Era de mañana, y la luz del sol entraba por la ventana principal de la oficina del sheriff, cuando se escuchó un sonido de llaves, era Shelly quien abriendo la puerta ingresaba a paso firme para iniciar un día de labores, aunque lucia algo molesta, quizás por los pensamientos incomodos que tuvo anoche.

-Shelly: Parece que el chico bonito no hizo la guardia que se suponía debía hacer, va a ver lo que le pasara...por hacerme tener estos extraños pensamientos.

Pensó Shelly quien subió las escaleras al segundo piso, para ir directamente al estudio de Colt, cuando de pronto, algo hizo que se detuviera.

-Shelly: Uhhh ¿qué es ese olor? Huele como a pino ¿Qué sucede?

Dijo Shelly al abrir la puerta, cuando una luz casi le cegó la mirada por lo cual tapo sus ojos de inmediato.

-Bueno días.

Una voz conocida la saludo, cuando Shelly quito su mano de sus ojos y vio el origen del brillo.

-Shelly: ¿Que, que le hiciste a este lugar?

Dijo la joven compañera del sheriff a quien se encontraba sentado en su escritorio, de manos cruzadas y con una reluciente sonrisa que acompañaba su fina cabellera rojiza.

-Colt: No te gusta, pensé que debería tener un mejor aspecto al anterior, como digo, un trabajo impecable se logra con un ambiente impecable.

Dijo Colt mientras Shelly seguía admirando lo que había hecho.

El suelo brillaba como un espejo, de echo Shelly lograba reflejarse en este al mirar hacia abajo, el escritorio, los muebles los cuadros, la lampara e incluso la computadora rechinaban de limpio, que lograba verse el brillo que desprendían, incluso la maceta se veía como nueva, todo acompañado claro está con un agradaba aroma a pino, Colt terminaba por decorar el lugar con su alegre presencia esperando una buena reacción de Shelly.

-Colt: No vas a decir algo bueno, me pase mucho tiempo limpiando, al menos un gracias sería bueno ¿no?

-Shelly: No esper...

-Colt: ¡Espera!

Shelly se detuvo justo cuando iba a poner un pie dentro del estudio.

-Colt: Primero lustra tus botas sobre el tapete frente a ti.

Shelly no se dio cuenta del tapete que había, algo nuevo en la oficina, pero que al mismo tiempo servía de lustre para las botas.

Shelly algo confundida, se paró sobre el tapete y empezó a raspar sus botas, tratando de lustrar su superficie y limpiar la tierra que había conseguido en su camino a la oficina, al caminar sobre las polvorientas calles del pueblo.

-Colt: Uhh creo que ya estas lista, ok ya puedes pasar.

-Shelly: ¿Como lograste hacer todo esto?, esto esta tan limpio, tan brillante, te debió llevar tiempo.

-Colt: Dije que tarde mucho en limpiar, aproveche mi guardia mi querida compañera, ahora si me siento como en casa.

-Shelly: Incluso la ventana luce tan limpia y las persianas se ven como nuevas, además ¿ordenaste todo el papeleo?

-Colt: Todo está archivado y guardado en las gavetas, me molestaba ver tantas cosas fuera de lugar y bien ¿te gusta no?

-Shelly: Pues, no diría que no era necesario, pero admito que le has dado un ambiente mejor a este lugar.

-Colt: Me es grato que te haya gustado.

Dijo Colt quien se levantó, se acercó a Shelly y le tomo ambas manos.

-Shelly: Pero ¿qué haces?

-Colt: Todo este arregló, me hace sentir mejor y me asegura que logramos hacer un buen trabajo juntos como equipo, incluso ya no te ves tan amarga como antes, me alegra ver que por fin nos llevamos ver, mi gran compañera en el crimen.

Shelly dejo esbozará cierto sonrojo en sus mejillas frente a la sonrisa del sheriff que la mirada con ojos llenos de alegría e igual de brillantes que el lugar.

-Shelly: Oh...ok, ok, pero ya suéltame, no tienes que hacer estas cosas.

-Colt: Perdona, compañera, es que me siento muy feliz hoy.

-Shelly: Si se nota.

Dijo Shelly haciendo referencia a esa aura brillante que Colt desprendía, aunque tal vez fue la felicidad que tuvo horas atrás, pero dejemos eso a su imaginación.

Mientras en la casa de Bull, Bibi terminaba de salir del baño, llevaba una camiseta alargada, pantuflas negras y al parecer se había bañado pues tenía una toalla en el cuello, la joven caminaba hacia la cocina donde el chico cuervo estaba sentado en la mesa leyendo el periódico del día.

-Bibi: Espero no te hayas comido mi cereal.

-Crow: Aun te gusta ese cereal tan agrio, ni a mí me gusta y eso que como gusanos también.

-Bibi: Es un sabor que una boca de pico no podrá entender, oye ¿y Bull? ¿No que hoy iba a salir?, ¿ya se fue entonces?

-Crow: Esta en su estudio, se escucha un poco molesto.

-Bibi: ¿Así? Me gustaría saber más.

Al parecer a Bibi le gusta ver a su primo molesto, por lo que se acercó silenciosamente a la puerta del estudio del toro, y en verdad se escuchaba la voz de Bull alto alterada, al parecer hablaba por celular.

-Bibi: (Pensando) Uh no oigo bien, pero parece ser que, un momento.

Dentro, Bull caminaba en círculos por su escritorio, el toro llevaba sus pantalones jean, sus botas con espuelas y su camiseta blanca algo ajustada que como siempre detallaba sus increíbles músculos, su chaqueta de cuero sin mangas estaba sobre el sillón, además su cabellera se veía algo descuidada.

-Bull: Como fuiste a hacer tan imbécil, sabes muy bien que necesito que estés aquí puntualmente, no puedes simplemente ausentarte, por algo te pago, y... ¿ahora que hago?, de donde saco otro bartender.

En efecto Bull hablaba con su bartender, por lo visto este tenía algunos problemas.

-Bull: Maldición, y dime, cuantos días vas a estar en el hospital.

Un breve silencio mientras el toro escuchaba la respuesta.

-Bull: Uhh son muchos, demonios, bien, entiendo, no tienes que disculparte, si ya sabes que yo hablo así de fuerte, ya voy a tener que ver como lo soluciono, espero que retornes tan pronto como te recuperes.

Parecía que Bull disminuyo un poco su enojo, por lo visto el bartender logro calmarlo o Bull no considero ser tan escandaloso.

-Bull: Tengo cosas que hacer, muchas cosas que hacer ahora, si, si ya te disculpaste, ahora concéntrate en lo que te dijo el doctor, oye ¿tu familia fue a verte?, me dijiste que les comunicaste.

Otro breve silencio para escuchar la respuesta, Bull lentamente bajo las cejas que tenía en alto en señal de enojo, pareció calmarse más.

-Bull: Entiendo, te llamare luego, para saber tu avance, si, si ya no necesitas más disculpas, no me hagas enojar más, hasta luego.

Bull alejo el celular y lo apretó con algo de fuerza.

-Bull: Lo que me faltaba, quien le manda a hacer estupideces, ahora...

Bull dejo el celular sobre el escritorio y puso su mano en su mentón, estaba pensando algo, y por lo visto no le gustaba.

-Bull: No esperaba hacer esto, pero, no tengo de otra que...

De pronto la puerta se abrió de golpe y entro Bibi quien dijo:

-Bibi: Bull oí bien, el bartender está enfermo.

-Bull: ¡Quien te dijo que entraras entrometida!, maldita sea qué más da, para que quieres respuesta si ya lo sabes.

-Bibi: Wow, que fuerte.

-Bull: Que te interesa, ahora vete, que tengo que pensar...

Bibi en vez de hacer caso se acercó a Bull, vio su expresión e inmediatamente se dio cuenta de lo que pensaba.

-Bibi: Bull no me digas que vas a...

-Bull: Que te calles te dije.

De pronto entro Crow.

-Crow: Que es todo este escándalo, no dejan a uno leer el periódico en paz.

-Bull: Pajarraco, ese periódico es mío.

-Crow: Si no lo usas, pues pierdes.

-Bibi: Te enteraste, nuestro bartender está enfermo, y sabes ¿adivina que?, Bull va a....

Bibi hizo una expresión como una clase de seña a Crow y este soltó el periódico.

-Crow: Oh no, no te atrevas, sabes lo que paso la vez pasada, mis plumas aun tiemblan.

-Bibi: No seas aguafiestas, yo quiero volver a verlo, vamos Bull.

-Bull: Maldita sean ustedes.

Refunfuñaba Bull, frente a una emocionada Bibi y un preocupado Crow.

-Bibi: Y bien, date prisa.

Bull se quedó pensando, luego rodeo su escritorio y se sentó de lleno en su sillón, apoyando ambos brazos sobre la base del escritorio, para unir los puños, el toro estaba que lo meditaba, sea lo que sea que iba a hacer y lo que emocionaba a Bibi que esperaba la respuesta, mientras Crow parecía retroceder para salir de ahí.

En verdad llevo su tiempo, tanto que Bibi dijo.

-Bibi: Y bien, vas a hacerlo o no, no voy a desperdiciar mi juventud aquí parada.

-Crow: Piénsalo bien Bull, no es necesario todavía.

-Bibi: Crow, que aburrido.

-Crow: No le hagas caso Bull, sabes que a veces no está bien de la cabeza.

-Bibi: Hablando de cabezas tengo un bate con tu nombre en él, si sigues fastidiando.

-Crow: Ves, hazme caso.

Empezó a generase una cierta rivalidad entre Bibi y Crow, cuando finalmente Bull se levantó y mirando a ambos dijo.

-Bull: No tengo más opción que...

-Bibi: ¿Siiiiiii?

-Crow: Hay dios...

-Bull: Preparar mi camioneta, tengo muchos asuntos que atender.

Una cara de póker casi se esbozaba en Bibi, quien quedo boquiabierta a la respuesta, mientras Crow dio un gran respiro...

En la oficina del Sheriff, Colt terminaba de dar un discurso motivacional a su equipo, el asistente lo escuchaba con total dedicación, mientras Shelly de brazos cruzados y a su estilo escuchaba, tratando de al mismo tiempo no dejarse llevar por esa sonrisa tan...atractiva que esbozaba su jefe.

-Colt: Bien manos a la obra señores, es fin de semana y eso significa tiempo libre para las fechorías, así que me encargare de la sección norte del pueblo, Shelly de la sección sur.

