—No puedo creer que de verdad lo hiciste— Dijo después de caminar un rato con Chaeyoung a su espalda. —Al menos la logré salvar— Dije sintiéndose agridulce.

—Voy a intentar no involucrarte en esto— Añadí, sintiéndome el dolor del brazo. —Los drones no lograron regresar, además de que escuché por el comunicador que no tenían forma de ver nada— Explicó.

— ¿No lo saben? — Pregunté incredula, negando ella. —No me quería morir tan joven… — Suspiré. — ¿Joven? — Me cuestionó. —Te golpearía si no la tuvieras en tu espalda y yo no tuviera el brazo roto— Le dije con mala cara, de un momento a otro llegando Nayeon y Mina.

— ¿Qué pasó? — Se acercó Nayeon, viendo a Chaeyoung. —El Kaijuu principal evolucionó o algo así y ella me salvó— Señalé a la desmayada.

Mientras Nayeon estaba preparándose para llevarla, ya que hasta Tzuyu estaba cansada y algo golpeada, pude ver a Mina suspirando, quizá de vergüenza o disgusto.

—Voy a comprobar la zona— Dijo la misma, yéndose tan rápido como llegó. —No le caes tan bien por lo visto— Finalmente Nayeon se puso en la espalda la más pequeña, como si no fuera nada.

—Yo habría hecho lo mismo— Empecé a caminar como antes.

Después de todo nos hospitalizaron a ambas, Chaeyoung estaba en condición critica, así que tuvieron que llevarla a algo mucho más intensivo.

— ¿Qué pasó allí? — Preguntó Tzuyu una vez estábamos solas. —Esa cosa no era algo normal aunque estoy segura que sentí una presencia mucho más fuerte— Empecé a recordar.

—Midieron tu impacto, va a ser imposible que vuelvas a aparecer sin que lo sepan— Me aclaró, sabiéndolo yo también.

—Tu vida vale más que la mía, la de Chaeyoung igual, si puedo salvarlas y morir yo, no se perdería nada— Le dije mi punto de vista, viendo como se empezaba a levantar, acercándose a mi camilla, subiéndose en esta, pasando sus piernas por mi abdomen, tomando mi bata y acercándome a su rostro, viendo claramente como aunque fuera inexpresiva, estaba realmente enojada.

—No vuelvas a decir eso nunca más— Me dijo, escuchandose igual que su expresión.

—Yo estaría muerta sin ti, Chaeyoung también, la madre y la niña, tú vida también vale— Me jaló, queriendo dejármelo claro.

— ¿TN…? — Escuchamos ambas del pasillo, volteando, siendo unas muy confundidas Dahyun y Momo.

Una media hora de explicaciones después.

—Pensaba que serian… — Río nerviosa Dahyun. —Ella es más como mi hija— Bromeé. —Yo diría que últimamente soy más tu madre— Refutó.

—Los demás querían darte las gracias por la ayuda, pero nos dijeron que podíamos pasar solo nosotras— Aclaró Momo.

—Quizá no sea la mejor peleando o esquivando, pero nadie conoce más de Kaijuu que yo— Sonreí dándoles un pulgar arriba.

Que no falte el malentendido sexual en mis historias