—Zhou Tzuyu— Pasamos a verla la mayoría. —Índice medido de explotación del potencial del traje, veinte por ciento— Me lo esperaba, pero dolía más al haber sido la primera medida y con ese cero con cero uno, ni siquiera cero con uno.

Uno tras otro, todos sacaban como mínimo diez y solo unos pocos rozaban los veinte.

—Kim Dahyun— Era fácil buscarla con la vista, era la más pálida. —Índice medido de explotación del potencial del traje, Diecinueve por ciento— Aquello era deprimente, el cómo aquella chica tan tierna estaba casi a la par de Tzuyu.

—Minatozaki Sana— Era la de al lado de Dahyun, a quien en las pruebas anteriores vi porque me parecía tierna también. —Índice medido de explotación del potencial del traje, diecisiete por ciento— Pese a aquello, me dió una paliza en potencial también.

¿Tenía que ser tierna para sacarle potencial al traje o qué?

—Hirai Momo— Ya me había rendido en ver quién era quien. —Índice medido de explotación del potencial del traje, treinta y tres por ciento— Todos voltearon a verla, incluida yo.

—Parece que todos se llevaron el potencial de TN— Nuevamente se burló de mi Nayeon.

—Bien— Se aclaró la garganta y limpió las lágrimas de la risa. —TN, ¿Puedes moverte? — Me preguntó directamente, empezando a hacer calentamientos, siendo como ropa normal, alzandole el pulgar.

—Pensaba que como no llegabas ni al uno por ciento no podrías mover el traje— Río pero más controladamente ahora.

—Vamos a la zona final— Y dicho aquello, marchamos a una gran zona dentro del complejo, con muros muy grandes, quizá de quince metros.

—Capturamos a unos cuantos Kaijuu hace un tiempo, la prueba es ver como se desenvuelven en combate real— Señaló una carpa a nuestra izquierda.

—Allí tienen todo el equipamiento que el cuerpo suele usar— Indicó.

Todos fuimos a buscar aquello.

—No había visto los rifles de asalto tan de cerca— Dije viéndolo en la mesa, tomando uno Tzuyu. —Son de diseño ruso— Lo miré de cerca.

—No te lo recomiendo— Se acercó a nosotras Nayeon. Aquello fué como una provocación mirándola y tomando uno, jalandome por el exagerado peso del arma.

No debería de decir lo mucho que la subcapitana volvió a reírse.

—Pasa la prueba por favor, yo me aseguraré de que nada malo te pase, pero necesito a alguien como tú— Me indicó después de volverse a secar las lágrimas.

—Yo… — Empecé a cargar el rifle con toda mi fuerza, levantandolo del suelo. —No voy a dejar… — Empezaba a temblar por el peso. —Que nada malo… — Como pude lo dejé caer en la mesa. —Pase… — Empecé a tomar aire.

—Yo voy a pelear junto a Mina— Dije jadeando, empezando a reír otro poco Nayeon.

—Eso es insinuar que quieres quitarme la posición— Me enderezó, siendo como una fuerza sin oposición, daba miedo incluso.

—Respira mejor— Me indicó.

Dada mi incapacidad, solo pude tomar una pequeña pistola y granadas de todo tipo.

— ¿Vas a estar bien? — Preguntó Dahyun, tomándome por sorpresa, asentí. —Nadie sabe más de Kaijuu aquí que yo— Le hice un pulgar hacia arriba.

Aunque obviamente iba a ser escotada por Tzuyu.

Una vez abierta la puerta gigante, empezamos todos a correr, saliendo como un rayo Chaeyoung y dejando atrás a todos, todos menos la tal Momo.