POV KAI

Convencerlo fue difícil pero aquí estamos, cenando. Mi idea de cena claro que era algo más romántico, un restaurante o algo así. Sin embargo aquí estamos comiendo comida callejera.

Kyungsoo me daba miradas de vez en cuando mientras comía su comida, por mí la verdad es que me sentía completamente satisfecho al verlo cenar bien. Lo mire un momento más y cuando levanto la vista yo desvié mi mirada.

-¿No vas a comer?- me moví torpemente y tome mis cubiertos.

-Claro que si – comencé a tomar de mi sopa, el rió bajito.

-¿Es que acaso estas nervioso? – baje la mirada, sentí mis mejillas sonrojarse.

-Sí, bueno eso es raro pero sí, me... estoy nervioso – volvió a sonreí para sí.

Lo que quedo de la cena fue callada, la verdad es que no sabía que más decirle. Cuando fuimos a mi auto para llevarlo a su casa, Kyungsoo parecía pensativo.

-Estas aquí en china, dices que te gusto – lo mire mientras conducía – estas portándote nervioso y siento cuando me miras- me sonroje de nuevo.- ¿Es verdad todo lo que dijiste?

-Claro que si – sonrió bajando la mirada.

-Wow, enserio pensé que jamás te llegaría a gustar – quería verlo, quería ver sus expresiones pero tenía que ser cuidadoso conduciendo.

-Me gustas y por favor créelo. – llegamos al pequeño hostal donde se estaba quedando.

Me miro saliendo del carro.

-Gracias Kai- Lo seguí.

-Oye, puedo conseguirte un cuarto del hotel. Puede ser más cómodo – negó.

-Está bien aquí, me tratan muy bien – me sobe las manos en el pantalón.

-Está bien, te daré tu espacio- Camine con él a la puerta.

-Bueno Kai, nos vemos – iba a entrar a la casa pero lo detuve. Me miro con los ojos como platos. Lo acorrale contra la puerta.

-¿Puedo tener un beso? – el seguía mirándome a los ojos. Asintió. Sonreí para mis adentros.

Tome su barbilla y lo traje a mis labios, fue un beso corto pero tan delicioso, tan excitante. Me miro a los ojos, no lo resistí y le plante otro beso, esta vez era uno más apasionado, tome sus labios y di una mordida, el pequeño gemido que soltó fue tan sexy, sus manos fueron a mi cintura y yo lo atraje más a mí, abrí mí boca y mí lengua se encontró con la suya, Su húmeda boca envió corriente a mi entrepierna, acerque a Kyungsoo por la cintura. Jamás en la vida me había sentido tan editado por alguien y mucho menos con un hombre, lo necesitaba. Necesitaba sentirlo, sentir su piel, Mi mente me jugaba malas pasadas, quería besarle para siempre, Quería saber lo que se siente tenerlo bajo de mí, acariciar su piel. Pude sentir su erección sobre mi muslo, quería restregarme contra él.

-Kai. – susurro con la voz ronca, su voz estaba llena de necesidad como yo. Se separó pero pego su rostro a mi pecho, respiramos rápidamente, sonreí – Por favor, para – demonios no podía pedirme eso.

-Soo - dije en su oído, bese su coronilla- Dame una oportunidad – necesitaba con todas mis fuerzas que me dejara estar cerca, tenerlo cerca.

-Te dije que me conquistaras – dios, eso era un sí.

-No te arrepentirás – bese su mejilla y él se separó.

-Nos vemos Kai – entro en la casa y yo fui al carro, mi corazón estaba como en un maratón, sonreí amplia mente, jamás en mí vida había sentido esto y me gustaba. Demonios me gustaba mucho.

Rodé por mi cama del hotel, no podía conciliar mi sueño. Ya había tratado de todo, había tomado un vaso de leche, había visto una película y comencé a leer un libro, mi mente estaba tan despierta, me sentía emocionado, feliz y nervioso. Además de que hacía unos minutos acabe con una sesión con mi mano derecha y mis pensamientos en Kyungsoo. Me estaba volviendo loco, sentía que lo extrañaba, que lo quería ver y estrecharlo en mis brazos. Eran la 1 am cuando decidí hacer algo estúpido.

Al tercer timbre del celular pensé en colgar, sin embargo alguien contesto del otro lado.

-¿Kai? – solté el aire.

-¿Estabas dormido?

-No, no podía dormir – dios, que alivio. -¿Pasa algo?

-Tampoco podía dormir, quería escucharte - ¿Eso había salido de mis labios?

-Humm – no dijo nada.

-espero no molestar – rio bajito.

-No lo haces – guardamos silencio un poco - ¿Me vas a decir quien fue el traído? ¿Quién te dio mí número y la dirección? – reí.

-Chanyeol.

-Debía saberlo.

-Después se lo agradeceremos – no contesto de inmediato pero pude sentir una sonrisa.

-Yo enserio quería comenzar de cero – susurro – tenía muchas esperanzas de olvidarte, pensé que nunca te iba a gustar y además me dolía mucho tenerte cerca.

-Lo siento, de verdad lo hago. Si mu hubiera dado cuenta de lo que sentía por ti, no hubiera sido un completo idiota.

-Eres un tonto – apreté mis ojos, era un placer escuchar su voz.

-Creo que el saber que te ibas a casar fue lo que detono todo, cuando recibí esa invitación no sabía que pensar. No lo entendía – recordarlo parecía lejano – Quizá tienes razón y me acostumbre a tenerte cerca, a tus coqueteos y a tus regalos pero dios, si no hubieras hecho eso , justo ahora seguiría siendo un idiota – rió del otro lado de la línea – crees que no te observaba Kyungsoo, lo hacía, te veía, lo hacía más de lo que quería aceptar. Yo sabía que eras guapo, sabía que eran tiernos, conocía tus expresiones, pero aun así no quise aceptarte.

-Pero en su momento también debiste pensar que era un encinos, dios, me dijiste que no te gustaba y yo seguía insistiendo, aun cuando ya tenías novia. Se lo dije a Baek, le dije que tal vez debía parar pero insistió en que tenías miedo, que no desistiera, de verdad lamento todo lo que hice. Sé que no es tu culpa.

-Tal vez si tenía razón Baekhyun después de todo. No quería ser diferente Kyungsoo, sentía que el que me gustara un hombre me haría así, que decepcionaría a mi madre. No quería decepcionarla, siempre ha sido mi pilar. Desde que mí padre nos dejó ella es mí soporte.

-Jamás supe nada de tu padre- guarde silencio – lo siento, yo no quería...

-No, no pasa nada – sonreí – En realidad papá murió cuando yo aún no nacía, tuvo un accidente de auto. Mi madre y él solo duraron 3 años casados. Ella dice que siempre lo ha amado y que jamás lo olvidara, quizá por eso no se volvió a casar. – Jamás había hablado con nadie de esto – Mi papa era una buena persona, me dejo cosas, mi primer bate de baseball, mi primer par de zapatos, mamá me dijo que él estaba emocionado de conocerme. Pero nunca lo hizo. En el fondo aun quiero que este orgulloso de mi, donde sea que se encuentre.

-Él estaría orgulloso Kai, eres un hombre exitoso.

-Gracias Soo, en fin, no quería fallarle a mi madre. Es la mujer más fuerte que conozco, ella logro un imperio solo con ayuda de mis abuelos, es un buen ejemplo y yo creía que si era gay o algo así ella se decepcionaría. Tenía miedo.

-¿Y ahora? – sonreí para mí.

-Ella me respeta, me dijo que me amaría como fuera, la amo con el alma y ella me acepta. – escuche que Kyung soltaba e aire – cuando le dije que venía, ella se puso tan contenta.

-¿Sabe que viniste por mí?

-No le dije que fueras tú pero sabe que es un hombre – reí.

-Me alegro por ti, se lo que sientes. Mi madre también se encargó de mí sola. Siempre fuimos solo los dos. No sé nada de mí padre, si es que está muerto o vivo. Solo sé que la boto en algún momento cuando supo de mi existencia. Ella fue la mejor madre del mundo, dedicada a mí y a la docencia, ahora ella está viviendo su vida y me gusta eso – Tampoco sabía eso de él – cuando se enteró que era gay fue la primera vez que me enamore, yo sabía que me gustaban los chicos pero lo tenía bien guardado, cuando me enamore en la universidad y me rompieron el corazón tuve que contarle todo a mi mama, ella fue mi soporte y mi motor. La amo y ella me ama por lo que soy. – Sonreí para mí – ella enserio te odia en estos momentos – abrí mis ojos con sorpresa – sabe lo que me hiciste sufrir y me dijo que si te veía te cortaria el pene – guardamos silencio – ¿Kai? – Soltó una carcajada – hey, tranquilo, le dije hace un rato que no sería necesario – siguió riendo en mi oído, estaba asustado pero su risa me deleitaba.

-Me asustaste.

-No debes meterte con él bebe de mamá reí con él, enserio no sabía cómo lo quería.

-¿Cómo fue tu enamoramiento en la universidad? - ¿Debía tocar ese tema? No dije nada más.

-Tom estaba conmigo en la universidad, desde que lo vi me gusto. Era tan lindo y siempre estaba de buenas, era respetuoso y amable. Con el paso del tiempo pude verlo de lejos y percatarme de que era más de lo que demostraba. Fue en una ocasión que me comenzó a hablar, él se portaba tan bien conmigo, nos hicimos amigos y poco a poco me enamore de él. Dicen que el amor es ciego, yo daba todo por mi primer amor, comencé ofreciéndome a hacer sus trabajos, él trabajaba fuera de la escuela y yo quería ayudarlo con las tareas, me sentía enamorado en ese tiempo. Todo paso tan rápido, cuando me di cuenta ya estaba haciendo todos sus trabajos sin que me ofreciera, el salía a fiestas y yo estaba encerrado terminando sus tareas, él era de las mejores calificaciones en la universidad y era gracias a mi – oh demonios, ese idiota – una vez estábamos tomando en mi cuarto de la facultad y lo bese, se fue el detonante, me dijo que le daba asco y que besaba muy mal. Además me confeso que tenía una novia y que jamás se fijaría en mí.

-Soo – eso me sonaba tan parecido a mí.

-Le dije que me gustaba y dijo que jama me había dado alas, me sentí morir. Me salí de la facultad, mí madre se enteró de mí orientación sexual y yo viví con Tom en mi corazón por años. Después de eso jure no enamorarme nunca más.

-Lo lamento Soo – el negó con un sonido.

-Fue hasta ese día Kai, te vi en la fiesta, me salvaste de una grande caída y dios, cuando te vi quede flechado – mi corazón fio un brinco – Dios sabía que eras la persona más guapas y sexy que había visto, mi cara se calentó en el instante y comencé a sudar frio – reí bajito – te observe, te vi y eras el mejor, la mejor persona con tus amigos, gentil, tan honesto y te encantaban mis postres, me enamore con él tiempo, no preguntes cuando exactamente pero cuando acorde mi mundo giraba a tu alrededor, pero también me rompiste el corazón.

-Kyung, lo lamento tanto.

-No te preocupes, lo sé. Se lo que sientes y te agradezco porque gracias a eso me pude respetar un poco más en teoría – rió sarcástico.- Kai, por favor solo no me rompas el corazón de nuevo – dios, no lo haría.

-Te lo prometo Kyungsoo.

Seguimos hablando, hablamos sobre sus postres, sus sueños y los míos. Él porque estaba aquí y las noticias más recientes de Lisa y Jennie. Cuando mire al reloj eran las 3:30 de la mañana, sonreí para mí. La primer persona con la que me desvelo hablando por teléfono, espero que la única.