"I'm much too young to let love break my heart"

Daegu - 13 de septiembre de 2014

Volvió a cambiar de terapeuta, por tercera vez.

Después de haber seguido terapia durante 2 años con Park Bogum, el mencionado se mudó a otra ciudad. En su lugar quedó Kim Namjoon, un hombre alto de piel bronceada y cabello castaño claro que acababa de graduarse de psiquiatra.

Menos mal, así Taehyung ya no tendría que ir a ver a esa señora de probablemente 80 años, quien era la psiquiatra que le prescribía los medicamentos a él y a su hermano. En serio, esa señora necesitaba jubilarse ya.

Por su parte, Namjoon era un profesional muy competente. Se tomaba su trabajo en serio y al mismo tiempo era muy empático con sus pacientes. A Taehyung le cayó bien de inmediato -cosa que no le sucedía casi nunca-.

Quizá fue por la cálida sonrisa que poseía el moreno, enseñando un par de lindos hoyuelos, o quizá fue por todos esa impresionante cantidad de diplomas y certificados que adornaban la pared del consultorio. "Seguramente es de esos cerebritos" pensó Taehyung.

Al principio Taehyung no estaba muy seguro de cómo alguien que parecía tener su misma edad iba a poder ayudarlo.

Sus dudas se disiparon cuando Namjoon le contó que actualmente tenía treinta y dos años, que lo consideraban una especie de superdotado, que había empezado la universidad a los dieciséis y que ahora contaba con títulos en psicología, medicina y la especialización en psiquiatría.

"Vaya" Taehyung frunció el ceño "mientras este tipo empezaba su licenciatura yo estaba en medio de crisis existenciales". Hizo una mueca, avergonzado de sí mismo, y decidió hacer caso omiso a sus pensamientos y concentrarse en lo que decía el terapeuta.

Lo importante -según Namjoon -era que estaba haciendo grandes avances con su tratamiento. Taehyung le contó todo lo que había dicho y hecho con su anterior terapeuta, y Namjoon se había encargado de revisar todo su expediente, así que pudo retomar el tratamiento justo donde lo había dejado Bogum.

El psiquiatra, luego de examinar bien el historial médico de Taehyung y estudiar cuidadosamente su caso, decidió que ya era tiempo de cambiar el tipo de terapia que seguía, definitivamente haría algunas modificaciones en el tratamiento del joven.

En una de las sesiones, Taehyung le contó sobre esa vez que regresó de la escuela; ya habían pasado dos años desde la muerte de su madre, y todos habían seguido adelante a su manera. Para bien como Seungmin, y para mal, como su padre y Jongwoon.

Taehyung sólo estaba ahí, arreglándoselas como podía, buscando alivio distrayéndose con MinKi. Deseando todos los días nunca haberle pedido a su madre que le trajera esa figura de acción edición limitada.

Ese día habían hecho unas lindas pulseritas en la clase, y él decidió hacer una de color rosa y le puso un pequeño cascabel; así MinKi lo usaría como un collar.

Cuando regresó a su casa, la primera en recibirlo fue la gatita, la cual fue a frotarse suavemente contra su pierna mientras levantaba su peluda cola. Taehyung le acarició la cabecita y le colocó la pulsera alrededor del cuello.

Admiró al animal, se veía muy bonito con su nuevo collar. Cada vez que lo veía recordaba a su madre, le hubiera gustado mostrarle cuánto había crecido, pero ya no podía. Ella ya no estaba.

Luego de sobarle la pancita y casi recibir un arañazo en respuesta -porque Taehyung sabía lo mucho que la gatita odiaba que le tocara el abdomen, así que lo hacía a propósito para molestarla-, se fue a su cuarto, a leer algunos cómics hasta que Seungmin sirviera el almuerzo.

Desde la muerte de su madre había comenzado a pasar bastante tiempo solo, le gustaban las actividades tranquilas, como dibujar y leer. Ambas se le daban bastante bien, por eso sus notas no bajaron en ningún momento aún después de su pérdida.

Era un niño sobresaliente, y las maestras estaban muy contentas con su desempeño, pero eso no parecía ser suficiente para ganar la atención de su padre. Apenas lo veía, y apenas intercambiaban palabra.

Tampoco quería molestar a Seungmin, pues éste también estudiaba y además él era quien se encargaba de los quehaceres de la casa ahora que su madre no estaba. Además, tenía una novia, así que no le sobraba tiempo.

Jongwoon ni siquiera era una opción, cuando estaba lúcido no solía hacerle caso a Taehyung, más bien se encerraba a jugar videojuegos todo el día. Y cuando le daban los brotes psicóticos se ponía a gritarles, o a llorar desconsoladamente, o a tratar a su familia y a cualquier ser viviente u objeto como una amenaza.

Ese día estaba haciendo tranquilamente su tarea hasta que escuchó varios ruidos extraños.

Guiado por la curiosidad, salió despacio a mirar. A medida que se acercaba a la sala los ruidos eran más claros, entre ellos unos maullidos y continuos bufidos.

Se asomó por el umbral y vio a Jongwoon persiguiendo y gritando incoherencias a su gatita. Su padre no estaba en casa y su hermano seguramente estaba con los auriculares puestos, así que decidió intentar defender a su mascota él mismo.