-Shelly: Como sea.

-Asistente: jefe, disculpe, ¿cuándo poder hacer trabajo de campo?

-Colt: No te preocupes, muy pronto será tu turno, pero necesito de tus grandes habilidades aquí en la oficina, mi gran amigo.

El asistente asintió con firmeza, haría un gran trabajo.

-Colt: Bien, a trabajar que el sol recién ha salido.

Abriéndose la puerta de la cochera, una camioneta algo antigua con tolva, de color azul oscuro y que tenía como adorno de capo unos cuernos de toro, como no podía ser para destacar a su dueño, el mismo que con una mano sobre en timón y otra apoyada sobre la ventana, observaba el espejo retrovisor, mientras salía de esta cochera, seguida de este vehículo dos figuras salían a su encuentro, estos eran Bibi y Crow quienes parecían algo molestos.

-Bibi: Oye bruto, que se supone que vas a hacer con el bar, sin bartender y contigo de paseo.

-Crow: Espero me traigas algún souvenir, digo recién eh llegado y merezco algo de consideración, por hacerte recapacitar de no haber tomado esa decisión....

Crow se detuvo cuando el toro grito.

-Bull: Cállense los dos, son un dolor de cabeza, si desean abren el bar y atienden, como si no fuera la única vez que lo hacen, saben muy bien que tengo muchos asuntos, sino quienes tendrán problemas serán ustedes, par de torpes.

Decía Bull cuando finalmente salió de la cochera, el sol brillaba por el horizonte siendo de mañana y este se reflejaba en el para brizas, a lo que Bull saco unos lentes de sol de su chaqueta y se las puso, se veía muy genial así, más ignorando los reclamos de Bibi.

-Bibi: No es mi culpa si cuando regresas esto está un desastre, te lo advierto.

-Crow: Basta, deja al jefe.

-Bibi: Te lo advertí...

Bull sonrió mientras se alejaba en su camión, pues observaba por el espejo retrovisor a Bibi persiguiendo a Crow con su bate, no representaban dificultades y sabía bien que no harían tonterías, al menos no tan graves, pensando esto Bull emprendió viaje, pasando por una de las calles desoladas del pueblo, al parecer él era casi el único habitante del pueblo que poseía un vehículo, bueno eso parecía, pues consideremos la moto de Bibi, que estaba en mantenimiento, el pequeño automóvil del alcalde, y la pequeña ambulancia del pequeño centro médico.

El polvo que se levantaba mientras la camioneta surcaba la calle era tremendo, tanto para nublar casi por completo la vista de Bull, pero el toro, sabía muy bien donde avanzaba, aunque no tanto para cruzarse con otra persona que le hizo detener la camioneta, justo cuando estaba a solo un metro fuera del pueblo.

-Bull: Acaso vas a seguirme a todas partes, pequeño entrometido.

Dijo Bull hacia la persona que estaba en frente de la camioneta y que avanzo hasta la ventana, la misma que Bull bajo para admirar mejor a este personaje quien limpiando su placa de sheriff con una mano pues esta se cubrió de polvo, y sujetando una bolsa con la otra, sonrió y dijo.

-Colt: Buenos días grandote, así saludas a tu compañero de juegos, me temo que tendré que multarte.

-Bull: Quiero verte haciéndolo, será la última cosa que hagas con vida.

-Colt: Que cruel, oye ¿adónde vas? Veo que te manejas un buen vehículo, aunque está un poco fuera de moda.

-Bull: Eso es parte de la multa, entrometido.

-Colt: Y van dos para la multa Bull, vamos, sé que puedes aumentar, pero dime en serio ¿adónde vas?

Bull sonrió y dijo:

-Bull: Asuntos mi estimado sheriff, muchos asuntos que tengo que atender fuera de aquí.

-Colt: Suena interesante, que lástima que no pueda acompañarte.

Dijo el sheriff quién dio media vuelta y cruzado de brazos hizo un ligero puchero.

-Bull: Por que perdería el tiempo hablando contigo si se bien que lo harás, así que ahórrate el tiempo y sube desagraciado.

-Colt: No tenías que ser tan rudo, bueno, tengo mucho que hacer aquí, pero si insistes.

Dijo Colt quien no perdió tiempo para avanzar hacia la otra puerta de la camioneta y entrar, Bull no le puso seguro o simplemente dejo que el sheriff hiciera esto.

-Colt: Vaya hay un ligero aroma...

-Bull: Puede mejorarse con tu sangre si quieres.

-Colt: No me dejas terminar... un ligero aroma a fragancia de pino.

-Bull: Que voy a hacer contigo pequeño bribón.

-Colt: Puedo darte varias opciones.

Bull sonrió y encendió la camioneta, ahora tenía un compañero de viaje por lo visto.

-Bull: Sabes que esto no será un paseo cualquiera ¿no? si sabes a lo que te enfrentas y...uhh me sorprendes.

Dijo el toro al ver como Colt se cambiaba de ropa, la bolsa que llevaba contenía una camiseta blanca con unos diseños de negro, una chaqueta jean y una gorra de beisbol color negro, Colt se coloca estas prendas y al mismo tiempo guardo su camisa celeste su chaleco purpura, así como su porta armas en la bolsa, su placa la guardo en su bolsillo, finalmente se colocó la gorra y dejando a un lado la bolsa con su ropa de sheriff, dijo.

-Colt: Y bien como me veo.

-Bull: Si empiezo a reírme temo que chocare la camioneta y eso que estamos en una carretera sin obstáculos en pleno desierto.

Colt: En verdad eres muy cruel, soy un joven con estilo, y bueno no son lo que yo hubiera escogido, pero fueron regalos de uno de los habitantes del pueblo, que casualidad ¿no?

-Bull: Oh claro.

-Colt: Al menos me veo mejor que alguien que conozco que usa la misma ropa, digo, esa chaqueta con las mangas arrancadas y esa hebilla de toro, enserio.

-Bull: Sabes estamos ya bastante lejos del pueblo, si te arrojo de aquí morirías antes de retornar.

-Colt: Solo era una sugerencia, te quedan bien, destacan tu gran cuerpo.

-Bull: Me siento halago, en serio, ahora has silencio, es un largo viaje.

-Colt: ¿A dónde vamos?

-Bull: ¿A la ciudad adonde más?

-Colt: Genial, oh lo olvidaba, déjame hacer una llamada.

En la oficina del sheriff el asistente terminaba de acomodar unos archivos, cuando de pronto la puerta principal se abrió de golpe y una molesta Shelly entro.

-Asistente: ¿Que paso?

-Shelly: No sé por qué me molesto, esto no debería sorprenderme.

-Asistente: Es el jefe supongo.

-Shelly: El muy idiota me llamo dijo que estaba en una misión especial.

-Asistente: Misión, ¿especial?

-Shelly: Diría más bien misión suicida, el muy idiota, está siguiendo a Bull, al parecer ese delincuente salió del pueblo con destino a la ciudad y no se le ocurrió mejor idea al tarado seguirlo.

-Asistente: Cielo santo, entonces.

-Shelly. Dijo que estuviera tranquila, que él se encargaría, y que retornaría en cuanto pueda, pero sabes no voy a malgastar mi día, enojándome, ya no, como Bull se fue, eso significa que el pueblo estará tranquilo, pero no voy a descansar, tengo aun trabajo que hacer, tú por otro lado, encárgate de vigilar a ese tarado, tienes su número, llámalo en unas horas, y fíjate como esta, entendiste.

-Asistente: Entendido Shelly, pero si es una misión especial será correcto molestarlo.

-Shelly: No dije que pusiera peros, el tarado es el jefe, pero en su ausencia yo sigo siendo tu superior, así que acata la orden.

-Asistente: Entendido Shelly.

-Shelly: Bien, retornare a mi trabajo.

Shelly salió de la oficina y el asistente se sentó en su silla, algo resignado, no quería molestar a su jefe, pero al mismo tiempo está preocupado, por él, quien sabe en qué clase de peligro se está metiendo, al seguir a ese criminal.

Pues ese peligro iniciaba ni Bien Bull y Colt llegaron a la ciudad, esta era la más cercana al pueblo y por lo visto Bull tenía mucho que hacer aquí, Colt parecía también conocer este lugar.

Colt: Que recuerdos, aquí solía ser unos de los lugares donde trabaje, tengo varios amigos en la estación de policía de aquí, me gustaría visitarlos.

-Bull: No me importa lo que hagas, después de todo estas en tu misión especial, como le dijiste a tu empleada.

-Colt: Primero, como crees que voy a dejarte solo, puedo ser una muy buena compañía y segundo Shelly no es mi empleada es mi compañera.

-Bull: Como sea, le mentiste a tu disque compañera.

-Colt: No es mentir es simplemente obviar algunos datos, no voy a meterla en mis asuntos.

-Bull: Pues te sugiero alejarte de los míos.

Dijo el toro quien estaciono y Colt vio que habían llegado a nada y nada menos que un hospital.

-Colt: Oh vaya ¿te sientes mal?

-Bull: Eso no es de tu incumbencia, ahora bájate.

Colt algo en duda, bajo del auto, así como Bull, y el sheriff siguió a este toro hasta la recepción del hospital, ahí Colt escucho a Bull pedir información sobre una persona, la cual el no conocía, luego el toro avanzo hasta el ascensor seguido de Colt, ambos dentro empezaron a subir.

-Colt: Entonces este es tu primo.

-Bull: Eso no te incumbe, tú te quedas afuera mientras yo entro, me oíste.

-Colt: Bien, yo no me meto en asuntos ajenos descuida.

Saliendo del ascensor y cruzando un pasillo el toro se detuvo frente a una habitación y entro, Colt se quedó afuera y se alejó un poco hacia una máquina dispensadora que estaba cerca de ahí, el sheriff con la ropa tan juvenil que llevaba, saco una botella de agua mineral, y mientras la tomaba se preguntaba.

-Colt: ¿Bull acaso tiene asuntos pendientes con esta persona?, o tal vez no, digo no dijo nada por acompañarlo, pudo haberme dicho que me vaya, pero me pidió que lo acompañara.

