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cuatro




Los días en la ciudad parisina habían pasado, las vacaiones allí estaban siendo increíbles. Taehyung fue el primero en abrir sus ojos esa mañana, a pesar de que no le agradaba la idea para nada, el sol le daba de lleno sobres sus avellanados orbes

Gruñó por lo bajo con bastante incomodidad, pocas veces tenía para poder disfrutar de estar a gusto por la mañana, lo normal era que tuviera que levantarse demasiado temprano para ir directo a la mafia y comenzar a impartir las clases

El omega era quien se encargaba en enseñar a los novatos a manejar las armas, porque la técnica del peliazul era precisa y de admirar

Con el ceño fruncido y su labio inferior abultado por la disconformidad, se dio la vuelta sobre el colchón, encontrándose de cara con el rostro pacífico de su pareja. Jeon mantenía una respiración pausada y sus labios entreabiertos, totalmente absorto en un mundo de sueños

Tae lo quería mucho, pero mucha veces dudaba de si podría ser él mismo quien le diera aquella vida que se merecía

El mayor había tenido desde pequeño una vida indeseable, por lo cual su carácter era bastante especial, especialmente malo

No era demasiado romántico, y le gustaban cuando las cosas le hacían sentir algo fuerte, algo que reemplazase cualquier dolor antes vivido, haciendo que se olvidase de este. Era por eso, por ejemplo, que le gustaba cuando Jungkook le trataba de aquella forma durante el sexo

Normalmente,le gustaba pasarse el día al lado de ese alfa que lo tenía tan mimado, estaba enamorado de él y eso lo tenía claro, porque a pesar que las cosas típicas de una película de amor no era lo suyo, si que adoraba mantener una relación seria con el chico

Y es que no era para menos, el menor siempre se esforzaba en verlo bien, en cuidarlo y hacerlo feliz, le amaba

– Buenos días, muñeco – susurró el azabache aún abriendo uno de sus    ojos con una suave sonrisa, llevando su mano diestra hacia la    cintura desnuda del chico contrario

– Hola Jeongukie-- Saludó de vuelta

– ¿Estás preparado para una mañana de compras? Te dije que en algún momento iríamos a buscar algún    traje de chaqueta que te gustase –

El peliazul asintió dejando que una de sus manos viajase hacia la cabellera carbón del menor, dejando que sus dedos se enredasen entre estos, así dejando cariñosas caricias en el lugar

Bien, entonces me iré a duchar ¿Te vienes conmigo? – Ni siquiera pasaron diez segundos antes de que el chico de piel canela se    levantase de la cama para ir desnudo hacia el cuarto de baño

Jungkook, con una gran sonrisa dibujada en sus labios pensó lo precioso que realmente Kim podía ser. Sabía que se estaba dedicando a preparar la bañera, porque eso es lo que hacía siempre. Cuando iban a hoteles -fuera de ámbitos de trabajo- siempre se bañaban ambos en las amplias tinas

Era algo que los dos disfrutaban mucho, por eso mismo lo hacían juntos

Mientras el mayor estaba echando sales y regulando la temperatura del agua, el azabache se sentó entre las sábanas para tomar su teléfono de la mesilla de noche. A pesar de que estaba en sus días de descanso debía de revisar sus mensajes, vivían bien, pero estaban en peligro en todo momento ya que podían hacerle una emboscada, a cualquiera de sus componentes de la mafia

-- Jungkook-ah, no tardes o se va a enfriar--

La voz ronca de Taehyung fue lo que le hizo darse prisa, a pesar de que seguía medio adormilado. En cuanto se dio cuenta de que todo estaba bien, dejó el teléfono sobre la mesilla de nuevo y se fue al baño

Allí estaba el mayor, quien ya se encontraba disfrutando de la calidez del agua

Al alfa le gustaba colocarse detrás suyo con la espalda del chico pegada a su torso. La piel canela de Tae era suave, era brillante y no sabía por qué, Jungkook tenía ganas de tocarla en todo momento

