El Guardaespaldas (1/?)
Miro con desagrado el boceto de un "vestido" en aquella hoja llena de manchas grises, todo borroneado lleno de líneas que sinceramente no dejaban ver en nada de que era un vestido, parecía un dibujo hecho por un infante quien solo agarro el lápiz e hizo rayones por todos lados. Una mueca se formo en sus labios, y sintiendo el enojo apoderarse de ella agarro aquella hoja de su cuaderno, la hizo una pequeña bola de papel y la arrojo hacia atrás.
Se sentía frustrada, cansada, y molesta. Apoyo sus brazos sobre la mesa, recostó su cabeza en ellos y miro por la ventana. La noche era hermosa, la luna llena decorando aquel cielo oscuro con su presencia y brillos, junto con las pocas estrellas que lograba notar. Levantándose de su asiento se encamino hacia la ventana, la abrió, y se apoyo con sus brazos el borde.
La ciudad de Nueva York, una ciudad hermosa, incluso en la noche mas oscura su brillo hipnótico resaltaba ante todo. La ciudad que nunca duerme, ese nombre le quedaba como anillo al dedo; Solo había pasado dos años y medio desde que se mudo a esta ciudad, y hasta el día de hoy no se arrepentía de nada.
Claro que tuvo que dejar muchas cosas en Paris, como a sus padres, su casa, y algunos amigos.. pero.. la oportunidad se le fue dada, y a pesar de todo, quería aprovecharla. Sonrió cuando el viento de la noche golpeo su rostro, era tan relajante. Su apartamento estaba en uno de los edificios mas alto de la ciudad, lo que le permitía disfrutar perfectamente de la gran altura.
Extendió su brazo hacia el horizonte, preguntándose.. ¿Qué se sentiria andar por los edificios?, ¿saltar por los rascacielos?, quizás suene como el sueño o el pensamiento de una niña pequeña, pero desde que llego siempre había tenido eso en mente. Negó por su tontearía. Ahora mas relajada se alejo, cerro la ventana y las persianas.
De repente el tono de su celular capto su atención, encendió la pantalla, la notificación mostraba que era un mensaje de Alya, su mejor amiga, desbloqueo la pantalla y leyó el mensaje. "Paso por ti en unos minutos". Decía aquel mensaje con algunos emoticones.
Bueno, de todas formas no iba a seguir dibujando. Envió un mensaje de respuesta, dejo su celular sobre una mesita y comenzó a ordenar su cuarto. Junto cada papel arrugado que en el suelo se encontraba junto con cada hoja rota. Todo metido en el cesto de basura. Luego guardo sus lápices y colores en su estucho, y finalmente su cuaderno de diseños, un cuaderno que siempre ha tenido con ella. Este lo dejo en una funda de color rosa con su logo de diseño, y lo guardo muy bien sobre una repisa.
No paso mucho cuando unos minutos después unos golpes en su puerta se escucharan. Sentada en el sofá con la mirada en el televisor dio el adelante para quien sea que tocara pudiera entrar. Y así fue, la puerta fue abierta por una chica de piel morena, ojos cafe con un toque dorado. Cabello Café con puntas anaranjadas atado en una coleta, unos lentes, y una vestimenta que consistía en una camisa anaranjada y encima de esta una chaqueta de cuero negra, pantalones de jeans y unas botas negras.
― Hola chica, ¿aburrida?. ―pregunto Alya, su mejor amiga, mientras le daba un sorbo a su vaso de café, de la marca Starbucks, por supuesto.
― Mas o menos ―Alya cerro la puerta detrás de ella, colgó su chaqueta en un perchero que estaba ahí y se sentó a su lado, colocando sus pies sobre la mesa― ¿Y tu?, ¿Qué tal el trabajo?.
― Estresante, como siempre, ya sabes como es J.J, espera todo para ayer. Aunque es mas fácil puesto que solo le interesan noticias relacionadas con cierta araña. ―le dio otro sorbo a su vaso. Marinette tenia que estar de acuerdo con eso, J.J era un hombre bastante gruñón, solo le toco conocerlo una sola ves y ya el hombre no le dio buena impresión. Sentía compasión por su amiga por soportarlo por varias horas― Pero olvidemos eso, pensemos en ti. ―coloco su vaso de café sobre la mesa y volteo hacia Marinette― Dentro de unos días será el festival de moda, donde presentaras tus nuevos diseños. Y Audrey ya hizo polémica diciendo que será algo que le volara la mente a todos.
― Estoy nerviosa Alya, es decir.. esperan mucho de mi.. ademas.. ―al ver como apartaba la mirada, Alya sabia que ocurría así que para tranquilizarla sujeto su mano.
― Esta el tema de la amenaza de Lila. ―Marinette asintió sin muchos ánimos.
Lila Rossi, una antigua compañera de escuela, de intercambio para aclarar. Desde el primer momento en que la vio no le cayo muy bien, y no es porque coqueteaba con Adrien Agreste, su antiguo amor platónico, bueno si, pero ademas de eso.. Lila no daba buena vibra, como se suele decir. Y vaya que tenia razón pues Lila resulto ser una mentirosa y una manipuladora, siempre mintiendo con motivo de dar lastima y conseguir lo que quisiera.
En su momento creyó que no volvería a saber nada de ella, pero el destino parece querer jugarle una mala pasada. Actualmente, Lila es la modelo estrella de una empresa de moda Italiana, y se han encontrado varias veces a lo largo de su carrera de moda.
Como se puede imaginar no fue nada agradable. Varios momentos Lila ha tratado de sabotearla, o de perjudicarla en su trabajo, ademas de claro, dejarla en ridículo, suerte o no, nunca lo ha conseguido, pero eso no quitaba el hecho de que era preocupante.
Y como tenia que pasar, cuando un evento importante así se acercaba, Lila no tenia otra mas que actuar. De momento ella no hizo nada, pero sabia perfectamente que algo se traía para ese día, algo malo. El temor era no saber que. Y todo se puede esperar de ella.
― Tranquila amiga, ya veras que como siempre no tendrá éxito. Ahora, ¿Qué tal si dejas de pensar en lo que pasara ese día?, y mejor te relajas.
― Es mas fácil decirlo que hacerlo.. temo de lo que sea capaz esta ves, tomando en cuenta que sus últimos intentos fallaron.
― Vamos.. no creo que sea capaz de tomárselo tan en serio como para hacer algo que pueda lastimarte.. ¿verdad?. ―Alya lo dijo de una forma de la que estuviera tratando de convencerse así misma. Marinette por otra lado, solo se mantuvo en silencio pensando en lo dicho, y por mas que trataba de pensar lo contrario, nunca se sabia de Lila.
Ambas amigas guardaron silencio, incómodamente se quedaron sin palabras para poder seguir la conversación, es decir, ¿Qué mas se puede decir?, Marinette estaba en una situación de estrés y Alya la conocía bastante bien que aunque tratara de distraerla su amiga era tan terca que seguiría buscando las forma de regresar al mismo tema.
La pelicafe, harta de esto, estaba a punto de decir cualquier chorrada como para la menos poder sacarle una risa a su amiga, cuando el tono de su celular se escucho. "Miracle" de la banda "The Score" se hizo presente rompiendo la incomoda atmosfera que se había formado. Alya saco el celular de su dispositivo y respondió a la llamada, y una vos masculina se escucho del otro lado.
― ¡Buenas noches Alya! ―la voz se escuchaba alegre, ademas del sonido de estar masticando algo.
― ¿Ned?. ―pregunto la morena al identificar la vos― Hola, ¿Qué sucede?.
― Pues estoy en tu casa ya que te traje las fotos que me pediste de Spidey. ―contesto Ned y el sonido de un refrigerador cerrándose se escucho de fondo.
― ¿De nuevo entraste a mi casa sin avisar?, espera.. por favor dime que no te comiste los pastelillos que estaban en el refrigerador, son de Nino, y ya sabes como se pone cuando tocan uno de sus pastelillos de tortuga. ―el silencio es lo único que se "escuchaba" del otro lado― ¿Ned?.
― Estoy muerto... ―hablo tras un rato en silencio, y nuevamente se lo escucho masticado.