Pasaron varios minutos y la demora hizo sentir un poco incomodo a Colt, quien en si era un completo desconocido que solo acompañaba a Bull, finalmente Colt miro hacia la puerta y vio que estaba entreabierta, Bull no la cerro, así que Colt se dispuso a cerrarla sin embargo escucho un ligero sonido, parecía que alguien lloraba, y aunque esto no era propio de Colt, los lamentos son algo a lo que un policía no puede negarse, así que disculpándose en su mente abrió ligeramente la puerta para dar un ligero vistazo, tras la puerta había un pequeño pasillo pero se lograba ver la cama donde estaba el paciente, a su lado estaba Bull quien tenía un brazo apoyando en el hombro de este sujeto, el sujeto que Colt reconoció.

-Colt: (Pensando) ese, ese no es el bartender del bar de Bull, ¿qué le paso?

Colt se peguntaba mientras seguía observando, el bartender estaba sentado en la cama, sus piernas estaban vendadas, así como uno de sus brazos, como escucho Colt era el llanto de este sujeto el que había oído, el bartender sollozaba mientras Bull lo calmaba, Colt estaba asombrado, no por el estado del bartender sino por la actitud de Bull, no esperaba que un tipo como el fuera así, sin querer Colt termino por escuchar parte de la conversación.

-Colt: Ya veo...

Pensaba Colt quien finalmente cerró la puerta con cuidado para volver afuera, sin que nadie se diera cuenta.

-Colt: Es penoso que tu familia no te visite en tu estado, pero al menos tu jefe se preocupó por ti, yo también me sentiría así, Bull... yo no....

Que estas balbuceando...

Colt se asustó cuando Bull apareció de pronto, parecía llevar un papel en su mano.

-Colt: Yo nada y ¿tu?

-Bull: Ya cállate y vámonos.

-Colt: Que, no vas a atender a tu primo.

-Bull: Ya terminé por ahora, te dije que nos vamos.

-Colt: Ok.

En el camino Bull saco su celular tomo una foto al contenido del papel e hizo una llamada.

-Bull: Hey, si soy yo, escucha, quiero que mandes las cosas de la lista que te acabo de enviar, a la habitación N...del Hospital de la calle... a nombre de ...... y quiero que sea rápido, me oíste, y habla con el doctor...dile que espero la mejor atención para ...... me oíste, ahora hazlo.

Colt observaba de reojo y sonrió, una leve sonrisa de ternura.

-Bull: ¿Que miras?

-Colt: Yo nada.

Finalmente, ambos salieron del hospital, en si tardaron casi más de dos horas en dicho lugar, pero Colt no pareció molestarse, no cuando se trata de buenas acciones.

-Colt: ¿Y bien?

Dijo el sheriff ya muy bien sentado mientras cerraba la puerta de la camioneta, a el toro quien guardaba su celular en su bolsillo y acomodaba el espejo retrovisor.

-Bull: Y tu aun sigues aquí.

-Colt: Eso fue muy lindo de tu parte.

-Bull: Dices eso a alguien más y yo mismo cavare tu tumba, me oíste.

-Colt: Y...ahora ya no es lindo (pensando) no sé por qué, pero me gusta que sea así de rudo.

Pensaba el sheriff mientras sonrisa de manera picara a un Bull algo molesto, pero que no gastaba su tiempo en sacar a este polizonte de su auto, más bien encendió su auto y continuo su viaje, mejor dicho, continuaron su viaje.

Pasando entre altos edificios, y calles con gran tránsito de personas, nuestros protagonistas avanzaban, Bull se veía pensativo y Colt esta vez permaneció en silencio, pues estaba entretenido con la vista, si bien no había pasado mucho tiempo en el pueblo, en verdad se sintió nostálgico volver a la ciudad, de pronto el sheriff se movió abruptamente, pues la camioneta hizo un giro inesperado.

-Colt: Oye, ¿quién te dio tu licencia de conducir?

-Bull: Haz silencio.

-Colt: Que agresivo, uhh, esto

De pronto Colt se volvió a fijar en la vista

-Colt: Fabricas, estamos en la zona industrial, ¿tan rápido?, ¿vas a visitar alguna de estas fábricas?

-Bull: No te dije que te callaras.

Ante la negativa del toro Colt sin molestias solo siguió mirando el lugar, sin embargo, conforme pasaban las fábricas, no había indicio de que Bull se detuviera, por lo que Colt pensó que su destino era otro y la zona industrial era solo un atajo, además que se empezaban a ver algunas colinas, pues la zona industrial estaba en los límites de la ciudad.

-Colt: Olor a mar, estamos cerca a los muelles, Bu...ok mejor me callo.

Bull no pareció incomodarse con el sheriff y continuo, y como dijo Colt al pasar dos grandes edificios, llegaron al muelle, lugar donde Bull siguió su camino, es que acaso este tampoco era su destino pensó Colt quien solo observaba, y es que conforme la camioneta avanzaba se dejaban de ver las fábricas y se veían más colinas que estaba frente al mar, mejor dicho las colinas a la izquierda, la carretera en medio y el muelle a la derecha, este muelle se extendía mucho, pues había una gran cantidad de puertos, pequeños pero varios, así como los puestos de pesca, restaurantes de comida marina, y claro cientos de botes, barcos y yates.

-Pasaron más minutos y Colt se estaba entreteniendo, viendo su celular, tenía algunos mensajes del asistente de la oficina, pero cuando estaba a punto de escribirlo, el auto se detuvo.

-Colt: Me supongo que tampoco te enseñaron a detenerte con propiedad y...este lugar, uhh no lo conozco.

Aún estaban cerca a el muelle, pero la camioneta se había estacionado en lo alto de una colina que daba frente a una gran fabrica que se adentraba en el mar, la cual estaba rodeada de una pared de alambres, parecía ser una fábrica de pescado por el aroma, o solo era el aroma del mar. En si la carretera se dividía en dos, una que continuaba el trayecto por el inmenso muelle y otra que subía por la colina y retornaba a la ciudad, en esta se había estacionado la camioneta.

Colt: Uhh debe ser...hey espérame...

Colt se dispuso a abrir la puerta, pero esta no abría y no porque Bull le haya puesto seguro, sino que el mismo toro se puso en medio de la puerta bloqueando la salida de Colt.

-Colt: Que sucede, sabes que puedo salir por la otra puerta.

-Bull: Te advertí que no vinieras, pero ahora no tengo ganas de estorbos, te quedaras aquí y me esperaras, haz algo de provecho y cuida a mi chico.

-Colt. Tu chico, oh tu camioneta claro.

-Bull: Al menos eso si lo entendiste, si te veo fuera del auto, te tirare al mar, me oíste.

Dijo un toro con los ojos muy centrados en Colt, pero no de buena manera, Colt dijo:

-Colt: No me veas con esos ojos, está bien me quedare aquí, y cuidare a tu chico, siempre y cuando no tardes mucho.

Bull hizo un gesto de molestia, algo parecido a un rugido de un animal y pues Colt.

-Colt. Ok, ok, lo cuidare el tiempo que tardes, cielos, no tienes que ser tan rudo.

A la manera tan típica de Colt, se acomoda en el asiento para esperar, y Bull aun con una cara de pocos amigos se alejó lentamente, bajando por la carretera por donde su auto subió, luego cruzando la carretera principal y llegando a la entrada de la fábrica, Colt tenía una vista clara y podía ver al toro, considero que fue mejor quedarse, así tendría una buena vista del paisaje, aunque esa fábrica no parecía darle buen aspecto.

-Colt: Me pregunto qué ira a hacer ese tipo, se detuvo en la entrada, pero no hay ningún puesto de vigilancia ni nada, espera...alguien parece acercarse.

Como decía Colt, una persona desconocida salió de uno de los edificios de la fábrica y se acercó a la entrada, abrió las rejas e hizo pasar a Bull, a quien saludo con un apretón de manos, por lo visto Bull era conocido en este lugar.

Luego ambos avanzaron y entraron, Colt ahora solo podía esperar.

-Colt: Bueno tengo que responder los mensajes y...uhhh ese aroma, aun lo huelo, tan fuerte que sigue aquí, el aroma de ese toro usa un perfume muy fuerte, muy varonil.

Pensó Colt quien paso su mano por el asiento del piloto, y en efecto al oler su mano se sentía el aroma de Bull, un aroma que agradaba mucho al sheriff.

-Colt: Esto me da más comodidad.

Pensando el sheriff quien se dio un tiempo para admirar el interior de la camioneta, antes de seguir con lo suyo.

Un interior muy bien conservado para ser una camioneta algo antigua, como no podía faltar un adorno de astas de toro colgando del espejo retrovisor, y un curioso adorno de una chica semidesnuda sobre el panel cerca a la guantera, de por si todo el lugar se veía limpio e incluso los asiento se veían revestidos hace poco, como dijo Bull , cuida a su chico, su auto que ha mantenido muy bien, así que Colt como hombre de ley aprecio muy bien este trabajo, aunque la curiosidad puede un poco y los ojos del sheriff quedaron frente a la guantera, la cual parecía no estar bien cerrada pues un ligero pedazo de papel salía, así que Colt como buen hombre hizo lo que tenía que hacer.

-Colt: Cielos, ese papelito está mal puesto, solo abriré un poco y lo pondré dentro nada más, ups se abrió todo, que descuidado.

Colt termino por abrir la guantera, cosas privadas que no tenía por qué ver, se dejaron ver, el papel que sobresalía, parecía ser un panfleto, además había otras cosas, como un frasco de perfume, una revista de autopartes de autos, y como no, varios peines, y algunas municiones de escopeta, así como un frasco de gel para el cabello de la misma marca que tenía Bull en su habitación, además había varios papeles, así que Colt de buena manera dijo.

-Colt: Esto esta desordenado, podría acomodarlo ¿no? digo Bull confía en mí, después de todo ha dejado a un extraño al cuidado de su chico, supongo que confía en mi deber de sheriff y eso hare...pero eso esta tan desordenado, ok Colt ordena, pero no veas.

Colt tomo las cosas y las coloco sobre el asiento vacío, tomo los papeles y empezó a acomodarlos, o mejor dicho darles ligeros vistazos.

-Colt: Facturas, facturas...factu...ras más fotos de chicas desnudas, oh aquí esta su licencia, ohh así te llamas, ok, deja de observar, pero tengo que comprobar que este actualizada ¿no? no soy policía de tránsito, pero da igual.

Colt siguió observando la licencia, se veía bastante nueva, como si no la hubieran usado, a pesar que tenía cierto tiempo, Colt finalmente decidió no fisgonear más, sin embargo continuo acomodando las cosas de la guantera, había también algo de basura, papeles rotos, tapas de cervezas y cerillos usados, Colt tomo estos y los metió en una bolsa, para luego tirarlos, pues su personalidad le decía que no podía botarlos en plena pista, así que luego de acomodar todo sin dar más vistazo cerro la guantera y puso la bolsa de basura dentro de su bolsa donde estaba su ropa de sheriff, para tirarla luego.

-Colt: Listo espero un agradecimiento al menos, veamos cuanto tiempo paso, uhh casi una hora, que tanto hace, uh no veo a nadie aun salir de ese lugar, oh lo olvide, no le eh respondido a mi compañero de equipo.

Colt se disponía a escribir, una respuesta breve, sería suficiente, y unos emoticones servirían de buen adorno.

-Colt: ... Así que no te preocupes, yo te avisare...carita con gafas, y pulgar arriba, listo. Ohhhhh

Bostezaba Colt, al mismo tiempo que estiro un poco sus brazos debido al reducido espacio del vehículo.

-Colt: Al menos la dirección del sol es contraria, así no me molesta, tal vez, pueda tomar una siesta, seria perfecto, el ambiente es agradable y el aroma de ese tipo me hace sentir tan bien, si solo un rato.

Colt empezó a cerrar los ojos.

-Colt: Uhhh que rico en verdad huele, Bull...Oye...

Dijo algo exaltado Colt cuando el vehículo se movió, por acción de la puerta del piloto que se abría, dejando ver al gran tipo que dijo...

-Bull: Que balbuceas niño, te dije que cuidaras a mi chico, y no que te pusieras a soñar.

-Colt: Fue un pequeño desliz.

-Bull: Si quieres soñar, bien te puedo dar un buen golpe, ahí si vas a soñar.

-Colt: Podría considerarlo, y bien que tal te fue, uhh que es eso.

-Bull: Nada que te importe.

Dijo el toro, pues llevaba un pequeño sobre, el mismo que guardo en la guantera, por lo visto no se dio cuenta que Colt lo había acomodado, cosa que Colt en su mente pensaba algo disgustado.

-Colt: (Pensando) ni siquiera me agradeció.

Bull ni se fijó en la guantera ni en él, y ni bien se puso su cinturón de seguridad, encendió el auto, para retomar a la ciudad.

-Colt: Veamos (mirando su celular), mira es casi medio día, ahora ¿a dónde vamos?

-Bull: (Suspiros) alguna vez te callaras?

-Colt: Lo siento, me callo, ahora sí, me callo, de veras

-Bull: Uhhh...

Nuestros chicos siguieron su camino y de nuevo en la ciudad, Colt solo observaba el camino, ahora pasaban por la zona comercial, diversas tiendas, restaurantes y demás negocios se podían ver en ambos lados de la calle, así como mucha gente.

-Colt: (Pensando) ¿acaso ira a comprar algo? Quizá...oye en verdad debes aprender a detenerte.

Dijo el sheriff, de nuevo pues Bull volvió a detenerse con fuerza, el toro no le hizo caso, más bien agarro su espejo retrovisor y lo volteo hacia él, viéndose en el Bull agarro su barbilla y dijo.

-Bull: Uhh ya empieza a crecer.

-Colt: Ya veo, si tienes algo de barba, casi ni se nota.

-Bull: Ni modo.

Dijo Bull quien bajo de su vehículo y le dijo a Colt.

-Bull: Hey niño, me esperas aquí, tengo que ir al barbero.

-Colt. Oye es más de medio día, y empieza a hacer hambre, no vas a comer algo.

-Bull: Casualmente luego de eso iré a almorzar.

-Colt: Genial, yo...

-Bull: Tu no estas invitado.

-Colt. ¿Qué?, Por qué?

-Bull: este barbero es un viejo amigo, así que probablemente vaya a comer con él, si tu quieres te puedes ir, no me interesa lo que hagas, te lo advertí, así que salte de mí chico.

-Colt: Entiendo, si yo fui quien me metí, bien.

Dijo Colt quien salió del vehículo, cuando Bull ponía el seguro.

-Bull: ¿Que esperas?

-Colt: Lo sé, lo sé, si nos vemos.

Colt avanzo, mientras Bull lo observaba como asegurándose que se fuera, luego dio media vuelta cuando Colt volteo en la esquina, y se metió a una bobería que estaba a unos metros de donde estaciono su camioneta.

Colt camino un poco y luego se detuvo para decir.

-Colt: Cielo, pero que idiota es ese tipo, en verdad esperaba que al menos me acompa...ok, ok no tenía por qué esperar eso, ya lo conozco, no es el tipo de persona, ahhh, en verdad me engaño, ahora...ohhh

Dijo Colt cuando le zona ligeramente el estómago.

-Colt. Primero algo de comer antes de seguir criticándolo.

Pasaba el tiempo, era la una de la tarde y en una cafetería, Colt almorzaba una hamburguesa con papa fritas y una gaseosa, no era un buen alimento, pero parece que Colt extrañaba ese alimento o estaba algo fastidiado para no comer otra cosa, o esos eran sus pensamientos, mientras masticaba su alimento.

-Colt: Creo que luego de esto me iré, puedo visitar a mis amigos en la estación, alguno de ellos quizás me pueda llevar de regreso al pueblo, pensó Colt cuando su bolsa de ropa se cayó al suelo, sin querer la empujo del asiento.

-Colt: Cielos, que más puede... ¿uhhh?

Colt vio, uno d ellos papeles rotos que había metido en la bolsa, que iba a tirar luego como basura, levanto la bolsa y saco dicho papel de la bolsa, era un papel roto, pero algo escrito ahí le llamo la atención.

-Colt: Uhh...parece un pedazo de alguna clase de carta, dice...gracias por la ayuda Sr...Oh vaya...

Colt se quedó admirando dicho papel, más bien tomo varios papeles rotos y empezó a unirlos, todos parecían ser de la misma carta.

Paso el tiempo de nuevo, eran casi las 3 de la tarde, y un Bull muy animado se despedía del amigo de la barbería, el mismo que le entregaba otro sobre.

-Bull: Bien estaré a la espera, nos vemos...Espera otra vez.

El toro cambio su expresión de ánimo, cuando al retornar a su vehículo, vio de nuevo al sheriff., el mismo que apoyado en la camioneta, parecía estar esperándolo.

-Bull: ¿Tu no aprendes verdad?, no te dije que... ¿ah?

El toro se detuvo cuando Colt le mostro la carta, la cual estaba completa, más bien unida con pegamento.

-Colt: No podría irme, sabiendo que necesitas de mi ayuda.

-Bull: Eso es, estuviste fisgoneando mis cosas, tu pequeño rufián.

-Colt: No estamos para eso, no cumpliste tu promesa con ellos, y casualmente hoy es el día, podría ayudarte, así no tendrás que volver a desechar esto.

Bull refunfuño un poco pero increíblemente subió a su camioneta y dijo.

-Bull: Que esperas metiche, sube de una vez, tenemos poco tiempo.

-Colt: Gracias, sabía que comprenderías.

Con ambos tipos de nuevo en la camioneta, esta retomo viaje y fue directo a la estación de correos, ahí Bull pidió cierta documentación, la cual Colt conocía y lleno rápidamente guiándose además de la carta, para que solo Bull firmara, luego Bull devolvió los documentos para que finalmente el encargado le dijera.

-Encargado de correos: Todo listo Sr, en breve el mensaje será enviado, muchas gracias por su apoyo.

-Bull: Si...gracias.

Dijo Bull un tanto desanimado, mientras que Colt a su lado se veía entusiasmado.

-Colt: No te desanimes, sé que les llegara a tiempo.

-Bull: Uhh.

-Bull no dijo más y dio media vuelta el trabajo que no esperaba hacer, había terminado ahora retornaba su trayecto.

-Colt: Perdona que te haya molestado, yo me ire por otro lado, porque...

-Bull: Deja de hablar y entra de una buena vez, antes que me arrepienta.

-Colt. Bull, muchas gracias.

Colt esbozo una sonrisa y entro de nuevo a la camioneta, eran poco más de las 6 de la noche.

-Bull: Aun tengo dos lugares que visitar, pero te advierto, vienes bajo tu propia voluntad, así que te portas bien.

-Colt: Entendido.

Nuevamente en el camino, la camioneta se detuvo en una clase de estacionamiento, uno que a Colt no le pareció de buena vibra si se pudiera decir, así que dijo.

-Colt: Este lu...

-Bull: Shhh, cállate, uhh no esperaba que llegaran tan temprano, hagas lo que hagas no salgas de la camioneta, se supone debía venir solo.

Bull hablo en voz baja y se vio algo nervioso, y cautelosamente bajo de la camioneta, para decirle finalmente a Colt:

-Bull: Te recomiendo que te agaches, y no hagas ruido, si valoras tu vida, hazlo.

Colt acato la orden y se agacho, como si no hubiera nadie en el lugar.

Bull avanzo varios metros, lejos de su camioneta, había varios vehículos así que por el momento nadie se daría cuenta de Colt, así Bull avanzo hasta llegar al medio del estacionamiento, lugar donde un grupo de tipos encapuchados lo esperaban, Colt levanto un poco la miraba y observo por el espejo retrovisor, pero no veía nada, por la lejanía, solo pensó.

-Colt: Que rápido cambio el ambiente, Bull...

No se escuchaba lo que estos tipos hablaban con Bull, pero parecían estimarlo mucho pues hablaban con total libertad, igualmente Bull que al principio estaba nervioso se mostraba muy abierto, incluso reían, luego uno de los tipos le entrego una maleta a Bull y el que parecía ser el líder estrecho su mano, como agradeciéndole un favor o algo, no paso mucho tiempo para que Bull se despidiera y se fuera llevándose la maleta, al llegar al vehículo, dijo a Colt que se mantuviera agachado. Colt acato y no dijo nada, hasta que Bull saco la camioneta fuera del estacionamiento, solo ahí Colt pudo levantarse.

-Colt: Uff, eso fue... intenso, uhhh... ¿puedo preguntar?

-Bull: Ya lo hiciste.

Dijo el toro quien llevaba en sus piernas la maleta.

-Colt: Eso...

-Bull: Si vas a empezar a hacer tu rol de sheriff, puedo tirarte por la ventana.

-Colt: No te preocupes, no me meteré en tus asuntos. (Pensando) no importa cuantas veces vea esa maleta, el símbolo en ella, es de una mafia del sur, pensé que se había disuelto, ¿acaso Bull es parte de ellos?

Colt siguió pensando, tanto que ni se dio cuenta cuando Bull se detuvo en supuestamente su última parada.

-Colt: Eso fue rápido, digo, no tanto, casi las 7 de la noche, al anterior lugar fue muy largo y, un momento este lugar, que es enserio.

Dijo un Colt algo sorprendido pues este lugar era una calle llena de burdeles.

El lugar estaba lleno de luces psicodélicas, por todos lados, varias lindas chicas adornaban las entradas de los locales y un sinfín de clientes paseaban escogiendo el mejor de su preferencia.

Colt estaba algo sorprendido, conocía el lugar, pero a decir verdad no había venido a este, al menos no solo, pues ni se dio cuenta que Bull se bajaba del vehículo.

-Colt: Oye, oye, enserio en este momento vas a ir a...

-Bull: Que pasa chico bonito, ah claro, olvidaba que a ti no te gustan estas cosas.

-Colt: No me bromees.

-Bull: Puedes esperar ahí, no te obligo, o puedes salir y divertirte un rato, lo siento volví a olvidar tus gustos.

Bull simplemente avanzo y entro en uno de los burdeles llamado "El acuario del placer", Colt se quedó en el vehículo, se veía algo sorprendido, pero también algo...molesto.

Bull por otro lado caminaba entre un gran espacio lleno de luces y una gran decoración de elementos marinos y acuarios de gran tamaño que actuaban como paredes del salón principal, uno en el cual había varios tipos observando la actuación principal, las bailarinas semidesnudas y disfrazadas de sexys sirenas, que en lo alto del escenario hacían sus exóticos bailes. Bull se detuvo admirando el escenario, cuando una voz le llamo la atención.

-Bull! Viejo amigo, que bueno verte.

Un tipo vestido de traje y usando una gran cantidad de joyas y anillos, lo saludaba, este era el dueño del lugar, a su lado dos señoritas muy hermosas no perdieron tiempo en acercarse al toro, en poco tiempo Bull estaba sentado en uno de los asientos vip con ambas chicas a su lado, mientras el dueño estaba sentado frente a él, la música y la algarabía de los clientes adornaba el ambiente, así como los acuarios que con luces fosforescentes adornaban ambos lados de las zonas vip donde estaba sentado Bull.

-Dueño del bar: Que rápido paso el tiempo, dime como va todo.

-Bull: LO normal, más bien muy aburrido.

-Duelo del burdel: Ah no tu aburrido, bueno para eso están mis chicas, dicho esto ambas chicas al lado de Bull se apoyaban en sus hombros, se las veía muy animadas y excitadas, parecían conocer muy bien a Bull.

-Dueño del burdel: Mis mejores chicas te extrañaban.

-Bull: No me sorprende, pero primero mi encargo, ¿dónde está?

-Dueño del burdel: Oye, oye, no quieres primero divertirse, no hagas esperar a mis chicas, te tengo la mejor de mis habitaciones.

-Bull: Eso me gusta, pero primero mi encargo.

-Dueño del burdel: No has cambiado.

Dijo el dueño quien saco del bolsillo de su saco otro sobre, pero este se veía algo grueso, para dárselo a Bull.

-Bull: Espero este completo.

Dijo Bull mientras recibía el sobre.

-Dueño del burdel: Cuando yo te eh fallado, pero si quieres ábrelo y verifica, hey mi amigo tiene sed, donde están las bebidas.

Dijo de manera prepotente a una de las camareras.

-Camarera: Lo siento señor, aquí tienen.

Dijo la camarera quien sirvió algunas botellas de ron, vasos y demás bebidas.

-Dueño del burdel: Vamos Bull yo invito, es mi mejor bebida, así tendrás muchas energías para divertir a mis chicas, incluso necesitaras a más de mis hermosas chicas, te puedo enviar tantas como quieras.

-Bull: Muy agradecido de tu parte.

Dijo Bull quien de brazos cruzados era admirado por ambas chicas que no podían esperar por él.

-Bull: Oye...que hay de ese asunto.

-Dueño del burdel: Oh el asunto, no te preocupes, todo está arreglado.

-Bull: Eso no parece ser lo que me dijeron.

-Dueño del burdel: No creas todo lo que escuches, por favor, Bull tu un gran tipo como tu vas a caer en mentiras, yo soy uno de tus mejores amigos, me conoces, oyes vas a beber algo, o ya quieres irte con mis chicas, míralas están tan deseosas por recordar viejos tiempos.

En verdad que las chicas se volvían locas porque Bull se las lleve a la habitación, Bull por otro lado miro hacia uno de los acuarios, los peces ahí eran exóticos, incluso uno en el suelo, en la esquina del acuario, uno que parecía un pedazo de cabello de color rojizo que no se movía por acción del agua, un raro pez.

Bull cerro los ojos y volviendo la mirada al dueño del burdel quien le sonreía dijo.

-Bull: Todo está reglado entonces, tengo asuntos que atender, será en otra ocasión.

-Dueño del burdel: ¡Queee!

Dijo un sorprendido dueño de burdel, mientras Bull se levantaba quitando de sus hombros las manos de las chicas, quienes también sorprendidas no entendían que pasaba.

-Dueño del burdel: Espera Bull, estas enojado o algo, vamos estas tenso, mis chicas...

Decía desesperado el dueño del burdel quien se acercó a Bull y apoyo su mano en el hombro del toro, Bull se detuvo y dijo.

-Bull: Saca tu asquerosa mano o tendré que ensuciar el suelo con tu sangre.

Dijo un enojado Bull, un aura de miedo se desprendía de él, tanto para alejar al dueño del burdel quien termino temblando, las chicas se asustaron, así Bull se retiró a la salida, no sin antes el dueño del burdel dijera algo.

-Dueño del burdel: Maldito seas Bull, creo que se dio cuenta ese hijo de perra.

Bull termino por salir del burdel y avanzar a su camioneta donde un Colt todo tranquilo, le dijo ni bien el toro entro a la camioneta.

-Colt: Eso fue rápido.

-Bull: No cumplió mis expectativas.

-Colt: Cielos, lastima.

Dijo Colt con una leve sonrisa en el rostro.

-Colt: Bueno ahora creo, es hora de regresar al pueblo ¿no?, mira son más de las 8 de la noche.

-Bull: Aun falta un lugar.

-Colt: Genial, digo, no hay problema (en voz baja) con tal, de salir de este lugar.

A paso rápido volvió a iniciar su ruta la camioneta, de nuevo por más calles de la ciudad, Colt se sentía algo cansado, mientras Bull quien lo miro de reojo, giro en una calle intempestivamente.

-Colt. Oye, otra vez, quieres una multa ¿no?, oye me oyes.

Bull estaciono su camioneta y bajo para decirle.

-Bull: Calla de una vez y baja, antes que me arrepienta.

-Colt. Ok, ok, que pesado, oye este lugar, es una de las calles más exclusivas de la ciudad.

-Bull: Ya cállate, vamos.

Bull avanzo y Colt a su lado decía.

-Colt: Tienes otros negocios por aquí, esto.

Decía Colt admirando el lugar lleno de locales muy lujosos cuando casi se tropieza pues Bull se detuvo.

-Colt. Oye, a donde vas.

-Bull: Deja de hacer preguntas, sígueme.

-Colt: Tu, oye...wow este lugar, solo lo vi en la televisión.

El lugar a donde entraba Bull era un lujosísimo restaurante, cuya entrada lucia tan reluciente, tanto como lo costoso que era, aquí Bull entraba y Colt lo siguió, algo preocupado.

-Colt: Bull, vamos a cenar aquí, eso es, me emociona que te ofrecieras, pero este lugar es costoso, yo no tengo dinero y además nuestros atuendos, no son los ...

Bull no hizo caso hasta que llego a la recepción donde el mozo les dijo.

-Mozo: Sr. Mil disculpas, pero este es un lugar recatado, me temo que su atuendo y ...ohh

Colt se sorprendió, pues el mozo se detuvo cuando Bull le enseño una tarjeta.

-Colt. Esa tarjeta, me parece conocida.

Una tarjeta de color negro con bordes plateados, no se sabía de qué era, solo que al verla el mozo dijo.

-Mozo: Oh cuanto lo siento, por favor acompáñenme.

-Colt: ¿Qué? ya podemos pasar, así como así, oye espérame, Bull.

Colt avanzo algo avergonzado, en verdad el lugar era muy fino, y la clientela bestia de excelente manera, pero él y Bull parecían gente de escasos recursos, no por nada algunos lo miraban y Colt agacho la cabeza avergonzado, Bull por otro lado no parecía intimidado más bien caminaba muy confiado siguiendo al mozo, los tres subieron al segundo piso, donde el lujo era incluso mejor, una sala llena de lujosas mesas, bellos candelabros adornaban el techo y exquisitos cuadros adornaban las paredes, parecía un museo convertido en restaurante, por un lado los cuadros y el otro una gran ventana que daba a la calle. En una de estas mesas con esa vista el mozo indico a Bull.

-Mozo. Sr. Esta es su mesa, por favor.

Bull no perdió tiempo y se sentó, Colt por otro lado lo pensó un momento, seguía avergonzado, pero el mozo insistió.

-Mozo: Sr, su asiento.

-Colt: Eh sí, sí.

Colt se sentó y el mozo les mostro la carta, incluso esta se veía muy bien echa y genero una cara de espanto a Colt quien fue directo a los precios los cuales pues...

-Colt: (Pensando) Santa madre de Dios, cada plato cuesta más que mi sueldo, o...oye Bull.

-Bull: (Al mozo) quiero este de aquí, y este, y una botella de vino, (a Colt) vamos pide de una vez.

-Colt algo sorprendido aun por la actitud tan relajada de Bull, miro de nuevo la carta, no solo los precios eran altos, sino que no conocía casi ningún nombre de las comidas, así que opto por uno que había escuchado, el único que conocía que era.

-Colt: Si este.

-Mozo: Entendido, en un momento regreso señores.

-Colt: Ufff, menos mal me acorde de ese, oye Bull tu conoces este lugar.

-Bull: No, pero un amigo me lo recomendó.

Colt: Ya veo (pensando) al menos no soy el único, pero me asombra, tanto lujo, y esa tarjeta (hablando) oye Bull...

