HwaSa no soportó el parto, lo intentó y pudo tener a su bebé, pero cuando NamJoon notó que sus ojos estaban cerrados supo que no era normal. Ella no estaba respirando, el bebé es un niño saludable según Solar, a pesar de la situación y el estrés que tuvo su madre durante el embarazo había nacido sin problema. El problema es su llanto, han pasado tres días desde que llegó a este mundo, cuando llora las chicas hacen cualquier cosa para distraerlo, sorprendentemente TaeHyung parece tener un encanto con los niños, NamJoon tiene mucho que aprender, no lo he visto atender a su hijo ni una sola vez, pero Hoseok dice que suele cargarlo para dormirlo.

NamJoon le había dado el nombre que él y HwaSa habían pensado, Kim YoHan.

El vecindario luce solitario, pero hay algunos zombis cerca que rondan principalmente en la noche, yo tenía mis propios planes y no pensaba quedarme.

— ¿Estás seguro de esto? —Jimin me mira con duda, todos estamos en la sala sentados en el suelo, la luz del día entra por las ventanas—Es peligroso.

— Más peligroso será que ese bebé atraiga un zombi—señalo. El que no está es NamJoon quien seguramente duerme aún con su bebé—Cada quien toma su rumbo y yo tomaré el mío.

— ¿Qué buscarás en Seúl? —TaeHyung me mira—No hay nada allí.

— YoonGi—EunWoo me mira fijamente, sé que está dudoso—No tienes que irte, pero tampoco tienes que quedarte.

— Pero es una locura—Hoseok niega con la cabeza.

— Ir a Seúl en auto es peligroso—interviene Wheein—Piénsalo bien, ¿Por qué querrías regresar?

Todos quieren saber porque deseo regresar, pero no pretendo decirles. No tengo que decirles tampoco, sólo deben saber que me iré y punto.

...

He tomado un baño hace minutos, seco mi cabello con una toalla sentado en la cama, en la mesa de noche están las cartas que GaRin dejó y que EunWoo me entregó. No las había leído, de hecho, las había olvidado dejándolas para más tarde. Tomo el sobre abriéndolo, leo la primera hora con su letra.

Oppa:

Lamento tener que llegar a este punto, si estás leyendo esto es porque el virus pudo conmigo. Pensé que sería la cura, bueno, pensamos que sería la cura, todos lo hicieron y pasó lo que pasó debido a ello. No te mentiré, estoy decepcionada conmigo misma por ni siquiera ser capaz de ayudar con algo tan sencillo como soportar el virus, le dije a EunWoo que no te dejara entrar y tampoco a JungKook, estoy enfermando, estoy muriendo más rápido de lo que tenía en mente.

Tenías razón, oppa. El virus actúa de manera diferente en cada cuerpo, no todos los zombis son iguales, todos tienen un tiempo diferente de transformación y lamentablemente el mío está siendo rápido.

No te sientas mal, hiciste lo que pudiste, llegué lejos gracias a ti, jamás imaginé que confiaría tanto en el novio de mi hermana, intento aguantar, pero el malestar está derrumbándome, ya no quiero comer comida, mi cuerpo comienza a desear carne humana, no sé si estas personas esperan el momento justo para dispararme, espero que lo hagan, no quiero que seas tú quien tome esa decisión.

Gracias, YoonGi oppa, por protegerme y cuidarme. Heize estaría muy orgullosa de ti, así como yo lo estoy. Lamento seguir sintiendo algo por JungKook, sé que lo detestas, sé que lo que hizo estuvo mal, pero fue una persona importante para mí.

No puedo apagar mis emociones en un instante.

Cuídate e intenta seguir sobreviviendo.

Lee GaRin.

Aparto las lágrimas de mis mejillas teniendo dos hojas más por leer, no están dedicadas para mí, cada una tiene un nombre. JungKook y EunWoo. Unos toques a la puerta me hacen voltear en esa dirección, el chico rubio que viste con pantalones militares y camisa blanca se acerca sentándose a mi lado, nota lo que tengo en mis manos.

— Hay una para ti—le entrego la hoja con su nombre—Y otra para el idiota de JungKook.

— Pensé que sólo escribió para ti—suspira—Escucha...

— Voy a irme no importa lo que digan.

EunWoo guarda silencio, es evidente que venía a intentar cambiar mi opinión.

— ¿Crees que estarás mejor solo?

— Probablemente.

— ¿A dónde irás cuando llegues allá?

— A cualquier lugar—le resto importancia mirando las letras de GaRin—Guardaré algunas cosas hoy, buscaré un bolso, me iré por la mañana.

— ¿Con qué auto? —ante mi silencio sonríe ladinamente—Puedo llevarte hasta el tren.

— ¿Crees que funcione? No hay luz en gran parte de la ciudad...

— No lo sabemos si no nos acercamos, MoonByul te extrañará, pensé que era tu amiga.

— Estará bien.

— Todos hemos perdido a alguien, ¿No es así? —lo miro. Luce melancólico de repente—Dejé de recibir noticias sobre mi familia cuatro meses después de que inició el virus—comenta—Poco a poco quedamos solos.

— Lo siento.

— ¿Y tu familia? Además de GaRin.

— Nunca me llevé con ellos, desde los dieciocho estoy solo. Nací en Daegu...

— ¿Y ni siquiera te llamaron cuando este virus comenzó?

— No—respondo—Podrás imaginarte lo unida que es mi familia—cierro mi carta doblándola muy bien—Lo más cercano que sentí a una familia fueron los padres de mi prometida, la hermana de GaRin.

— ¿Siempre fueron buenos contigo?

— Sí, incluso cuando regresamos a casa luego de esos zombis en la carretera ellos...fueron buenos—miro al suelo. GaRin también lo perdió todo sin poder hacer nada—En fin, guardaré algunas cosas.

...

He conseguido un bolso no muy grande, pero me permite llevar lo justo, guardo algo de ropa que he conseguido de mi talla, puedo escuchar el llanto de YoHan pasadas las horas, guardo algunas chaquetas por si la noche se torna muy fría, mientras miro las prendas que guardo alguien toca la puerta, MoonByul sonríe un poco acercándose a la cama donde toma asiento. Su cabello castaño es completamente liso, lo tiene atado en una coleta alta pero algunos mechones se escapan.

— ¿Cómo llegarás a Seúl?

— EunWoo me llevará a la estación de trenes.

— ¿Crees que esté funcionando?

— Lo mismo dije, pero no pierdo nada con intentar—cierro mi bolso. Echo un vistazo a la habitación por si olvido algo—Mañana por la mañana me iré.

— YoonGi—volteo a verla—¿Qué esperas...encontrar allá? —aclara su garganta luciendo un tanto...nerviosa—Insistes mucho en ir.

— Nunca me ha gustado Daegu—me excuso. Ella parece pensarlo—Y no me siento cómodo en el grupo.

— Yo tampoco—responde—TaeHyung no es de mi agrado, no después de lo que hizo a GaRin y NamJoon tampoco me agrada mucho—hace una pausa—Lamento que haya perdido a su novia, pero si ellos reaccionaron así con GaRin una vez...pueden hacerlo de nuevo—me mira—En resumen, no me apetece estar entre traidores.

La entiendo un poco.

— ¿Te irás también?

— Me iré contigo—levanto mis cejas cruzándome de brazos—Tú lo dijiste, no tengo nada que perder.

— Solar y Wheein te extrañarán.

— Ellas estarán bien sin mí, Solar le ha tomado mucho cariño al bebé en poco tiempo, querrá quedarse a su lado, Wheein en cambio...—hace una mueca—Creo que le gusta EunWoo.

— ¿No crees que sería más seguro para ti quedarte aquí?

— Lo mismo te pregunto.

— MoonByul...

— No me digas que piense en las chicas, ya te di la razón de porque no quiero quedarme, al igual que tú me siento incómoda—se levanta de la cama—En un momento como este es mejor no andar tan solo, ¿No crees?

Me mantengo sosteniendo su mirada por unos minutos, no soy nadie para decirle que no. Si ella quiere venir sabe a lo que se enfrentará.

— Está bien, guarda lo que puedas, mañana por la mañana saldremos.