17. "AMOR, INVERCIONES Y DESPEDIDAS"
-1995-
Elena.
Han pasado tres años desde la muerte de Zack, y aunque poco a poco he intentado superarlo nada ha sido igual. Estuve yendo un tiempo al psicólogo pero creo que nada sirvió, solo obtenía los mismos intentos de motivación por parte del psicólogo y la gente me tachaba de loca por "necesitar un especialista par mis emociones".
No es que me importase la opinión de todos esos idiotas pero cuando eres una persona con depresión, no sabes cuánto te afectan los comentarios hasta que ya estás en el fondo.
Por suerte, creo que el distraerme en otras actividades y la compañía de mis amigos me ha ayudado un poco y creo que estoy saliendo de esta.
-Emm, hermanita –Habla Robert-.
Estábamos en la cafetería esperando a Cris ya que habíamos hecho la costumbre de desayunar todos los domingos en familia. Solo que esta vez Bob no pudo venir por un problema con su trabajo así que solo seriamos nosotros tres, yo siendo mal tercio claro.
Volteo a verlo esperando a que siga ya que desde que llegamos lo vi un poco nervioso y de inmediato supe que tenía que decirme algo pero tampoco lo quise presionar. Aunque si no me lo decía ya estaba por presionarlo.
-Quiero pedirle matrimonio a Cristina –Dice rápido que apenas le entiendo-.
No podía creer lo que estaba escuchando ¡mi hermano por fin se casaría! Pero... ¿si escuche bien?
-¿Que tú qué? –Más vale preguntar-.
-Quiero... pedirle matrimonio a Cristina –Hora de emocionarse-.
Me levanto del sillón que está pegado a la mesa, estaba por gritar pero me controle y me mantuve serena.
-¡Ya era hora! Casi diez años de noviazgo yo pensé que ya no se lo ibas a decir.
-¿Q-que...?
No puedo evitar acércame y sacudirlo de los hombros para liberar la emoción y al mismo tiempo la poca paciencia que le tengo a veces.
-Ay hermano, a veces no sé cómo fue que obtuviste pareja.
Se queda callado unos segundos mirándome con una expresión indescifrable y luego me abraza. Y yo, me quedo paralizada y desconcentrada.
-¿Estas bien? –Me pregunta luego de unos segundos-.
No entiendo a qué viene esto así que le respondo con un poco de duda.
-Si... ¿Por qué no estaría?
-¿Ya superaste lo de Zack?
Eso fue como un balde de agua fría.
La verdad he intentado olvidar todo lo que paso, pero es imposible. El hecho de que el me lo recuerde me da una punzada al corazón, pero tengo que ser lo suficiente fuerte para aguantar todo, aguantar esto.
-¡Claro! –Sonrió-. Bueno... no al cien –Digo sincera-. Pero ya se me controlar, tampoco es que no se vayan a casar por mí.
-¿Estas segura?
-Claro, no tienes que estar preocupado por mi todo el tiempo –Sonrió-. Aparte tú tienes que pensar ahora en Cris y el cómo le vas a decir.
-Pero tú eres mi hermana.
-Y ella tu futura esposa –Veo a lo lejos que Cris viene llegando-. Y mejor no discutas que ya viene el amor de tu vida.
-dos semanas después-
Cristina.
Al fin otro turno más terminado, estoy demasiado agotada.
Bueno me gustaría estar agotada hasta para pensar pero no puedo. Desde hace unos días Robi ha estado un poco distante conmigo, hasta siento que me está ignorando; ¿será que Elena sabrá algo?
-Elena... ¿Sabes por qué Robi ha estado distante conmigo esta semana? Tú lo vas mas así que siento que sabrías por qué –Comienzo a jugar con mis dedos-. ¿Sera que ya no me quiere? O tal vez... ¡¿O tal vez ya no quiere estar conmigo?!
-CRISTINA –Dice tomándome de las manos intentando calmarme-.
-¿Si?
-No pasara eso, tu tranquila.
-¿Cómo estas tan segura?
-Porque él me lo dijo –Dice segura-. Él me ha dicho que te ama demasiado.
Inmediatamente sé que me esconde algo.
-¿Tú me estas escondiendo algo? –Pregunto entrecerrando los ojos-.
-¡¿Qué?! ¡No, claro que no! –Dice evidentemente alterada-.
-¿Entonces por qué te pones nerviosa?
Veo que se lo piensa unos segundos y luego suspira derrotada.
-Bien, pero es que no te lo puedo contar porque es una sorpresa.
-¡¿Qué?!
-No insistas.
-PERO... ¿POR QUE? –Me levanto de la silla-.
-Porque si, así que tranquilita se ve más bonita la niña, ya siéntate.
Suspiro cansada ya que sé que nunca podre ganarle, así que me siento y decido cambiar de tema a uno mas interesante.
-Oye –Hago un baile de cejas-. ¿Y qué me cuentas de tu y Bob?
-¿A qué te refieres? –Pregunta confundida-.
-¡Ay vamos! Sabes de lo que hablo.
-La verdad, no –Dice despreocupada-.
-Pues que ustedes dos se verían súper bien juntos.
Quiero mucho a mi amiga, y la vi muy feliz con Zack. Pero desde su muerte ya no ha sido la misma y creo que un cambio de corazón (hablando en sentido figurado) sería lo mejor para ella.
-Aún no se si quiero comenzar otra relación Cris. Aparte a Bob yo lo veo como un hermano, lo quiero como quiero a Robert.
-¿Estas segura? –Entrecierro los ojos-.
-Si –Dice con simpleza-.
Me preocupa, pero la veo demasiado convencida de que no necesita una relación en estos momentos así que dejo de insistir.
Miro el Reloj y me doy cuenta que ya es hora de salir. Al fin veré a mi querido novio.
-Ya es hora de irnos.
-Cierto. ¿Nos vamos juntas?
-Claro.
-una semana después-
Okey, una cosa es que me gusten los vestidos cuando hace calor, pero... ¡¿Estando en mitad de otoño?!
-¿Por qué tengo que ponerme un vestido? –Le pregunto a Elena-.
-Porque es su aniversario. ¡Solo ponte el vestido y ya!
-Pero hace frio –Me quejo-. ¡¿Qué no recuerdas que yo soy fuego?!
-Cris –Dice en modo de advertencia-.
-Aparte... Me dijo que solo sería una cena –Me excuso-.
-Cristina ¿Qué ocurre?
-Puede... puede que no le tenga un regalo –Digo mientras me cubro la cara de la vergüenza-.
-¡Que!
-Okey no. Si le tengo regalo pero no sé si sea perfecto para él.
-A ver, ¿Podrías ser más específica? –Pregunta confundida-.
-Lo que pasa es que le hice un pastel, pero no sé si lo quiera comparado con semejante cena que me tiene preparada –Digo apenada-.
-Por supuesto que lo va a querer, ¡Dios, él te ama como a nadie cristina!
-Lo sé pero tal vez... esto no sea suficiente.
-Amiga –Me mira a los ojos-. Déjate de inseguridades y solo diviértete ¿Okey?
Después de pensarlo unos segundos solo asiento feliz y termino de arreglarme.
Al terminar solo bastaron unos minutos para que llegara Robert por mí e irnos a la cena. Al llegar, pude notar que era un restaurante un poco alejado pero con vista a la ciudad, era hermoso...
Luego de un rato de haber terminado de cenar nos quedamos en la terraza admirando más el pasaje.
-Amor –Llamo su atención-. Muchas gracias por la cena.
-¡Ay amor! -Sonríe con ilusión-. Gracias a ti por seguir a mi lado –Toma mis manos-. No sé qué haría sin ti –Besa mis manos mientras me mira a los ojos-.
Me quedo callada unos segundos y luego me atrevo a hablar.
-Robi, te hice un regalo –Agacho la cabeza para evitar que la vergüenza me invada-. Pero, a comparación de lo que tu hiciste creo que no es lo mejor para ti.
Robert.
Después de lo que me acaba de decir no puedo creer que aún no se haya dado cuenta que es lo más importante en mi vida y mi felicidad en carne propia. Por estas escenas es por lo cual siempre tengo la necesidad de que sea feliz a mi lado y se sienta segura, porque después de tanto años conociéndola, sé que es una chica que se hace la difícil y a primera vista se esfuerza por parecer dura, pero es la persona más adorable y tierna que he conocido. A pesar de su fuerte carácter y excelente fuerza, la quiero cuidar como se cuidan las lindas y pequeñas muñecas de porcelana, porque eso es para mí.
Y no digo que ella sea débil, sino que esa apariencia le ayuda a engañar a sus enemigos y así ella pueda mostrarse tal y como es, no me caben las palabras para definir lo perfecta que es para mí, sus defectos son mis favoritos que ya no los veo como defectos y sus virtudes son tantas que no me cabrían en las manos para contarlas. Estoy perdidamente enamorado de ella, tanto que da miedo, pero es miedo es el que me motiva a seguir con ella, porque la amo.
Cristina.
Después de unos segundos en silencio me armé de valor para mirarlo y me encontré con sus ojos verdes tan hermosos, tenían una mirada diferente, y no era mala, pero tampoco sabía que quería transmitir.
-Amor... Me encanta cualquier cosa que tú me des, no importa si es gigantesco o no, si es algo material o emocional. Lo que más me gusta es que sea tuyo, que tú me lo hayas dado porque me amas así como yo te amo –Toma mi cara-. Pero... lo que más quiero en la vida eres tú, con el simple hecho de existir me haces el hombre más feliz del mundo, y no lo digo porque sea algo cliché, sino que es lo que en verdad siento, es lo que viene de mi corazón y no me bastan las palabras para expresarte cuanto te amo.
Escuchar esas palabras tan hermosas de el hace que mi corazón lata como cuando era adolescente y mi primer amor me dijo un simple "Me gustas". Pero esto es diferente, es diferente porque él es el hombre que amo y por el cual daría mi vida.
Nunca creí volverme a enamorar después de tantas decepciones en el amor, pero desde que el llego a mi vida, estos han sido los siete años más felices de mi vida, en los que he aprendido a amar y amarme a mí misma, con todo y mis inseguridades.
-Cariño –Las lágrimas no tardan en salir así que me aferro a el-. Eres tan lindo conmigo... tan perfecto.
-Como tú, una perfección en persona, se merece esto y más...
Después de eso Robert me dijo que tenía otra sorpresa más preparada y yo pude evitar sentirme tan especial...
Llegamos a lo que parecía un campo con algunos árboles, la zona central estaba despejada y había un globo aerostático decorado con colores y luces.
-¡SORPRESA!
Me había quedado sin palabras, todo era tan hermoso que parecía la escena de una película romántica, así que lo único que pude decir fue:
-WOW...
-¡Feliz aniversario cariño! –Se acerca y me besa así que le sigo el beso-.
-¡Feliz aniversario! –Digo despegándome con una sonrisa en los labios-.
Robert.
Estoy tan emocionado que no puedo con los nervios.
-¿Con que un paseo en globo aerostático? –Me pregunta sonriendo-.
-Pero esa no es la sorpresa -Digo emocionado-.
-¿Ah no?
-Nop –Sonrió-. Si me permite bella dama, acompáñeme al globo.
Sonríe y me sigue hasta el globo, ya está todo listo, cada cosa preparada, solo queda su respuesta.
https://youtu.be/OukQDrJ7QRQ
Los nervios no ayudan mucho y temo que tal vez sean muy evidentes... Finalmente arriba reúno el valor para hablar pero las palabras se me quedan atoradas y en su lugar digo otra cosa.
-Oye Cris... -Trago saliva para evitar que mi garganta se seque más-. No le tienes miedo a las alturas, ¿Cierto? -¿Así o más tonto?-.
Se re y me toma de las manos.
-Tontito, ¿Qué es lo que te tiene en otro mundo?
Bien Robert, es tu momento. Ahora o nunca.
- Créeme tonto, o lunático tal vez –Respiro y me relajo-. Pero a veces te veo y pienso, no puedo entender cómo es posible, que ella aún no se dé cuenta de lo importante que es para mí vida, de lo feliz que me hace cuando estoy a su lado, que simplemente mi felicidad la veo en una persona y esa persona es ella –Tomo una de sus manos y le entrego un girasol, sus favoritos-. Por estas razones es por las que siempre tengo la necesidad de querer hacerte sentir feliz –Sonrió-. Pienso que no importa si no estás a mi lado, pero solo quiero verte feliz y que te sientas segura.
Que a lo largo de los años que he estado a tu lado me he dado cuenta, que te quieres mostrar como una persona fría y distante, pero eres todo lo contrario, conforme te voy conociendo, todas esas capas se caen, las murallas se derriban y finalmente, si lo ves desde mi punto de vista, conoces a la persona de la cuál ahora me encuentro perdidamente enamorado, porque es la persona más tierna que he conocido, ella sin darse cuenta es muy tierna y adorable, pero solo pocas personas ven ese lado suyo, y yo soy muy afortunado de poder ver ese lado. No todo de ella es perfecto; tiene un temperamento fuerte e intimidante, pero... a pesar de eso solo quiero que esté bien, quiero cuidarla como se cuidan la tazas dé cristal porque eso es para mí –Veo que lagrimas comienzan a caer de sus mejillas así que beso su frente y prosigo-. Una joya de cristal.
No te quiero decir que eres débil porque no lo eres. Eres una persona muy fuerte y valiente, no me salen las palabras para expresar lo perfecta que eres ante mis ojos, eres tan perfectamente imperfecta, que cuando no estoy a tu lado pasan los segundos, los minutos, las horas, los días, y no dejo de pensar en ti, en lo mucho que te extraño, que solo espero con ansias el día para volver a estar contigo. Para poder abrazar a la persona que me hizo perder la cabeza por tu me hiciste querer cambiar para bien, a ver el mundo desde otra perspectiva, estoy tan perdidamente enamorado de ti que puede llegar a ser un poco aterrador incluso para mí porque nunca me había pasado querer tanto a una persona que no sea mi familia por la que pondría su vida primero antes que la mía.
Ahora delante de mis ojos tengo a la persona que más amo con la cuál quiero que sea parte de mi vida –Veo cierto brillo en sus ojos, y no creo que sean solo lagrimas-. Y yo de la suya en un futuro –Me preparo para sacar el anillo-. Es por eso que he tomado la decisión de pedirte matrimonio –Me arrodillo y saco el anillo-. Porque eres mi todo, mi amor, mi vida, mi luz...
Espero ansioso su respuesta pero ella no para de llorar y eso me preocupa un poco. Me levanto y tomo delicadamente su cara entre mis manos lo cual provoca que ella llore más y yo me sienta desesperado.
-Amor, ¿Qué ocurre?
Tal vez... ella no se quiere casar conmigo.
-Acaso... no...
Cristina.
En toda mi vida, nunca me habían dicho algo tan hermoso, tan hermoso que me haga llorar. Estoy perdidamente enamorada de él, nunca me arrepentiré de decirlo. Robert es alguien que literal viene de otra dimensión, porque hombres como el aquí no hay, y yo tuve suficiente de ellos.
No soy tanto de palabras, y él lo sabe. Así que sin más y antes de que piense que no me quiero casar con él lo abrazo con todo el amor que siento por él y lo beso como si no hubiera un mañana.
Quien dice que un simple beso no te hace sentir nada es porque no ha encontrado a una persona especial en su vida, a quien besar o simplemente abrazar y sentir tantas emociones al mismo tiempo.
Mi felicidad es tanta que después de unos minutos más arriba disfrutando del momento, no siento mis mejillas de tanto sonreír. Y al bajar me llevo la sorpresa de que toda mi familia, incluyendo amigos y conocidos, están aquí...
-Cuatro años después-
*1999*
-¡Feliz aniversario amor! –Me da un ramo de girasoles-.
-¡Feliz aniversario! –Le doy su camisa de su marca favorita-.
-No puedo creer que ya cuatro años juntos –Dice con nostalgia-.
-Quince si cuentas los años que estuvimos de novios y el año comprometidos –Sonrió satisfecha, pues a él siempre se le olvidan las fechas-.
-Cierto, mí querida científica siempre de maravillosa.
Después de casarnos y en nuestra luna de miel, conocimos a unos científicos que estaban de expedición buscando información sobre una posible especie nueva y nos mostraron un poco como era su trabajo. A mí me intereso el tema y poco a poco fui investigando hasta comenzar a estudiar Ciencias Naturales. Obviamente Robert no podía quedar atrás y también quiso estudiar lo que fue ciencias en física y química. Así que se podría decir que estamos en proceso de ser unos "científicos".
-Bueno, bueno –Se queja Bob-. ¿Nos van a presumir cuanto se aman en su aniversario o nos van a decir para que nos hablaron con "tal urgencia"?
-Lo siento –Me disculpo-.
-Sigue así de amargado y te quedaras solo –Dice mi esposo-.
-Por favor, no discutan –Dice Elena-. Pero, serían tan amables de decirnos para que necesitan nuestra ayuda –Dice un poco fastidiada-.
Elena había conseguido un trabajo siendo asistente de oficina, ya que nadie quiere una arquitecta de mujer. Obviamente sé que mi amiga es capaz pero la sociedad hoy en día no es muy buena a como era antes.
Mientras que Bob se había conseguido un trabajo de lo que estudio, diseño de interiores; Pero tampoco es que sea muy conocido que un extraño diseñe tu casa.
Ambos se veían satisfechos con su vida, pero no parecían felices. Espero que la noticia que les daremos Robert y yo les alegre la vida, ya que también queremos que ellos sean parte de esto.
-¿Recuerdan la vieja fábrica a las afueras de la ciudad? –Pregunta Robert sin ocultar su emoción-.
Hace unos dos años habíamos comprado una fábrica abandonada con la esperanza de restaurarla y hacer un negocio a beneficio de ambos.
-Emm sí.
-¿Qué hay con eso? –Pregunta Elena-. ¿La van a vender?
-No –Sonrió-.
-¿Harán un negocio finalmente? –Pregunta Bob con algo de ilusión-. ¿Puedo diseñarlo por ustedes?
-Algo mejor –Dice mi esposo agitándolo de los hombros-.
-Bueno, ¿nos van a decir o no?
Ambos nos miramos cómplices y proseguimos.
-Queremos abrir una academia de científicos –Decimos al mismo tiempo-.
-¿Eh? –Dicen igual de confundidos-.
-Y queremos que ustedes sean nuestros socios.
-¿Qué...? Pero... ¡solo han hecho un descubrimiento!
¿Olvide mencionar eso?
Creo que sí. En nuestro camino para ser científicos hicimos más práctica que teoría y creamos un líquido no toxico que con esparcirlo por cierta zona esta comienza a elevarse hasta cierta altura rompiendo algunas leyes de la gravedad y creando otras nuevas. Aun esta en estudios pero gracias a este nos hicimos "reconocidos" en el mundo de la ciencia y tecnología.
-Necesitamos un a una arquitecta y un diseñador de interiores –Dice guiñando un ojo-.
-Sin contar que podrían ayudarnos con el marketing, comercio y comunicación –Digo ahora sin poder ocultar mi emoción-.
-¡¿QUÉ?! –Dicen levantándose del sofá-.
-¿Es broma?
-¿Cómo va a ser una broma? –Pregunto tratando de no reír-.
-Pero...
-No aceptaremos un no como respuesta –Dice mientras se sienta en el sofá como un villano de película-.
-No seas así, dales opción –Ruedo los ojos-.
-No me la creo –Dice quitándose los lentes para tallarse los ojos-.
-Ni yo –Dice meneando su melena roja con sus manos-...
-Meses después-
Narrador.
-¡Un poco más a la derecha! –Dice Bob-.
-¡No! Es más a la izquierda –Ordena Elena-.
-Noo, mira ven y ponte aquí para que veas que si es a la derecha.
Elena hace caso y observa el letrero, desde esa y su perspectiva ella piensa que es mejor a la izquierda, a la derecha se veía chueco.
-Sigo creyendo que es a la izquierda –Dice con orgullo-.
-¡QUE NO! –Dice irritado-. Tienes que verlo bien... –Voltea a ver de nuevo el letrero y finalmente se da cuenta de sus error-. Aammm –Se aclara la garganta-. ¡A la izquierda!
Mientras que Elena y Bob eran los encargados de remodelar la fábrica y moldearla a un espacio más escolar. Cristina y Robert eran los encargados de todo el papeleo junto con los aspectos legales y los permisos. Todo iba avanzando de maravilla para que su sueño se hiciera realidad...
-22 de mayo del 2001-
-¡Y con ustedes, los creadores de esta impresionante escuela! –Habla el presidente por el micrófono-.
Aplausos y gritos alegres. Finalmente la escuela con más expectativas en el mundo sería abierta.
Luces, cámaras, reporteros con micrófonos ansiosos por una entrevista. Todo tan perfecto y gracias a cuatro personas.
-Muchas gracias a todos –Sonríe mientras toma de la cintura a su esposa-. Agradecemos la presencia de todos.
-Una vez más, estamos muy felices por cumplir uno de nuestros sueños.
-¡Díganos! –Habla una reportera-. ¿Cómo fue que se les ocurrió semejante idea?
En segundos más reporteros desesperados comenzaron a hacer sus preguntas desesperados por la atención.
-A ver, calmados –Sonríe el presidente-. Las entrevistas después de cortar el listón.
Luego de calmar el caos era hora del discurso de apertura.
-Nuevamente agradecemos a todos ustedes por estar aquí.
-La academia CECM –Comienza Robert-.
-Por sus siglas, que significan "Científicos Emprendedores Cambiando el Mundo".
-Es la escuela por la cual hemos estado trabajando a lo largo de estos meses –Se aclara la garganta mientras comienza a caminar mostrando la fachada-. Se preguntaran ¿Qué buscamos hacer con esto? Pues buscamos una mejor vida para nuestro futuro, más moderna y actualizada, la cual nos facilite nuestros aspectos en la vida.
-Pero, nos solo vemos hacia nuestro propio futuro y beneficio, también pensamos en el futuro de nuestro planeta. Buscamos que cualquier tecnología y los materiales que se utilicen aquí sean biodegradables, recíclales y seguros.
-Todo eso se escucha espectacular –Halaga el presidente-.
-Por supuesto que sí señor. Y con nuestros socios y grandes amigos –Apunta a Elena y Bob-. Esperemos que todo salga como esperamos.
-¡Eso es fantástico! Hasta me gustaría entrar a tal escuela.
-Podría ser posible –Sonríe cordial-. Ya que aceptaremos a personas de cualquier edad y género. Creemos que para la inteligencia y astucia no hay edad así que tendremos las puertas abiertas para cualquier científico que quiera cambiar el mundo, con ideas innovadoras y gran esfuerzo.
-¡Todo es maravilloso! –Les da la mano a ambos-. Espero que su negocio tenga un buen inicio y todo vaya de maravilla.
-Muchas gracias presidente –Dicen al mismo tiempo-.
-Pero bueno, ya no alarguemos más el tiempo. Es hora de cortar los listones...
-Tres meses después-
Todo estaba saliendo de maravilla, tanto que después de firmar el quinto contrato para una posible expansión, estaban cansados. Robert y Cristina estaban en su oficina terminando unos pendientes.
-Cariño, todo está saliendo de maravilla –Dice emocionado-.
-Por supuesto que sí, cada vez son más quienes quieren entrar a la escuela –Sonríe mostrándolos dientes-.
-¿Crees que podremos hacer un cambio en el futuro?
Se queda callada unos segundos y luego responde.
-No lo creo... Estoy segura –Vuelve a sonreír-.
Pero no todo lo que comienza bien, termina bien.
-¿Cristina del Bosque y Robert Lucio?
Un abogado junto con dos policías entra a la oficina de ambos con Elena y Bob detrás de ellos.
-¿Ocurre algo oficial?
-Quedan arrestados por contaminación ambiental y daños secundarios en uso de sus productos –Saca unas esposas-.
-¡¿Qué?!
-Tienen derecho a guardar silencio, si no cuentan con un abogado el gobierno les concederá uno.
-¿De qué habla? –Dice Elena-. ¡Ellos son inocentes!
-Eso lo veremos en la corte.
Al salir de las oficinas, reporteros y personas rodeaban la propiedad. Unos furiosos, otros no tanto; Algunos reporteros aun no tenían idea de que iban a reportar y ya estaban creando las suposiciones enfrente de cámaras...
-¿Qué fue lo que paso exactamente? –Pregunta la juez-.
-Su señoría, permítame mostrarle las evidencias que muestran soborno hacia algunas personas que estaban el día del arresto de mis clientes, ellos fueron quienes comenzaron la protesta y todo el caos.
-¿Y quiénes fueron los que los sobornaron?
-Aún no se sabe con exactitud. Solo un testigo pudo testificar diciendo que fue una fuerza externa.
-Entonces no hay testigos ni culpables.
-Con todo respeto, mi trabajo es mostrar la inocencia de mi cliente. Y dado el hecho de que fue un soborno lo que comenzó todo lo más lógico es que ellos queden en libertad ya que todas las acusaciones fueron falsas.
El público y el juez se quedan callados, el silencio no era tenso pero tampoco era cómodo. Era un silencio desgarrador que podría destruir a alguien, o ayudarlo.
-Adjuntando las pruebas y viendo que hay falta de acusaciones, a pesar de que todas son evidentemente falsas. Robert Lucio y Cristina del Bosque, Fundadores de la escuela CECM, quedan libres de toda acusación –Toca el martillo-. ¡La sesión ha terminado!...
-1 mes después-
-¿Están seguros de esta decisión? –Los mira preocupada-.
-Claro que si hermanita –La despeina un poco-. No nos extrañen mucho.
-Aparte, solo serán unos meses, ya volveremos con ustedes –La abraza-.
Luego de la acusación la escuela se cerró temporalmente, y después del juicio todas las ventas, inversiones y los estudiantes bajaron tanto que tuvieron que cerrar la escuela.
Ahora, en los planes de Robert y Cristina, solo estaba pasar tiempo juntos, pues después del matrimonio no lo habían hecho mucho.
-¿Estarán seguros en Alemania? Dudo que sepan hablar alemán.
-Ich weiß nicht viel, aber ich weiß mehr als dein Narr –Dice mientras lo abraza-.
Bob lo mira confundido y luego mira a Cristina con suplica.
-¿Podrías decirme que me dijo el tarado de tu esposo?
Cristina se ríe y se despide de el con un abrazo.
-Los extrañaremos.
-Por cierto –Habla Robert recordando algo-. Les conseguimos empleo por si quieren seguir trabajando de lo que les apasiona –Sonríe-. Tienen cinco propuestas, luego se las mando por correo para que ustedes acepten alguna o podrían buscar uno propio, también les tengo su carta de recomendación.
-No se hubieran...
-Ni empiecen –La interrumpe-. Amiga, solo es un agradecimiento por el apoyo que nos dieron, y si podríamos haberles dado más lo hubiéramos hecho pero...
-No se tienen que estar preocupando por nosotros.
-Son nuestra familia, es natural que lo hagamos –Sonríe sincera-.
Se escucha un ''bip'' anunciando que pronto tendrían que partir.
-Creo que es hora de irnos.
-Creo que si...
-Nos veremos luego –Dice despreocupada-. No es como si nos fuéramos a ir para siempre.
-Esperemos que no –Trata de bromear-.
-Wow hermana mía, no llores que yo llorare también –Dice Robert con un poco de burla combinada con sarcasmo-.
-Tonto.
Todos ríen mientras los acompañan a la salida, sus maletas ya estaban y su avión estaba por salir, así que solo faltaba que se subieran a su auto.
-Los vemos en unos meses –Dice Bob como último comentario-.
-Nos vemos chicos –Dicen al mismo tiempo-.
-Hasta pronto par de tortolos...
NOTA DE LA AUTORA: Bueno, bueno. ¿Qué tal les pareció este capitulo? Muchas cosas en tan pocos años * Ríe con sarcasmo * Este es uno de mis favoritos porque muestra la inteligencia y dependencia que tienen todos. Prácticamente ya son como una familia y eso me gusta mucho.
Por cierto, ¿Qué tal la parte de la propuesta? Honestamente tuve muchas dificultades porque sentía que el sentimiento no se hacia. Osa, imaginen mi desesperación intentando hacer una escena romántica. Por suerte tuve una gran amiga que me ayudo a redactar tal propuesta jsjs y quedo mejor de lo que me imaginaba.
En fin, basta de charla. Me despido y nos leemos muy pronto, tal vez en otro mundo ;)
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro