73
Al menos sabía que la temperatura si lo afectaba, una vez recobré algo de fuerza, empecé a subir más y más la temperatura, fundiendo todo a mi alrededor, quizá iba a tener que forzar el plasma, no sabía cómo o si siquiera era posible, pero era mi única opción.
Pese a verse rodeado por básicamente magma, parecía tener una barrera que lo repelia todo a quizá cuatro metros a la redonda, en un parpadeo mandándome a volar otra vez, estabilizandome solo para sentir aquella fuerza empujarme a un edificio, partiendo piso tras piso hasta llegar a lo más profundo.
No sabía donde estaba, pero mis llamas empezaban a concentrarse, nuevamente estaba llegando al plasma, sintiendo como el edificio empezaba a caerse solo por fundir sus cimientos.
Aunque cada pedazo, metal, concreto, todo lo de dentro solo se estaba fundiendo al ir cayendo, convirtiendome en un pequeño sol, una armadura a mi alrededor.
En aquella forma era mucho más fácil concentrar en mis manos cosas para lanzarlas, aunque sin dar ninguna aún.
Lo único que tenia era abrazarlo con aquello, acercándome más y más a él, fundiendo todo a mi alrededor, viendo como empezaba a alejarse, parando después de un rato, lanzandole todo aquello, empezando a abrir un hueco en donde impactó, yendo muy profundo hasta enfriarse.
Nada a su paso habría sobrevivido a eso.
—Me habrías matado— Lo vi caminar detrás de mi, volteando. —Si me hubieras dado— Se burló. —A lo que si le diste es a uno de esos refugios de humanos— Me indicó, volviendo a ver, aunque todo estaba fundido, no lo podría distinguir aunque quisiera.
Nuevamente sentí como me aprisionó en aquello, siendo más fuerte ahora.
—Te dije que no iba a necesitar de nadie más— Se fué acercando, empezando a enfriarme yo.
Había perdido oficialmente.
—Fué curioso pelear contra ti, no tienes tan mal nivel para ser una peste— Escuché pasos al rededor, siendo un par de Kaijuu humanoides, aunque de una amenaza tan insignificante que hasta residuales serían más peligrosos.
—Que quede claro, solo quería divertirme, puedo llevarte así, pero es más cómodo como lo hacen ellos— Indicó, viendo como ambos humanoides ponían algo en el suelo, empezando a crecer y engullirme, era más como una prisión, no sentía dolor ya, tampoco veía nada.
Antes al menos tenía oportunidad, esto era injusto.
¿Por que nada podía irme bien por un solo mes?
Estaba empezando a controlar mejor todo, no fuí suficiente.
Si aquello solo estaba jugando conmigo, qué le pasaría a todo el cuerpo…
Quería salir, quería volver a generar un pequeño sol, pero otra vez había llegado a mi limite, nunca había ganado.
O perdía el control o me salvaban, nunca pude ganar, seguía siendo la misma inútil que ahora podía controlar llamas sin más.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro