Ya es de noche estamos en un pueblo que ni si el nombre pero ando muy molesto conmigo mismo deje morir a mi mejor amigo Edwin..

Hoy en la madrugada seguimos avanzando sin resistencia alguna y a mi capitán se le ocurrió la gran idea de mandar un grupo de reconocimiento a unas granjas cerca de la vereda del río, "Vamos amigo será fácil" Edwin siempre de optimista a todo, fuimos 7 hombres para investigar posibles enemigos en la zona al llegar no vimos nada solo un nido de ametralladora abandonado dos soldados se acercaron y de repente hubo una explosión y sus partes salieron volando en toda dirección y quedó una pequeña nube de sangre que se disperso rápido todos corrimos a cubiertos pero nos tenían rodeados, comenzamos a disparar en todas las direcciones pero sin ver de dónde venía el enemigo eran invisibles.

Éramos solo 5 soldados y estábamos luchando contra un pequeño ejército belga que estaba de guardia en esas granjas, queríamos pedir ayuda a nuestra unidad pero la radio fue dañada por la exploración solo estábamos nosotros hay en una pequeña cabaña de madera mientras una gran lluvia de balas caí sobre nosotros.

Uno de los soldados intento regresar una granada pero murió baleado luego de sacarla de la cabaña, las municiones ya se estaban agotando y queríamos irnos rápidamente de ese lugar.

"Edwin ya casi no tengo balas" el me miró con cara de preocupación pero se le ocurrió la gran idea de salir corriendo por la parte de atrás hacia los árboles uno a uno fuimos corriendo, yo quedé con el en la cabaña " Ve yo te cubro tengo más municiones que tu", me dijo sonriendo "me sigues amigo" fue las últimas palabras que le dije antes de salir corriendo hacia los árboles al voltear la mirada el seguía en la cabaña y cuando quiso intentar salir corriendo un cohete impacto en su cuerpo, su cuerpo salió volando en muchas direcciones fue tan brutal su muerte que muchos pedazos cayeron cerca de los árboles donde estaba yo, tuve que seguir corriendo mientras el enemigo nos seguía, cuando llegamos de nuevo al camino mi unidad llegó para ayudarnos. En segundos los belgas fueron eliminados rápidamente en ese momento sentí alivio ya que pensaba que ese sería mi último día.

El capitán ordenó seguir, le dije para recupera las placas de Edwin y del otro soldado alemán que murió, el se negó pero en un momento de descuido me regresé rápidamente y encontré solo la del soldado pero la de mi amigo Edwin nunca la pude encontrar, al regresar con mi unidad seguimos avanzado teníamos la orden de llegar a París lo más rápido posible.

Madre no sé si seguiré siendo el mismo chico de siempre no sé si regresaré a casa algún día pero te quiero decir que te quiero y agradezco cada cosa que hiciste por mi, la gente habla de un cielo o infierno pero creo que está guerra es el verdadero infierno, a veces no duermo bien tengo pesadillas por cada maldita muerte que echo, y ahora me quedé sin mi mejor amigo Edwin no conocí su apellido ni de dónde era, pero ojalá que su familia pueda cumplir el sueño de él...

Aton Bauer 1940