-¡Déjala, no te ha hecho nada! -exclamó Taehyung.

Su hermano lo miró con odio y se tapó los oídos -¡Cállate! ¡Cállate! ¡Cállate! -gritó furioso.

El pánico se apoderó de él cuando JongWoon acorraló al animal en una de las esquinas de la casa y comenzó a darle patadas con mucha fuerza.

-¡No! -lloró mientras agarraba del brazo a su hermano, intentando desesperadamente de detenerlo.

Jongwoon le dio a su hermano menor un manotazo en la cara, tan fuerte, que hizo que Taehyung cayera al piso. Todo mientras sujetaba a la gatita con el pie, la cual no dejaba de intentar escaparse y lanzarle bufidos y arañazos en un intento de alejar a su agresor.

Taehyung se quedó paralizado, observando con horror cómo su hermano tomaba el cuerpo de su adorada mascota -mientras ésta le arañaba como podía dejando líneas rojas por la piel que lograba alcanzar- y luego le rompía el cuello haciendo un sonido de crack.

Su hermano tiró al suelo el cuerpo inerte del animal y seguía pisoteándolo, totalmente fuera de sí. Sus brazos tenían arañazos que estaban comenzando a sangrar, y sus ojos parecían a punto de salir de sus cuencas.

Taehyung se levantó y corrió a llamar a Seungmin, quien se asustó al verlo con la mejilla derecha roja, hipando y temblando mientras lloraba y susurraba con la voz entrecortada -W-woon... m-mató ... a M-minki...

Seungmin salió deprisa a ver lo que sucedía y llamó a los vecinos para que lo ayudaran a reducir a Jongwoon. Enseguida lo llevaron al hospital y le aplicaron varios sedantes hasta que se quedó profundamente dormido.

Mientras que Taehyung se quedó en su casa con uno de sus vecinos, llorando desconsoladamente. Sintiéndose completamente inútil y culpable; por su culpa, su madre murió. Y ahora, no pudo salvar a su mascota, que su madre le había encargado cuidar.

"¿Por qué no puedo hacer nada bien?" pensaba, mientras enterraban el cuerpo destrozado de su querida MinKi. "¿Por qué todo lo que quiero, termina muriendo?"

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Seúl - El presente

Taehyung se encontraba comiendo una pizza en casa de su mejor amigo, mientras este comía una ensalada. -Anda Jimin, una rebanada no te hará nada -murmuró mientras masticaba.

-Me gusta estar en forma, además si como eso luego debo matarme haciendo ejercicio. Este cuerpo no se formó a base de comer pizza -dijo alzando una ceja.

-No entiendo como puedes aguantar tener ese estilo de vida tan... saludable. Ew.

El rubio rodó sus ojos -Créeme que si sigues así, esa pancita que tienes crecerá hasta no ser nada adorable en unos años -se burló.

Ayer me acosté con Sungjae-soltó abruptamente el azabache, para mirar de reojo a su amigo. Probablemente le daría uno de sus discursos.

El rubio se quedó quieto -Ya sabes lo que pienso de ustedes, de eso que tienen. No me parece muy saludable que digamos.

-No tenemos nada -se defendió Taehyung.

Jimin bufó -Ya. Sólo se acuestan, se pelean, se alejan y luego se vuelven a acostar. Es un ciclo sin fin. Me parece que él cree que sí tienen algo -replicó .

-Aún si él lo cree, no es así. No le he dado ninguna señal de que pienso casarme con el ni nada parecido -insistió el azabache.

-No lo sé. Tengo un poco de miedo por ti, Tae, me parecen un poco espeluznantes las escenas de celos que te suele armar, no quiero que te haga daño -hizo un puchero.

-No me hará nada, Chim -le dio un suave golpe en el brazo

-No más del que tú le has hecho a él -murmuró el rubio.

-¿Qué?

-Nada. No me hagas caso -suspiró. -Escúchame Tae, lo digo en serio. Debes dejar de verte con ese tipo. Si quieres acostarte con alguien iremos a clubes los fines de semana, o descarga a esas apps de citas. Por favor, sólo piénsalo ¿sí?

Taehyung se quedó callado. Sabía que su amigo tenía razón, debía decirle a ese chico que ya no podían verse. Pero en el fondo, seguía pensando en que quizá sí tenía un poco de miedo a la reacción de Sungjae cuando le contara de su decisión.

El médico a veces era un poco impulsivo. La primera vez que se enteró que Tae tuvo sexo con otra persona, se alteró bastante, tuvieron una fuerte discusión y tuvo que echarlo de su apartamento.

Al día siguiente Sungjae se había disculpado mil veces e incluso se arrodilló para que lo perdonara. Taehyung lo perdonó, por supuesto, y luego tuvieron sexo. Esa era su forma de arreglar las cosas.

Sin dudas eso tenía que parar ya mismo, así que tenía que pensar muy bien en cómo acabar con eso sin que alguno de los dos salga herido.

Pero por ahora sólo se dedicaría a pensar en que vería a Seokjin al día siguiente, y no dejaría que nada ni nadie lo pusiera de mal humor.

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Hi.

Graaaaciaaaaas por leer. 🤧

Besos para vos, que te bancaste leer este cap re largo xd. 😘