Querido diario:
Lo he encontrado.
No es el mismo Jorge que antes.
No es el mismo de nunca.
¿Recuerdas cuando mamá te habló del accidente?
¿Recuerdas cuando murió Jorge?
En ese accidente, el único herido fui yo.
Pero mamá pensó que era Jorge.
Me cuidó todos los días en el hospital.
El verdadero Jorge miraba desde la puerta, reacio. Ahora estaba abandonado a su suerte.
¿No crees que éramos muy pequeños, querido diario?
Tal vez las fechas estén mal colocadas.
Tal vez Jorge no tenía 5 años, ni yo tampoco; sino más bien 15.
15 años es una edad razonable para huir de casa, ¿no crees?
15 años duraron mi madre y mi padre.
15 años tenía Jorge cuando, en un alarde de superioridad se marchó de casa.
Mamá entonces pareció quebrarse.
Su mente veía a Jorge en la camilla, pero no veía a Jorge en la puerta.
Sus dos Jorges se habían vuelto uno solo.
Ahora solo existía el verdadero.
El hermano no existía ahora.
Existía Jorge.
Menudo error más rocambolesco, ¿no crees?
Pensaba que yo era él.
Pensaba que él era yo.
Y sin embargo, ella no rectificó de sus errores.
Sin embargo, Él hizo que rectificara.
No encontraba a Jorge.
La acusó de todo lo que había ocurrido.
La agredió como nunca, mientras, de nuevo, podía observar la escena.
Pero esto, diario, es otra historia.
Buenas noches.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro