Los padres de GaRin tenían diferentes mordidas por todo el cuerpo, pedazos de carne que faltaban en ellos, EunWoo los había cubierto con una sábana del armario mientras yo lloraba como niño pequeño en el pasillo. Por un momento mi mente se puso en blanco, no sabía qué hacer, que decir ni que pensar, me había bloqueado por completo y no dejaba de echarme la culpa una y otra vez. No podíamos quedarnos en la casa, estábamos muy vulnerables aquí, no había lugar seguro, todos terminaríamos muriendo, quizás me lo merezca.

De regreso en el auto, nadie preguntó nada, la llovizna comenzó a caer empapando los cristales.

— En unas horas caerá la noche—dice EunWoo—¿Alguien más tiene una idea de a dónde ir?

Jimin se mueve en el asiento antes de hablar.

— Podríamos...ir a...mi casa.

— ¿Crees que podamos quedarnos allí?

— Quiero creer que sí—respira profundo.

...

La casa de Jimin es pequeña, el vecindario está solitario como los demás, hay una cerca de maderas altas rodeando dicha casa, sirve como protección, Jimin revisa la planta junto a la puerta de dicha cerca, de la tierra saca la llave para abrir. Jimin cierra con seguro de nuevo llevándonos al interior de su casa, todo se encuentra intacto como si nunca hubiera pasado una pandemia. EunWoo cubre las ventanas con las cortinas de inmediato al igual que MoonByul, la casa tiene luz milagrosamente.

— ¿Vives solo? —pregunta Wheein.

Tenía entendido que el chico vivía con sus padres.

— Vivía con mis padres un poco más lejos, esta casa era otra propiedad de ellos que me dejaron—sonríe tristemente quitándose el bolso.

— ¿Crees que ellos ya no estén en este mundo? —MoonByul lo mira.

— Mi madre tenía constantes dolores en sus manos y piernas, no creo que haya ido muy lejos, mi padre por otro lado...siempre la acompañaba—parpadea varias veces cuando sus ojos quieren dejar salir las lágrimas—En fin, siéntanse cómodos, arriba hay dos habitaciones y un baño.

— Dormiré en la sala—digo con desgano.

— Yo también—reprocho a EunWoo con la mirada, pero me ignora.

— Dormiremos todos en la sala entonces—MoonByul se sienta en el sofá.

— No—me opongo—Ustedes duerman arriba, yo dormiré aquí en la sala.

— No te quedarás solo—dicta EunWoo—No te dejaré solo, mucho menos en tu estado. Los chicos dormiremos en un cuarto y las chicas que duerman en otro—Jimin asiente—Aseguraremos las puertas y ventanas, ¿Tienes algo de madera?

— El ático no es muy grande, quizás consigas allí.

...

La lluvia cae a cántaros, EunWoo ha colocado tablas de madera en las ventanas, pero aun así las cubre con las cortinas, la puerta de la casa está asegurada con llave, nadie entra ni sale. Todos hemos tomado un baño quitándonos un peso de encima, hace algo de frío, ningún canal puede verse en la televisión, en cambio, Jimin tiene algunas películas, pero nadie tiene ganas de ver una, empezando por mí.

Sin apetito me voy a la habitación, hay una cama matrimonial que en un pasado perteneció a los padres del chico, Jimin dormiría a la izquierda y yo a la derecha, EunWoo se recostaría en una colchoneta que encontró en el ático, apenas me recuesto en la cama luego de quitarme los zapatos y Jimin aparece con una taza en su mano.

— No tengo hambre.

— No es comida—deja la taza en la mesa de noche—Es un té que usaba mi madre para relajar el cuerpo y poder dormir mejor—sonríe un poco. En sus ojos también se nota cansancio, decepción y preocupación—Lamento lo de GaRin, YoonGi.

Respiro profundo quedando sentado en la cama. Jimin toma asiento jugando con sus manos, tiene un suéter ancho que le queda largo en las mangas.

— Yo lamento lo de NaYeon—al nombrarla noto como se tensa—Lo siento.

— Hemos hecho muchas cosas malas, ¿No es así? —me mira—Si regresáramos en el tiempo tú hubieras evitado que le inyectaran eso a GaRin y yo hubiera hecho que NaYeon subiera primero al auto—luego se corrige—No, hubiera evitado que fuéramos a ese lugar.

— No podías evitarlo de todos modos, ambos fueron por separado.

— Sé que viste a los padres de GaRin—tomo la taza con cuidado al estar caliente, el líquido es oscuro, pero huele a canela—¿Eran zombis?

— Fueron la cena de los zombis—comento algo irónico—Sigo sin poder creer que el gobierno quiera que el contagio se corra, ¿Pretenden contagiar a todo el país y quedarse sin cura?

— Creo que han dado por sentado que no hay cura en Corea del Sur.

— ¿Y cómo están tan seguros? —niego con la cabeza—¿Y si uno de nosotros somos la cura?

— No creo que nadie tenga las ganas de dejar que un zombi nos muerda para comprobarlo—y lo que dice es cierto.

— ¿No quieres morir?

— ¿Qué?

— No tenemos nada porque luchar, Jimin.

— Sigo viviendo porque pienso en NaYeon.

— No, sigues viviendo porque tienes miedo de morir por esas cosas.

— ¿Y tú no tienes miedo? —ladea su cabeza—¿Quieres rendirte? ¿Dejar que te muerdan? Entiendo el dolor que debes traer encima, todos hemos perdido a la persona que queríamos, perdimos familias, novias...—respira—Piensa en GaRin y Heize, ¿Ellas querrían eso para ti?

Recuerdo el final de la carta de GaRin.

"Cuídate y sigue sobreviviendo"

Sigue sobreviviendo.

— ¿Viviremos huyendo?

— Esto no debe ser eterno.

— ¿Crees que si aparece la cura van a colocárnosla? Vimos cómo murieron muchos en ese refugio—señalo—Perdimos, Jimin, seguir luchando no vale la pena.

Él guarda silencio, no sé qué piensa, pero yo no quiero seguir, no tiene sentido seguir, estamos jodidos de todos modos, lo perdimos todo.

— Los humanos somos así, nos aferramos a la sobrevivencia—se levanta—Buenas noches, YoonGi.

...

Corro por un pasillo intentando alcanzar a GaRin y Heize, mientras corren ríen con gracia. Cuando despierto todo está oscuro, mi corazón late rápido, mi frente se encuentra sudorosa, aparto las gotitas mirando a Jimin dormido a mi lado, está dándome la espalda mientras respira lento. Con cuidado me incorporo en la cama distinguiendo a EunWoo en la colchoneta, el mango de su pistola sobresale debajo de su almohada, la manta cubre hasta su pecho dejando sus brazos a la vista. Todo está en real silencio.

Sólo se escuchan las respiraciones de los demás.

Sin hacer ruido me coloco mis zapatos, salgo de la habitación dirigiéndome a la cocina por algo de agua, no quiero encender las luces porque llamaría la atención. Mientras bebo del vaso mi mente vuelve a caer en blanco, vuelvo a preguntarme si vale la pena seguir viviendo en esta situación. Lo que comenzó en unos días a la cabaña terminó como una película de zombis, éramos un grupo grande que fue dividiéndose poco a poco.

La primera en morir fue Heize.

¿Habría cambiado mucho si ese viaje no hubiera ocurrido?

Camino a la ventana que está al costado de la puerta, esa que permite ver hacia la cerca, veo entre las tablas notando todo oscuro, algunos faros de los postes están encendidos todavía, contengo el aire cuando una sombra se mueve en la cerca, ¿Es un zombi?

— ¿YoonGi? —doy un respingo. MoonByul se ha levantado y se acerca a mí, le indico que guarde silencio colocando un dedo en mis labios.

Regreso la atención a la ventana, no veo la sombra, intento mirar encontrando molestosas las tablas, MoonByul cubre su boca cuando aparece dicha sombra frente a nosotros, podemos distinguir parte del rostro y...

Es TaeHyung.

El próximo es el antepenúltimo