Decidieron entonces sentarse en los sillones al lado del mostrador, que eran para la recepción. Olían a viejo y les faltaba relleno, algunos hasta tenían manchas oscuras sobre el color grisáceo de la tela, no tenían pensado siquiera tocarlas.

— Bien Señor Gabumon, es un gusto — comenzó la conversación Luzbel.

— Porfavor solo llamenme Gabumon, me hacen sentir viejo. — suspiró pesadamente la criatura — ustedes son unos niños... Me sorprende que los primero humanos que vea sean unos recien nacidos.

— Este... La verdad es que no somos recién nacidos... Aún así, si podemos aceptar que somos unos niños — Tsuyo tenía que ser sincero, eran unos mocosos en esa situación. — Estamos en nuestra etapa de desarrollo.

— Ese no es el tema de la conversación — intervino Akira de inmediato. Aúnque al instante se arrepintió de alzar la voz. — E-El punto es que... — tomó aire — necesitamos información Gabumon. No tenemos idea de donde estamos, ni tampoco estamos seguros de quien nos trajo o por que razón. Siendo honestos, tenemos miedo, los acontecimientos recientes han sido bastante confusos.

— Akira tiene razón — la ojos oliva de inmediato apoyó a la cobriza — ¿Qué nos puedes decir de Codeworld?

— Les contaré lo que todo digimon sabe de su propio hogar. En la escuela nos enseñan historia de Codeworld, aúnque realmente era bastante aburrida para mí en su momento — rió nostálgico Gabumon, probablemente recordando esos tiempo.

— Escuela... — murmuró Tsuyo para si mismo. Comenzaba a notar similitudes entre ese mundo y el suyo.

— Codeworld es un mundo considerablemente jóven, si lo comparamos con su mundo. — empezó contando — ya que fue creado gracias a los humanos.

Esas palabras de inmediato llamaron la atención del trío.

— ¿L-los humanos crearon... Codeworld? — el peli oscuro dijo cada palabra con un rostro de impresión.

— Si, los seres humanos son los fundadores de Codeworld. Ellos lo crearon, son nuestros dioses. Eso es lo que todos sabemos. Gracias a ellos empezaron a nacer los digimon, las plantas y todo lo que tenemos para vivir. — sonrió bastante feliz y animado — y solo se conoce el aspecto de los humanos por ciertos libros con información sobre ustedes. Aúnque solo tienen una explicación muy general recalcando que todos son diferentes entre si.

— Los humanos crearon un mundo desde cero... No me sorprende pero... Tampoco me explico como... — Akira se metió en sus pensamiento analizando la poca información que habían recibido, pero ciertamente había sido impactante.

— Codeworld es un mundo creado a base de datos, donde los códigos rigen las leyes de la naturaleza, la vida y hasta los objetos que no piensan ni sienten. Estamos todos conformados por códigos — explicó apuntando a su mano — cada pequeña parte de nosotros está creada y constituida por códigos que se entrelazan y se complementan para dar forma a una estructura mayor.

— Como las células —murmuró Luzbel.

— En realidad es algo más complejo... En nuestro mundo, los seres vivos y los objetos inertes no nos conformamos de la misma manera. Mientras que según lo que dice Gabumon, aquí todo, sin excepción está constituido por un código. — dijo Akira, demostrando una vez más, su conocimiento amplio. — de tal manera que en este mundo, la base de una roca y la de Gabumon puede ser la misma, pero dependiendo de que forma se entrelazen o interactuen los códigos entre si, creará una cosa o otra... O bueno... Eso creo.

— Realmente es de la zona 2... — pensó Tsuyo bastante impresionado. — Vaya, he de admitir que yo no podría pensar así en tan poco tiempo. Eres impresionante Akira.

— Asi es señorita Akira, es exactamente como usted lo dice — Gabumon le dió la razón a la jóven.

Akira suspiró haciendo para atrás sus coletas. Solía no estar muy segura de su conocimiento, pero de cierta forma ser útil le hacía sentir muy bien.

— Ahora, lo más importante. La única cosa que diferencia a seres vivos de objetos inanimados. — continuó la criatura con cuerno.

— Entonces si que hay algo... — habló por fin después de un rato la chica del cabello gold Pink.

— Si, lo hay. Los dos códigos más importantes de todos. El Heart's code y el Soul's code. — inmediatamente el dueño del motel fue interrumpido.

— Perfecto, necesitábamos saber de eso — Tsuyo sintió un gran alivio, por fin algo que les diera una pista sobre el mensaje, recordaba la mención de la palabra ¿jerts coud?

— Si quieres saber, cállate y escucha — contestó el digimon de forma brusca — primero que todo, el heart's code es aquel código único que todo cuerpo debe poseer para tener una forma física y existir de forma tangible en Codeworld.

— Entonces el Heart's code es el que se encarga de mantener la forma física de las cosas — dijo Akira jugueteando con su cabello de nuevo — y de los seres vivos y de absolutamente todo lo que se puede tocar...

— Pero... — Luzbel abrió la boca un momento.

Antes de que siguera hablando, Tsuyo le hizo una señal de que no siquiera comentando nada, probablemente para dejar a Gabumon continuar y evitarse otra regañada.

— Y el Soul's code es el código único de cada ser vivo en Codeworld. Poseer un Soul's code significa tener dentro de tí mismo, la vida. Todo lo que va más alla de lo físico tiene que ver con ese código.

— Es como el alma — Luzbel tomó la palabra.

— En realidad, la traducción literal es Código del alma — la cobriza le aclaró a la otra jóven. — así que tiene sentido.

— ¿Hay algo más que debamos saber? — Tsuyo miró al dueño del lugar expectante de su respuesta.

— Mañana les explicaré algunos funcionamientos básicos de codeworld, pero por lo demás, es muy parecido a su mundo — terminó el digimon. — les daré una habitación con dos literas, la casa invita.

— Muchísimas gracias — la de pelo color fantasía hizo una reverencia bastante extraña. Poniendo con sus dedos una forma de diamante y acercarla a su frente, para después inclinarse a un Ángulo de noventa grados perfecto. Tsuyo entonces no tardó en seguirla.

Akira derrepente se sintió totalmente desubicada por la acción tan extraña para agradecer que tenían sus acompañantes. Ya había oído de esa reverencia pero nunca la había visto y menos ponerla en práctica.

Bajó levemente la cabeza para por lo menos, no quedar como una maleducada y agradecer la hospitalidad y atención.

— Tenemos bastante de que hablar — Luzbel iba detrás de ambos mientras subían las escaleras dentro del motel, evitando hacer mucho ruido.

— Si pero, creo que lo mejor para nuestra salud es descansar y en la mañana nos ponemos a conversar sobre todo lo que ahora sabemos. Pero creo que pensaremos mejor relajados. — el más alto se estiró, su voz sonaba algo cansada, probablemente por algo de estrés que podía causar esa situación.

— Bueno, creo que tienes razón — suspiró rendida la más baja.

Llegaron entonces a su nueva habitación. Tal como dijo Gabumon, habían dos literas, de metal algo oxidado, pero por lo menos los colchones y las sabanas parecian levemente higiénicos. Las paredes del mismo color menta, húmedo y deprimente. Había una sola ventana que daba directamente a un callejón al lado izquierdo del motel.

— Bien, el primer tema de mañana será conversar sobre el heart's code. — Tsuyo se cruzó de brazos mirándolas, ellas también lo hacían — Con la información actual, se me hicieron más preguntas nuevas de las que ya tenía y se contestaron....

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