-- El pelo azul te queda muy bien... -- Musitó el pequeño de ambos

Se estaba dedicando a mojar el cabello color fantasía de Taehyung con ayuda de sus manos, aquello era de lo más relajante. El contrario simplemente se encontraba allí con sus ojitos cerrados, disfrutando de como el poderoso alfa le mimaba un poquito

-- La verdad es que me gusta mucho, creo que hasta supera al cabello rojo --

-- Oh, bueno, ese color te quedaba también de escándalo. Problemas de ser precioso, supongo --

Tae rió girando apenas su rostro para que sus acolchados labios tomaran los del menor, dándole un beso que les hizo temblar

Así era como ellos disfrutaban del baño, de esa forma también conseguían relajarse un poco y sobre todo se olvidaban de aquel trabajo tan cansado tanto físico como mentalmente que tenían

Bastantes minutos pasaron para cuando ya el agua se había comenzado a enfriar, aquello fue el detonante de que quisieran salir ya. Jungkook fue el primero en salir, colocándose uno de los albornoces del hotel para secarse, y además, tomando otro más para rodear el cuerpo mojado y desnudo del omega con este

— Puedo ponerme el albornoz solo, Jungkook-ah— comentó el mayor soltando una suave risa

— Lo sé, sé perfectamente que eres capaz de hacer cada una de las cosas que quieras, pero hay veces que me gusta hacerlo por ti... —

— Bobo —

El chico de cabellos azules se acercó al cuerpo del contrario para rodear su cintura, dejando su rostro apoyado en el hombro del menor, permitiéndose a si mismo olfatear su cuello

Los lobos de ambos estaban seguros, se amaban el uno al otro, de hecho los animales fueron los primeros en congeniar, Jungkook y Taehyung no habían sido tan amables el uno con el otro desde el principio

Ellos solían discutir, y lo que era más grave es que el omega incluso a veces había llegado a atacar a Jeon, por eso mismo, para ellos era    casi gracioso el hecho de tener ahora esa relación en la que ambos estaban sumidos

Con tranquilidad y entre risas se vistieron, Taehyung decidió también maquillar un poco sus ojos y después de aquello salieron hacia las calles de París

Era la ciudad favorita del chico de piel canela, y la realidad era que la pareja solía visitarla bastante, cada vez que tenían algunos días de descanso, tanto era así que ambos podían defenderse en aquel precioso idioma, por lo menos hablando, porque de escribirlo no tenían idea

— Jungkook, siempre he tenido curiosidad de algo sobre Yoongi hyung. Desde que lo conozco ha estado apenas con una persona, es alfa y su lobo tiene necesidades ¿no tiene pareja? —

La pregunta había venido de sorpresa para el azabache, su mejor amigo era alguien bastante reservado para esas cosas. Jungkook si había conocido a algunas parejas de este, pero ya hacía mucho tiempo que no lo había visto con alguien

— No lo sé Tae, la verdad, él nunca suele hablar de esas cosas, ya sabes como es hyung —

— Si, ya sé por qué entonces está tan amargado, le hace falta mojar el churro — El mayor chistó con su lengua, tenía una relación de amor odio con el alfa pálido de ojos gatunos

Le tenía aprecio, o eso creía, porque Taehyung no quería querer a nadie, demasiado le costó aceptar que sentía cosas demasiado grandes por su menor    

— Oye...— Kook rió mientras andaba al lado de su chico y revolvía su azules cabellos    

— ¿Qué? Es la verdad, Yoongi hyung siempre está serio y con esa cara de "me importa todo una mierda" "me da igual si se la estás chupando a Jungkook, yo tengo que hablar con él ninini"

A este punto el chico azabache se estaba carcajenado, su pareja era tan natural que le hacía gracia, Tae le hacía feliz hasta en las    cosas más pequeñas    