Colt estaba por decir, pero apareció el mozo quien le sirvió el vino que pidió Bull, así como otro mozo quien sirvió la comida, toda sumamente elegante sobre la más aun elegante mesa.

-Colt: Wow...

-Mozos: Buen apetit...

-Bull: Gracias.

-Colt: Si, gracias, wow esto fue lo que pedí, se ve tan bien echo, me da pena comérmelo y Bull increíble, el pidió algo igual de increíble.

-Bull: Increíble, esto parece comida para niños.

-Colt: La comida gourmet siempre viene en platos pequeños.

-Bull: Lo sé.

-Colt: leve mueca (pensando) Bull no sabes nada de esta clase de comidas, oh cielos, no quiero ni pensar de tus modales, no creo que...Bull...oh

Colt quedo perplejo, Bull, el sujeto rudo y vestido como criminal del oeste, tenía increíbles modales, la manera en la que coloca la servilleta, en la que tomo los cubiertos, no parecía el, tanto que Colt se le quedo viendo un rato para que Bull dijera.

-Bull: Oye niño, esa no es el tenedor para carne,

-Colt. Ah sí, pero.

-Bull: Ese es el de ensalada, ¿no tienes modales?

-Colt: (Pensando) que rayos, me corrige, enserio no conocía de cuantos cubiertos, y ¿cuál es para carne?, uhhh

-Bull: El de tu derecha, ese no, ese.

-Colt: Oh so...solo estaba jugando.

-Bull: Uh... si claro.

-Colt: (Pensando) Ahora yo soy el estúpido, pero Bull con modales...que maravillosa sorpresa, nunca deja de sorprenderme.

Pensó Colt con un leve sonrojo en las mejillas.

Así la cena de lujo empezó y nuestros chicos no perdieron tiempo en charlar, extrañamente cosas que no tenía que ver con nada de lo ocurrido ese día, otras cosas poco relevantes, anécdotas de Bull en su bar, y cosas que Colt recordaba de su vida en la academia de la policía, al mismo tiempo que Bull seguía corrigiendo los modales de Colt.

Eran las 10 de la noche, y finalmente terminaban de cenar, pudieron haber acabado antes por la poca cantidad de comida, pero Ambos chicos se entretuvieron con una amena charla y un muy exquisito vino. Bull extendió su mano llamando al mozo a quien le entrego su tarjeta, la misma que hizo recordar a Colt preguntar por esta.

-Colt: Oye esa tarjeta.

-Bull: Espera, tienes restos de comida en la boca.

-Colt. Que, no, oh cielos.

-Bull: esos modales de nuevo, pequeño niño.

-Colt: Lo siento, es que...

Mientras Colt se limpiaba el mozo retorno con la tarjeta de Bull, ya estaba pagado el menú y ni bien Colt se terminó de limpiar vio por curiosidad el recibo y casi se cae de su asiento.

-Colt: (Pensando) Que...eso costos todo lo que comimos, eso es más de lo que gano en la mitad de un año.

-Bull no parecía preocupado, el mismo que guardo su tarjeta.

-Bull: Bien vamos, ay es tarde.

-Colt: O...ok (pensando) no te quejes Colt, él te invito la comida, el, no me di cuenta Bull me invito a cenar, oh cielos esto fue alguna clase de cita acaso, y yo me la pase hablando tonterías y mostrando pocos modales, soy tan estúpido.

Pensó Colt mientras salía del restaurante con Bull, hasta incluso cuando subieron a la camioneta.

-Colt. Ufff, bueno hora de retornar.

-Bull: En efecto.

-Colt: Oye...gracias por la cena, en verdad te lo agradezco, me tomaste por sorpresa.

-Bull: Ya, ya cállate ahora que está lleno, espero no oírte más.

-Colt: Ok, usted manda capitán, el sheriff da por saldada sus multas

-Bull: Aquí vamos de nuevo.

-Colt: (sonrisa) solo para animar la noche.

La camioneta avanzo y pues Colt en su mente se despedía de la ciudad.

-Colt: Llegaremos al menos a la 1 de la madrugada, pue...oye otra vez.

-Bull sonríe esta vez, parecía gustarle parar de repente.

-Colt: Bull ya me estoy...oye a donde entras

-Bull: Llegamos.

-Colt. ¿Qué?, pero si ni salimos de la ciudad, es más seguimos en la zona lujosa, en qué lugar estamos entrando y espera que.

-Bull: Quien dijo que saldríamos de la ciudad, vamos sal.

Colt observo que una clase botones le abrió la puerta de la camioneta y lo invitaban a entrar, a entrar a un hotel de lujo, uno de 4 estrellas.

-Colt: Wow, Bull no me digas.

-Bull: (Mostrando su tarjeta misteriosa, al mozo) procura estacionarlo bien.

-Mozo: si señor.

El mozo se llevó la camioneta al estacionamiento del hotel, mientras Bull y Colt fueron guiados dentro del hotel, como era de esperar dodo era de lujo, Bull como si conociera el lugar avanzo a recepción con tarjeta en mano.

-Colt: Bull (algo sonrojado) no solo la cena, vamos a estar en este hotel junto...

-Bull: (A la recepcionista) Dos habitaciones.

-Colt: ¿Qué?

-Bull: ¿Algún problema?, dos habitaciones (dando su tarjeta) para esta noche.

-Colt: Ya veo (pensando) creo me emocione mucho.

En poco tiempo ambos con sus llaves llegaron a sus habitaciones, al menos estaban en el mismo piso, pero separadas Bull tenía la habitación 32 y Colt la 39.

Bull llego a su habitación abrió la puerta y dijo a Colt mientras entraba

-Bull: Buenas noches

Y cerro de golpe, Colt se quedó un momento ahí parado algo desanimado.

-Colt: Si... buenas noches.

Colt avanzo a paso lento, se veía triste, hasta que llego a su habitación, entro, cerró la puerta con seguro y al levantar la mirada dijo.

-Colt: Wow, pero esta habitación es vip, es más grande que la oficina, y toda finamente decorada, increíble, tiene baño propio y hasta televisión gigante, mira esta cama, tan suave y que agradable aroma.

Colt se echó sobre en esta un momento.

-Colt: Uhh si muy suave, lastima no esté aquí, supongo ya debe estar dormido.

Unos minutos y nuestro sheriff estaba en la ducha, de un elegante y refinado baño de hotel, el agua que rociaba su cuerpo aliviaba al cansado Colt y le ayudaban a quitarse la pena.

Otros minutos y Colt solo con una toalla en la cintura se miraba al espejo.

-Colt: Todo bien, este gel de hotel, luego lo usare, uhh creo que yo también debo afeitarme, una afeitada más tarde, Colt se sentía mejor, y olvido el hecho de que dormiría solo, así que se colocó una buena bata de hotel y salió del baño para dormir....

-Colt: (Bostezo) Ohhhh que...

-Así que esto es una placa, las he visto más grandes.

Colt escucho la voz y vio al sujeto que, sentado en su cama, agarraba y observaba su placa, el sheriff puso sus manos en su cintura y esbozo una sonrisa para decir:

-Colt: Es de mala educación tocar la placa de un sheriff sabes.

Decía al gran tipo quien también llevaba una bata, el mismo que le sonreía, obviamente sabemos quién era.

-Bull: No sabía que era delito, que harás al respecto.

-Colt: Mas multas quizás, a menos que puedas pagarlas claro.

En la oficina del sheriff, el asistente tomaba la guardia, mientras se comunicaba con Shelly quien se preguntaba cómo estaba el idiota de su jefe, a lo que el asistente le decía que hasta el último mensaje estaba bien, que no se preocuparan.

Era media noche, y la habitación de Colt estaba en silencio, bueno en silencio por que era imposible hablar, cuando tus labios están muy ocupados, así pensaba Colt quien con su toro montándolo de lleno no soltaba sus labios.

-Colt: (Voz baja) es muy suave la cama ¿no?

-Bull: A quién le importa eso, has silencio.

Volvía a robarle sus labios el gran toro a su sheriff quien le sostenía su rostro para no soltarlo, el peso del toro arrugaba las finas sabanas sobre las que el sheriff recibía la energía del toro en su entrepierna.

-Colt: Ahh...no esperaba esto, ohh gracias por cambiar de opinión.

-Bull: (saboreando su cuello) te dije que hagas silencio.

Pero Colt no podía evitar emitir gemidos tras gemidos, con su toro saboreándolo mientras entraba en él, ya su ano obviamente estaba ya acostumbrado y muy feliz de recibir amor de toro.

Rápidamente la cabellera de Bull se alborotaba pues las manos de Colt lo hacían en señal de excitación, pues el toro dejaba de saborear a su sheriff y Colt no quería soltarlo, aunque eso suponía agarrarlo de los pelos.

Tan buena era esta cama de hotel 4 estrellas que ni hacia sonido por los movimientos de apareamiento del toro.

Muy finas sabanas que ahora terminaban en el suelo, cuando Bull las arrojo porque le parecieron estorbar, cuando se movió y puso a su Colt sobre él, era hora de que el sheriff montara al toro.

-Colt: Ahh...esta todo adentro...

-Bull: No todo, maldita sea, acaso puedes tener un rostro más enfermo.

Decía el toro que a pesar de la oscuridad de la habitación podía observar el rostro lascivo de su sheriff, y de echo la gran ventana estaba algo abierta así que las luces de la ciudad entraban en algo, así como una suave brisa que generaba ondas en las finas cortinas, pero que apenas llegaban para calmar el calor producido por estos dos cuerpos masculinos sedientos de placer.

-Bull: Je

-Colt: ¿Qué pasa?

-Bull: Tú te escabulliste allí ¿no?

-Colt: ¿Donde?

-Bull: En el burdel, no me mientas te escondiste tras el acuario.

-Col: No...no sé de que estas hablando, solo concéntrate

-Bull: No sabes mentir, se sinceró y sigo.

El toro había dejado de saborearlo para preguntarle. Colt miro hacia otro lado, era obvio que mentía.

-Bull: Tenias miedo que me metiera con una de esas zorras.

-Colt: No les digas así, además te negaste.

-Bull: Aja, viste todo eso también.

-Colt: Ca...cállate y sigue con lo tuyo.

-Bull: No me arrepiento de haberme negado, o tal vez sí, estabas celoso.

-Colt: Oye...

Bull dio una carcajada y se movió bien para que su sheriff se sentara bien sobre su gran miembro de toro.