― ¡¡Y te los sigues comiendo!!. ―ante eso Marinette no pudo evitar comenzar a reír, era graciosa ver la interacción de los dos, parecían casi hermanos. Al fin algo bueno que pudo alegrar un poco su noche.
― ¿Esa es PequeNette?, reconociera esa bonita risa en cualquier parte. ¡¡Hola PequeNette!!.
― Hola Neddy. ―Ned Leeds, un amigo que hizo a sus pocos días de llegar a Nueva York, es un chico agradable, un poco gordito, lo que el dice, que trabajaba con Alya en el Daily Bugle, manejando las cosas que tengan que ver con la web― ¿Cómo estas?.
― Estoy bien, gracias por preguntar, algo atareado con el tema del Daily, manejando su sitio web, y arreglando una que otras cosas. En fin, ¿tu como estas?.
― Bien..
― Claro, si llamas estar "bien" a tu situación, pues si, estas muy bien.
― ¡Alya!. ―se quejo Marinette, no queriendo que Ned supiera ese tema, no quería preocuparlo a el también, pero ya era tarde. Este había escuchado todo.
― Perdonen que pregunte.. pero.. ¿Qué quieres decir con eso?. ―genial, lo que no quería paso. El tono de Ned dejo de ser alegre y ahora se le escuchaba preocupado.
― Pues, digamos que Marinette tiene un pequeño problema con una ex compañera. Quien, desde siempre a tratado de hacerle la vida imposible, ahora con la llegada del festival de moda, tememos que ella trate de hacer algo nuevamente.. ―dijo Alya, ignorando por completo las malas caras que le estaba dando Marinette― Así que.. estamos pensando en como solucionar esto, al menos yo. ―hubo un pequeño silencio del celular, luego se escucho una botella siendo abierta, y nuevamente la voz de Ned.
― Si creen que esta chica puede hacer algo malo.. o algo tan extremo como dañar a PequeNette.. ¿Por qué no buscar ayuda?, quizás algo de protección.
― ¿Protección?, ¿te refieres a algo así como un guardaespaldas?. ―pregunto comenzando a interesarse en la propuesta.
Por otro lado, Marinette no supo como reaccionar ante esto, ¿un guardaespaldas?, ¿era necesario llevar las cosas a ese extremo?. Pero por otro lado, se sentiria mas tranquila, que demonios, ¿de verdad estaba considerando algo así?, la falta de sueño le estaba afectado.
― No estarán hablando en serio.. ¿no?. ―pregunto Marinette casi riendo.
― ¿Por que no?, vamos, la idea puede escucharse alocada, pero creo que seria lo mejor para que puedas trabajar tranquila. Alguien cuidándote seria algo bueno.
― Ademas, no seria necesario que busques un guardaespaldas de la nada, tengo un amigo que necesita trabajo, el podría trabajar para ti y de esa forma ambos se beneficiarían. El te protege y tu le pagas, simple
― No lo se Ned, es decir.. no me da mucha confianza. ―se cruzo de brazos y medito un poco en la propuesta, estaba muy cansada para esto.
― Por favor, el necesita dinero.. al menos intenta esto por unos días.
― Bien. ―suspiro rendida, estaba muy cansada como para discutir― Puede intentarse.
― ¡¡Gracias PequeNette!!
― Esperen. ―interrumpió Alya claramente no muy de acuerdo a esto― Todo estaba bien asta el punto de tu amigo Ned, ¿Cómo sabemos que ese amigo tu yo es capaz de cuidar a Marinette?, ademas de ser de confianza claro.
― Créeme Alya, si el no puede proteger a Marinette, entonces nadie puede. Confía en tu amigo Ned. A todo esto, ¿vendrás?, ¿o simplemente te dejo las fotos?.
― Iré, de paso veré si la pastelería sigue abierta para comprar un poco mas de los pastelillos de Nino. Ademas de darte tu paga. Por cierto, ya que estas ahí, ve calentando la comida que esta en el microondas.
― Ya rugiste.. por cierto PequeNette, mañana llevare a mi amigo a tu estudio para que lo conozcas, y juzgues tu misma que tal.
