Pues hay dos cosas:

Primero:Le escribí una carta de confesión a mi crush y se la deje en su mochila.

Los nervios me dieron la misma tarde y las miles de preguntas surgieron "¿Me habré equivocado? ¿No debí hacerlo? ¿Y si se da cuenta que fui yo?"

Y bueno, hasta ahora no he sabido nada,ni siquiera sé si ya la encontró.

Segundo: Hoy entendí que no iré a la universidad que quiero.

¿Me dolió? Por supuesto que si

Lo sentí en mi corazón, el dolor de saber que no podía estudiar lo que quería.

Ahora me debo limitar a estudiar lo "posible" en mi ciudad natal.

Que debo decir es un asco,la educación a nivel universitario aquí está muerta.

La Universidad a la que iré,según yo es de "pobres".

Es para aquellos a los que sus padres no tuvieron dinero para enviar a otra universidad. ( Qué es mi caso)

Nunca quise estudiar en esa universidad pero es la única que tiene lo que quiero.

Y para mi mala suerte,soy una idiota en todo y no tengo ningún otro talento más que el de la escritura.

Mis padres quieren que estudie inglés para obtener un diploma,¿Qué no entienden que no sé inglés? Y mis ganas de estudiarlo no existen.

Sólo me mandan a una clase a donde no prestare atención,no me esforzarey en definitiva, reprobare.

Ellos simplemente no parecen entenderlo.

Ya lloré. Pero siento que aún hay más de donde vino.

Quiero seguir llorando pero ¿Por qué no sale? ¿Ya no duele? ¿Ya no soy capaz de llorar?

Ya no sé que será de mi...

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(Quitando lo serio y lo depre,¿Debería conseguirme un Suggar Daddy?)