— Te amo — Felix habló de forma cortada mientras sentía que el pelinegro hundía su rostro en el valle de sus pechos, besando ahí. Desde que vio las marcas que había dejado en su cuerpo no le volvió a chupar o morder, solo la besaba, lamía y acariciaba.

El mayor solo volvió a besarlo ahí mismo, sonriendo, y se separó, viéndolo. Solo movió un poco sus muslos para bajarle un poco para verlo. Sonrió mientras se pegaba más a la pared y sostenía las manos del menor, sonriendo.

— ¿Se siente bien? — el menor asintió al mismo tiempo que llevaba sus manos a la nuca contraria, enredando sus manos en el cuero del otro, y rió. Chan se movió lento mientras Felix gemía más fuerte.

— Se siente mejor que la primera vez Chan —pero volvió a gemir al sentir que Chan sostuvo su rostro, haciéndolo ver.

— ¿Se siente mejor que con Hyunjin? —Felix lo vio fijamente a los ojos, y asintió, acariciándolo.

— Todo contigo se sentirá mejor...

El pelinegro relamió sus labios mientras sus labios volvían al cuello del otro, besándolo, pero rió. Volteó a verlo mientras sostenía sus manos, poniéndolas en su corazón.

— Es porque... es porque te amo —los ojos del castaño comenzaron a llenarse de agua al mismo tiempo que el igual acunaba el rostro de Chan, acariciando sus mejillas con sus pulgares. —Cuando haces algo con una persona que te ama, si-sientes que es, mejor que hacerlo con otra persona, y viceversa.

— Yo igual te amo, Chan, tú fuiste el culpable de que me enamorara de ti en todos los aspectos. —el pelinegro solo comenzó a arquear sus cejas mientras sentía que sus ojos se llenaban de agua y lo veía fijamente, sonriendo.

Sus manos comenzaron a acariciar sus hombros y en un pequeño movimiento estaban en la cama de nuevo.

Chan había vuelto a mover sus caderas de forma lenta, haciendo gemir a Felix mientras lo veía fijamente y sonreía, relamía sus labios.

Definitivamente ambos eran los culpables de enamorarse en todos los aspectos posibles.

Porque Chan amaba a tanto a Felix. Un gemido alto de el menor le indicó que esta había llegado al orgasmo, así que el comenzó a moverse un poco más rápido para venirse el también. En cuanto lo hizo, solo se separó de el y se acostó a su lado, viéndolo fijamente.

El pelinegro se acostó bajo pecho, pero viéndolo sonriente.

Los rasguños de su espalda no ardían para nada, no estaba agotado y mucho menos triste, pero al mismo tiempo quería llorar y dormir. No decidió por cuál.

Felix se ladeó para verlo y lo besó, pero el pelinegro tomó un paso y comenzó a entrometer su lengua en la cavidad bucal contraria, comenzando a acariciarse. Solo se separaron y un rastro de saliva los unía.

Ambos tenían un gran sonrojo, pero solo rieron.

—¿Entonces?

—Sólo me queda terminar con Hyunjin y tú con Jeong-

—No, no somos nada más que amigos, nada sentimental —Felix buscó un rastro de mentira en sus ojos, acercándose más, así que sólo entrecerró sus ojos.

—¿Seguro?

—¿Po-por qué? —tragó saliva al recordar lo que había pasado el sábado. Lo vio a los ojos. Felix solo pensó en si decirle la verdad o no.

— Pues, no-no lo sé... —todos los problemas que han tenido hasta ahora habían sido porque no habían hablado, así que el menor suspiró —. El sábado los escuché tener sexo.

—Oh...

—Y de verdad quería saber si ustedes no son nada porque quiero que si llegamos a tener algo, no seamos amantes, aunque en este instante lo somos —Chan negó, riendo —No te rías, la pasé mal ese día...

—Y yo igual, me enteré que tú y Hyunjin ya son novios — Felix suspiró.

—El me lo pidió y yo solo tuve que aceptar porque pensaba que tú y Jeongin eran novios... ¡Todo esto pasa por no hablar! —Chan solo torció sus ojos, y vio la almohada.

—¿Escuchaste?

—Si... —el mayor se acostó de espaldas y buscó su mano, y lo besó —No me trates de endulzar, Chan...

—No lo hago, pero, no te sientas mal por eso, ¿Si? —y el otroasintió, sonriendo.

[....]

— Yo también le gusto — Jeongin abrió su boca y sonrió, abrazándolo.

— Sabía que este día iba a suceder tarde o temprano, Dios, me alegro, ¿Cómo lo hicieron? —Chan solo sonrió mientras levantaba sus cejas y comenzaba a jugar con el borde de su pantalón, carcajeando.

—Tuvimos sexo, le dije que lo amo, y el me dijo que igual me ama, ahora el va a terminar con Hyunjin porque no quiere que seamos amantes.

— ¿Y estás segura que la va a terminar? —asintió, señalando a un castaño que llegó hasta ellos y abrazó al pelinegro, dejando un beso en su mejilla.

—Entonces, le digo que quiero terminarlo... —Ambos asintieron —Estoy nerviosa, nunca había terminado una relación, siempre me terminan.

Chan solo lo vió, lo tomó por los hombros, y sonrió, dándole ánimos.

—Tú puedes, ¿Si? —asintió de nuevo, tragó saliva, y rió. Solo volvió a besar su mejilla y a caminar hacia el pelirrojo que igual estaba entrando a la escuela y lo detuvo.

Chan y Jeongin caminaron más cerca para escuchar.

—Ey-

—Hola, hermoso —un beso sonoro y Jeongin vio cómo el menor hizo un gesto, apartándose. —¿Pasó algo?

—Mira, la verdad es que no eres lo que pensaba y creo que lo mejor sería terminar porque...

—¿Perdón? ¿Te-terminar? —Hyunjin tragó saliva nervioso mientras veía a Felix ver nervioso el suelo, carraspeó. —Hey, Lix, mira, no-no no hay que terminar ahora, ¿Si? Es sólo que-

—No, yo quiero terminar, no eres lo que esperaba y pensé que me gustabas, pero-

—Tú eras la perra que estaba buscando mi atención...

Chan iba a salir pero Jeongin lo detuvo, rogando por una defensa del castaño.

—Y ahora tú estás siendo la perra que está rogando por mi, ¿Hay alguna diferencia?

—Lix, espera- por favor, ve- ¡Ven aquí!

Y un quejido del otro hizo que saliera del escondite, con el ceño fruncido y con los puños listos.

Así que en cuanto vio una pequeña marca rojiza en la mano de su menor, el vio a Hyunjin, y apretó su mandíbula.