Minutos y minutos de gran placer para el sheriff montando a su sabroso toro.

Finalmente, Colt sintió como el toro entro de lleno y a través de un rugido de bestia, sintió ese calor que tanto le gustaba, ese calor de semilla de toro entrando en él, tanto par que sheriff también libero su semilla en un fino disparo sobre el musculoso pecho del toro, pues el sheriff seguía sentado sobre él, terminando por caer sobre este pecho ya lleno de amor de toro.

Colt grito: Santos toros del himalaya...

-Colt: (algo fatigado) eso se sintió...graci...oye no aprietes mi cintura con tanta fuerza que va...hey que pasa...

Bull de repente agarro a Colt y con fuerza lo tiro a la cama de nuevo.

-Colt: Oye eso fue rudo ...oh cielos

Colt veía de frente a Bull, quien parecía un gran monstruo oscuro por la falta de luz, un monstruo que exhala aire de sus fosas nasales tal cual toro y que parecía emitir un destello rojo de sus ojos, así como una sonrisa maliciosa, un verdadero monstruo frente a él, uno que tenia de nuevo una inmensa erección palpitante.

-Colt: (Leve sonrisa con algo de miedo) je, Bull estas lleno de energía, no te ...ahhhhhh....

Colt grito cuando Bull volvió a meter su energía en él, pero esta vez fue muy rudo, tanto que esta vez Colt sintió dolor, por eso el grito en vez de un gemido, un verdadero dolor, algo, algo estaba pasando.

-Colt: (Pensando) Que pasa, el miembro de Bull es más grande, más que antes, está creciendo acaso, esta, está estirándome, mucho, mucho, Bull basta me duele, oye ya...

Bull: ¡Cállateee!

Colt se calló pues se asustó, esa voz sonó algo siniestra no parecía ser la voz de Bull, pero no hubo tiempo de preguntar cuando esta bestia empezó a aparearse de nuevo y Colt no podía detenerlo, por su inmensa fuerza bruta, esto debería ser placentero, pero no, dolía mucho, ¿qué pasaba con Bull?

-Colt: Bull, detente me duele, esto, esto es más grande, que haces...ahhh

-Bull: (Voz siniestra) Cállate, me toca a mí.

-Colt: ¿Qué?... no...ahhhhh...

Gritos de dolor por parte de Colt, era lo que soportaba al toro que seguía entrando más y más, apretando y desgarrando lo que no debería desgarrar, esto ya no era normal, y las lágrimas de Colt lo hacían notar.

-Colt: (Pensando) que dijo, acaso, acaso la cena fue solo para satisfacerme y luego cobrarse como dijo, soy alguna clase de ganado al que alimentas y luego comes, eso soy...ahhhhhhh duele, duele basta...me estas...matando...

Bull no se detenía, para nada, los gritos se detuvieron, pero no porque a Colt le gustara, sino porque ya no tenía fuerzas ni para gritar, solo sentía como literalmente lo partían por la mitad.

Bull seguía, él era el único que lo disfrutaba, así lo demostraba su demoniaca cara mientras Colt sufría y se desgarraba de dolor, incluso sentía como el toro agarraba sus piernas con tal fuerza que parecía querer arrancárselas, más dolor en una noche que no se suponía terminara así, porque Bull hacia esto, no parecía el Bull que el sheriff conocía.

Finalmente, la cama elegante empezaba a moverse con más fuerza, por fin sentía la tremenda fuerza del toro sobre un agonizante cuerpo que ya no podía clamar por ayuda incluso. Pero parecía que ya acababa, cuando un grito del mismo demonio se escuchó, algo que recorrió el cuerpo de Colt y lo estremeció a tal punto que casi se desmaya, y era que Bull exploto, todo dentro de Colt, un calor se sintió, pero no del bueno, uno que ardía, uno que quemaba y que literalmente hincho el vientre de Colt.

-Colt: (Apenas consciente) Estoy en el infierno...acaso siento que voy a explotar, pero, ya al menos acá...ahhhhhh

Colt grito de nuevo, cuando se suponía no tenía más fuerzas, pero logro hacerlo, porque, porque Bull no termino, pues si bien saco su miembro dejando salir un torrente de esperma de demonio, y algo de sangre, el toro endemoniado solo tomo un respiro y continuo con una nueva erección, y un nuevo dolor del mismo infierno para Colt, quien esta vez sí se desmayó, pues esta vez Bull si se pasó y por pasar nos referimos a que lo estaba matando, el miembro de demonio Bull, ya parecía haber destruido el interior, las piernas de Colt parecían simples piernas de títere, incluso parecía haberse dislocado. Parecía una película de terror, porque para terminar de decorar la cama estaba con restos de sangre, mesclada con esperma.

Solo se podía ver un inmenso demonio penetrando el cuerpo sin vida de un pequeño títere, el cual quedo tirado en la cama cuando Bull termino, ahora sí, sacando su inmenso miembro bañado en semen y sangre.

Bull retrocedió como para admirar lo que había hecho.

-Bull: (fatigado) que...

Los ojos rojos del toro de pronto se apagaron y Bull se quedó estático. Una ráfaga de viento paso por la cama, sobre el cuerpo inconsciente y destruido de Colt.

-Bull: Que... ¿qué paso? Colt... ¿Colt que diantres te paso?

Bull totalmente aterrado corrió hacia la cama y levanto el cuerpo de su sheriff, lagrimas empezaba a genera el toro las cuales caían sobre Colt.

-Bull: (llorando) que, que paso, que te hice, maldita sea no, no, no.

El toro apego su oído al pecho de Colt.

-Bull: Aun, aún sigue con vida, que fue lo que te hice, porque no puedo recordarlo, maldita sea, debo, debo, espera, sí, eso servirá...

Unas voces muy raras se escuchaban, como ecos parecían provenir de diversos lados.

-Colt: Que es eso, que suena, no puedo ver nada.

Decía Colt quien parecía estar en un sueño, para luego verse en lo que parecía ser una clase de habitación, toda blanca, pero sin nada más, ahí Colt dejo de escuchar esos sonidos.

-Colt: Donde estoy, yo...oye sigo desnudo, oye...espera no que yo estaba con Bull y.

-Ya te puedes ir...

Colt. Quien dijo eso, oye, oye.

Colt pareció ver a alguien en la habitación, pero de pronto todo se volvió borroso hasta oscurecerse, Colt empezó a abrir los ojos, pues un destello empezaba a hacerse presente.

-Colt: (Pensando, algo confundido) que pasa...Bu...Bull

Colt apenas abriendo los ojos veía a Bull quien lo cargaba y al mismo tiempo pasaba por su cuerpo un objeto extraño.

-Colt: (Pensando) que es eso.

Dicho objeto no podía verlo bien, pero parecía ser una clase de gema, una de color purpura, la cual destellaba conforme Bull la pasaba por la entrepierna de Colt. El Sheriff sentía como su fuerza volvía y como su cuerpo se mejoraba, en efecto, dicha gema parecida curara las heridas y desgarros, así como volver a su lugar aquellas partes del cuerpo que se dislocaron.

-Colt: Que... que pasa Bull, que estás haciendo.

Bull miro a Colt, el toro seguía derramando lágrimas y dijo.

-Bull: Funciona, Colt estas bien.

Dicho esto, la gema dejo de brillas, pues el cuerpo de Colt quedo como nuevo, tanto para que el sheriff le diera una patada al toro para que este saliera de la cama y terminara en el suelo.

-Colt. Uff que fuerza, me siento con tanta energía.

-Bull se levantó, el toro seguía desnudo, al igual que Colt.

-Colt: (Molesto) que fue lo hiciste imbécil, y que diantres es esa cosa que acabas de pasarme, estás haciendo alguna clase de brujería.

-Bull se sobo la cara por la patada y de pronto se volvió a tirar al suelo, arrodillado.

-Bull: Lo lamento, por todo lo que te hice, en verdad lo siento, no recuerdo que paso, pero hice algo muy malo, estuve a punto de matarte, pero, pero pude curarte.

-Colt: ¿Ahh? No recuerdas, no recuerdas todo el dolor que me hiciste sentir, pedazo de imbécil.

Bull seguía arrodillado, dando disculpas tras disculpas, frente a un enojado Colt.

-Colt: levántate si eres tan hombre y dime en mi cara que mierda te paso.

Bull obedeció, y se levantó, se veía tan guapo y musculoso, aunque su cara estuviera llena de lágrimas y algunos mocos, pero eso no importaba. El sheriff seguía molesto y esperaba una respuesta.

-Bull: Te soy sincero, no em acuerdo, pero sé que lo hice, casi acabo contigo, se suponía esto sería una noche buena, pero lo arruiné, en verdad no sé qué hice, pero no merezco tu perdón, lo lamento Colt, aunque no quieras aceptarlo, no sé qué me paso.

Lagrimas masculinas seguían brotando de Bull, tanto para sombra a Colt, que no esperaba ver a un sujeto tan masculino y rudo llorar de esa manera, en verdad lo sentía y se lamentaba.

-Colt: Entonces, no lo recuerdas, ¿es eso verdad?

-Bull: Por que hacerlo.

-Colt lo pensó, mientras estaba parado sobre la cama, mirando a este sujeto lamentándose.

-Colt: (suspiro) por todas las estrellas, no me queda más que creerte.

-Bull: ¿Me crees?

-Colt: Supongo, al menos me curaste y, oye, ¿qué es esa cosa?

Bull levanto su brazo pues aún llevaba la gema en su mano.

-Bull: Es una larga historia.

Pasaron algunos minutos y como si no hubiera pasado nada, ambos hombres estaban acurrucados en la cama, Colt apoyado en el fuerte pecho de su toro, como un niño pequeño, escuchando la historia de Bull, mientras este sostenía la gema en su mano.

-Bull: Seré breve, fue hace unos 10 años, cuando llegue al Retropolis, en ese entonces estaba mi prima y el mejor amigo de ella. Una noche mientras esos dos peleaban por una tontería, y yo terminaba de acomodar las cosas para inaugura mi bar, vi por la ventana una extraña ráfaga de luz en el cielo una que aumento, para darme cuenta de que algo caía del cielo, no muy lejos de ahí.

-Colt: ¿Un meteorito?

-Bull: Si.

No solo yo lo vi, mi prima y su amigo también lo vieron y me siguieron cuando subí a mi camioneta para ver qué pasaba, extrañamente nadie más del pueblo lo vio. Supongo porque era de madrugada, así avance siguiendo la trayectoria hasta que llegue.

