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D-DAY.

Mi semblante sombrío no pasó desapercibido por Yoon Gi, teníamos que editar varias fotos y yo seguía corrigiendo el mismo error una y otra vez, Yoon Gi soltó un fuerte suspiró y luego de jalar mi silla y girarla para que quedará frente a él me tomó por los hombros y me agitó.

ㅡSi tú no le pides a Soo Bin que vuelva, lo haré yo Yeon Jun, necesito que terminemos esto hoy y en las dos horas que has estado ahí sentado, no haz hecho nada.

ㅡSoo Bin regresó...

Yoon Gi se atraganto con su propia saliva, casi escupiendome en la cara cuando tosió, tuve que darle agua para que se recuperara, él jaló su silla y se sentó frente a mí.

ㅡ¿Y CUÁNDO MIERDA PENSABAS DECIRMELO?

ㅡDurante la comida.

ㅡPues vayamos a comer ahora.

Yeon Jun me tomó de la muñeca y luego de pedirle a Yun que siguiera editando, ambos salimos de ahí hacia nuestro restaurante favorito. Mientras esperábamos, Yoon Gi me hizo contarle todo con lujo de detalle, él disfrutaba demasiado ese tipo de información, le gustaba saberlo todo, no me interrumpió hasta que terminé de hablar.

ㅡAhora solo tengo una semana para salir de ahí.

ㅡVaya... es más complicado de lo que imaginé, un hijo es algo bastante delicado, no es como que puedas simplemente llegar y querer separarlo de su papá, sin embargo, sigo creyendo que Soo Bin y tú deberían estar juntos. Por otro lado, no te preocupes por eso de mudarte, la parte del estudio de mi casa está libre, puedes ir ahí cuando quieras, no es muy grande pero puede servirte.

ㅡGracias amigo, sonará demasiado cursi pero... no sé qué haría sin ti.

ㅡYa sé que me amas.

ㅡIdiota.

ㅡ Imbécil.

Pasamos el resto de la comida y del día pensando en qué hacer, Yoon Gi se tomaba bastante en serio todo aquello y realmente se lo agradecía, Yun de había ido a hacer unas entregas, así que solo quedábamos él y yo, aún teníamos mucho trabajo por hacer, cerca de las siete, Yoon Gi por fin se rindió con terminar todo ese día, era divertido que él dijera aquello, pues él era el jefe. Cuando Yun regresó de hacer las entregas, Yoon Gi me miró y sonrió de oreja a oreja.

ㅡVayamos por un trago.

ㅡMe parece una idea perfecta, estoy cansado de entregar fotos.

ㅡYo también me apunto, no quiero llegar aún a casa.

ㅡEntonces vayamos.

Una caso tras otro fueron acumulándose en la mesa, tan rápido como la mesera se los llevaba, eran vaciados, al parecer todos teníamos algún problema amoroso, me daba miedo preguntarle a Yun, pues sabía que la causa de su decepción amorosa era yo. Sin embargo, no tenía ni la más mínima idea de lo que le pasaba a Yoon Gi y como no había querido decirme luego de insistirle, decidí dejar de hacerlo y esperar a que él quisiera hablar.

Conforme el tiempo pasaba, mi estado de ánimo iba decayendo, de vez en cuando las lágrimas escapaban de mis mejillas, siendo incapaz de contenerlas más. No sabía que hacer, a pesar de haberlo hablado con Yoon Gi y buscar varias opciones, mi conclusión siempre era la misma, Soo Bin merecía ser feliz, yo no era nadie para arrebatarle esa felicidad, pero al mismo tiempo quería luchar por él, enmendar todos mis errores del pasado, hacerle saber lo que sentía, pero Soo Bin estaba casado, Soo Bin tenía un hijo y lo más importante, Soo Bin era feliz.

No podía simplemente llegar y arruinar aquello, no tenía ningún derecho, lo amaba de verdad y estaba dispuesto a sacrificar mi felicidad por la suya, pero aquella jodida vocecita en mi cabeza me decía que lo intentara una vez más, algo que me estaba volviendo loco.

Había notado que Soo Bin había quitado todas las fotos donde salíamos él y yo, había varias por toda la casa y ese día al despertar, fue una de las primeras cosas que noté pero no dije absolutamente nada, después de todo... era su casa, y suponía que todas ellas le traían terribles recuerdos al más bajo. Esa debía ser señal suficiente para darme cuenta de que él no me quería más en su vida, pero mi cerebro parecía no querer entender.

Ver nuevamente a Soo Bin me hizo confirmar lo que muy tarde acepté, amaba a Soo Bin, lo amaba de verdad y solo quería todo lo bueno del mundo para él, obviamente aquello no me incluía.

No supe cómo ni cuando, pero de pronto me encontraba parado frente a la puerta de mi apartamento, alguien me sostenía y me decía cosas que no podía entender.

ㅡPor favor Yeon Jun, dime cuál es la llave.

ㅡNo tengo llaves, desaparecieron.

ㅡYeon Jun las tengo yo.

ㅡTú te... las robaste.

ㅡYeon Jun por favor.

Me sentía flotando en una nube, todo daba vueltas y frente a mi apareció Soo Bin, me lancé sobre él y lo próximo que supe fue que odiaba el agua fría, odiaba ser tan débil, odiaba llorar, odiaba ver llorar a Soo Bin.

—Yeon Jun, no llores por favor, todo está bien, no estoy enojado, pero ¿por qué no me buscaste?, estuve esperando por ti y nunca llegaste, ¿por qué fuiste tan cruel la última vez que nos vimos?, me lastimaste demasiado, tuve que seguir con mi vida, tuve que seguir sin ti... pero no te odio.

Desperté con un horrible dolor de cabeza, había tenido un extraño sueño, uno donde Soo Bin me decía que no me odiaba, quería volver a dormir, quería seguir soñando con ello, pero el ruido en el apartamento me impediría volver a hacerlo. Me dolía el cuello también, había dormido mal, muy mal. El aroma a comida llegó a mi nariz, pero no se me antojo mucho, me estiré y levanté lentamente, dándome cuenta de que estaba en la habitación, Soo Bin había improvisado una cama en el suelo con varias cobijas, ahí la razón del porque me dolía todo, no estaba acostumbrado a dormir en el suelo, pero sabía que Gun no lo había hecho con malas intenciones, seguramente tenía miedo de que fuera a caerme del sofá.

Podía escuchar a Kai cantando alguna canción infantil, me puse de pie y noté que traía el pijama puesto, comenzaba a sentirme jodidamente avergonzado, Soo Bin me había tenido que cambiar y soportar mi olor a alcohol, quería gritar, quería desaparecer, ¿habría dicho alguna estupidez mientras estaba ebrio?, intenté hacer memoria, pero ni siquiera recordaba cómo había llegado al apartamento.

Me cambié y salí de la habitación con mucho cuidado, quería pasar desapercibido, pero tan pronto abrí la puerta de la habitación, todas las miradas estuvieron sobre mí, Kai, Soo Bin y Yuna dejaron lo que estaban haciendo y se quedaron mirándome lo que me pareció una eternidad. Soo Bin me miraba con tal seriedad, que comenzaba a creer que realmente había hecho o dicho alguna estupidez.

—Bébelo, te ayudara para la resaca.

Soo Bin señalo un vaso con un líquido de color raro, le di las gracias por tal molestia, aunque realmente no quería beberlo, pero así lo hice, porque no quería que Soo Bin se enojara.

—¡Buenos días!

Yuna me saludo y sentí que me había gritado, mi cabeza punzo y aquello solo hizo más difícil que me terminara el vaso con aquel líquido extraño, que igual que su aspecto, sabía terrible.

ㅡBuenos días...

ㅡUy, debió estar muy buena la fiesta para que Soo Bin tenga que prepararte su bebida especial.

ㅡSi...

ㅡLo sé, Yeon Jun oppa, yo también lo he bebido.

Me dió unas palmadas en la espalda y casi escupo lo que acababa de beber, como pude me lo tragué y fui directamente a la cocina y tomarme una bebida energética, intentando borrar el sabor de mi boca.

Soo Bin se despidió de todos, ni siquiera volteó a verme, definitivamente la había cagado, pero no siquiera sabía de qué disculparme, intentaría sacarle la información más tarde.

Pronto fue mi turno de irme, Kai me abrazo como el día anterior y luego siguió jugando, si bien, la bebida de Soo Bin me había ayudado mucho, el dolor de cabeza no se me quitaba con nada, así que ese día en el trabajo fue un infierno para todos, por eso cuando Yoon Gi nos dejó ir una hora antes, Yun y yo se lo agradecimos. Cuando llegué a casa, el apartamento estaba vacío, en la mesa había una nota de Yuna, habían ido al parque y Soo Bin los alcanzaría allá, así que aproveche la oportunidad para preparar algo de comer, así podría disculparme por todas las molestias que había causado.

Escuché la puerta abrirse justo cuando había terminado, me recargue en el marco de la puerta y sonreí cuando Kai corrió a abrazarme, lo cargué y besé su mejilla.

ㅡLávense las manos.

ㅡNo debiste molestarte, Yeon Jun.

ㅡNo es ninguna molestia, además... ayer te hice pasar un mal momento y Soo Bin... de verdad lo siento, no volverá a pasar.

—Está bien, no te disculpes, no hay problema, sé que no se repetirá porque pronto te mudarás.

—Si...

No pude decir nada más por el nudo que se formo en mi garganta, las palabras de Soo Bin sonaron tan frías que sentí mis ojos humedecerse, bajé a Kai para que fuera con Soo Bin a lavarse las manos y aproveché para ir a servir. La comida estaba bastante decente, pero Soo Bin no dijo nada al respecto, era la primera vez que cocinaba para alguien, no podía decir que era un experto, pero me defendía. Sin embargo, el nudo en mi garganta y las palabras de Soo Bin rondando en mi cabeza, me hicieron imposible comer todo lo que había en mi plato, así que me rendí y simplemente recogí los platos cuando todos hubieron terminado.

La semana había pasado volando, al contrario de lo que creí, mi relación con Soo Bin se volvió más y más distante, apenas nos veíamos por el trabajo y Soo Bin estaba más serio de lo normal, incluso cortante. Mis maletas ya estaban hechas, luego regresaría con Yoon Gi para llevarme mis pocas pertenencias que no entraron en las maletas. Era domingo, así que ni Soo Bin ni yo habíamos ido a trabajar, yo me mudaria al día siguiente, era bastante incómodo estar en la misma habitación con Soo Bin, pues por más que intentaba sacarle plática, él se limitaba a responder con si o no, así que me di por vencido y me puse a jugar con Kai, todo había terminado.

No podía negar que me había terminado encariñado de Kai, era un niño adorable y muy lindo, sin embargo, no había podido evitar sentirme celoso cuando lo vi corriendo de un lado a otro, ayudando a arreglar todo para Min Gyu, su papá, Soo Bin también se veía entusiasmado, yo solo quería desaparecer. Había sido bonito cuando una vez, Kai me había llamado papi por accidente, pero Soo Bin se disculpó de inmediato y le dijo a Huening Kai que no volviera a llamarme así nunca, aquello me había dolido demasiado, pero solo pude sonreír y dejarlo pasar.

Era obvio que no me iba a quedar a ver tal escena, maldecia mi mala suerte por no haber podido mudarme ese día, pues Yoon Gi aún no desocupaba el estudio y tenía material delicado que debía mover. Sabía gracias a Yuna que el papá de Huening Kai había tenido que ir a Corea por el trabajo, así que Min Gyu regresaría ese día a las cinco de la tarde, eran las cuatro y sabía que era tiempo de irme por ahí a beber algo.

Me puse de pie y fui por mi chaqueta, Kai me miró extrañado y se acercó a mi, tiró de mi chaqueta y me agaché cuando me llamó con su manita.

—Yeon, ¿no veras a mi papi?

—Lo siento Huening, debo hacer algunas cosas, pero diviértete mucho con tu papá, ¿sí?

El pequeño asintió y se fue cabizbajo, me rompió el corazón verlo así, me sentía tan mal, pero no creía que mi corazón pudiera soportar tanto.

Caminé hacia la puerta y cuando la abrí, di un pequeño brinco al encontrarme con un chico aún más alto que yo y bastante Guapo, estaba a punto de tocar, me sonrió un poco apenado y antes de que pudiera decir palabra alguna, la vocecita de Huening Kai nos interrumpió.

—¡¡¡Papi!!!

El pequeño Kai corrió hacia el desconocido y yo casi lo atrapo para decirle que no se trataba de su papá, que Min Gyu aún no llegaba, pero el chico se agacho a la altura del pequeño y lo cargo girando con él.

—Mi amor, ¿te has portado bien?

—Shi, Yeon me ha cuidado y enseñado a dibujar mariposas.

—¿Yeon?

Sentía que estaba viendo todo aquello desde afuera de mi cuerpo, no entendía absolutamente nada, ¿por qué Kai le decía papi a aquella persona?, ¿era tal vez la nueva pareja de Soo Bin?, pero... ¿y Min Gyu?

Soo Bin salió de la cocina y sonrió al ver a aquel chico parado aún en la puerta.

—Woo Sik, pasa, ¿no llegabas a las cinco?

—Mi vuelo se adelanto, en realidad extrañaba mucho a Kai, ¿Lia aún no llega?

—No, me dijo que tal vez su vuelo se retrase, está nevando en Londres y no sabe si saldrá a tiempo.

—Ya veo, am... ¿Quién es él?

—¡Oh cierto! Woo Sik, él es un conocido, Yeon Jun, él es el esposo de mi hermana Lia, Woo Sik.

—Papi, quiero ir al baño.

Dijo el pequeño estirándole los brazos a Soo Bin, el cual lo cargo con gusto y comenzó a caminar hacia el baño.

—¡Jajajajaja! ¿Aún no se le quita esa maña de llamarte papá?, le he dicho mil veces que eres su tío, pero sigue sin saber pronunciarlo, así que oficialmente te convirtió en su segundo padre, a Lia le mata de risa eso, dice que es extraño ver a un niño con otro niño.

—¡Yah! Les recuerdo que soy mayor que ustedes, Yeon Jun, ¿puedes ayudarle a Woo Sik a meter sus maletas?

Estaba en un trance, mi cerebro estaba intentando procesar todo aquello palabra por palabra, Huening Kai no era hijo de Soo Bin, Kai era hijo de su hermana, Soo Bin era su tío, Soo Bin no tenía un hijo, Soo Bin... ¡No tenía un hijo!

Sentí como si mi alma hubiera regresado a mi cuerpo, de pronto mi humor regresó, tomé gustoso las maletas de Woo Sik y las metí, lo hice pasar y le hablé como si fueramos amigos de toda la vida, ambos tuvimos conversaciones muy interesantes, él había viajado a lugares a los que yo también y teníamos muchas cosas para compartir, Soo Bin solo nos veía y rodaba los ojos.

ㅡCreí que tenías algo que hacer.

ㅡPuede esperar.

ㅡ¿Te quedarás a comer?

ㅡPor supuesto.

La comida me supo deliciosa, nada pudo borrar la sonrisa de mi rostro, cerca de las siete, Woo Sik y Kai se quedaron dormidos en el sofá, así que me puse a recoger la mesa con Soo Bin. Mientras yo lavaba los platos, Soo Bin los iba secando, aquella escena me remontó a tiempo atrás, cuando habíamos puesto final a nuestra relación pero cuando hubo una reunión en mi casa, no pudimos estar lejos el uno del otro, sin embargo esta vez era diferente, ya había aceptado mis sentimientos hacia Soo Bin y el saber que Soo Bin no tenía un bebé, cambiaba todo.

Soo Bin intentaba guardar el último plato, pero no alcanzaba, aquello me pareció adorable y me acerqué por atrás para ayudarle, tomando su mano entre la mía, lo sentí tensarse e intentar zafarse, así que solté su mano solo para colocar las mías a sus costados sobre la encimera, impidiéndole escapar.

—¿Cuándo pensabas decirme que Huening Kai no era tu hijo?

Soo Bin suspiró y se giró entre mis brazos, algo de lo que pude ver, se arrepintió cuando quedamos frente a frente, con escasos centímetros de separación, así que Soo Bin puso sus manos entre nosotros como un método de defensa.

—Es como un hijo para mi, además, nunca preguntaste, solo sacaste tus conclusiones.

—¿Ahora es mi culpa?

—¿No lo es?

—¿Sabes la estupidez que estaba a punto de hacer?

—No... ¿Por qué habría de saberlo?, Yeon Jun, ni siquiera sé porque estas tan enojado por esto, nosotros ya no...

—Iba a rendirme, estaba a punto de rendirme contigo, iba a dejarte ir de nuevo.

Soo Bin abrió los ojos y separó los labios por la sorpresa, su labio inferior comenzó a temblar y tuvo que morderlo para detener el temblor, pero aquello solo me provocaron unas terribles ganas de besarlo, pero estaba ahí por otra cosa, debía controlarme.

—Basta Yeon Jun, estoy cansado de tus juegos, ya no quiero más esto, se acabo, se acabo hace mucho tiempo.

Sin poder contenerme más, tomé a Soo Bin entre mis brazos y lo abracé con fuerza, él intentó separarse pero se lo impedí, se rindió fácilmente luego de darse cuenta de que no lo soltaría, sentía su cuerpo temblar entre mis brazos, no sabía si era una buena o mala señal, pero ya no me importaba, iba a recuperarlo, iba a enamorarlo, está vez iba a hacer todo correctamente.

—Voy a demostrarte que no eres solo un juego, voy a enamorarte de nuevo Soo Bin, no me vuelvas a dar otro susto así, mi corazón no podría soportarlo.

Me alejé de él sin soltarlo, solo para observas sus hermosos ojos y sus lindas mejillas sonrojadas, aprovechó mi descuido para escapar de mis brazos, lo dejé ir, pues no quería abrumarlo

—Suerte con eso, no será nada fácil, tuviste tu oportunidad y la dejaste ir, no soy un juguete y tampoco soy el Soo Bin que conociste antes, pero si estás empeñado a ello, no puedo hacer nada más que desearte suerte...

Sentí mi corazón acelerarse, Soo Bin me estaba dando permiso de conquistarlo de nuevo, esperé a que saliera de la cocina para brincar y celebrar en silencio, ya no me importaba si Min Gyu seguía con él, él no estaba ahí pero yo sí, está vez sería diferente, está vez le demostraría a Soo Bin lo mucho que me gustaba, le demostraría que de verdad lo amaba y lo enamorado que estaba de él, luego de cinco años, la vida volvía a sonreírme y de la mejor manera.

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