[POV Soo Bin.]

No sabía por qué estaba ahí, al fin y al cabo, no es como si fuéramos grandes amigos, al menos no para mí, pero yo nunca faltaba a mi palabra... Nunca, y aquella palabra resonó curiosa en mi cabeza.

Odiaba usar trajes pues siempre me picaba la etiqueta de estos, había intentado varias veces quitársela, pero era bastante difícil, y yo bastante flojo.

Suspire lentamente, tan lento que incluso yo me desespere y termine soltando el aire de golpe, por el momento, ninguno de mis conocidos había llegado y es que sí, por alguna extraña razón, teníamos amigos en común, para ser más exacto, mi mejor amigo, Beom Gyu.

Volví a tomar el vaso de refresco que estaba frente a mí en una pequeña mesa de centro, mientras intentaba buscar con la mirada a los anfitriones, Woo Young y su prometido, al cual aun no conocía, Woo Young era un buen chico, delgado, alto, de piel pálida y de porcelana de facciones delicadas pero su carácter era fuerte y un poco rebelde.

| Flashback |

Habíamos terminado hablando, porque ninguno de los dos había encontrado pareja para un trabajo de historia que hacíamos en la universidad, así fue como nos conocimos, aunque, las primeras horas estuve a punto de tomarlo por el cuello y lanzarlo muy lejos, pues el niño se la pasaba hablando de lo lindo que era su novio y de lo mucho que se amaban, decidí descartar la idea pues se veía que era de los chicos que estudiaban y no me dejarían todo el trabajo.

Al final, luego de entregar el trabajo y obtener puntos extras por lo bien que lo habíamos hecho, me encontré desayunando con Woo Young algunas veces a la semana, hasta que un día por casualidad, descubrimos que... Para ambos nuestro mejor amigo era Beom Gyu, cosa que no me agrado en lo absoluto, no... Era celoso, mucho en realidad, aunque nunca lo demostraba, odiaba compartir a mis amigos, en especial a ese lindo chico de ojos juguetones. La razón era muy simple, alguna vez hubo atracción entre nosotros.

— Ayer salí con Beom Gyu, me invito a comer hamburguesas porque me dijo que pasaba demasiado tiempo con mi novio y lo tenía muy olvidado... Debimos haberte invitado Soo Bin.

—No hay problema, ayer estaba ocupado haciendo algunas cosas.

Mentira, había estado más aburrido que un gato en una jaula, había terminado viendo películas de vaqueros mientras me comía lo que sea que encontraba.

—¿Se la pasaron bien?

—Si, Beom Gyu es muy sobreprotector, ya sabes, le encanta estar acariciándome el cabello y molestándome con lo de mi novio. Yeon Jun se pone bastante celoso de él, es realmente lindo.

—¿Lindo? Yo no le veo lo lindo a los celos, temo que Beom Gyu se meta en problemas, así como es él de despistado.

—No lo hará, no es como si Yeon Jun fuera a golpearlo o algo parecido, simplemente me encanta llegar a casa y que me abrace tan fuerte mientras me dice que huelo a perfume de otro hombre y bueno... Ya sabes que pasa después.

—No era necesaria tanta información.

—Por cierto... Pronto tendremos nuestra fiesta de compromiso, ya hace más de tres meses que me pidió matrimonio y por mis estudios no hemos podido festejar.

—Ya veo. ¿En qué dices que trabaja?

—Es fotógrafo, de los mejores, ¡Dios! Sus fotografías son tan buenas que todos sus photobooks vuelan, ese hombre es perfecto.

—Si claro, nadie es perfecto Woo Young.

—¡Él sí! Pero es mío... Cuidadito y te atrevas siquiera a mirarlo Choi Soo Bin.

—¡Nunca lo haría!

Y aunque sus palabras fueron de broma, se sentía la advertencia verdadera tras ellas, para ser sincero, estaba realmente celoso, y no solo de él en específico, de todas las parejas en sí. Nunca había tenido suerte en eso del "amor", la primera vez que creí estar enamorado, mi novio me engaño con mi mejor amiga, luego de eso... Vino Yeo Sang, y de él es mejor no hablar.

| Presente |

Mi mano libre se deslizo por mi cabello, comprobando que este siguiera en perfecto estado, casi lo había comprobado cuando vi a Woo Young entrar con su caminar elegante, la gente comenzó a rodearlo y solo pude ver el cabello del que era ya su prometido, suspire y me puse de pie, como sea, tendría que ir a felicitarlos, quedarme un tiempo que se considerara prudente y luego disculparme para ir a mi departamento a perder el tiempo en algo... Necesitaba un trabajo de medio tiempo.

Mi caminar fue lento y la multitud fue disipándose, mis ojos estaban concentrados en el menor, el cual se había cortado el cabello y ahora parecía joven, hasta que sentí un escalofrió recorrerme el cuerpo, como cuando alguien te mira fijamente.

