29. Cena paterna.
Melanie Cross.
Estoy aquí, ahogándome con mis propias lágrimas del dolor tan inmenso que siento. La única persona que creí que era leal en mi vida, me ha destrozado al mentirme de tal forma. Fui tan estúpida al pensar que podía enamorarse de mí, que podía amarme y hacerme feliz como las parejas normales, pero me cabe duda de que todo fue parte de un maldito plan de Richard que desgraciadamente, funcionó a la perfección.
No me mintió con lo de Simmons pero con lo de mi padre sí.
Me estoy quedando en una de las lujosas habitaciones de su mansión. No me quiere dejar ir hasta que supuestamente supere esto y pueda estar tranquila. Parece que algo sigue atormentándolo y sé que tiene que ver conmigo.
—Melanie, su padre la está esperando en el comedor. — dice Peter. Me seco las lágrimas y muestro mi lado más fuerte. No tengo hambre, solo me siento porque quiero escuchar lo que tiene que decir.
—Siéntate, cena con tu padre.
—No vuelvas a recordarme que eres mi padre. — me siento y una empleada me sirve. — ¿También secuestraste a su familia para que trabajara aquí? — le pregunto cuando nos quedamos a solas.
—La gente tiene padres enfermos, muchos hijos que alimentar y muchas deudas que pagar. Nadie rechazaría una buena oferta de trabajo como las mías.
—¿Y saben lo que haces de verdad?
—No tienen porqué saberlo y sí lo hacen, firmaron un acuerdo de confidencialidad. — come como si nada y se limpia los labios con su servilleta.
—Necesito escuchar la verdad. Necesito saber todo desde el comienzo. Sin más mentiras. — es por lo único que me senté en esta mesa.
—Deberías comer primero. No quiero que te deprimas por alguien como él. No vale la pena.
—¿Y tú sí? Solo dime todo lo que sepas.
—Jack es como un agente, detective y policía a la vez. Ni siquiera sé lo es. Fue enviado al departamento federal por asuntos internos, ya que sospechaban de que habían infiltrados de la mafia Bilson en él y la primera sospechosa, era Laura. Se acercó a ella de la misma forma en que se acercó a ti. La enamoró y le sacó toda la información. — empieza.
—Espera... ¿La señora Adams? — no entiendo.
—Bilson la crió luego de que sus padres murieran en un trágico tiroteo. Era muy pequeña. Desarrolló afecto hacia él, así que lo apoyaba en todas sus locuras. Por eso estudió investigación policial. Para infiltrarse entre los departamentos federales y cayó en las manos de Simmons. Todo fue una coincidencia. Bilson siguió con vida gracias a ella. — me cuesta creer lo que escucho pero tiene mucho sentido.
—Por eso estaba tan preocupada por mí sobre Jack. Tenía miedo de que la historia se repitiera. — estoy armando el rompecabezas.
—No le tengas mucha pena, también es una arrogante. Todos son así. No debes confiar en ellos.
—Es lo mismo que me decía mi madre. — recordarla me pone muy triste. — ¿Y cómo sabes esto? ¿No que Bilson y tu eran enemigos?
—Antes de serlo, éramos muy buenos amigos, casi como hermanos. Hasta que tu madre entró en nuestras vidas y con su trastorno de desquiciada lo convirtió en una guerra.
—¿Por qué Martha querría vengarse de ti si escogió estar contigo?
—Solo una de sus personalidades me amaba, las demás querían estrangularme. Las sádicas preferían a Bilson, era una lucha por diferencia de intereses morosos dentro de ella. Como tu madre, la Martha predominante sabía de las intenciones de las demás, me pidió que la encerrara en una de mis tantas mansiones hasta que pudiera controlarlas. Por eso dejó a Junior con su madre.
—No puedo creer nada de esto.
—Después del internado sabía que solo yo podía ayudarla. Pero su enfermedad jugaba con nosotros constantemente. — este trastorno genera una manera muy complicada de conversar, pero después de las definiciones de Jimmy, puedo entender todo lo que me dice. — Le pagué varios doctores y podía vivir controlada a base de medicamentos y terapias, pero cuando quedó embarazada, se volvió loca otra vez y huyó con la ayuda de ese bastardo.
—¿Y la abuela? ¿Ella dónde está?
—La encontraron muerta en su propio hogar. No sé más detalles. Tuve demasiados problemas de los que ocuparme en ese entonces. — bebe vino de su copa.
Ahora también tengo una abuela muerta.
—Esta familia es una locura. — paso la mano por mi frente.
—Sí. Y tu eres lo único bueno de todo esto. La única esperanza. — me mira con ternura. — En fin, retomando lo de Laura y Jack; él se acostaba con ella para sacarle información y cuando ella lo descubrió tuvo decir toda la verdad si quería conservar su trabajo. Estuvo a punto de arriesgar a su propio criador por amor.
—¿Por amor?
—Por amor a Jack. Es lo que estoy tratando de explicarte desde hace rato. Ella se enamoró de él, pero él no de ella. Solo la veía como un caso que resolver. Ambos se usaban: ella para darle información a Bilson y él para desenmascararlos.
—¿Y cómo es que sigue trabajando ahí?
—No lo sé, todo indica que le dieron otra oportunidad. Quizás se arrepintió, a fin de cuentas, solo vive de ese trabajo. Pero estoy seguro de que es porque como todavía no atrapaban a Bilson, Simmons prefería mantenerla cerca.
—Jack lo mató en un yate.
—Sí, esas fueron mis órdenes. — come como si nada mientras lo dice. — Simmons lo quería vivo, yo no.
—Él solo obedeció tus órdenes porque tenías a su madre secuestrada. ¿Cómo tuviste el valor de hacerle algo así a alguien como ella?
—¿La conocías ya?
—No en persona. Pero llegamos a hablar por teléfono cuando me quedé en su apartamento.
—Secuestré a su madre cuando llegó a la ciudad, la mantuve encerrada y lo llamé para informarle del asunto; no tuvo de otra que obedecer. Solo que lo de revolcarse contigo, no estaba en el plan. Tenía el presentimiento de que solo era eso, pero con el tiempo le daba miedo que lo descubrieras. — todo lo que me rodea es horror.
— ¿Su misión solo era protegerme? ¿No te bastaba con Peter siguiéndome a todas partes?
—Su misión era protegerte de Simmons, de Laura y de los Bilson también. Aunque Peter sea uno de mis mejores hombres, un agente dentro de la policía y el mejor de todos, es algo que no podía desaprovechar.
— ¿Protegerme de Adams? — como si ella pudiera hacer algo contra mí. Jamás se lo permitiría.
—Ella es la que está enviando información a los Bilson sobre tu paradero. Recuerda que tienen informáticos que lo ven todo y las veces que te atacaron, era con su ayuda. Digamos que es una vieja resentida que quiere acabar con la mujer que le está robando la atención de su amado. — no puedo creer esto. Lo sabía. Sospechaba que algo extraño pasaba con ella, pero jamás me imaginé esto.
—Nada de esto tiene sentido, ella fue una de las primeras que me mostró su apoyo.
— ¿Por qué crees que Martha te decía que no podías confiar en la policía? Porque ya la conocía. Martha sabía de su relación con los Bilson y a ella no le convenía que nadie más lo supiera, ya que su carrera, por sus antecedentes, se iría a la mierda.
— ¿Cómo es que sabes todo esto? — me duele la cabeza con tanta información.
—Así como Jack, tengo infiltrados en todos lados. Utilizo sus debilidades para convencerlos de hacer lo que yo diga. — bebo un poco de agua. — No te quiero cerca de ellos. Ni de Laura, ni de Jack y mucho menos de Simmons. Todos piensan en sí mismos, no tienen empatía por nadie. Son capaces de hacer cualquier cosa para salirse con las suyas.
—Eso suena muy tú. — habla de los demás como si fuera diferente a ellos. — Ok, haré un resumen para ver si entendí todo lo que está pasando. — me aclaro la garganta. — Mi madre tiene un trastorno de personalidad, son tres en total (dos locas y una normal), fueron las que provocaron esta enemistad entre Bilson y tú que los ha llevado a terminar de esta forma. Cuando quedó embarazada de mí, huyó de ti y volvió criar a sus hijos ella sola, amenazándote con entregarte a la policía si te acercabas y trataron de vengarse de ti a través de Frank, porque era un peón de Bilson. ¿Por qué siento que en esta parte falta algo que todavía no sabemos? Algo no encaja.
—Sí, yo también lo creo. Es mejor no atormentarse demasiado. Con todo lo que ha pasado es suficiente.
—¿Y si Bilson sabía algo sobre Martha que nosotros no? Eso explicaría porqué seguía interesada en ella. A tal punto de que mandó a Frank a acercarse a nosotras. — intento armar el rompecabezas. Por su cara creo que lo he hecho pensar en ello también.
—Efectivamente lo mandó hacia ustedes por una razón. ¿Fastidiarme más, quizás?
—Aún con toda la información que tenemos, sigue faltando algo. Algo que Bilson sabía. Por eso quizás la ayudó a irse, mantenerse oculta o quién sabe qué.
—¿Qué podría haber sido? Si en 21 años con todo mi poder no supe nada más, es porque quizás no lo hay. Lo único que quería ocultarme, era tu existencia, pero no le salió como quería. Estuve vigilando tus primeros pasos, cada que ibas al parque, yo estaba allí, oculto entre las personas viéndote comer y embarrarte con un helado, la vez que intentaste escapar de casa...
—¿Escapar de casa? Yo nunca intenté escapar de casa.
—Sí, sí lo hiciste. Hace pocos meses. Mis hombres vieron a Martha persiguiéndote en un coche. No sé de dónde lo sacaste pero pudieron arreglar sus problemas. Martha me dijo que solo habían tenido una pequeña discusión.
—No, es que es imposible. Jamás he sido rebelde con mi madre. No tengo recuerdos de un momento así.
—Sí, mira. Tengo una fotografía que Peter consiguió de las cámaras de seguridad. — saca su móvil y me la muestra. ¿Qué es esto? Es mi cara pero no soy yo. No puedo ser yo. Nunca intenté escaparme de casa y mucho menos tengo recuerdos de eso.
—Es que... nunca he estado en ese vehículo. No lo puedo recordar.
—Entonces es extraño. Si tú no eres la de la fotografía entonces quién es. — me quedo en silencio. Esto es muy raro. — Solo...dejemos el pasado atrás. — sigue comiendo.
—¿Y ahora qué? ¿Qué piensas hacer? ¿Mantenerme encerrada como a mi madre?
—Por supuesto que no. Peter seguirá acompañándote a todas partes por seguridad. Te daré una casa, un auto, todo lo que necesites. Todo lo que me pidas estará a tus pies. Eres la hija de Richard Johnson. Por cierto, te daré mi apellido. Tu madre solo te registró como Melanie Cross, en lugar de Melanie Johnson Cross.
—No quiero ni tu dinero, ni tu apellido. Quiero que me dejes en paz. Nunca te perdonaré por lo que le hiciste a la madre de Jack. — agacha la cabeza.
—Está bien. Estoy preparado para esto. Ódiame lo que quieras, despréciame. Pero sigo siendo tu padre y ahora que Martha no podrá impedírmelo, actuaré como tal. Recuperaré el tiempo perdido hasta que lo hagas. — veo sinceridad en sus ojos pero no estoy lista para aceptarlo en mi vida. Requerirá tiempo y no creo que tenga mucha paciencia.
—¿Y mi madre? ¿No harás nada para ayudarla? A pesar de ser como es, está enferma. Necesita ayuda.
—Tiene que cumplir su sentencia, pero pagaré un buen abogado para que revise su caso y me diga que más se puede hacer. Si conseguimos su libertad, le proporcionaré un buen doctor.
—¿De verdad harías eso?
—A pesar de todo, sigue siendo la madre de mi hija. — menos mal. Eso me deja más tranquila. —¿Y tu hermano?
—Está fuera de la ciudad. Volverá en unos meses. — asiente con la cabeza. — ¿Puedo irme?
—Sí, pero ya es muy tarde. Preferiría que esperaras hasta mañana. Peter te llevará a tu aparamento.
—Necesitaré alguna de mis cosas. — prefiero bajar la guardia. Estoy muy cansada.
—Peter te las traerá. — asiento y me levanto de la mesa. — Buenas noches, Melanie. — es lo último que escucho antes de ir a la habitación. Necesito descansar. Han sido muchas emociones el día de hoy.
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