Simplemente perfecto

Taehyung se fue rápidamente a los vestidores una vez que tuvo la bolsa en sus manos, el equipo de Yonsei ya se había retirado por lo que no había nadie, debería apresurarse si quería llegar antes de que el partido comenzara.

Se despojó de toda su ropa quedando completamente desnudo y sacó cada prenda del interior de la bolsa de Yeji.

Recordó que dentro de su casillero guardaba unas pequeñas bragas que Namjoon le había regalado como broma el día de los inocentes, se había olvidado tirarlas, lo que fue una suerte para este momento, ya que eran de color azul turquesa similar al tono oscuro de las orillas del uniforme de porrista de Hyosan.

Las deslizó por sus largas piernas, las cuales estaban completamente libre de vellos, era una suerte ser una persona con tan poco vello corporal, incluso si tomara una foto de ellas y las subiera a alguna red social podrían pasar como piernas de mujer, delgadas pero torneadas y con la delicada piel perfectamente cuidada, tuvo mucho cuidado para acomodar a su amiguito dentro de la diminuta prenda para que nada sobresaliera de las bragas.

Después se colocó el crop top que en su mayoría era blanco con detalles azules, se ajustaba perfectamente a su pecho cubriendo solo esa parte, el cuello alto cubría su piel hasta su barbilla pero tenía un triángulo exactamente en la división de sus pezones que dejaba ver la pálida piel que se escondía debajo de la prenda.

La falda se la colocó justo debajo de su ombligo, el encaje de sus bragas se apreciaba un poco adornando la lisa pretina justo como quería, dado que la falda era de una mujer más baja y gracias a que sus caderas y trasero eran demasiado carnosos se levantaba de la parte de atrás y dejaba ver más de lo que necesitaba.

—Perfecto —dijo Tae mirándose al espejo, realmente se veía muy bien en ese uniforme y dejaba ver demasiada piel, Jeon Jungkook se escandalizaría y no apartaría su vista de él.

Soltó su cabello para acomodarlo nuevamente, dejó sus mechones más cortos para que cayeran por su rostro y volvió a tomar el resto en una sola cola alta y la ató con una larga cinta azul que también venía en la bolsa de Yeji.

Sacó un brillo labial humectante que le había dado Jimin y se lo colocó —Realmente soy hermoso, jajaja —se guiño un ojo en el espejo y salió del vestidor.

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Taehyung entró al auditorio moviendo exageradamente las caderas haciendo que la falda se balanceara al ritmo de sus pasos, no perdió de vista como todos los jugadores y personas de las gradas lo miraban, sonrió para sí mismo con orgullo mientras se dirigía directamente a donde se encontraba el equipo de Hyosan.

—Jungkookie~ —llamó en voz baja.

Cuando Jungkook se giró para verlo, Taehyung no se sorprendió por la forma en que esos ojos dorados recorrieron cada parte de su cuerpo, desde sus piernas expuestas hasta detenerse en su rostro.

Tae sonrió de forma coqueta mientras los otros jugadores también lo miraban y comenzaban a murmurar sobre lo bien que lucía su uniforme en su cuerpo a pesar de ser un chico.

—Jungkookie —volvió a repetir —Hoy seré tu animadora personal —le guiño un ojo —Cada movimiento y grito será solo para ti, así que mírame, ¿de acuerdo?

—Patético —dijo Jungkook con una nota de molestia en su voz, giró su rostro, dirigiendo una mirada helada hacia su equipo que no dejaba de ver a Kim Taehyung —Es momento de que empiece el partido.

—Hay que ganar —respondieron todos al unísono mientras se ponían de pie y se dirigían al centro del auditorio no sin antes lanzar otra mirada de reojo a Taehyung, quién solo se limitó a guiñarles un ojo de forma coqueta.

Jungkook entrecerró sus ojos hacia Taehyung, luciendo completamente molesto antes de dirigirse al centro del auditorio para reunirse con su equipo.

Taehyung entonces se giró hacia donde estaba el equipo de Yonsei.

Namjoon escupió su agua cuando éste lo saludo, no se había dado cuenta de que era él.

—Le daré un jalón de orejas —le gruñó en voz baja a Félix —¿Qué pretende?

—Le sienta bien el uniforme de porrista —Jimin, que estaba tras ellos, contestó —Nunca creí que tuviera tanto coraje para hacer algo así solo para llamar la atención de Jungkook Hyung.

