Esquizofrenia, Se detectó en éste pobre niño que con el pasar de las estaciones empeoraba.

Según su reporte, comenzó a perder la vista, sus pupilas en la mayor parte del día estaba dilatas y lo peor; sus cambios de humor. De un momento en que está sonriente y amigable al siguiente estaba gritando con voz agravada, como si no fuese él en ese momento.

Algunas de sus venas se marcaban en su cuello.

Era algo doloroso de ver si se trataba de un niño.

En medio de una depresión encontró la respuesta fácil, la que cualquiera de mente débil (según se dice) piensa al estar en un mal rato; Suicidarse. Su deseo fugaz de desaparecer se vio apañado cuando volvió en sí dentro de una habitación blanca y vendajes cubriendo la mayor parte de su cuerpo y rostro.

Al día siguiente de la prueba aparecieron en primera plana en los periódicos "¡Adolescente intenta suicidarse prendiéndose fuego!". Quise corroborar esto y fui a la biblioteca, en el apartado de las noticias más viejas, encontré lo que pudo ser esa misma noticia pero esta pequeña hoja ya estaba humedecida y la tinta no era favorable para leerla.

Absolutamente todo, por propias palabras de Fukase al médico; Era culpa de Adam.

Volví a revisar sus dibujos con la esperanza de encontrar algo que me dijera quién era ese tal Adam.

Lo que encontré me hizo desear no haberme interesado en estos papeles tan viejos. En unos dibujos era posible percibir lo que creí, un ser con forma humana, con un intento de llagas por toso su cuerpo, en sus extremidades tenía muchos rayones. Supongamos que es cabello.

Lo que me dejó impresionado fue el rostro de aquel ser, aunque más que rostro era una autentica cabeza de cerdo.

¿Cómo es que lo dejé pasar?

Adam era un hombre con cabeza de cerdo.