Mío

De nuevo el rostro de Jungkook dibujó una sonrisa, diferente a la anterior, está vez está llena de malicia.

Era tan jodidamente hermosa y excitante, que hizo que su pene se contrajera en medio de ambos cuerpos.

Taehyung gimió cuando él lo miró fijamente y dejo caer su rostro en el cuello de Jungkook para cubrir su sonrojo, aprovechando para besar y chupar la delicada y blanquecina piel, dejando un hermoso moretón en el lugar, sin importarle que sería una evidencia de lo que estaba sucediendo.

Entonces, las manos de Jungkook se aferraron a su cintura y comenzaron a mover el cuerpo de Tae de arriba hacia abajo, para que montara su erección, mientras el mismo movía sus caderas hacia adelante para embestirlo brutalmente al mismo tiempo que lo guiaba.

El sonido de los continuos choques de las nalgas de Taehyung con los muslos de Jungkook inundaban los vestidores, acompañado de chasquidos húmedos y gemidos bajos por parte de ambos.

Taehyung apretó fuertemente la orilla de los casilleros y levantó su cabeza recargándola en ellos, gemidos dolorosamente sensuales subían por su garganta y saliendo por sus labios sin que pudiera detenerlos, intentó tragar su saliva lo pudo mejor pero parte de ella se deslizó por su barbilla, mezclándose con el sudor que bajaba de su frente, debido al intenso placer que estaba sintiendo.

En estos momentos estaba como detestaba, sudado y jadeando, sin embargo no le importaba, le encantaría estar así siempre.

Se mordió el labio en un intento de acallar sus gemidos obscenos pero era imposible, las embestidas de Jungkook eran duras y despiadadas, dando exactamente en su punto máximo de placer en cada golpe.

La boca de Tae se abrió con un grito lascivo, más saliva fluía por sus labios por la forma tan dolorosamente placentera en que estaba doblado, se sintió tan bien, tan jodidamente bien —¡Jungkook! —gritó cuando las enormes manos de Jeon se apretaron más en su cintura, podía sentir incluso las cortas uñas del otro clavarse en su piel, dejará marcas, pensó sintiéndose orgulloso por ser marcado por el otro —Koo, ahhhh~ , más, más adentro, ¡Hah~! más profundo, Hyung, no te contengas~ destrozame~ —empujó sus caderas hacia abajo intentando empujar el pene de Jungkook más adentro, necesitaba sentirlo destrozando su interior, llegando hasta lo más profundo de su ser, su propio pene se frotaba en medio de ellos, estaba tan apretado y se rozaba placenteramente con su piel durante cada embestida, el sudor de ambos y la lubricación natural hacía que se deslizara fácilmente de una manera malditamente tortuosa.

—Jungkook —logró decir Taehyung después de un agudo gemido, se inclinó hacia adelante recargando su frente contra de Jungkook, sonriendo lo mejor que podía sin dejar de respirar pesadamente —¿Se siente bien? Ahhhh~, ¿estar dentro de mí? - besó su nariz —Hyung tu pene es perfecto para mí, ahhh~ tú me llenas tan bien y mi culo te traga con gusto, nhg~ mírame, estoy sudado y pegajoso gracias a ti, umm~ ¿No te gustaría hacer esto todo los dias?

Jungkook no dijo nada pero su corazón se aceleró tanto que Taehyung sabía que era un sí, y lo confirmo cuando capturó de forma desesperada su boca para besarlo salvajemente, mordiendo sus labios, metiendo su lengua dentro de ella.

Sus rostros giraban de un lado a otro, sus bocas se movían en sincronía, vertiendo sus gemidos en la boca del contrario,  desbordando su propio placer a través de sus labios.

Y entonces el cuerpo de Taehyung se estremeció, los dedos de sus pies se curvaron, sus caderas se detuvieron, gimió de placer aún encerrado en los labios de Jungkook y su respiración se detuvo por un segundo mientras una humedad cálida se desplazaba en medio de sus cuerpos.

El cuerpo de Jungkook no dejaba de moverse con desesperación sin cortar el beso, sus caderas se impulsaban hacia arriba y hacia abajo follando salvajemente el agujero de Taehyung a través de su orgasmo, pudo sentir el momento exacto en que el placer inundó a su  presa, la forma involuntaria en que su culo lo apretaba, con deliciosos espasmos que se sentían como suaves mordidas alrededor de su pene, Jungkook se corrió fuertemente, mientras el culo de Taehyung lo ordeñaba gota a gota, cada espasmo, cada apretón, cada  mordida,  hacían que el semen de Jungkook no se detuviera, llenó tanto a Taehyung que si sería posible, no habría dudas de que estaba embarazado en este momento, con tanto semen que fue expulsado en su interior.

