Al día siguiente.

Los niños elegidos estaban alistando para salir del hotel.

-¡V-mon!, ¡V-mon, dónde estás!.-Dijo Daisuke buscando al Digimon azul.

El elegido se puso a buscar por todo el hotel a su compañero.

En otro lado.

-¡Qué lindo! ¡Tu serás parte de mi programa!.-Dijo una azabache con kimono, abrazando a un dinosaurio azul.

-¡Suéltame! ¡Debo regresar a Odaiba!-Dijo el dinosaurio tratando de soltarse del abrazo.

-!Nop¡ ¡Tu iras al inframundo conmigo!.-Dijo la peli negra abrazando con más fuerza al dinosaurio.

-Leviathan-Sama, ya nos vamos.-Dijo Saji a la chica.

-Si-.Dijo la chica guardando al dinosaurio en un sacó.

Salto en el tiempo.

-Chicos, ¿Vieron a V-mon?.-Pregunto Daisuke a Ken, Lori y Miyako.

-No.-Dijeron todos al mismo tiempo.

-¿Qué pasa?.-Pregunto Taichi acercándose a los de 02.

-V-mon desapareció.-Dijo Daisuke preocupado.

-¡V-mon desapareció!.-Exclamaron los elegidos.

-Si......lo único que recuerdo es que el y se levantó a tomar agua en la noche.

-¿No habrá vuelto al ciberespacio?.-Propuso Takeru.

-No, ellos no pueden Ingresar por su cuenta.-Explico Koshiro sacando su laptop.

-Chicos ¿vieron a V-mon?.-Pregunto Joe a los Digimons.

-No lo vimos.-Dijeron todos los Digimons.-

-Daisuke dame tu D3, tal vez lo localice.-Pidió Koshiro.

-Espero que lo le pase nada.-Dijo preocupada Hikari.

-Eso espero...

-Daisuke no te preocupes verás que todo estará bien.-Dijo Sora para calmar al elegido.

Koshiro estaba teclado hasta que la pantalla mostró una localidad.

-Bien en marcha.-Dijo Taichi Abriendo la puerta, pero se topó con una sorpresa.

Una castaña estaba del otro lado de la puerta.

-¿Shidō?.-Dijo Taichi confuso.

-!Yagami-Kun¡.-Exclamó Irina sonrojada.

Los niños elegidos se preguntaron se preguntaron qué hacía la castaña ahí.

Pero con un sonrojo y ahitada dijo que era para despedirse, pero la chicas elegidas tienen sus sospechas que tenía otro motivo.

Dejando eso de lado le explicaron a la Angel la situación, pero la castaña no dudó ni un segundo en saber de quien pudo haber sido.

En la estación de trenes.

Vemos a todos los demonios Gremory, Azazel, Serafall y alas 2 Yokai.

-¿Dónde están esos chicos?.-Dijo Azazel viendo donde estaba los elegidos.

-Vine a conocer a mis salvadores, y son tan impuntuales.-Dijo Yasaka molesta.

-Madre sea paciente, estoy segura que vendrán.-Dijo Kunou angustiada.

-Vámonos.-Dijo Serafall apurada con un saco en la espada.

Pero el saco que tenía la Mao se rompió dejando ver a V-mon, quien no perdió su oportunidad de huir.

No pasó mucho para que los elegidos llegaran.

-¡Daisuke!.-Exclamó V-mon para luego aventarse a abrazar al elegidos

-¡V-mon!.-Dijo Daisuke correspondiendo el abrazo.

-¡No! ¡No es justo!.-Dijo Serafall molesta.

-Lo siento pero V-mon es mi amigo.-Dijo Daisuke para guardar a V-mon en el ciberespacio.

-No quieres nada por el.-Dijo Serafall sacando su cartera.

-No.

-¿Seguro?.-Dijo Serafall seductora, dejando ver su escote.

Ante esa insinuación el elegido se sonrojó hasta las oreja pero se mantuvo firme, pero cierta castaña de la Luz no lo tomó tan bien ya que desprendía una aura de muerte.

-Ejem.-Dijo el caído para librarse de esta situación incómoda.

-Niños elegidos, gracias por salvarme.-Dijo la Reina Yokai, haciendo una pequeña reverencia.

-Si muchas gracias.-Dijo Kunou haciendo una reverencia.-Y sea bienvenidos a visitarnos.

-Oigan niños elegidos.-Dijo el caído.-Quiero que en una semana venga a esta dirección en Kuoh.-Dijo Azazel dándole una tarjeta.

-Chicos....muchas gracias por su ayuda.-Dijo Issei estrellando la mano a Taichi quien lo consideran el líder de los elegidos.

-Muchas gracias.-Dijeron los demonios y Ángel a los elegidos, haciendo una reverencia.

-No hay problema.-Dijeron los elegidos con una sonrisa.

Todos los sobrenaturales estaban apunto de partir a Kuoh así que se embarcaron, pero una castaña se quedó.

-¿Shidō? No ere de la misma academia que ellos.-Dijo Taichi confuso.

Pero la castaña no respondió y se quedó quieta.

-¿Shidō?

Pero ante la mirada atónita del castaño, elegidos y demonios.

La Ángel lo besó con tal intensidad que al separarse dejaron un hilo de saliva.

-Me gustas........-le susurró Irina al elegido del valor quien se le quemaron las neuronas.

Para luego salir corriendo al tren, que enseguida partió.

Fin.
Espero que les aya gustado el capituló.