En el bolsillo del abrigo de Kook comenzó a virar su teléfono, al ver el nombre de quien se trataba sonrió — Hablando del rey de    Roma...—

Tae rodó los ojos y paró de andar para que el contrario pudiera hablar más cómodo    

— Hola, Hyung ¿Qué necesitas? —

— Mover vuestro trasero hasta Corea, tenemos un problema —

— ¿Es grave? — Preguntó serio tomando la mano de Taehyung mientras se lo llevaba casi arrastrando de allí

— No mucho, tenéis que iros ya de Francia, van a por ustedes —

— ¿Cómo lo sabes? —

— SeokJin está aquí — Sentenció Yoongi

— Llama al piloto de nuestro avión y dile que nos espere en el aereo puerto, en quince minutos Tae y yo estamos allí —

Jeon colgó la llamada dejando salir un gruñido, no es precisamente lo que más le hubiera gustado. Le apetecía relajarse un poco más junto a Taehyung, que permanecía callado a su lado, imaginándose lo que pasaba, después de todo era su día a día

— ¿Todo bien? — Se atrevió a preguntar mordiendo el interior de su mejilla derecha

— Sí, solamente nos están viniendo a buscar, pero lo han conseguido detectar así que nos volvemos a Corea. No sé como cojones se han    podido imaginar que estábamos en Francia —

— Bueno, no pasa nada, ya volveremos otra semana —

Ambos llegaron de nuevo al hotel para tomar las pocas cosas que tenían allí, y casi contra reloj llamaron a un taxi para ir hacia el areoperto, donde ya estaba uno de sus pilotos esperando

Estaban sentados en los mullidos sillones del avión, o por lo menos,Taehyung lo estaba, porque el menor estaba andando de un extremo a otro por el pasillo del vehículo. Taehyung lo miraba divertido, era algo que iba dentro suyo, Kim nunca veía el peligro en ningún lado

Y puede que eso es lo que le hiciera excelente en su trabajo

— Ya, Jungkookie, ven y siéntate aquí conmigo —

— No puedo ahora mismo ¿Para qué habrán venido a buscarnos? ¿Qué intentaban? —

— Kook, iban a matarnos, porque sabían que estábamos solos y no había apoyo en ningún lado, eso es todo —

El azabache se quedó callado, el mayor tenía razón, iban a matarlos y y a está ¿Cómo hubieran salido las cosas? Se sentía agradecidode tener el equipo a fin de cuentas él había formado en la mafia

— ¿Vas a venir, o no? — Musitó sonriendo

— Taehyung, para. Necesito unos momentos para asimilar qué podemos hacer, que a ti te sea indiferente no significa que lo sea —

El ceño del mayor se encontraba fruncido, odiaba, detestaba con toda su alma el hecho de que le hablaran así, de hecho, probablemente si hubiera llegado a ser otra persona no se hubiera quedado callado, ni hubiera decidido ignornarle

Kook podía dar las gracias

Aunque lo único que hizo es sentir impotencia al ver como los ojos avellana lo esquivaban y se centraban en la ventanilla. Eran personas que parecían vivir en mundos totalmente diferentes

Las horas pasaron, Jungkook incluso consiguió quedarse dormido en uno de los tantos asientos de cuero, sin embargo el peliazul se quedó despierto hasta que las ruedas del vehículo tocaron tierra

Muchas veces le habían repetido lo molesto que era y la mierda de actitud que tenía, pero odiaba el hecho de pensar que quizás, y sólo quizás, el alfa podría verlo así también

El piloto fue quien despertó al azabache, ya que el mayor simplemente había comenzado a tomar su pequeña maleta para salir de allí

No había conversación alguna, solo eran ellos dos andando por los pasillos del aereopuerto con el que tenían contrato, solo necesitaban meterse por una de las salidad de emeregencia y no tendrían por qué pasar algún control

Y eso hicieron, sabiéndose de memoria el camino, dispuestos a ir a casa

Lo que no esperaban era encontrar allí, a quienes supuestamente les estaban buscando en Francia

— Deberíais de tener un poco más de cuidado de las cosas que habláis y a quienes tenéis alrededor... las paredes tienen oídos    Jungkookie...— La preciosa chica estaba frente a ellos con tres hombres alrededor suyo

Joy llevaba puesto un abriego de pelo largo negro y sus labios pintadosde rojo, haciendo contrarste con su melena larga azabache

Ella era lider de otra mafia, desde hace mucho tiempo habían tenido problemas con ellos, era algo que ni siquiea se sabía por qué había empezado, pero ahí estaba

— ¿Sabes? En realidad no sé cómo habéis sido tan tontos como para moveros a otro país sin alguna protección, esas cosas son de ser poco    cuidadosos — Ella sonrió cínicamente mirándose el precioso esmalte de uñas que llevaba

Jungkook frunció su ceño, esa alfa le sacaba de quicio, lo había hecho toda su vida y no parecía que fuera a acabar nunca

— Estás más fea de la última vez que te vimos — Soltó el peliazul riendo de forma ronca después

— Tú mejor no hables, estás demente. Eres un omega que nadie desearía tener al lado. Te diría que abandonaras tus esperanzas de estar con Jungkook y dejases de perder el tiempo, en no mucho se hartará de ti. Pero todo eso no sirve de nada puesto que os voy a matar a aquí y ahora —

El chico menor no era capaz de emitir alguna palabra, estaba shockeado,intentaba pensar en algún plan, en algo con lo que pudieran escapar, pero literalmente por mucho que lo deseara no tenía ni una puta salida

Tampoco podía recurrir a atacar o defenderse puesto que no tenía arma alguna allí

Se maldecía en diez idiomas diferentes, como mierdas se le había ocurrido relajarse tanto; como si su vida fuera normal

Taehyung sabía, podía percibir el nerviosimo del chico, y sabéis, el chico de piel canela podía tener muchos fallos, demasiados, a niveles estratosfericos, sin embargo, nunca dejaría que el alfa se muriera si antes él no había intentado defenderlo, porque a fin de cuentas, a él le daba igual morir, no tenía miedo

— Me aburrreeeees Jooyyyyy — Kim rodó sus ojos apoyando una de sus manos en el hombro izquierdo del azabache

Taehyung no necesitó demasiado tiempo para notar que el guardaespadas de la derecha de la chica estaba sacando con calma una pistola de dentro de su chaqueta mientras Joy seguía hablando, con intención de seguir manteniendo entretenidos a los dos chicos

Los labios del chico de piel canela se acercaron hacia las orejas y allí le susurró "no te asustes"

El menor no era capaz de entender nada, por lo menos hasta dos segundos después

De un momento a otro, en rápidos movimientos tomó su maleta de ruedas y la tiró con fuerza hacia el estómago de aquel beta que estaba apunto de dispararles

La pistola cayó y Tae corrió deslizándose desde abajo, consiguiendo disparar en la cabeza a los tres hombres. Ya solo quedaba Joy, que le estaba apuntando con la pistola sobre su frente

— Di adiós Taehyungie~ — susurró ella

Jungkook corrió hacia la chica para detenerla pero el disparo se escuchó, haciendo que el azabache frenase a mitad del pasillo y además cerrase los ojos

No creía haber podido perder a Taehyung, y mucho menos cuando lo último que había hecho era gritarle que dejase de ser molesto, en otras palabras

— Taeh-...¿Yoongi? — Preguntó sorprendido

— Joder, perdón por no venir antes, pero en serio, creíamos que se habían ido a Francia por ustedes, pero se habían quedado en el aereopuerto... —

— Si, si... muy bonito, pero ¿podéis quitarme a la zorra muerta esta de encima? —

La voz grave del de piel canela casi que le devolvió el colo a la cara de Jeon, que corrió el tramo que le quedaba para llegar hasta los    cuerpos ya sin vida y además el del peliazul

