19. Obedecer al rey
Ares se sentía furioso, ¿Cómo su madre podía amar más Apolo si no era su hijo?, entro al reino ondeando su capa negra y apretando sus puños de lado. Comprendió ahora el gran inmenso que amos que tenía su padre hacia sus hermanos
¿Cómo se atrevía su padre a hablarle de respeto cuando ella fue capaz de hacerle eso a su madre? El joven príncipe subió los escalones blancos y miro en la planta alta como Annelise, la dama de compañía de su hermano se dirigía hacia él, la joven detuvo su andar al verlo e hizo una pequeña reverencia.
—Con permiso— murmuro la joven pasando a su lado.
Ares estiro su mano y la tomo del brazo obligándola a detenerse, la joven miro al piso sin tener el valor ni el permiso de ver al príncipe a los ojos, Ares coloco su mano sobre el mentón de la chica y la obligo a verlo.
—¿A dónde vas con tanta prisa?
—Su madre me ha pedido algunas cosas para su hermano majestad— contesto mirándolo, se removio un poco— Yo debo ir por ellas...
Ares la jalo del brazo acercándola a él, paso su mano sobre el rostro pálido y liso de la joven.
—Eres muy bonita— hablo, Annelisse se removió un poco incomoda ante el tacto del príncipe— ¿Por qué no pudiste ser para mí? ¿Por qué para mi hermano si ni siquiera es...?— se quedó callado sin terminar la pregunta y sonrió de lado, coloco una mano sobre la cintura de la chica— Puedo pagarte mejor que mi padre si me das lo que quiero.
—Debo ir por...
—Debes obedecer al rey y yo también soy tu rey.
Apreto su brazo y la jalo por los pasillos del castillo, Annelisse observo como la llevaba a su dormitorio y se removía intentando zafarse, Ares abrió la puerta y le sonrió.
—Por favor, yo no quiero.
—Pero yo sí, yo si quiero que...
—¡Ares!— le grito una voz en el pasillo.
Ares sin soltar a la joven miro como una silueta se acercaba a él, alzo el mentón y encaro a la persona que se colocó frente a él.
—Suéltala—ordeno Apolo.
—¿Vienes a ordenarme tu? — pregunto con burla y negó con la cabeza— Tú no eres nadie para ordenarme.
Apolo se le acerco.
—Aléjate de ella.
Apolo soltó una risa.
—El valor te hace dejar de tartamudear, que maravilloso— exclamo burlón Ares— A ver, di una frase más larga, di "Ares es mejor que yo".
Apolo se quedó callado sin dejarlo de ver, negó con la cabeza.
—No voy a caer en tus juegos— contesto y miro a Annelisse— Retírate por favor.
Ares sonrió de lado cuando la joven paso a su lado y volvió a ver a su hermano.
—Eres afortunado, si ella estuviera conmigo ya...
—No me interesa saber tus fantasías sexuales con las mujeres que se te atraviesan en tu camino— lo cayo, Ares observo con asombro como su hermano había hablado con fluidez— Aléjate de ella.
Apolo se dio media vuelta dejando a su hermano, Ares abrió las palmas de sus manos y miro sangre en ellas.
—Necesito saber cómo le has hecho para hablar sin trabarte, ¿Qué te has tomado o a que magia negra te has sometido para lograrlo? — le grito en el pasillo, espero que su hermano volteara a verlo— ¡Apolo!
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro