-Es que siento que Malfoy está planeando algo- A primera hora de la mañana delante de la mesa comedor de Gryffindor, dijo Harry a Ron y a Hermione. -Desde que Lucius fue enviado a Azkaban, él ha estado furtivo, especialmente anoche le vi en la puerta de la Sala de los Menesteres deambulando por mucho tiempo.-

-No podrá hacer nada, Harry.- Dijo Hermione distraída cortando el filete, siguiendo las miradas de Harry miró hacia la mesa de Slytherin, luego vio la cara pálida y cansada de Draco, de repente no ha seguido de hablar.

La verdad, esta es su primera vez mirando en serio a Malfoy, sin llevar ningunas gafas de color. Antes ella ni siquiera quería tener mucha interacción con él en absoluto, "orgulloso y arrogante" la esta imagen de él había estado tan arraigada en su mente, dejando que ella ni siquiera le miró con buenos ojos a él.

Él al parecer desde antes ya era bastante pálido, pero ahora Hermione hasta puede sentir que él está mucho más pálido que antes, color negro debajo de los ojos eran muy evidentes. Su bien definido mano sujetaba el mentón, los párpados caídos sin saber qué estaba mirando, una apariencia de haber perdido el alma.

Hermione de repente tuvo una sensación extraña en el corazón, ella raras veces había visto un Malfoy así. Mejor dicho, casi nunca le había visto así. En los recuerdos de ella, Malfoy siempre buscaba pelea cuando encontraba con Harry, siempre una apariencia arrogante de autoproclamado noble, alardeando las riquezas y los estatus de la familia Malfoy, además usándolos como capital del líder de Slytherin.

Pero ahora, desamparado, triste, desconcierto......Ella no sabía cuales palabras usar describían mejor el aura que él desprendía en este instante.

Probablemente la despedida de su padre había sido demasiada dolorosa para él, aunque Lucius es mortífero, es su enemigo, pero él también es el padre de Malfoy. Ella acordando las palabras que recién dijo ella a Harry, resulta que empezó a sentir un poco triste en su corazón.

Él no podía hacer nada.

Su padre fue encarcelado, y él no podía hacer nada.

Tal vez por haber sido fijado durante mucho tiempo, Draco percibió esta mirada prevenida de Gryffindor, él silenciosamente siguió esta mirada, vio unos ojos marrones, que después de que él sin previo aviso hizo contacto visual con ella, miraron hacia otro lado con pánico.

¿Granger? ¿Qué era esa expresión en su mirada hace un momento? ¿Compasión? ¿Por qué le mira usando ese tipo de mirada? Él de repente sintió muy enojado, como si hubiera recibido insultos, insultos muy parecidos de no ser tomado en serio por enemigos.

Si no era porque estaban separados por una distancia, separados por unas personas, él realmente quería preguntar a ella, qué estaba haciendo exactamente ella.

Sin embargo como era igual que todos los "sólo podía" que odiaba dolorosamente, él sólo podía tirar los cubiertos que tenía en las manos, luego dejando las llamadas de la gente a su alrededor, saliendo del comedor pareciendo furioso.

Él odia tanto......esta sensación. Sabía que la mayoría de gente había escuchado el asunto sobre su padre, pero él antes preferiría que los demás le llamaran hijo de mortífero, que sentir ese tipo de miradas. El orgullo no le dejaba transmitir a nadie su dolor y debilidad, y también le hacía detestar el compasión de cualquier persona.

Por eso cuando giró y se dio cuenta de que la figura causa principal de todo de esa mirada estaba justo detrás suyo siguiéndole hasta fuera del comedor, e intentó detener llamándole, él ya no pudiendo aguantar más, sacó la varita y apuntó hacia Hermione.

Luego él sintió que el mundo se puso tranquilo de repente, acompañado de las miradas que no esperaban eso por eso parecían pánicos de Hermione, acompañado con un dolor punzante en el sitio de la mano donde tocó la varita, él pudo percibir que el mundo se volvió blanco y tranquilo.

Hermione viendo a Draco que la intentaba atacar, se cayó al suelo sin ninguna predicción.