Llegando la noche Tsuna se encuentra nuevamente en la casa de los Arcobaleno, lástima que esta aun en shock...

En un momento Tsuna se retira de la cocina para avisarle a Kyoya y Mukuro que la cena ya está y aunque Hayato menciona ligeramente la extraña actitud ni Enma ni Spinner ponen completa atención y van rápidamente a ver que cocina el menor...
Lo que vieron les dejo un miedo terrible, debido a la extraña combinación de ingredientes que parecían pelearse entre sí.

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A la mañana siguiente Tsuna entra al colegio un tanto pensativo aún, ya que parece costarle olvidar lo sucedido hace un día. Lástima que sigue negando lo que parece sentir, todo porque cree que Reborn sólo lo molesta al estar aburrido.

Sin embargo, cuando un par de compañeras le hablan no puede evitar correr a esconderse, aunque minutos después Reborn se acerca a donde se esconde y le comienza a hablar sobre la prueba próxima de matemáticas y que se debe esforzar, todo de manera normal. En cambio el castaño lo único que tiene en mente es la aparente tranquilidad que tiene el mayor para ir con el, así que se quita la mano que tiene en su cabeza y despidiéndose corre a su salón, todo bajo la atenta mirada del mayor.

Y aunque parece nadie está al rededor la verdad es que un viejo conocido del menor se encuentra observándolos tras las rejas...

Ese mismo día, más tarde Kyoka junto a Mukuro se encuentran en la casa arcobaleno estudiando para el examen del día siguiente que Reborn mencionó haría, y aunque Tsuna se encuentra un tanto nervioso, nota que el mayor no se encuentra cerca, Kyoya al ver a su amigo así decide iniciar una pequeña plática.

—Tsuna... El carnívoro no está en casa, madre dijo que estaría bebiendo con amigos—

—Oh, vale—

—Oh chicos~ Iré a la tienda, ¿que gustan compre para la cena?— grita Luce, entrando a la sala

—Chuletas de cerdo, Omnivora—

—Señorita Luce, puedo ir por las compras—

—Oh Tsunayoshi, no te preocupes, yo pue...—

—Kyoya y yo iremos kufufufu~—

—¿Seguro queri...?—

—Si, vamos Kyoya— indica Mukuro, mientras jala al azabache fuera de la casa

Una vez la pareja sale, Luce simplemente le sonríe al menor y lo lleva al sillón nuevamente, todo para mostrarle los viejos album's de fotos que encontró cuando limpio el ático de la casa.

En dichos libros se observan pequeñas fotos de Kyoka y él, estudiando, jugando o de Tsuna realizando las labores escolares ; también se encuentran las distintas facetas de Reborn, desde que era un niño hasta un adolescente, aunque de esta etapa parece que Luce optó por tomar desde todos los ángulos cuando el pequeño Reborn realizaba trabajos o problemas de matemáticas.

Luxe y Tsuna se divertían viendo las distintas fotos de Reborn, cuando una llama la atención del menor, en esta Reborn y Kyoya posan frente a un templo y al lado de esa se encuentra una foto de oraciones, una de Kyoya para pasar el examen y la otro de Reborn hacia el castaño; Tsuna se sonroja ante aquel detalle y sonríe acariciando la foto, tiempo después Luce se levanta y lo deja solo observando los demás albums, tan metido esta en ver a Reborn, que nota cuando esté entra a la casa.

—Si que estas interesado en ver fotos antiguas— habla serio y un tanto molesto el mayor

—Re-Reborn... ¿Qué haces...?— dice mientras Reborn se comienza a acercar y se agacha con la intención de besarlo

—Ah... V-v-voy a la tienda— grita alejándose y corre rumbo a la puerta

Reborn observa aquella acción del menor, suspira y mira el desastre de albums que hay en la sala, poco después toma un cigarro y lo enciende, mientras se pone a recordar y pensar.

"Cuando era niño, siempre creí -y creo- en una cosa...
No importa lo duro que sea el problema, puedo resolverlo.
No hay tal cosa, como un problema sin resolver... O eso me dije.

Pero ese día... Donde le sonreíste a aquella chica y aceptaste su comida, no pude evitar el ir hacia ti y...

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No importa lo que me diga Viper o Skull, ya no intento tomar nada, tampoco en ese entonces que te vi junto a Kyoya; al contrario me fastidiaba él verte vestido de aquella manera, parecías un delincuente pero lo deje pasar porque sabías cocinar, después comentaste tu situación.

Recordé entonces porque salía a golpear chicos, al principio eran menores pero tanta libertad los llevaba a mal camino y aunque le dejara el resto a Skull, muchos volvían a lo mismo otra vez.

Me estaba cansando y sentía que nada de lo que hacia servía, me estaba dando por vencido... pero entonces apareciste frente a mi y te arrodillaste, me pediste ser mi subalterno, porque a tus ojos era genial, fuerte e increíble, estaba sorprendido pero lo escondí y te pregunte que harías siendo mi subalterno, tu respuesta aun me causa risa porque parecía más que serias mi esposa, pero aún así acepte.

Sigo preguntándome de donde sacaste aquello de asesino de osos, pero supongo que nunca obtendré la respuesta ¿cierto?

Aun así, me sentí feliz y bien después de mucho tiempo; pero entonces te comencé a conocer poco a poco y creí no pasaría nada... Vaya equivocación.

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Pft... Recuerdo aquella vez en secundaria, cuando recibieron Kyoya y tu, Tsuna, las calificaciones de una prueba que les había ayudado a estudiar, parecías nervioso y asustado... Me sorprendió la calificación que habías obtenido porque había sido buena pero al verte y notar tu decepción al fallar cuando habías realizado un ejercicio conmigo y estaba en el examen no pude evitar sonreírte, acariciar tu cabello y halagarte un poco.

Me extraño tu actitud después pues parecías querer llorar pero huiste y cuando fui a buscarte te observe secandote pequeñas lágrimas, en ese momento me detuve de irte a consolar, la sensación de suavidad de tu cabello aun estaba muy marcada en mi mano.

Días después fue año nuevo y fui con mi madre al templo, ver a Kyoya anotar su oración me hizo pensar en ti y no pude evitar escribir para que pasaras el examen, a los días de aquello partí, ya que me habían llamado a una escuela para suplir a un profesor, no iba feliz realmente pero creí era por la partida, aun así mis pies me llevaron a aquel lugar donde puse mi oración y como si me despidiera de ti la toque.

Un par de meses después, mientras revisaba un par de exámenes recuerdo me enviaste un mensaje anunciandome que habías quedado en la preparatoria junto a Kyoya y me agradecias; hubieras visto mi cara, seguramente creerías es una ilusión aquel brillo y sonrisa que debí haber puesto.

Dicha felicidad se agrando cuando llamaron de la preparatoria y me indicaron que debía suplir a su maestra de matemáticas por maternidad. Vaya suerte pensé pero el verte tan atento al presentarme, no pude evitar que parte de la felicidad saliera.

Diste siempre todo Tsuna.

No tienes idea alguna de lo honesta que fue aquella mirada sincera, aquella que me salvo -y aun me salva-, por eso comencé a pensar que ahora de verdad podría resolver cualquier problema, sin importar la dificultad...

Mientras estuvieras a mi lado.

Por eso lo que hice aquella vez de la chica fue un poco de celos y deseo guardados..."

—Aunque, eso jamás te lo diré de todos modos— dice al aire mientras da una última calada a su cigarro

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Y aunque el mayor sonríe esperando al menor, Tsuna para su mala suerte una vez termina de correr es acorralado.

—Hola Yoshi... Tiempo sin vernos—