Tanto Taehyung como Jungkook se quedaron inmóviles después de sus placenteros orgasmos, con los labios aún unidos en un beso que se negaban a dejar, no intentaban moverse, simplemente, sus rostros estaban pegados por sus bocas, jadeando con fuerza para recuperar algo de aliento.

Después de un rato Jungkook se separó, mirando a Tae quien simplemente le regaló una sonrisa cansada y se impulsó hacia adelante para besar su nariz.

—Voy a salir —anunció Jungkook, Tae le dió un ligero asentimiento con la cabeza y mordió sus labios cuando, efectivamente, éste comenzó a retroceder.

El suave plop que se escuchó cuando salió completamente de Taehyung, resonó demasiado fuerte debido al silencio que los rodeaba.

Jungkook se agachó de nuevo, sosteniendo las piernas de Taehyung firmemente y las bajó al piso, no pudo evitar soltar una débil risa cuando notó como sus piernas se tambalearon sin fuerzas después de haber estado tanto tiempo levantadas.

—¡Que cruel! —se quejó Tae cuando se percató de su burla, si no estuvieran sus piernas temblando lo hubiera empujado suavemente como venganza.

Jungkook se levantó y rodeó la cintura de Taehyung con una mano y la otra la deslizó debajo de sus piernas —Puedes soltarte, estoy aquí, te tengo —le dijo tiernamente.

Tae por fin soltó la orilla de los casilleros y efectivamente cayó sin fuerzas sobre los brazos que los esperaban, aún con todos sus brazos entumecidos por sostenerse fuertemente de los casilleros rodeó el cuello de Jungkook y recargó su cabeza en su hombro.

—Eres un salvaje —se quejó Tae haciendo un puchero —¿Desde cuando Jungkook Hyung se volvió tan audaz? —se rió contra su cuello.

Jungkook los llevó a la banca central con la intención de sentarse.

—Kookie, llévame a las duchas —Tae exigió con tono juguetón —Mi culo está escurriendo.

—Desvergonzado —respondió Jungkook con cariño presionando un beso en su frente, y en lugar de sentarse hizo lo que le ordenó Taehyung.

Lo llevó hasta las duchas y lo ayudó a bajar, Taehyung se aferró al pasamanos que estaba en un costado mientras Jungkook abría la llave de la regadera.

Se detuvieron a esperar que el agua estuviera en su temperatura correcta, entonces Jeon lo ayudó a meterse debajo de la regadera, recargado en la pared frente a él.

La suave caída del agua tibia sobre su cuerpo hizo que los muslos de Tae se relajaran un poco.

Se permitió disfrutar de la sensación tranquilizadora antes de que unas manos lo sostuvieran de nuevo.

Jungkook sostuvo a Tae por la cintura con una mano y con la otra comenzó a quitar el crop top de su cuerpo y lo arrojó descuidadamente al piso, ahora con el pecho expuesto, las manos de Jungkook recorrieron sus pezones y los peñiscó.

Taehyung echó la cabeza hacia atrás ante los juguetones toques, y dejo que Jungkook continuara tirando de sus pequeños brotes, se sentía tan bien, le gustaba esto.

El cuello de Tae se mostró desnudo a la vista de Jungkook, éste se inclinó y lo chupó suavemente antes de morderlo y succionarlo en todas las partes que su boca alcanzaba, Taehyung volvió a gemir al sentir los suaves labios magullando su piel.

En el siguiente momento Jungkook por fin se despojó de su short y de su ropa interior, dejándose únicamente la camiseta, que ahora estaba empapada con el agua.

De nuevo está duro, pensó Tae cuando sintió la firme erección chocando con su entrada.

Antes de que pudiera detener a Jungkook, sintió de nuevo el doloroso placer de ser penetrado.

—Mierda Koo, ngh~ ¿Otra vez?

—Mn —respondió Jungkook contra su oreja —Tae ahora eres mi puta, y las putas no se cansan —lamió de forma sensual su oído y dejó un suave beso —Puedo hacer lo yo que quiera, a partir de ahora eres solo mío Kim Taehyung.

—Seré lo que tú quieras que sea Hyung~ —respondió Tae riendo —Pero también a partir de ahora eres solo mío, hazte responsable por robar mi virginidad, Koo~.

—Solo tuyo, siempre lo he sido —respondió orgulloso Jungkook con un último beso en su cuello antes de empezar a follarlo bajo la regadera.

⛓️

El equipo de Yonsei ganó el partido de baloncesto debido a que el jugador estrella de Hyosan se enfermó repentinamente después del medio tiempo.

Los vestidores tenían un aroma extraño cuando el equipo de Hyosan regresó a ellos, sin embargo no prestaron mucha atención por la decepción de haber perdido.

Yeji jamás recuperó el uniforme que le prestó a Taehyung, pero Jungkook se encargó de entregarle uno nuevo.

Fue extraño ver a Jungkook yendo a la fiesta que Taehyung organizó, además de que prácticamente estuvo a su lado en todo momento, incluso llevándole sus bebidas hasta donde estaba sentado y se veían bastante amigables el uno con el otro, pero nadie se atrevió a preguntar, después de todo seguramente ambos se habían extrañado y querían recuperar el tiempo perdido.

Misteriosamente, Taehyung no pudo caminar bien por unos días y Jungkook se ofreció a cuidarlo, llevándolo a la universidad y recogiéndolo por la tarde, Jungkook lo regaño de ser terco y dar tantos saltos, argumentando que seguramente se torció el tobillo o se desvío la cadera por intentar hacerse el gracioso y que esperaba que esto fuera una lección.

Jimin terminó confesando que había visto a Jungkook robar su primer beso a Taehyung en la fiesta, y junto con sus amigos pudieron burlarse de la 'hermosa doncella con pene'

Taehyung finalmente consiguió una confesión de Jungkook de que estaba enamorado de él desde la secundaria, Tae hizo un berrinche quejándose de que no se había dado cuenta de eso, aceptando que él mismo había confundido sus coqueteos con travesuras, y que si hubieran empezado a salir desde ese tiempo, hubieran aprovechado para follar en cualquier lugar de la escuela, principalmente en la solitaria esquina oscura de la biblioteca, la cual nadie revisaba.

Jeon y Kim continuaron con sus estudios en sus respectivas escuelas, sin embargo se veían todos los días.

Taehyung decidió ser parte del equipo de animadoras de su universidad, pero con el respectivo uniforme de hombre, las faldas las dejaba para sus citas en casa de Jungkook, donde solo él podía ver lo que había debajo de ellas.

⛓

️Un año después.

Jungkook se encontraba en el sofá de su departamento escribiendo un ensayo en su laptop para su clase de literatura mientras esperaba que Taehyung terminara de ducharse.

—Jungkookie~ —llamó Tae suavemente desde el pasillo.

Jungkook inmediatamente se giró para observarlo.

Taehyung permaneció en su lugar sonriendo de manera coqueta.

Jungkook dejo de mirarlo por un momento, el tiempo suficiente para que pudiera cerrar su laptop y colocarla en la mesa de centro para después levantarse y caminar hasta donde Taehyung estaba parado.

—Koo~ —volvió a repetir Tae levantando una mano y acariciando su mejilla —Hoy seré tu animadora personal —le guiño un ojo —Cada movimiento y grito sera solo para ti, así que mírame, ¿de acuerdo?

—Chantajista. —Respondió Jungkook con cariño, siguiendo su juego.

Antes de abrazar a su novio, Jungkook se deleitó con la vista, está vez Tae vestía un atuendo de porrista de tono rojo con detalles negros, la falda era más corta que la anterior dejando ver sus largas piernas y su trasero desnudo, el top solo cubria sus pezones dejando su cuello y brazos libres.

Cuando los ojos de Jungkook brillaron con lujuria y deseo, Taehyung sonrió triunfante por haber logrado esa reacción —Hyung~ —arrastró la palabra con una dulce voz coqueta —¿Crees que el delicado y virgen TaeTae es una puta que debería ser castigado?

Jungkook rodeo su cintura con su brazos y cerró todo espacio entre ellos, sus penetrantes ojos dorados se perdieron en los traviesos ojos grises —Si—respondio con voz áspera ganándose un gemido de excitación de Taehyung —pero es mi Puta —sonrió con dulzura y beso sus labios—Y solo yo sé como castigarlo.

Tae levantó sus brazos para rodear el cuello de Jungkook y ambos empezaron a caminar abrazados hacia su dormitorio, este será un largo y placentero primer aniversario de noviazgo.