Los jóvenes humanos y sus digimon estaban aterrorizados ante la horrible escena que estaban viendo, buscando reconfortarse en sus compañeros respectivamente, intentando superar la horrible imagen frente a ellos.

-¿Y debemos luchar contra esa cosa? Mirad lo que está haciendo con esos digimon- Hideaki estaba preocupado, aunque no lo parecía, pero temía por su hermana mas que nada.

- Si, luchemos, nosotros debemos vencerlo- Wormmon sonaba despreocupado respecto a la situación, aunque en el fondo estaba algo preocupado.

-El gran Dorumon derrotará a esa mala bestia- Dorumon alardeaba de su fuerza, pensando que el solo podría vencerlo.

-Que arrogante es- Tsuyo tenía una gota de sudor cayendo por su frente, no por miedo, sino por la personalidad de su compañero.

-Olvidalo Dorumon, tu arrogancia te hará caer- Gabumon arruinaba el momento del digimon morado con su semblante serio de siempre.

-Caray, que seriedad la que mantiene- Sara estaba consternada por la seria personalidad de su compañero digimon.

-Si, luchemos contra ese monstruo- Lunamon sonaba muy calmada, como si la situación no le afectase.

-Lunamon debería reaccionar mas- Lily estaba bastante confundida por como reaccionaba su amiga digital.

-S-si, ganemos a esa cosa y vayamos a descansar- en el rostro de Sistermon se veía una mezcla de timidez y motivación.

-Es mucho mas tímida de lo que yo pensaba- Sumire observaba a su compañera sufriendo por su timidez.

-¡Si! ¡Vamos a por el!- Betamon tenía una sobrecarga de motivación-

-Esto va a terminar mal, espero que piensen algo- Alex dudaba de que pudiesen ganar fácilmente.

-Jum, esa lagartija no va a ganarnos- Terriermon se mostraba terco, cruzando los brazos.

-Eso no es bueno, debe aprender a pensar mejor las cosas- Dan pensaba como ayudar a su compañero a entender.

-Puede que ese tipo de miedo, pero debemos enfrentarlo de todas formas, es nuestro momento de luchar- Agumon todavía tenía miedo, pero estaba dispuesto a luchar por sus amigos.

-Hermano, tienes razón, hay que luchar- Harumi parecía la única de acuerdo con su compañero, aunque era por conocerse muy bien.

-Juajuajua, ¿Esas piltrafas van a vencerme? Que buen chiste- Darklizamon se burlaba de sus objetivos, pensando que serían igual de sencillos que sus anteriores víctimas.

-No nos subestimes, vamos a por el chicos- Agumon no estaba a gusto con la presencia de aquel digimon, quizá por su oscura naturaleza.

Haciendo caso al dinosaurio naranja, los ocho digimon fueron al combate contra aquel digimon agresivo, siendo que empezaron a atacar usando sus garras, aletas, lanzas o lo que tuvieran a mano, pero Darklizamon repelió a todos con facilidad.

-¡Llama bebé!- Agumon disparó por su boca una bola de fuego en dirección al digimon nivel campeón.

-¡Desintegrador azul!- Siguiendo el ejemplo de Agumon, Gabumon exhala una andanada de fuego azul hacia Darklizamon.

-¡Cañón de metal!- Dorumon dispara varias esferas de metal hacia el digimon enemigo.

-¡Descarga eléctrica!- Betamon atacó también, con una descarga de electricidad surgida de su cuerpo.

-¡Perforador divino!- Desde la punta de su lanza, Sistermon disparó un rayo de energía amarillo hacia el lagarto de fuego oscuro.

-¡Red pegajosa!- Wormmon escupió hilos de seda pegajosa hacia su enemigo.

-¡Disparo de lágrima!- En la antena de Lunamon se concentró poder, el cual después usó para disparar una esfera de agua hacia Darklizamon.

-¡Ráfaga de conejo!- Terriermon disparó una pequeña bola de energía verde hacia el mismo digimon al que todos atacaban.

-Menuda broma de ataques, ¿En serio pensáis dañarme con esa basura? ¡Infierno oscuro!- Darklizamon exhala fuego de color negro a su alrededor, no solo anulando los ataques, sino golpeando a los digimon que los lanzaron.

-¡Agumon!- Harumi corrió hacia su hermano, agachándose al llegar para abrazarlo con lágrimas en los ojos -No te dejes derrotar por algo así, tu puedes con mucho mas que esto-

Cada uno de los elegidos había ido a por su compañero, buscando protegerlo del digimon oscuro, aunque los conocían poco no pensaban dejarles a su suerte, mientras, Darklizamon se acercaba lentamente a por Harumi y Agumon, a quienes acababa de fijar como víctimas de su rabia.

-¡Cuidado Harumi!- Tsuyo había visto lo que ocurría con el digimon, avisando así a la nueva amiga del grupo.

-¡Despierta Agumon! ¡Tu puedes!- Harumi sacudía al pequeño dinosaurio naranja con cierta insistencia, notando claramente el peligro que se les acercaba.

-Os mataré a todos y me daré un festín de digicores, pero vosotros seréis los primeros en caer- Darklizamon había llegado ya donde estaban ellos, para agarrar a Harumi del cuello y levantarla en el aire.

-S-sueltame ya- El aire iba faltando en la garganta de la joven, pues la mano del digimon reptil apretaba bastante fuerte.

-Y-ya lo has oído, ¡Dejala ya!- Agumon sentía rabia por lo que le ocurría a su hermana y por no poder ayudarla, aún así fue corriendo lo mas que podía por las heridas a por Darklizamon.

Conforme Agumon corría al ataque, una extraña energía crecía en su cuerpo, eso provocó que brillase en un naranja mas intenso, al llegar al digimon que intentaba matar a Harumi, le dio un golpe que gracias a aquella energía extra le hizo soltar a la chica en el suelo, entonces el digivice reaccionó, brillando también y llamando la atención de la humana.

-¿Por que brilla tanto?- Harumi veía con atención aquella acción de la tablet que era el digivice, sin saber que hacer.

-Comando digievolución desbloqueado, activarse con icono en la pantalla- La voz del digivice volvía a salir, comentando la situación.

-¡No lo permitiré! ¡Nadie puede ser mas fuerte que yo!- El digimon malvado empezaba a correr desesperado hacia el Agumon.

-¿Digievolución? Veamos como es- Harumi pulsa el icono que acababa de salir en la pantalla del digivice.

Tras la pulsación del icono, unas palabras salieron en la pantalla, siendo estas "Aegis Evolution", las cuales estaban escritas en color naranja brillante.

-Vale, es el momento, ¡Aegis Evolution!- Una vez dichas las palabras, un resplandor fue hacia Agumon, aumentando la intensidad del brillo.

-¡Agumon digievoluciona en!- La luz se transformó en fuego, el cual envolvía el cuerpo del digimon dinosaurio, a la vez que llevaba sus cambios físicos a cabo, para una vez terminados, el fuego deshacerse por completo -¡Flarelizamon!-

-¡No! ¡Ya es tarde!- Darklizamon corrió a golpear a su contraparte naranja, quedando empatados al chocar sus puños.

-Te enseñaré el verdadero poder del fuego, vamos allá- Flarelizamon pudo liberar una de sus manos para después golpear a su contrario en el rostro y apartarlo de si mismo.

-¿Quieres fuego? Pues toma fuego ¡Infierno oscuro!- El reptil oscuro volvió a usar aquel ataque contra su rival.

-¡Torre de fuego!- Flarelizamon exhaló la misma cantidad de fuego hacia el ataque que le iba dirigido, bloqueando este fácilmente en un choque de fuegos.

-¿Es todo lo que tienes?- Darklizamon caminaba en dirección a los ataques, ganando ventaja sobre su homónimo de luz.

-¡Toma esto! ¡Golpe de llama!- Con su mano izquierda, Flarelizamon dispara varias bolas de fuego, las cuales impactan contra el otro digimon, anulando su ataque, mientras el del digimon bueno también se acabó.

-Eres bueno, pero no voy a dejar que salgas de aquí ¡Dolor oscuro- Darklizamon envía a su contrario varios símbolos hechos de niebla.

-Deja tus sucios trucos ¡Torre de llamas!- Flarelizamon hizo uso del mismo ataque, destruyendo los símbolos e impactando contra el digimon maligno.

Al recibir aquel ataque, el cuerpo de Darklizamon empezó a descomponerse en datos para poco después quedar solo un digihuevo, del cual salió una esfera negra volando hacia un lugar lejano, al mismo tiempo llegaron algunos Pawnchessmon White para ayudar a llevar a los digimon heridos dentro.

-L-lo conseguimos- Harumi abrazó a Flarelizamon, al mismo tiempo que este volvía a ser Agumon y ambos caían desmayados por el agotamiento de la pelea.

Por fortuna los Pawnchessmon estaban allí, pues en grupos fueron llevando a los digimon y a Harumi a la enfermería para que las Cutemon que trabajaban allí fuesen revisando sus heridas, también allí estaba una Babamon, quien era la jefa de enfermería.

-Parece que están estables, bien, cuidadlos hasta que estén todos bien- Babamon daba las ordenes a aquellos Cutemon, quienes trataban a sus pacientes con energía.

-Disculpe señora, ¿Por que Harumi se ha desmayado así?- Tsuyo estaba preocupado por la situación en la que estaba su amiga.

-Eso es fácil de resolver, los Pawnchessmon me han contado que el intruso la tomó del cuello, pero también ha sido por el uso de la energía Data- La anciana terminaba de hablar, dejando mas confusos a los humanos de lo que estaban antes.

-¿Energía Data? ¿Eso que es?- Sara, la menor del grupo sentía curiosidad, pero a la vez preocupación por todos los heridos.

-Es una energía que se encuentra en el interior de los digimon y que puede desarrollarse en el interior de otros seres vivos- Babamon explicaba aquello con paciencia.

-Y, ¿En que influye para que Harumi se haya desmayado?- Hideaki dijo eso, esperando poder resolver la incógnita.

-Muy sencillo, la digievolución que según los Pawnchessmon se produjo, hizo uso de gran parte de la energía Data de vuestra amiga para permitir a Agumon llegar a su nivel campeón- Babamon terminaba de explicar aquello mientras vigilaba el trabajo de sus ayudantes.

-¿Sabe cuando se pondrán bien?- Sumire estaba cerca de Sistermon, deseando que todos se recuperaran pronto de su mal estado.

-Tranquila, en un par de horas estarán tan campantes, solo hay que darles tiempo para que se curen- La digimon mayor veía a Sistermon Blanc con intriga.

-Señora, ¿Ocurre algo con Sistermon? Veo que la mira raro- No era Sumire quien dijo eso, sino Alex, a quien no le parecía normal esa mirada.

-Oh, no es nada hijo, solo que hace mucho no se ve a una Sistermon, desde, bueno, olvidalo- Babamon escurría el bulto poniéndose a trabajar en algo.

-¿Y si vamos a pasear un rato? Hagamos tiempo en lo que todos se ponen bien- Lily dijo eso, si bien estaba preocupada por Lunamon, creía que quedarse y verlos en ese estado sería peor.

El resto del grupo asintió para después salir en dirección a la puerta principal, aunque primero fueron interceptados por las hijas de la reina, Junomon y JetSilphymon, quienes se veían aliviadas porque los humanos estaban bien.

-¿Como están vuestros compañeros?- Junomon fue la primera en preguntar, quitando las palabras de la lengua a su hermana, además de que estaba preocupada por los digimon.

-Están bastante bien, gracias por preguntar- Dan fue el que habló ahora, agradecido con las princesas.

-Íbamos a salir un rato en lo que se recuperan todos, pero no conocemos nada del lugar- Tsuyo habló esperando que alguna de las dos digimon pudiera ayudarles con eso.

-¡Oh! ¡Yo me ocupo! Por favor hermana, dejame guiarles- JetSilphymon estaba muy emocionada, mostrando una actitud infantil que normalmente debía ocultar.

-Está bien, pero no vayas a llevarles a ningún sitio raro, no queremos asustar a nuestros elegidos- Junomon se mostraba algo seria, demostrando el papel de hermana mayor que debía llevar.

Con gran alegría por la aceptación de su hermana mayor, JetSilphymon empezó a caminar junto al resto de elegidos, mostrándoles las distintas calles del reino y evitando lugares mayormente peligrosos. Así llegaron a un circo, en el cual al entrar pudieron ver una enorme red colocada cerca del suelo, dos enormes pilares de madera con una cuerda atada entre los dos y demás cosas de circo, todos se sentaron en los bancos alrededor de la pista. En un momento dado, bajaron volando a la pista dos digimon que parecían cucarachas, los cuales parecían parte del espectáculo.

-¡Bienvenidos todos a una nueva jornada en el circo volador de los hermanos Roachmon! ¡Nosotros somos los maestros de ceremonias, los magníficos Roachmon!- Ambos digimon hablaban al unisono, con un tono alegre y educado, el cual no era muy propio de la especie.

-¡Si! ¡Vamos hermanos Roachmon! ¡Dadnos un buen espectáculo!- Entre todas las voces de los distintos digimon que habían ido allí, se podía escuchar los de la princesa JetSilphymon, sorprendiendo así a casi todos en la carpa.

-Vaya, parece que hoy tenemos una invitada especial, por lo que hoy tendremos un espectáculo de lo mas especial para ella y sus amigos- Conforme los digimon cucarachas iban hablando, la digimon del molinillo se sonrojaba un poco, causando las risas de todos -Sin mas dilación, os dejamos con la primera función, ¡El gran forzudo BanchouGolemon!- Los dos digimon hermanos se retiraban dejando espacio para la función.

Conforme el digimon rocoso iba accediendo a la pista central, los gritos de admiración no tardaron en hacerse oír, si bien dicho digimon no era el mas famoso del circo, era admirado por su descomunal fuerza.

-Hoy yo, Banchogolemon voy a levantar la friolera de cuatro Groundramon- Con una sonrisa de orgullo, el digimon pedregoso dio un silbido tras el cual entraban los cuatro digimon dragones.

A la llegada de aquellos dragones verdes, los vítores no se hacían tardar, siendo que se colocaron en sus posiciones al momento, listos para su acción en el espectáculo del digimon mineral. Sin dudar, Banchogolemon fue levantando uno a uno a aquellos digimon dragones, apilandolos uno sobre otro, para después levantar al de abajo del todo y consecuentemente a los tres que andaban por encima de ese, recibiendo así vítores por parte de los digimon del publico, incluso los humanos ahora vitoreaban. Los actos siguientes fueron igual de buenos o mejores, tal como ver a un Piedmon lanzar cuchillos en dirección a una tabla redonda que giraba con una Angewomon atada a esta, siendo que impactaban en la madera por debajo de los brazos, entre las piernas, a un lado de estas también y a ambos lados del cuello, después iba un FlameWizardmon, quien hacía trucos de magia con el fuego que manejaba, el ultimo espectáculo era cosa de dos Hanumon, que estaban subidos en los enormes pilares de madera con un palo de madera cada uno, para después empezar a caminar por la cuerda colgante, al llegar al centro de esta, comenzaron una simulación de pelea usando los palos y sujetándose en la cuerda con sus pies preparados para la situación. Por fin, los maestros del circo volvieron a salir, agradecieron a todos por la visita y todos volvieron a donde vivían, JetSilphymon se fue al palacio con los humanos.

-Ya era hora, mamá os estaba buscando a todos, creo que tiene algo importante que decir para todos- Junomon tenía su semblante serio de siempre, mientras empezaba a moverse hacia el salón de los tronos.

-Pues si hay algo importante, vayamos a ver lo que nos dice- Hideaki estaba de acuerdo con aquella digimon, si debían hacer algo, era necesario saber como actuar.

Así, el grupo al completo, acompañados por la digimon del viento fueron al salón de los tres tronos, donde obviamente la reina y Junomon ocupaban dos, el otro rápidamente fue ocupado por JetSilphymon, quien fue volando a su sitio, los elegidos pudieron notar que tanto Harumi como los demás digimon estaban allí, completamente recuperados, así que cada uno fue al lado del suyo.

-Me alegra que hayáis llegado elegidos, tengo algo importante que contaros- JunoKazemon sonaba como siempre, alegre y firme, pero considerada.

-¿De que se trata? Ayudaremos en lo que haga falta- Tsuyo estaba convencido sobre todo esto, motivado a ayudar.

-Recientemente he recibido mensajes de La Luz, la líder de nuestro mundo, me ha hablado de los orbes oscuros- La digimon reina sonaba algo preocupada al mencionar esas cosas, como si las temiese -Dijo que esos orbes corrompen los datos de los digimon y los llevan a un alto nivel de maldad-

-Pero eso es horrible, pobres digimon- La pequeña Sara se sentía mal por los que debían estar sufriendo a manos de esas cosas malditas.

-¿Y que es lo que buscan esos digimon con los orbes?- Alex preguntó a la reina, buscando una explicación clara sobre ello.

-La destrucción de nuestro mundo- La reina fue clara en su respuesta, sorprendiendo a los humanos allí presentes.

-¿Esos digimon no tienen alma o que? Es injusto que quieran hacer esto- Harumi estaba molesta con ello, pues era un atentado contra todos los que la habían cuidado durante años.

-Lamentablemente no se les puede hacer razonar, la oscuridad les hace perder todo ápice de piedad que hayan tenido- Esto era dicho por Junomon, quien a pesar de mostrarse seria, estaba afligida por dentro.

-Y por eso estáis aquí, para eliminar la oscuridad que daña a la luz- en este caso la voz de Lumostasis se había manifestado con un brillo dorado en el techo del salón.

-Para salvar la luz, debemos destruir la oscuridad- Lily prestaba atención a aquellas palabras, esperando conocer mas de su misión.

-Eso es, pero ahora no puedo deciros mucho mas, la oscuridad se vuelve muy poderosa y agota mi energía muy rápido- Tanto la voz como el brillo se desvanecieron, dejando a todos con intriga de lo que ocurría.

-Será mejor que todos vayan a dormir, mañana será un día largo y el inicio de su viaje por todo el mundo- Sentenció la reina, bostezando un poco debido a su real ajetreo.

Junomon asintió para ir con los humanos para poder buscarles un lugar donde dormir, siendo así que les dejó a cada uno en una habitación con su compañero digimon para que pudiesen descansar bien y afianzar la confianza unos con otros.