No tardé en encontrarme con unos profundos ojos negros mirándome fijamente, no podría describir si era una mirada amenazante o simplemente me observaba, solo que me quede completamente atrapado por ellos, como polilla que vuela hacia la luz, así me sentía, mis pies comenzaron a moverse solos, manteniendo el contacto visual con aquellos ojos profundos, siendo interrumpido por la mirada curiosa de Woo Young, trayendome de regreso a la realidad.

—Soo Bin, si no te conociera... Ya te hubiera golpeado por estar mirando así a mi prometido.

—¿Eh? ¿De qué hablas? Yo no veía a nadie.

—Si... Está bien, te creeré, ven, quiero presentarte a mi prometido.

No dije nada más y seguí al menor hasta donde se encontraba su prometido, con mi vista al suelo, para evitar malos entendidos.

—Amor~ te presento a mi amigo Soo Bin, es mi compañero en clase de historia, Soo Bin te presento a mi prometido, el señor perfecto Choi Yeon Jun.

—Un gusto, ignora a este niñato, no soy perfecto ni soy señor, puedes decirme Yeon Jun.

Me estiro su mano y yo dude unos segundos antes de tomarla, por alguna extraña razón, mis manos estaban sudorosas y frías, así que rece porque no lo notara. Sus manos eran tan suaves y cálidas, que comenzaba a entender el porqué el menor iba por ahí pavoneándose al presumir de su ahora prometido, cuando creí que era suficiente tiempo, intente quitar mi mano, pero él seguía sosteniéndola, a Woo Young lo jalo una señora de mejillas sonrojadas por el alcohol y Yeon Jun suspiró manteniendo una sonrisa de diversión en el rostro.

—El tardara, ¿Quieres ir a sentarte un rato? Realmente no conozco a nadie de aquí y eres amigo de Woo Young, así que creo podemos llevarnos bien.

Asentí sin darle muchas vueltas, girandome para dirigirme a la enorme sala de estar a sentarme, fue entonces, cuando note que seguía sosteniendo mi mano, pero la soltó lentamente y yo solo pude hacer como que no había notado nada.

Poco a poco fuimos abriéndonos paso entre las personas hasta que llegamos a nuestro destino, el departamento donde vivían era realmente grande y estaba en una buena zona, obviamente pertenecía a Yeon Jun, ¡genial! Realmente parecía alguien perfecto. Me senté en el sofá cruzando mis piernas, esperando que Yeon Jun se sentara frente a mí, pero fue directo a sentarse a mi lado, ese hombre tenía una mirada que podría poner nervioso a cualquiera, pero decidí ver al frente.

—Y bien... ¿Soo Bin cierto?

—Si, ese es mi nombre.

—Soo Bin, me gusta... ¿Cuántos años tienes Soo Bin?

—Diecinueve... Recién voy a cumplir los veinte en diciembre de este año.

—Ya veo...

Una sonrisa bastante extraña se dibujo en su perfecto rostro.

—¿Cuántos años tienes tu?

—Veinte.

—Tenemos la misma edad solo soy menor por meses, se siente bien no usar honoríficos.

El solo rió por lo bajo, su voz tenía algo que me gustaba, algo que me atrapaba y me erizaba la piel cada que pronunciaba mi nombre, suspire mientras acomodaba mi cabello.

—Soo Bin, vayamos al balcón ¿si?, me siento un poco asfixiado entre tantas personas.

—Claro... Yo te sigo.

Él se levantó y comenzó a caminar frente a mí, mis ojos se perdieron en la delicada zona de su nuca, ahí donde su cabello terminaba y comenzaba su blanca piel, una enorme necesidad de acariciarla me invadió de pronto, tanto que mis manos comenzaron a picar y tal vez si hubiera estado más atento, hubiera podido esquivar a aquel chico y evitar que derramara toda su bebida en mi traje, ahora todos nos miraban con curiosidad.

—Lo siento, creí que me habías visto.

—No te preocupes, iba distraído, no hay problema.

—De verdad lo siento.

Hizo una pequeña reverencia y se fue a perder entre la gente, la cual perdió su interés en nosotros casi de inmediato, esa mancha no se quitaría de mi camisa ni de chiste, aun así intente limpiarla con un pañuelo que llevaba, hasta que alguien me tomo por el brazo.

—Anda, vamos a secar eso, te resfriaras si te lo dejas.

—Gracias, Yeon Jun.

Y lo seguí sin poner resistencia, ¿Qué rayos pasaba conmigo?, su mano rodeando mi muñeca, era una sensación agradable, aunque no tocaba directamente mi piel esta se estremecía y sabía que algo de verdad andaba mal en mí.

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Nueva adaptación!!! ❤🎉

Espero realmente les guste, en lo personal para mí es una historia que había leído hace ya mucho tiempo y me gustó mucho!! ❤❤

Nos vemos el viernes!! ❤❤ Gracias por todo su apoyo!!! 💖