Capítulo 10: El toro de Falaris
Viernes 30 de agosto:
Hace un mes ya desde mi última víctima y la verdad ya me siento calmado porque al fin se que mis hijos están bien y la zorra de mi mujer me ha pedido el divorcio, la muy puta se quiere quedar con todo luego de que me abandonó, además de quitarme a mis hijos me quiere quitar lo poco que me queda.
Hoy quedó en que venía para llegar a un acuerdo sin nesesidad de ir a juicio. La ansiedad me está matando pero no quiero tomarme la medicación eso es para locos y yo no estoy loco para nada.
Ya está aparcando el coche; por Dios que odio más grande le tengo a esa víbora, pero la verdad no sé puede ocultar y la verdad es que está más buena que nunca. Pero bueno me tengo que olvidar de eso y centrarme en el daño que me ha hecho esa grandísima hija de puta. Por su culpa perdí toda mi vida y me he co vertido en un Don nadie que no tiene ni para comer.
Si ella piensa que se va a salir con las suyas está muy mal. Bueno alomejor no tanto porque no paro de mirarle las tetas en lo que me habla, ¡Uff! Que calor mad tonto me está dando y creo que a ella también, porque se está desnudando; <<espera>> ¿ Cómo que se está desnudando? Ella piensa que con un polvo voy a olvidar todas las pintadas que me hizo, pero no tiene idea.....
¡Ohh! Pero es que mira que culazo a la mierda todo Gonzalo dale la mejor follada de su vida. Ahora es que recuerdo porque fue que me casé con ella. Menudo arte para chuparme la polla tiene está tía.
¡Oh dios! Está sacando un dildo de su bolso, hace mucho que no hacíamos esto, pero como me conoce la desgraciada, sabe que eso me encanta. Sin dejar de chuparme la polla comenzó a masturbarme lentamente y poco a poco fue bajando su lengua hasta llegar a mi ano, que rico se sentía, la verdad extrañaba mucho esa sensación. Introdujo su dedo en la boca y luego de monarko bien con su saliva me lo metió bien rico por el orto y luego de eso hizo lo mismo con el dildo y comenzó a meterlo y sacarlo de mi culo.
Que pervertida es, le encanta jugar con mi trasero. De un momento a otro metió el dildo completamente y se me trepó encima para moverse violentamente como con ganas de que me corriera dentro de su vagina. De un momento a otro la exitación me fue poniendo la mente en blanco y mientras sus manos apretaban suavemente mi cuello recordé que la misma persona que me daba placer era la que me había desgraciado la vida. Así q con mucha furia estire mi mano hacia la mesa de noche y con le golpee con la lámpara en la cabeza callendo ella completamente desmayada en la cama.
Su cabeza no para de sangrar, pero ella ya está recuperando el conocimiento así que la llevo hacía “EL PARAÍSO” . Esta mujer se merece lo peor del mundo así que usaré el toro de Falaris, la voy a cocinar viva. La mordaza en su boca no deja que los gritos se escuchen fuera de la casa. Aún seguía desnudo pero está era una ocasión especial así que luego de sacarme el dildo del ano me vestí con mejor traje y me fumé un puro junto a ella en la q sentía el agradable aroma de su piel como se quemaba.
No se ni como ni cuando pero solo en un segundo mi casa se llenó de policía. Eso parecía la misma comisaría. Esos guarros me arrestaron como si fuera un criminal, yo que soy un distinguido psicólogo. Ya no queda respeto en esta sociedad de hoy en día.
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