-Colt. Que encontraste.

Tanto yo como mi prima y su amigo nos quedamos asombrados al ver un gran cráter en medio del desierto, uno de color purpura y dentro de este había cientos, no miles de trozos de esta gema que formaban una montaña que surgía del cráter.

-Colt: Y me supongo las tomaste, creo que hay muchas películas de ciencia ficción que te dicen que no hagas eso.

-Bull: Eran muy atrayentes, pero no fu el primero en agarrar una, el amigo de mi prima fue quien tomo una, a pesar de que mi prima le dijo que no, pero no le paso nada. De hecho el tipo se quedó admirado por ellas, así que yo tome una también.

-Colt: Entonces no pasó nada.

-Bull: No en ese momento, de pronto el tipo soltó la gema y su mano se quedó del mismo color de la gema, cayó al suelo y empezó a retorcerse, mi prima grito y trato de ayudarlo, pero el sujeto se movía demasiado, yo solo me quede mirando como...

-Colt: ¿Mirando cómo?

-Bull: Como el sujeto empezaban a crecerle plumas en su cuerpo, unas plumas negras, así como un pico, para finalmente dejar de retorcerse y darnos cuenta de que se había convertido en alguna clase de ave, para ser exacto un cuervo humanoide, claro que el tipo se aterro al ver sus manos llenas de plumas.

-Colt. Fascinante, como se llama el sujeto.

-Bull: No recuerdo su verdadero nombre, lo llamamos Crow ahora.

-Colt: Que original.

-Bull: Mi prima se lo puso.

-Colt: Pero solo el por qué toco la gema, entonces tu.

-Bull: A decir verdad, cuando vi eso, yo seguía tocando la gema, pero yo no sentí nada, incluso a pesar de que mi prima me dijo que lo soltara, no me paso nada, más bien sentí que quería tomar más y sin darme cuenta estaba llenando mi camioneta con una cantidad de esas cosas, a pesar de que mi prima me gritaba que no haga eso e intentaba devolverlas, Crow seguía sentado admirando su nuevo cuerpo. De pronto sentimos un terremoto y toda la montaña de gemas se hundió, generando un cráter profundo, todas las gemas cayendo al subsuelo, solo me quede con unas cuentas que mi prima no logro tirar de vuelta.

-Colt: Y no te paso nada luego.

-Bull: Nada, así que me las llevé, sin hacer caso a mi prima y su amigo cuervo, el mismo que nos dijo se sentía muy bien, por lo visto solo su apariencia cambio, bueno las gemas que pude, en total 12 gemas, las cuales partí en más pedazos, una de ellas es esta casualmente.

En mi casa, empecé a analizar dichas gemas, pensaba llamar a un amigo geólogo, pero decidí probar por mi cuenta, era como la escuela, la clase de ciencias.

-Colt: Interesante, pero eso significa que experimentaste contigo.

-Bull: Si, aunque use algunos sujetos de prueba, animales del desierto y uno que ladrón de la zona.

-Colt: No te voy a juzgar por eso, porque ya paso hace mucho, pero ya sabes que eso no es bueno.

-Bull: Todo por el afán de descubrir estas gemas. Ahí descubrí más cosas:

Las gemas reaccionan a las ambiciones de la persona que las toma, generando una reacción. Como lo que le paso a Crow, quien nos dijo que cuando las tomo ansiaba venderlas como alguna clase de joya o para estafar, eso no les gusto a las gemas, parecen seres vivos.

Las gemas pueden obedecer los deseos de la persona, eso incluye curar a alguien, deseos buenos al parecer.

-Las gemas pueden otorgar fuerza y agilidad, pero no duradera, al menos mientras las lleves contigo.

-Colt. Entonces por eso llevas tu esa gema.

-Bull: No la necesito, pero siempre la llevo porsiacaso, gracias a ella estas vivo. también mi prima y Crow llevan una, ella oculta dentro de su bate y Crow como collar escondido en su plumaje, yo la llevo en un compartimiento dentro de mi hebilla.

Decía esto Bull señalando su hebilla en forma de toro que estaba sobre la cómoda al lado de la cama, esta tenía como una pequeña puerta, hacia un espacio donde se guardaba la gema.

-Colt: Interesante, puedo tocarla.

Colt extendió su mano, pero Bull la alejo.

-Bull: prefiero que no la toques, no quiero que te haga daño.

-Colt: No tengo malas intenciones.

-Bull: Aun así, no quiero que te haga daño, no después de lo que te hice.

Bull coloco la gema dentro del compartimiento de su hebilla y la seguro, al parecer la hebilla solo se abre con la huella dactilar de Bull.

-Colt: Buena historia, por otro lado, Bull, y por lo que acabas de decir, ¿qué te paso?

-Bull: Ya te dije, no lo recuerdo.

-Colt: Parecías un demonio, me aterre, incluso tu voz cambio, tus ojos parecían dos llamas.

- Bull: No sé qué me paso, es la primera vez que sucede, lo lamento, lo que me sorprende es que, a pesar de eso, sigas aquí, otro hubiera huido, ¿no me tienes miedo?

-Colt: A decir verdad, no, para nada, tampoco puedo explicarlo, sentí pánico, pero ahora siento que debo estar aquí, a tu lado.

-Bull: Eres valiente y eso último fue cursi Que cursi fue eso, Colt acaricio la mejilla de Bull y esbozo una sonrisa.

-Colt: ¿Cursi?, me lo dice el tipo rudo que se puso a llorar como nena, mientras trataba de disculparse conmigo.

-Bull: Fue solo una reacción, pero en serio.

Dijo Bull mirando a Colt a los ojos.

-Bull: No temes que vuelva a pasar y te haga algo peor, no quiero hacerte daño, de echo pensaba pedirte que te alejaras de mí, ya que...

Bull se detuvo cuando Colt estiro su mano y acaricio su mejilla diciendo:

-Colt. No digas eso, en verdad no sé por qué hago esto, será porque te aprecio mucho, escuche muchas cosas de ti, pero hoy me mostraste un lado que no había escuchado, me gusto, mucho.

Bull tomo la mano de Colt y dijo.

-Bull: Sabes bien que esto puede volver a pasar.

-Colt. Es un riesgo que quiero afrontar, hasta descubrir su origen, y eliminarlo.

Colt sonrió, al igual que Bull y ambos se dieron un tierno beso, cuando Colt dijo.

-Colt. Perdona el atrevimiento, pero me supongo no tiene pareja.

-Bull: Si, si tengo.

-Colt: ¿Qué?

Colt se quedo congelado de la impresión y ese ambiente romántico se quebró.

-Bull: Creíste que no tendría.

Colt agacho la mirada, aun estando sobre el pecho musculoso de su toro.

-Colt: Ya veo, me ganaron y ¿cómo es?

-Bull: (sonriendo) es bajito, tiene un hoyuelo en el mentón y una hermosa cabellera roja, trabaja como sheriff en el mismo pueblo donde vivo.

Colt alzo la mirada y sus ojos brillaron, al mismo tiempo que se ruborizo y empezó a sonreír, para acercarse de nuevo a Bull y besarlo.

-Bull: Pero él no sabe que ya tiene pareja.

-Colt: Creo que ya lo sabe.

Colt le dio un buen beso a su toro, olvidando todo lo que paso esa noche, incluso el pequeño sheriff derramo algunas lágrimas, lágrimas de felicidad.

-Colt: Te amo idiota grandulón.

Paso el tiempo y ambos ya estaban dormido, Colt era abrazado por su toro y usaba su enorme brazo como almohada.

De pronto Bull se levantó, y lentamente saco su brazo.

El toro se movió y termino sentado sobre la cama, sobre su rostro se reflejaba algo de luz de la ciudad, que entraba por la gran ventana. Bull se veía algo triste y pensaba.

-Bull: No sé en verdad que me paso, yo no...

Bull alzo sus brazos frente a él, mirando sus grandes manos, de pronto sus ojos empezaron a sentirse raros y de sorpresa como un destello ya no se veía en la habitación, veía detrás de sus manos un ambiente oscuro, uno lleno de llamas, como si hubiera un incendio y escuchaba varios gritos, pero lo que le asusto fue ver sus manos, las cuales estaban manchadas de sangre, los ojos del toro entonces empezaron a mostrar ese brillo, ese color rojo endemoniado de antes ,cuando escucho un grito fuerte que decía:

- ¡Papá!

Tal grito retumbo en su mente y Bull cerro con fuerza los ojos, y de pronto ya no escucharon los gritos y al abrirlos se vio de nuevo sentado en su cama.

-Bull: ¿Qué fue eso?

-Dijo Bull al mirar de nuevo sus manos, las cuales estaban normales, sus ojos ya no brillaban.

Bull?

Dijo un soñoliento Colt que se dio cuenta que no estaba su toro.

-Colt: ¿Te pasa algo?

-Bull: Nada, solo fui al baño, eso es todo.

-Colt: Vamos vuelve a dormir.

-Bull: Si

El toro se volvió a acurrucar abrazando a su Colt quien se acurrucaba entre sus músculos, y volvía a usar su brazo como almohada, el joven sheriff esbozaba una sonrisa, aunque Bull no parecía verse tan feliz, esas imágenes parecían ser de su pasado, de todas maneras, trato de olvidarlas hasta que finalmente se quedó dormido, junto a su ahora pareja.

Misterios del capitulo

¿De quien hablaba Bull al principio, luego de hablar por celular, y que emociono a Bibi y asusto a Crow?

¿A qué se refería la carta que logro armar Colt?

¿Cuál era el secreto que ocultaba el dueño del burdel?

¿Qué contiene los sobres que recibía Bull, y la maleta?

¿Qué tarjeta misteriosa uso Bull en el restaurante y el hotel?

¿Cómo entro Bull a la habitación de Colt si este le echo seguro?

¿Cuál es el origen del Bull demoniaco?

¿Qué significo el sueño de Colt antes de ser curado?

¿Qué misterios ocultan los recuerdos que tuvo Bull, y que al parecer tienen que ver con el Bull demoniaco?

¿Qué más misterios se ocultan tras las gemas purpura?

¿En verdad Colt acepto convivir con la posibilidad de ser herido de nuevo por el Bull demoniaco?

Estas y otras preguntas en capítulos posteriores, si es que puedo jeje

Continuara...