— Tae... dios, estás aquí —

— Claro que estoy aquí, bicho malo nunca muere — bromeó

— Que malo ni malo... eres increíble —

Jungkook no era capaz ni siquiera de respirar de forma regular, solo podía abrazarse al omega que no parecía siquiera inmutarse, simplemente rodeó con sus brazos el cuello del contrario

— Ya... no vayas a llorar, mi pequeño alfa sensible —

— No estoy... llorando — Musitó con su rostro hundido en el cuello ajeno

Min evitaba mirar la escena, esperando con su espalda pegada a la pared.Sabía que debía de darle su espacio a aquellos dos, más aún con el susto que se acababan de llevar

— Hyung, gracias —

Yoongi rodó los ojos con una sonrisa al escuchar el agradecimiento de parte de Taehyung, era la primera vez que recibia algo que no era un ataque de parte del omega de piel canela

— No es nada, me alegra de que pudieras darte cuenta de que estaba ahí,tenía que ser silencioso para que no me pillaran —

— Tu aroma asqueroso hizo su trabajo en hacerte sentir —

— Hasta salvándote la vida me vas a insultar, no tienes remedio —

Jeon ayudó a Tae a ponerse en pie y fue cuando se dio cuenta del corte que tenía sobre toda su mejilla

— ¿Qué te ha dado? — Preguntó su pareja preocupado

— Ha sido una de sus uñas asquerosas, cuando Yoongi hyung le ha disparado ha caído encima mío y bueno, me ha arañado con fuerza —

— Vamos a mi casa, SeokJin está allí, así te curamos la mierda esa también — Dijo Yoongi mientras buscaba armas y dinero entre los    bolsillos de los muertos

— ¿Te estás follando otra vez a SeokJin hyung? — El peliazul preguntó para después carcajearse

El pálido tomó una de las pistolas y disparó al suelo al lado de Taehyung, haciendo que este le lanzase una mirada de odio, la amistad de estos dos era de las cosas más raras del mundo

— Claro que no, no hagas que me arrepienta de haberte salavado. Jennie viene con los Jongin a tomar a los cadáveres, así que nosotros nos vamos ya —

Los dos más jóvenes asintieron caminando detrás de Yoongi, que tenía su auto aparcado fuera. El viaje a casa del mayor estuvo sumido en susurros de parte de atrás del auto, siendo los dos menores quienes tenían la bajita conversación

Sin poder evitarlo Yoongi comenzó a recordar aquella época, esos años en los que todo había sido una mierda, porque él solo era un alma en pena detrás de una cara bonita a la cual no le importaba nadie ni nada, SeokJin

Tan enomarado estaba que le daba igual, sabía que el precioso omega no lo querría nunca como él quería, pero estaba bien así, se conformaba con verlo y fundirse con él

Por suerte todo eso ya estaba superado, Yoongi había aprendido a que eso era tóxico y desde entonces tampoco tuvo oportunidad de estar con alguien más, y si alguna vez se le presentó la ocasión, la ignoró, no le interesaba

Tanto así que su celo se cortó, llevaba años sin celos, pero estaba bien así, no necesitaba a nadie

— ¿Yoon? Hemos llegado... —La voz del alfa menor lo sacó de los pensamientos ¿cómo había aparcado y ni siquiera se había dado cuenta?

-- Si, vamos, arriba está esperando SeokJin, os tiene que contar cosas --

Fue así como los tres chicos subieron al apartamento de Min, donde no era raro acabar el día a veces. En cuanto entraron en la sala vieron a SeokJin sentado en el sofá con sus piernas en posición de Indio, se encontraba viendo la televisión en pijama

-- ¡Jungkook-ah! ¡Por fin llegáis! Dios, siento no haberos avisado bien --

El omega se abrazó a Jeon y dejó un beso en su mejilla, luego dejando otro en la mejilla de Taehyung, que se molestó en poner cara de asco ante eso, comenzando a frotar su mano en su mejilla

-- Tranquilo, hyung... Yoongi consiguió llegar a tiempo, y fue un total alivio. Cuéntenos ¿Qué pasó? -- Preguntó mientras se sentaba en uno de los dos sofás de la sala, por supuesto con el peliazul entre sus piernas, dispuesto a escuchar mientras jugueteaba con la cadena del cuello del azabache

-- Desde que tuve que entrar en la mafia de Joy como espía estaba escuchando rumores de que vendrían algún día por ustedes, lo que no sabía que día podría ser. Por lo visto uno de sus nuevos reclutados os vio en el aereopuerto, entrando en el embarque de Francia. Joy nos había dicho que iríamos a buscaros, cuando dijo aquello, pensé que obviamente sería allí, hubiera sido bastante inteligente ya que allí estábais más indefensos que aquí. Pero claro, ella sabía que de alguna manera, alguien os avisaría e iríais allí. Lo que aún no entiendo es como entraron en el pasillo que tenéis acordado con la empresa para salir desapercibidos, y desde luego lo que es obvio es que sabían que había un espía ahí dentro, lo que no sabían es que era yo -- El omega mayor frunció sus labios llevando una de sus manos hacia los cabellos negros de Yoongi, que estaba sentado a su lado, se negaba a sentar al lado de los tórtolos

-- Por suerte Yonnie fue bastante rápido~ Bien hecho, bebé --

Min suspiró ante aquel coqueto trato ¿Acaso el mayor no se cansaría de jugar con él? Mala suerte, él ya no seguiría ese juego

-- Ostia, que asco -- Tae arrugó su nariz, sintiéndose asqueado por el coqueteo, escondiendo su rostro en el cuello de su pareja, haciéndole reír una vez más

-- Bueno ¿Queréis algo de beber? Tengo Vodka, también Whisky o cervezas --

-- Un Whisky para mi ¿Quieres algo, amor? -- Preguntó Jeon al mayor acariciando la espalda de este con la yema de sus dedos por dentro de su camiseta

A Taehyung no le gustaba el alcohol, por lo que negó en seguida

-- Yo te acompaño a ver que tienes por ahí --

SeokJin se levantó del sofá en seguida con una sonrisa, colgándose rápidamente del brazo del pálido para entrar con él en la cocina. Min estaba intentando mantener la calma, harían dos años desde que todo entre ellos había acabado, y la única relación que habían tenido desde eso había sido por teléfono, porque SeokJin estaba en la otra mafia a muchos kilómetros de donde verdaderamente pertenecía

-- Gracias por dejarme quedarme aquí mientras estoy en Seoul -- Agradeció el castaño sentándose de un saltito en la encimera mientras miraba como Yoon buscaba las bebidas y las copas

-- No agradezcas, después de todo te has auto invitado, yo en ningún momento te di la opción --

-- Te recordaba más caballeroso Yoonnie--

-- Pues tú sigues igual a como te recordaba --

--Me lo tomaré como un halago--

-- No deberías-- Espetó el azabache sin siquiera alzar la mirada de las copas

Kim sabía que siempre había jugado un poquito con su menor de ojos gatunos, pero siempre le había parecido tan divertido como placentero porque sí, el sexo con el alfa era simplemente excelente; y eso estaba muy bien

-- Yoonyoon... perdón si alguna vez hice algo que te doliese, lo digo de coraz- --

-- Oh, ¿te refieres a esa vez que te confesé que te amaba y decidiste besarte con otro chico frente a mi? ¿O te refieres a cuando cada vez que terminábamos de tener sexo y te pedía que te quedaras te ibas entre risas llamándome inocente? ¿ O también cuand- --

--¡Vale, lo pillo! Fui un capullo, pero de verdad que lo siento--

El mayor se bajó de la encimera con su labio inferior abultado, no tardó en rodear con sus brazos el cuello del alfa y mirarle con aquellos ojos suplicantes

-- Te había echado de menos ¿lo sabes? -- Susurró el castaño atrapando su labio inferior entre sus incisivos para luego relamer sus pares de belfos, tan coqueto siempre...

-- SeokJin hyung, para de jugar, yo ya no soy como tú piensas--

-- Eso lo hace más emocionante, presentame entonces al nuevo Yoongi... -- El mayor colocó sus manos detrás de la nuca contraria y con una sonrisa; junto movimientos lentos, se acercó poco a poco a los finos labios de Min

Hubiera sido un beso, por lo menos si el timbre no hubiera sonado, haciendo que el pálido se separase toscamente del cuerpo del castaño

-- V-voy a ver quien es-- Dijo antes de salir de la cocina

Estaba respirando de forma irregular y tenía la cabeza embotada, le costaba pensar ¿Había estado apunto de dejar que el omega jugase de nuevo con él? O no, no por favor, otra vez no ¿dónde había acabado su amor propio?

Mal Yoongi, joder

Abrió la puerta de forma rápida consumido en ansiedad. El movimiento fue tan brusco que el pequeño rubio que estaba justo ahí dio un suave saltito del susto

-- ¿Jimin? ¿Qué haces aquí? --

-- M-me dijiste cual era tu edificio hace unos días... iba de camino a casa pero pasé por aquí, y justo una señorita muy amable me preguntó si necesitaba algo; y-y bueno, y-yo sé que es muy repentino pero hoy me encontraba un poco triste... así que le pregunté por ti y me ayudó a llegar a tu piso ¿molesto? Puedo irme si lo hago, sé que es muy repentino --

Min no podía creerlo, como alguien podía ser tan puro, inocente y lindo. Solo podía existir una persona así, y joder, lo tenía frente a él, con esas gafas negras que siempre llevaba, con ese cabello liso y dorado

-- Quédate, si quieres luego te acompaño a casa, pero quédate un rato --

-- ¿En serio? -- Preguntó con aquellas pomposas mejillas sonrojadas

-- Sí, yo tampoco estoy muy bien y- oye ¿Qué es eso? -- Min no puedo evitar reirse, en todo el tiempo que llevaba frente a él no se había dado cuenta de que el pequeño traía un libro entre sus brazos, abrazándolo contra su pecho para calmar los nervios

-- Bueno, cuando me siento mal me sirve que alguien me lea... c-como el otro día en mi casa mientras cenábamos dijiste que te gustaba leer, pues pensé que podríamos, ya sabes, hacer un buen dúo--

Ahí estaba de nuevo, sonriendo de esa forma que solo Jimin últimamente era capaz de provocar, el pálido estaba seguro de que si Taehyung estuviera ahí enfrente le diría "Uy, que asco", pero en serio Jimin era la mejor compañía de sus días, era lo más sano que pisaba su cabeza

-- ¿Yoonyoon? ¿Entras ya?-- La voz de SeokJin sonó desde dentro

La sonrisa que el menor tenía plasmada en sus labios fue borrada al instante y el azabache fue consciente de como el cuerpo del pequeño se encogía de nuevo un poco

-- Hyung, si tienes visita puedo venir mañana, yo en serio no quiero ser una molestia --

-- ¿Molestia tú? Joder, eres lo menos molesto del mundo. Sólo un momento, voy a echar a los idiotas esos de mi casa. Ven, entra, te llevaré a mi habitación- ¡ A ver! Te llevo allí para que me esperes cómodo, ya sabes, mientras echo a todos los bobos esos que tengo por... amigos --

El menor rió asintiendo intentando reprimir la gran sonrisa que quería salir de sus abultados labios, su hyung le caía muy muy bien

De aquella forma fue como el omega se acabó sentando en el borde de la cama del chico pálido, dispuesto a esperar pacientemente acariciando a un dormido Holly

