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50

Jimin estaba tratando de respirar correctamente, Yoongi lo veía con algo de nervios y hasta un poco asustado, ¿Le estaba dando un ataque respiratorio? Tal vez deberías de comenzar a conducir hacia el hospital.

— Ji-Jimin... ¿Estás bien? Estaremos aquí por una semana, podemos venir después. — Le propuso sin quitar su mirada del perfil del menor.

— No, hyung... Hay que hacerlo hoy.

— ¿Qué? — Preguntó el mayor con el sonrojo subiendo hacia su rostro.

— Que hay que hacerlo, hyung. Vamos. — Desabrochó su cinturón y bajó del vehículo.

Yoongi se sintió un completo idiota al haber malinterpretado eso, Dios, ¿Qué le pasaba? Con eso en mente, bajó y caminó hasta quedar junto a Jimin.

Una última vez, respiró hondo, contó hasta tres, tocó la puerta, unos voces y pasos acercándose... Sus nervios aumentando y la puerta finalmente se abrió.

Una mujer no tan alta, con el cabello largo de un color castaño obscuro y con unas arrugas adornando su frente apareció del otro lado de la puerta, solo se quedaron observándose sin decir nada.

— Jimin... — La señora Park fue la que cortó el silencio.

— Mamá. — Respondió Jimin, sonando frío. La mujer miró por el lado de su hijo, percatándose de la presencia de otro hombre.

Hombre que ella sabía quien era.

— Tu debes de ser Min Yoongi, ¿Cierto? — Le ofreció su mano, y el mencionado con algo de duda, la aceptó.

— Mucho gusto, señora Park. — Jimin entrecerró los ojos al notar una mirada rara en su madre, separó la mano de Yoongi que aún sostenía la de su mamá y la mujer les permitió pasar.

— Pasen, iré por tu padre, Jimin. — El menor asintió.

Yoongi al notar que Jimin estaba realmente tenso, se acercó por atrás, acarició toda la extensión de sus brazos hasta que entrelazó sus manos.

— Tranquilo, bebé. — Le susurró. — No voy a dejar que alguien más te haga daño de ninguna forma.

— Hyung... — Jimin pegó su espalda al pecho de Yoongi, cerró los ojos para disfrutar del contacto, hasta que un carraspeó lo hizo saltar, reincorporadolo nuevamente y alejándose por completo de Yoongi.

Auch. ¿Así se sentía Jimin cada vez que le hacía esto?

— Hola, Minnie. — Le saludo su padre con una sonrisa.

— Paren con esto. ¿Qué es lo que pasa? ¿Porqué de repente querían verme? — Preguntó, no quería soportar la hipocresía de parte de ninguno.

— Vamos a sentarnos, ¿Si? Tenemos que hablar. — Los cuatro se dirigieron hacia la sala. — Jimin, nosotros... bueno... Nos queremos disculpar contigo. — Le dijo su madre.

— ¿Disculparse? — Cuestionó Jimin sin saber cómo reaccionar.

—  Estuvo mal haberte corrido de tu casa solo porque no estábamos de acuerdo con... — El señor Park miró a Yoongi por unos segundos. — Tus gustos... y tus sueños.

— Solo te queríamos proteger, Minnie. Sabes que no es muy bien visto que dos hombres estén juntos y...

— Desde el inicio de mi carrera fui abierto con ese tema, desde el principio la agencia que me contrató y mis seguidores sabes sobre mi orientación sexual. Y claro, recibo varios comentarios de odio, sin embargo también tengo muchas personas que me apoyan. Era consciente que algunas personas no iban a aceptarme así, pero en realidad no me importa.

— Solo no queríamos que sufrieras, Minnie. — Explicó el señor Park.

— Acabaron lastimandome más que cualquier otra persona. — Los señores Park agacharon la cabeza, Yoongi solo veía a los tres. — ¿Eso es todo? Porque planeo disfrutar de mi estadía en Busan.

— Jimin, queremos que... por favor, perdónanos. Te extrañamos. — Algo en el pecho de Jimin se removió. — Eres nuestro hijo, nada cambiará eso.

— Tu mamá tiene razón, Minnie. — Interrumpió el mayor. — Hemos visto cada logro tuyo y nos sentimos muy... orgullosos de ti. Nos agrada que hayas cumplido tu sueño y también que hayas encontrado a alguien especial.

Jimin solo se quedó observando las sonrisas de sus progenitores, que solo emanaban tristeza. Su corazón le estaba rogando por ir y abrazarlos a ambos pero su mente le pedía que se mantuviera firme, que no se los dejara tan fácil.

Pero de un momento a otro se paró y los abrazó con todo el cariño que tenía, diciéndoles lo mucho que los extrañaba y recibiendo agradecimientos de sus padres.

Y Yoongi... tenia una rara sensación en el pecho.

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