Día 15 - Enero
Querido diario:
La casa está en llamas. Los recuerdos de Jorge se han desvanecido en la ceniza de mis recuerdos. La nieve cubre lo que en su día fue mi hogar.
No estoy quemada, no estoy herida.
Simplemente estoy vacía por dentro. Y sigo escuchando sus voces, la de aquellas personas que nombran mi pasado.
Rosa ha salido del hospital, querido diario. Y a mí solo me quedan ya 5 días para saber la verdad.
¿Alguna vez te dije que Rosa es más que una amiga para mí? Es mi hermana. Es la única en el mundo capaz de soportarme y reír conmigo; llorar ante mi soledad y disfrutar de mis momentos.
Pero ahora ella se ha marchado muy lejos.
Y solo me queda guarecerme de la nieve con mi abrigo.
Todavía puedo ir allí y recuperar el baúl de los recuerdos.
Tal vez cuando lo abra sea demasiado tarde, pero tengo que hacerlo en algún momento.
¿Crees que podré vivir así, querido diario?
Mis manos están heladas ahora, y no son capaces de escribir de forma correcta.
Mis piernas empiezan a fallecer.
Mi cuerpo empieza a perder su brillo.
Tengo que seguir viva unos días más.
Aunque la calle sea mi cobijo esta noche.
Y tú, querido diario seas mi almohada.
¿Sabes lo que hay en ese baúl?
Están todos aquellos objetos de Jorge que fui guardando en momentos de su vida importantes.
Cuando nació, cuando creció… cuando murió.
Porque incluso el día de su muerte pude guardar uno de sus pequeños guantes manchado de barro en aquel baúl.
Y lo cerré para siempre.
También introduje en él algunas de las palabras que Él me decía.
Tenía la esperanza de que esas palabras se quedasen allí para siempre, y nunca salieran.
Pero antes de eso, Él acabó con mi persona.
Porque Él no tiene corazón.
Adiós, querido diario.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro