Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

49


—Una última cosa… — Les dije a las tres que estaban a punto de irse, no sabia si decirles aquello. —El número once me propuso algo— Finalmente me decidí.

—Si me iba con él, todo esto iba a terminar, no enviarían más Kaijuu— Lo dije.

—La desgracia es que no lo lograras matar— Respondió Mina. —No se puede confiar en un Kaijuu, si están tan desesperados ahora, es por algo— Opinó Jihyo. —Yo no te dejaría hacerlo ni aunque quisieras, tendrías que matarme primero, Tzuyu y las demás harían lo mismo— Explicó Nayeon, quitándome la culpa.

Pensaba que había sido la egoísta más grande de la humanidad negandome antes.

—Tendrías que matarme a mi también antes que te deje hacer eso— Finalmente Mina y Nayeon empezaron a irse.

—Haré algunas pruebas a tu traje roto, quizá nos diga algo, luego tenemos que hacerte algunas pruebas más médicas, quizá tus huesos u órganos nos digan más— Explicó Jihyo, acercándose un poco a mi.

—No creo que vayas a convertirte en Kaijuu ahora— Me dijo tranquila. —El número once parece saber demasiado, quizá puede transformarse en humano, si pasa desapercibido es porque su cuerpo no lo aparenta— Explicó su razonamiento, acomodándome la bata.

Y tenía razón, el número once sabía demasiado, ahora más, pero lo de reconocerme en mi forma humana era extraño, además de que hablaba un poco más humano.

Pero si de algo no tenía duda, es que era mi inverso, un Kaijuu que podía mimetizar humanos, y yo una humana que podía transformarse en Kaijuu.

— ¿Quieres mi opinión? — Me sacó de mi mente, asintiendo. —Parece que esto solo está perfeccionando tu apariencia— Empezó a pasar su mano por mi pecho entre la bata.

—Ahora tu piel es incluso más suave— Empezó a mover la punta de sus dedos, yendo más arriba su mano. —Algunas imperfecciones ya no están— Pasó a estar cerca de mi cuello.

—Aunque no tenga que ver con todo esto como tal… — Pasó a verme a los ojos. —Me pareces incluso más linda ahora… — Sonrió al decir aquello, llevando su mano a mi mejilla.

—Nunca vas a ser un monstruo— Finalizó, recordándome incluso lo que dijo Mina.

Quitó su mano, dándose la vuelta y empezando a irse también.

Una vez se había ido de básicamente la base de operaciones de las cuatro, tomé la mejilla donde ella había puesto su mano, notando algo de calor, muy probablemente estaba roja.

Era una estúpida sin remedio. Ella solo quería reconfortarme, en el remoto de que le gusten las mujeres también, solo me vería como una compañera del trabajo.

Además… ¿Por qué me estaba sintiendo así con tantas? Yo no era así.

Aunque ser o no ser es una línea muy difusa para mi últimamente, llegando hasta el espectro de especie incluso.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro