Después de pasar toda la noche admirando la belleza de la luna ante una soledad jamás experimentada, se dio cuenta de las cosas que la mantenían unida a la hija mayor de los Addams. No podía quedarse más tiempo con ella a su lado.

En cuanto su transformación terminó, se cubrió con el suéter que había procurado no romper y se dirigió al lugar donde se había juntado con Ajax la noche anterior. El sol apenas comenzaba a salir y el fresco de la mañana le azotaba las piernas desnudas.

Al llegar rebuscó entre la maleza, la ropa que Ajax iba a prestarle. Aunque el olor de alguien conocido la detuvo de su búsqueda. Su rostro se volvió piedra al ver el suéter de Merlina y algo de su ropa en lugar de la ropa gigante de Ajax.

Iba a tener una seria conversación con el chico apenas se encontrara decente.

Entró a los baños cercanos al bosque, un montón de licántropos más se encontraban en el lugar. Intentó vestirse con rapidez a la vez que trataba de ignorar el aroma de la chica gótica que le golpeaba la nariz cada tanto. 

Cuando salió del cubículo se sintió un poco avergonzada al sentir la mirada del resto de sus compañeros en ella. El olor propio mezclado con el de alguien más solía considerarse un lazo de amor.

Ya eran alrededor de las 7 de la mañana, las clases comenzarían en cuestión de minutos pero ella se dirigía a la oficina de la directora Weems. Dio tres golpes a la puerta para avisar de su presencia antes de entrar.

Ajax ya se encontraba sentado en uno de los asientos frente al grueso escritorio de la directora. Ambos volvieron su mirada a ella apenas cerró la puerta.

— Me comenta el joven Petropolus acerca de tu situación. Y entiendo que quieras dejar la academia un tiempo — Se levantó de su silla para mantener firme su decisión — Pero estamos a mitad del año escolar y veo un poco imposible realizar su deseo.

— Usted no lo entiende — Ajax se había levantado de su asiento con molestia, incluso una de sus serpientes intentaba asomar la cabeza — Enid no puede estar mucho tiempo con esas emociones negativas, es un licántropo y ellos son muy sensibles. Ella podría-

— Yo sé lo que podría pasar, Petropolus. No por nada soy la directora de este lugar — Una de sus manos golpeó el escritorio, asustando a la rubia — Pero no puedo hacer nada. Mitad de año escolar y fecha de exámenes. No puedo ir dejar algo así.

— Tranquilo, Ajax — No quería que se metiera en problemas, así que lo tomó del brazo para intentar relajarlo. 

El sonido de la puerta al ser abierta bruscamente la hizo encogerse en su lugar. Malditas habilidades de lobo.

— ¿Está Enid aquí?

— Señorita Addams. Tenga más educación y toque antes de entrar — Larissa estaba casi segura que le sacarían canas verdes ese trío de jóvenes — Además, estamos hablando de algo privado.  

— Enid — La ignoró para intentar alcanzar a la licántropo frente a ella, Ajax lo evitó — Hazte a un lado, gorgona.

— No es momento, Addams.

— Créeme, lo sé. Pero no dejaré que se vaya sin decir nada — Se miraban a los ojos con furia. La mirada petrificante de Ajax ardía en llamas pero no era rival para la mirada de Merlina, era como mirar al infierno mismo.

— Sí van a hacer de esto una pelea juvenil, prefiero que salgan de mi oficina — Merlina le dirigió una mirada de odio a la directora, mirada que no la inmutó — Ahora.

Los tres salieron de la habitación como niños regañados. La tensión que se generó adentro había aumentado considerablemente. El chico tomó por los hombros a Enid para alejarla un poco de Merlina.

— ¿Quieres hablar con ella? — Él iba a tomar en cuenta los deseos de la rubia, si ella decidía no hablarle a la gótica, entonces lo haría realidad.

Enid lo miró a los ojos con decisión. Debía ser fuerte.

— Déjanos solas, Jax. Puedo con esto — Petropolus le tomo la cara para dejarle un beso en la cabeza y luego dejarla en el lugar. Demasiado cerca. -

Merlina vio la escena con disgusto, aunque su cara no lo demostró en absoluto, tal vez un poquito. Mientras veía a Enid tomar el valor para acercarse, ella se tomó su tiempo para detallar a la chica.

Inevitablemente su mirada se suavizó al ver que llevaba puesta la ropa que había tomado para ella y, por supuesto, su suéter. Sus ojos no podían apartarse de ella, era espantosamente adorable; sus manos que jugaban entre ellas nerviosas y el monólogo interno, que parecía estar teniendo, que hacía que caminara en círculos pequeños. Era cómo si solo acercarse a ella fuera una tortura. Podría acostumbrarme a eso. -

Sus orejas se calentaron al verse descubierta observándola. Pero su rostro no se inmutó.

— Entonces... — Ella misma comenzó la conversación — Te irás.

— Ese era mi plan. Irme a San Francisco algunas semanas. Descansar un rato de la rutina.

Merlina sabía que no era verdad, pero aún así asintió suavemente.

— No quiero que te vayas — Esas simples palabras derrumbaron el muro que Enid había construido hace tan solo unos segundo atrás — Quiero aclarar las cosas.

La Addams no se acercó, pero sus palabras eran firmes y no había ni una pizca de duda en sus ojos. No iba a ser infantil y llevarlo todo por la orilla por miedo a ahogarse. Iba a enfrentarse a ese enorme tsunami.

— Háblame con la verdad, no quiero más mentiras ni que evadas cosas.

— Seré sincera en su totalidad — Enid se cruzó de brazos esperando a que la gótica continuara — Sí, besé a Xavier y no voy a negarlo, pero quiero que sepas que yo no sé muchas cosas que tengan que ver con colores pastel, como el amor. Xavier me dijo que no era una excusa y que hice mal al jugar con ambos.

>> Pero jamás he tenido estas emociones "positivas" por alguien antes, o no de la magnitud en las que las siento ahora. Se sienten tan repugnantes y es como si me sentenciaran a la horca y fuera inmortal. No puedo expresarme como en mis novelas. No soy de palabras.

¿Se había dado cuenta que le gusta Xavier? Seguro estaba preparando todo esto porque lo había escogido a él y le parecía un final justo. Bueno, es que él es mejor en todo; sabe esgrima, es buen dibujante y comparte la habilidad de Merlina por tener visiones, es alto, guapo y su voz es linda. Y lo que es la cereza del pastel, es un chico. Serían la pareja perfecta

No sabe en que momento ella había descruzado los brazos y ahora jugaba con sus manos, o en que momento Merlina había comenzado a acercársele.

— Mi padre alguna vez me dijo que encontraría a el hombre perfecto para mi cuando menos lo esperara, no tomé en cuenta sus palabras. Creo que quizá debí pedirle un consejo o dos sobre el amor, así no estaríamos en este embrollo.

— Supongo que tu hombre perfecto es Xavier ¿no?

— ¿Qué? — La joven de trenzas estaba acercándose más y más — No.

Déjate de rodeos, eres una Addams ¿por qué no abres la boca de una vez?. -

— Enid, quiero... — No de nuevo, quería golpearse el pecho para obligar a su voz a salir. Tragó saliva para obligar al nudo en su garganta a bajar — .. quiero aprender a amar contigo.

>> Creo que me gustas, Sinclair.

— ¿Crees? — No sabe de donde salió esa pregunta, su cerebro estaba aún procesando lo dicho por la gótica.

— Según lo que me dijeron padre y madre por la bola de cristal, ese sentimiento nauseabundo que me provocan ganas de vomitar cuando estoy a tu lado, son en realidad mariposas en el estómago. No les creo nada de eso. Pero es diferente a lo que siento con Xavier.

— ¿ESTÁS DICIENDO QUE TE GUSTO?

— Eres lenta — Tomó un respiro para calmar sus ganas de ahorcarla — Pero sí, me gustas. De hecho ahora te odio por hacer que lo repita.

— Okey... okey — Se había puesto pálida de repente, parecía que se iba a desmayar o algo — Necesito tiempo para pensar.

— ¿Pensar en qué? Ya no hay nada que pensar. Te gusto, me gustas.

— Pero necesito saber si estoy haciendo lo correcto. Porque aunque hayas dicho esto y de alguna rara forma te estás disculpando, me decepcionaste de verdad y ya no sé si creer en ti. 

— Podemos ir lento. Pero no quiero que te alejes — Merlina no quería ser cursi, así que no le tomó la mano, pero jaló la manga su mismo suéter que ahora usaba Enid. Esto es tan humillante. - — Se siente como cuando vi legalmente rubia, solo que esta vez no me gusta el tipo de tortura.

— Hazme confiar en ti de nuevo. Porque quiero que sepas, Merlina Addams, que me vuelvo loca por salir contigo.

Merlina Addams no podía despegar la mirada del rostro de la chica rubia, de sus ojos o de sus labios.

— Yo también.

Y Enid Sinclair no pudo evitar plantarle un beso en la frente a la joven de trenzas.

— I can see you're scared of your emotions
I can see you're hoping, you're not hopeless
So why can't you show me?
Why can't you show me?
I can see you're looking for distractions
I can see you're tired of the acting
So why can't you show me? —

——

Muchas gracias por sus comentarios de amor <3

Yo sé que desean venganza y derramamiento de sangre de una única persona. Eso iba a hacer, de hecho la idea original era mandar a su casita a Enid y Merlina le escribiría cartas hasta que Ajax y Xavier se cooperaran para un celu y pudieran hablarse mejor. Pero me da tanta flojera hacer un formato para las cartas y además de que esta mamada sería más larga.

Fiiin, acepto reclamos, pero recuerden que Enid no ha perdonado a la infiel de Merlina y aun queda buen tramo para que vuelva a confiar en ella. Ya se la saben.

Moraleja: No se besen con nadie hasta que sepan lo que sienten y si sienten lo mismo por todos, valeverga son arrománticos.

-willy