― No se como llegamos a esta situación.. ―murmuro Marinette sin saber muy bien que fue lo que paso, ¿acepto tener un guardaespaldas?.
Cuando Alya se fue, y ella se quedo nuevamente sola, no hizo otra cosa mas que prepararse para dormir, aunque fueran las 9 pm, estaba exhausta. Luego de darse un baño, de colocarse su pijama, se recostó por fin, sintiendo un gran alivio cuando su espalda tuvo contacto con el suave colchón. La charla de hace rato aun seguía vigente en su mente, aun pensaba que era algo exagerado, pero.. ya había aceptado, y quizás sea algo bueno, Ned dijo que su amigo necesitaba trabajo, si podía ayudar.. entonces al menos lo intentaría.
A la mañana siguiente la alarma comenzó a sonar, la apago mientras terminaba de atarse su cabello. Como lo estuvo haciendo desde hace rato se hizo un rodete, pues ya no podía andar con sus coletas al trabajo, de cierta forma la hacían ver de manera mas infantil, y no quería eso, tampoco quería seguir siendo la misma, por eso comenzó a levantarse mas temprano. Ya no quería mas problemas por impuntualidad.
Se miro en el espejo, su rostro con un poco de maquillaje, no demasiado como para resaltar, se cómodo mejor el cuello de su camisa y finalmente se fue a preparar su desayuno, que no fue tardío puesto que simplemente fueron algunos huevos revueltos con un batido de plátano. Tras agarrar sus cosas, su cuaderno de diseño lo mas importante, y de no olvidar nada como por ejemplo dejar alguna cosa enchufada, como su plancha de pelo. Salió de su apartamento.
El camino al trabajo fue bastante rápido, y tranquilo, normalmente era mas largo, quizás le pareció corto por el hecho de que se la paso todo el camino mirando por la ventana con un único pensamiento. ¿Hizo bien?, bueno, no es como si hubiera aceptado nada aun, tampoco contrato a nadie. Aunque Nedy dijo que llevaría a su amigo para conocerlo y ver que tal.
Y no iba a negar que tenia un poco de curiosidad por ver quien era ese tal amigo de Nedy. Pero eso seria para mas tarde.
Ahora en su estudio, en su zona de confort, en su lugar especial. El único lugar de todo Nueva York donde podía relajarse, se concentraría por fin en terminas sus diseños. Mas bien en terminar de crearlos. Observo un maniquí, con unas telas rojas formando un vestido incompleto. Sonrió para si misma, ahora si podía actuar.
No sin antes poner algo de música, Jagged Stone, pese a los años seguía siendo su artista favorito, y sus canciones sin duda lograban causar las emociones que se proponía. Comenzó con el vestido, y si, como se podría pensar en este tipo de trabajo, y por el festival, que tendría ayudantes para terminar mas rápido, y si los tiene, pero les pidió que le dejaran trabajar sola.
La razón era simple, aunque sonara mal, no confiaba en otras manos para dejar sus diseños como ella deseaba para el festival. Por mas que tardara, prefería hacerlo ella para que fueran cien por ciento Marinette. Ademas, no es como si les faltaran tanto.
Cinco y media de la tarde, marcaba un reloj de gato colocado sobre su mesa de trabajo, el cielo teñido de un tinte anaranjado adornaba la ciudad. Cerros sus ojos y soltó un suspiro con pesadez. Se dejo caer con cansancio en su silla, dejando todo su peso apoyado en el respaldo. Le dio un sorbo a su vaso de café , el cual debía ser su sexto o séptimo en todo lo que llevaba del dia; Sus parpados pesados, y sus manos ligeramente adoloridas por todos los pinchazos que se dio con la aguja, sus pies ligeramente hinchados por estar con zapatos todo el tiempo, hacían que en ese preciso momento quisiera agarrar todas sus cosas e irse a casa.
Pero... ver todos sus proyectos casi terminados hacían que todo ese dolor valiera totalmente la pena. Un gran bostezo salió de su boca, estiro su cuerpo haciendo que sus articulaciones emitieran un sonido, se quito los zapatos, se desabotono algunos botones de su camisa, y con sus brazos cruzados se apoyo sobre la mesa. Su estomago gruñía por algo de comida, ya que no fue consentido en todo el día, pero el cansancio era mas fuerte.
Justo cuando estaba por relajarse sonó su celular tomándola por sorpresa; Abrió sus ojos de par en par y en un rápido manotazo tiro todas las cosas de su mesa como pinturas telas o botones solo para agarrar su celular.
― ¿H.. hola?. ―titubeo un poco a causa del cansancio.
― ¡¡Hola PequeNette!!. ―se sintió un poco mas relajada cuando escucho las voz animada de Ned― Quería decirte que mi amigo ya esta en camino a verte. Perdón si no puedo acompañarlos, pero J.J anda mas intenso que nunca, así que.. ya te imaginaras el resto.
― Aja.. ―contesto sin muchas ganas, dispuesta a volver a cerrar sus ojos y dormir. Cuando de golpe logro reaccionar― Espera... ¡¡¿Qué?!!. ―pregunto sentándose firme en su silla― ¡¡¿Cómo que tu amigo esta viniendo?!!.
― Sip, estará ahí en.. unos pocos minutos.
― ¡¡Neddy!!. ―grito algo enojada― ¡Pudiste haberme avisado antes, tengo todo el lugar hecho un desastre, ademas.. ¿Cómo es eso de que no estarás?, ¿piensas dejarme sola con una persona que ni siquiera conozco?. No, tengo mis limites, mejor llama a tu amigo y pídele que se vuelva... ¿Neddy?, ¡Ned!. ―le había cortado, del otro lado no se escuchaba nada mas que el tono de la llamada terminada.
Thwipp!!.
Un sonido algo peculiar interrumpió cuando estaba a punto de gritar todas las groserías que se sabia, pero con cariño, a su amigo. Poco a poco fue alejando su celular sobre su mesa, y lentamente comenzó a voltearse. En su ventana, no vio nada. Eso era bueno, quizás lo imagino. O eso pensaba hasta que levanto su mirada.
― Hola.. buenas tardes Señorita Dupain Cheng. ―saludo con notable nerviosismo. El silencio entre ambos se hizo presente. Marinette parpadeo un par de veces, incluso froto sus ojos creyendo que estaba alucinando por la falta de sueño. Y cuando noto que el seguía ahí, estuvo a punto de gritar― No espere, por favor no grite ¡soy bueno!. ―exclamo bajando de la pared, aterrizando perfectamente en el suelo― ¿E.. es un mal momento?, puedo irme si lo desea. ―señalo la ventana detrás de el. Notablemente confundido en la situación.
― ¿Qu.. que haces tu aquí?, ¡¡wow!!. ―al querer levantarse de su silla tropezó con unos rollos de tela que estaban tirados. Pero no llego a tocar el piso cuando una telaraña se pego a ella sosteniéndola.
― ¿Se encuentra bien?. ―pregunto el haciendo un poco de fuerza para enderezarla― No se preocupe... se deshará en un rato. ―dijo pensando que ella se enojaría por la telaraña en su ropa.
Ignoraba el hecho de que la telaraña era lo ultimo en lo que estaba pensando Marinette, quien no apartaba la mirada de el. Aturdida, confundida, y algo temerosa era como ella se sentía en ese momento, y debida a eso solo pudo llegar a decir una cosa.
― Hola.. ―si, eso fue todo lo que su boca logro decir.
― Em.. hola.. ―devolvió el saludo levantado su mano y moviéndola de un lado a otro. Y nuevamente el silencio se hizo entre ambos Marinette dio varias bocanadas de aire para intentar tranquilizarse y tratar de analizar lo que paso.
Primeramente, estaba el hecho de que un hombre de traje rojo y azul estaba en su estudio, con sus manos en su espalda mirando todo a su al rededor, notablemente nervioso. Y segundo.. ¿Qué hacia el ahí?. Spider-man, el héroe de Nueva York, el mayor héroe local que tenia la ciudad, estaba en su estudio, ¡frente a ella!. ¡¿Como se supone que deba reaccionar?!!.
Pudo apreciar cada detalle de el, lo mas llamativo su traje, que a simple vista estaba hecho de Lycra y Spandex, para una diseñadora de moda no era difícil notarlo. Sus ojos blancos, sus patrones de telaraña, y lo mas llamativo, una enorme araña de color blanco en su pecho. Inevitablemente no podía negarle a sus ojos ver "de mas", era innegable que el héroe arácnido tenia una figura.. muy atlética, y por lo pegado que estaba el traje a su cuerpo, no dejaba nada a la imaginación.
― Tu.. tu traje es bonito. ―dijo ella algo incomoda, tratado de evitar que el ambiente se volviera pesado― Aunque el diseño es llamativo.. se ve incomodo
― Gracias.. yo mismo lo hice. Y si, da comezón y esta un poco ajustado de la entre pierna.
― Si.. puedo notarlo..
― ¿Qué?. ―rápidamente cubrió su boca por su comentario. Mientras que el héroe, se veía sorprendido, y podría notarlo por la expresiones de los ojos de su mascara.
― Bueno.. em.. ¿Señor Spider-man?. ―dijo Marinette tratando de ignorar lo anterior.
― Spider-man esta bien.
― De acuerdo, Spider-man, ¿me podría decir porque el héroe de Nueva York esta en mi estudio?.
― Bueno Señorita Dupan Cheng, estoy aquí porque un amigo me la recomendó. Dijo que usted ofrecía trabajo, uno de guardaespaldas, así que.. vine por eso, por el trabajo.
― Espera.. ¡¿Eres el amigo del que hablaba Neddy?!. ―Spiderman asintió lentamente. Confundido mas por su reacción, ¿acaso Ned no le dijo que vendría?, con razón su reacciones.
― ¿Debería irme?.. siento que la estoy incomodando.
― No.. no, es solo, no es lo que me esperaba. Cuando Ned me dijo que un amigo suyo vendría.. me imagine a alguien mas normal. ―dijo Marinette masajeando su cien con clara molestia.
― Auch.. ―Dijo Spider-man sujetando su pecho fingiendo dolor
― No entiendas mal, por favor, sabes a lo que me refiero. ―Ya mas calmados, ambos, lo invito a tomar asiento. Por lo menos, si el héroe tuvo la decencia de venir, debería tratarlo como un invitado― Regresando al tema, Spider-man. Es cierto.. que estoy "contratando" a alguien para que me proteja.. pero en realidad es algo que no veo necesario, solo lo hice por las insistencia de Ned y de una amiga llamada Alya. Pero al caso.. quiero saber.. ¿por qué el tu?, un héroe, ¿estaria interesado en este trabajo?, de proteger a una simple civil de entre tantos.
Su pregunta no estaba del todo descabellada. Porque de cierta forma tenia razon, ¿Por qué de todas las personas el héroe de Nueva York?.
Spider-man se esperaba esa pregunta, y aun así, no sabia como responderla. Llevo su mano a su mentón, y los lentes de su mascara se entrecerraron, dándole una expresión de pensativo, aunque a los ojos de Marinette era mas de comedia.
― La verdad señorita Dupain Cheng.. estoy desesperado, necesito trabajar urgentemente. ―soltó con total sinceridad, con un tono completamente deprimido que por un momento hizo que el cuerpo de Marinette tuviera un pequeño escalofrió. Fue raro― Para ser sincero.. no me esta yendo muy bien economicamente, ni socialmente, en general.. no estoy bien.
― ¿De verdad?. ―pregunto Marinette ligeramente sorprendida. Era de admitir, que no se esperaba algo como eso― Pero.. eres Spider-man, yo creía, como todo el mundo, que al tener poderes.. ser reconocido por todos, ser una figura comerciante, diablos hasta tienes tu propio cereal, tendrías una vida.. ya sabes, ligeramente cómoda.
― Spider-man puede ser muchas cosas, pero la persona que esta debajo del traje.. no es nada mas que un perdedor, sin amigos, sin vida social, sin vida amorosa, solo un nerd amante de la ciencia. ―contesto soltando una pequeña risa de ironía― Fui despedido de mi trabajo anterior, mi casero me esta presionando cada vez con la renta.. y apenas me alcanza para hacer algunas compras. Así que cuando me hablaron de este trabajo, vine de inmediato.
― Pero.. ¿Por qué viniste como Spider-man?. ―por la pregunta los ojos de la mascara de Spider.man se expandieron, y nerviosamente se rasco la mejilla.
― Como dije.. no podía permitirme fallar, así que pensé.. que si venia como Spider-man, y no como Pe.. digo, y no como la persona debajo del traje, tendría mas oportunidad.
― ¿Querías aprovecharte de tu estatus de héroe?. ―se cruzo de brazos y el héroe podía sentir como se encogía por la mirada de reproche.
― Se que no se escucha bien.. pero no lo pensé en ese momento. Aunque e de admitir.. que Ned influyo un poco. ―para Marinette eso era mas creíble.
Marinette lo pensó un poco. Las cosas parecían totalmente descabelladas; Miro al héroe, sus grandes ojos blancos estaban fijos en ella, movía levente su mano, quizás por los nervios de saber cual será su respuesta. Cerro sus ojos recordando cuantas veces había visto en las noticas las hazañas del arácnido, cada persona que salvo, cada delito que detuvo, cada niño que ayudo. Quizás esto era una oportunidad, para dar un gracias por todo. Con eso en mente, finalmente había tomado la decisión.
― Escucha, Spider-man ―este se enderezo en su asiento de inmediato― el trabajo que estoy dando solo es por un par de días, hasta el festival de moda. ¿Entiendes?. ―el asintió― Bien, tu has ayudado a la sociedad, y eso es algo que admiro, pero no creas que por eso te estoy dando una clase de favoritismo. Solo, digamos.. que te estoy devolviendo el favor.
― ¿Eso significa que usted..
― Mi madre siempre decía, "has algo bueno por los demás, y ellos lo harán por ti". Y eso aplica contigo ahora mismo. ―sonrió, se acerco hacia el causando que este se pusiera de pie. Y extendió su mano― Te contrato. ―el héroe, aturdido, estrecho su mano, y Marinette coloco su mano libre sobre la del héroe, dándole un pequeño apretón― A partir del ahora, estoy a tu cuidado.. ¿si?.
Quedo en silencio, contemplando esos orbes azules que lo miraban con ternura, y hasta con admiración. Sintió su rostro arder, gracias a la mascara eso no se notaba. Su mano aun seguía sujetada por Marinette, y a pesar de los guantes, podía sentir la suavidad de sus pequeñas manos.
― S.. si. ―respondió nerviosamente. Y Marinette mas que complacida, soltó con suavidad la mano del héroe.
― ¿Puedes empezar mañana?. ―Spider-man asintió, diciendo que no habría problema― De acuerdo.. esta es mi dirección. ―escribió lo dicho en un pequeño papel y se lo entrego― Ven mañana, y te explicare a detalle todo.
― ¿A que hora debo estar?.
― Seis y media estará bien. Te estaré esperando.
Unos pocos minutos después, el héroe se había ido y ella quedo completamente sola en su estudio. Como anteriormente hizo, se tiro de lleno en su asiento, dejando caer sus extremidades por el cansancio. Y ahora, por el dolor de cabeza que le provoco la situación.
― Voy a matar a Ned. ―murmuro Marinette, cerrando sus ojos, dejándose vencer por el cansancio. Tratando de al menos, relajar su mente.
Por otro lado. Spider-man, aterrizo sobre el marco de una ventana, la cual abrió lentamente y pegado a la pared comenzó a adentrarse en la habitación. En el techo, estiro su pie y cerro la ventana. Luego sin mas se dejo caer.
Se quito la mascara, y la arrojo sobre su escritorio la cual estaba llena de dibujos, pequeños aparatos, chips, y algunos cartuchos de sus lanzadores. Algunos mechones rebeldes de su cabello cayeron sobre sus ojos, los movió un poco, y se quito la parte de arriba de su traje. Y así como estaba, se tiro a su cama.
― ¿Quién lo diría?.. volví a verla. ¿Se acordara de mi?.―con esa pregunta rondando su mente, cerro sus ojos. No sin antes programar su despertador.
----------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro