cuando estés listo, nos vemos Mochi. —Se despidió el sonriente pelirrojo.

En una clásica despedida de mano, Kim dio su último adiós, tomando asiento e indicándole al rubio que podía acercarse.

El rubio a cruzo sus brazos, acercándose y tomando asiento al lado del castaño. —Aún no entiendo cómo puedes tener tiempo libre en tu agenda, contando eventos, grabaciones, entrevistas y además salir con los tres.

El manto rio, negando con diversión cosas que sabía eran muy obvias. —Jimin creo que olvidé informarte pero termine con Bogum hace una o dos semanas, no tienes que preocuparte. —Respondió, colocando su mano en el hombro contrario y dejándose caer con sutileza sobre las piernas más torneadas.

—Oh dios, no comentaste nada. —Se siento ofendido hasta crear un lindo puchero. —... él te gustaba mucho, ¿no?

Taehyung se tomó un momento, observando los ojos contrarios hasta sentir las verdaderas palabras sobre sus labios. —Era muy atento y súper atractivo, pero fuera de las grabaciones o eventos... su prototipo de chico malo no encaja en lo que busco para algo real. —Suspiró, jugando con la mano más pequeña. —Ahora pienso concentrarme en lo que tengo con...-

—¿Jungkook y Hoseok? —Sonrió, pensando en lo mucho que le desgravada Taehyung al principio, regresando a su realidad y percatándose del gran avance que los dos habían tenido en su relación.

Realmente lo consideraba un gran amigo.

—Exacto. —Respondió escuetamente.

—¿Pero cómo? ¿No quieres averiguar quien de ellos te interesa de verdad?

—Eso sería una muy buena conversación para después, ahora estamos aquí por ti. —Consiguió cambiar el tema. —Así que cuéntame, ¿para que necesitas mis servicios?

Una risa nerviosa de expandió por el lugar, dejando un juego de manos entre los pequeños y gorditos índices del mayor. —Que curioso que lo digas así porque suenas como todo un mafioso espía intelectual.

La pregunta se plantó en la mente del castaño, era claro que algo estaba sucediendo. — ¿Que sucede?

—Necesito que hagas algo por mi. —Respondió.

—Eso ya lo habías pedido, lo que quiero es saber de que se trata.

El felino de pelaje rojizo temblo, tomando un pequeño papel de su bolsillo izquierdo. —Quiero que averigües que hace Yoongi en esta dirección.

Lo proceso, bueno, eso intento. —¿Qué?

—Solo debes decirme a quien verá, una pequeña descripción física y si puedes lograrlo, escuchar su conversación.

—¿Me estás pidiendo que lo espíe?

—Por favor, sin preguntas hasta que lo hayas conseguido y te juro que te diré que sucede.

—¿Tienes dudas otra vez?

—Tae no es eso, por favor hazlo, quiero saber con quien se va a encontrar y que es lo que va a entregarle. —Hablo desesperado. —No ha visto tu versión felina y será muy fácil espiarlo de ese modo.

—¿Acaso y te has vuelto loco?

—Yo te he ayudado muchas veces en nuestras reuniones a que mantengas un momento a solas con cualquiera de los dos, siempre me encargo de distraer al otro y que así puedas besarte a escondidas con el que elijas.

Taehyung relamió sus labios antes de suspirar con fastidio. —Mierda Jimin, debes estar bromeando. —Comentó, sujetando con fuerza el pequeño papel antes de salir caminando.

Era necesario.

De uno u otro modo él averiguaría que es lo que estaba sucediendo en la vida de su Yoongi, incluso si él no pretendía decírselo.

El siguiente capítulo les ayudará mucho más a comprender que es lo que se encuentra sucediendo. UuU.

Yui-Chan ❤️