—Pero solo logró hacer que Jungkook se molestara más —Félix respondió.

—Si —Hoseok estuvo de acuerdo —Pero no por lo que crees —su mirada viajaba de Taehyung a Jungkook continuamente mientras sonreía.

Con un silbido agudo del árbitro y un excelente salto por parte de los capitanes de equipo para conseguir el balón, el partido comenzó con Hyosan liderando.

Durante toda la mitad del partido, Taehyung estuvo gritando el nombre de Jungkook de forma extremadamente sensual mientras daba saltos y bailaba con cada porra, más de una vez su falda se levantó dejando ver sus pequeñas bragas y la pálida piel de sus muslos y Jungkook estaba cada vez más irritado con cada mirada que le lanzaba, pero por más que Taehyung hizo todo por distraerlo, Jungkook no fallaba ningún tiró.

Cuando el primer tiempo terminó Tae ya estaba sumamente cansado y le dolía la garganta por gritar tanto, al menos tuvo un logro, Jungkook miro todos sus movimientos pero no logró que perdiera la concentración.

Derrotado, decidió regresar a los vestidores, se ducharía y cambiaría para disfrutar del segundo tiempo y apoyar correctamente al equipo de Yonsei, como espectador, desde las gradas.

  
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Taehyung paso por los vestidores del equipo visitante durante su trayecto a los vestidores de Yonsei, entonces otra idea traviesa cruzó su mente.

Le escondería su ropa limpia a Jungkook por haberlo ignorado tanto.

No tardó en encontrar su bolso, era el único de color blanco con nubes estampadas en ella además de un inusual broche de conejito que lo adornaba, que siempre llevaba consigo desde que él lo recordaba.

Saco la ropa interior de Jungkook, doblada de forma perfectamente exagerada, otra idea cruzó su mente, sacó su celular para tomar una foto, abrió su Twitter y la subió escribiendo "¿Qué se ve mejor? ¿Taehyung con ropa de porrista o la ropa interior de la 'Frialdad Elegante'?"

Antes de poder hacer la publicación una ronca voz se escuchó tras él.

—Kim.

Mierda, Taehyung maldijo internamente, no solo había sido descubierto en los vestidores del equipo invitado, si no que aún sostenía en su mano la prístina ropa interior del que había dicho su nombre —Jungkook —dijo Tae forzando una sonrisa.

Jungkook avanzó hasta él, observando fijamente su ropa interior en su mano.

—Me equivoque de vestidores Kook no es lo que crees —dejó la ropa interior y su celular sobre el banco, esperando un grito o tal vez un golpe de aquel hombre.

Pero Jungkook ya no contestó, solo se limitó a mirarlo fríamente, siguió avanzando hacia adelante haciendo que Taehyung retrocediera hasta que su espalda chocó con los casilleros.

Dado que Tae tenía puestas unas zapatillas deportivas bajas, Jungkook parecía unos centímetros más alto y por la forma en que lo miraba y como se colocó frente a él, Taehyung no pudo evitar tragar saliva por lo intimidante que se veía.

Su mirada era fría y penetrante mientras recorría de arriba a abajo todo el cuerpo de Taehyung, éste podía jurar que era como un lobo observando a una presa que deseaba devorar completamente.

Aquellos ojos dorados brillaban con rabia y lujuria al mismo tiempo, pero ¿Por qué?

Justo antes de preguntar el motivo de esa mirada, Jungkook se inclinó y enterró su rostro en su cuello, haciendo que Taehyung liberará un sonido impresionado.

Jeon olfateó el cuello de su crop top y dejo un beso en el, entonces fue ahí donde la compresión llegó al cerebro de Taehyung.

Ya no tenía dudas de lo que sucedía.

Jungkook estaba celoso .

Taehyung se rió suavemente y colocó ambas manos en el pecho de Jungkook, no pudo evitar darse cuenta de lo firme y duro que se sentía, con los pectorales tan perfectamente marcados, y lo empujó para que se levantara, recorrió sus manos hasta llegar a su cuello y las envolvió para atraerlo hacia él, con un dulce susurro dijo lo que había descubierto, y de lo cual después podría burlarse abiertamente.

—Jungkook ¿Te gusta Yeji?