Min entró en la sala, donde vio a los otros tres charlando

-- Lo siento, no habrá copas ni nada, os tenéis que ir, me ha surgido una urgencia. Y tú, SeokJin hyung, tendrás que irte a un hotel, si quieres te pago la noche de hoy --

-- Uoh, a saber qué urgencia tiene el pedazo de azúcar caducado hyung -- Bromeó Taehyung colocándose su abrigo

-- Uno el cual no te interesa, idiota --

-- ¿En serio tengo que irme? -- Preguntó el castaño arrugando su nariz, estaba detectando un aroma, y no era de ninguno de ellos, no lo había olfateado antes, ni siquiera en la casa de Yoongi cuando recién entró esa tarde

-- Sí, por favor, venga --

-- Vale, pero te aseguro que hablaremos mañana, muy seriamente --

El omega tomó su maleta, y dándole mucho igual, salió del hogar de Min en pijama, siendo seguido por Jungkook y Taehyung, que tendrían que tomar un taxi hasta el apartamento que compartían

Cuando todos se fueron, el pálido pudo suspirar en paz, había silencio en su casa y el aroma de Jimin podía sentirse un poco ¿Estaba en el cielo?

-- Perdón por tardar... ya estoy aquí. Yo hm, voy a ponerme ropa cómoda ya que sigo con el uniforme del trabajo, si quieres puedes contarme mientras por qué te encuentras un poquito ¿plof? --

La risa de Jimin no tardó en sonar, el término "plof" se lo había enseñado él al mayor hacía unos días, el primer día que cenaron juntos. El hecho de ahora escuchar al mayor utilizarlo era bastante divertido

El pequeño asintió y decidió comenzar a hablar mientras el contrario se cambiaba de ropa, no hacía mucho que se conocían, estarían cerca de las dos semanas, pero parecían casi la mejor opción de compañía. Jimin no conocía a casi nadie allí, y para Yoongi el pequeño represntaba la paz que no tenía en su vida diaria

Después de una pequeña charla y algunos consejo filosóficos de parte del mayor, ambos se encontraban sentados sobre el mullido colchón, con Holly separándoles en mitad de ambos cuerpos

-- Hyung, si ves que me quedo dormido, despiértame para irme a casa--

--Si, si, ahora relájate que voy a empezar a leer --

Ambos tenían sus espaldas apoyadas en el cabecero, la voz de Yoongi resonaba en cada rincón de la habitación recitando la historia y la manita derecha del rubio jugueteaba con los ricitos del cachorro que tenía al lado

-- Sin embargo, Jhoan no...--

El pálido no sabía cuanto tiempo había pasado, y tampoco había sido consciente de cuando la cabeza del menor estaba apoyada en su hombro, con los labios medio abiertos y respiración pausada

Una sorpresa se llevó el pálido al checar la hora en su teléfono y ver que había pasado casi hora y media, normal que se acabase durmiendo

Con cuidado dejó el libro en la mesilla para luego levantarse, no tenía intención de despertar al tierno omega que se veía tan cómodo allí, se negaba. Decidió quitarle esas gafas que a veces deseaba tanto apartar para que pudiera dormir mejor, y por supuesto, le buscó un edredón calentito para echarlo por encima de su cuerpo

-- Buenas noches...-- Susurró quedándose unos momentos más embobado con el chico

Finalmente decidió tomar otro edredón para él e irse al sofá, no quería dormir con Jimin ¿Y si se despertaba y lo intimidaba? No quería incomodarlo, por eso prefirió quitarse del medio, dejándole el espacio que debía

Holly acabó haciéndole compañía después de todo

Y aunque suene bastante incómodo dormir en un sofá, Yoongi estaba feliz de que el pequeño estuviera relajado y dormido en su habitación


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Otra vez, cinco mil palabras, estoy super contenta

Espero que os haya gustado el capítulo <3 y que estéis disfrutando la obra

Kissuuu~~


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