N/A: Un poco de woosan no le viene mal a nadie, je je je je xD

Cap dedicado a letfaraway ♡♡

Hoy os recomiendo 'before you' de angelbaby y PRETTYMUCH, maravillosa forma de comenzar la semana.

[...]

"¿Estás seguro de que será una buena idea?" Preguntaba Joowan, caminando tras un TaeHyung que no se estaba quieto por nada del mundo. Era como perseguir a una cría de rana hiperactiva.

"Claro que lo estoy, es su cumpleaños. Yim nos cocina todo el tiempo y siempre prepara los mejores postres, cócteles y bebidas que puedan ocurrírsele, creo que no estaría mal hacer lo mismo por una vez... ¿no?" Mirando a los demás, encontró un montón de hombros encogiéndose. Él bufó. "Tenéis menos iniciativa que una mazorca de maíz."

"¡Oye!" Siendo Jimin el primero en exaltarse, tomó la palabra. "Yo estoy de acuerdo con tu idea, pero no veo cómo pretendes que cocinemos algo cuando se nos quema hasta la sopa... Y está hecha a base de agua."

"Jimin tiene un punto..."

TaeHyung no pudo no mostrarse sorprendido cuando vio a Jungkook estar de acuerdo con el peliazul.

"¡¿Cómo has dicho?!"

Este se aclaró la garganta inmediatamente, apartando la mirada. "No, no, nada... Q-Que podíamos intentarlo, seguro que no sale tan mal, ¿no?"

"Mírate... Medías casi dos metros de largo cuando llegaste aquí y ahora te domina una larva con el pelo de colores y alas." Se burlaba Wooyoung, de brazos cruzados, mientras ladeaba la cabeza. Parecía muy decepcionado, en especial cuando Jungkook sólo le fulminó. "Qué pena..."

"¡Wooyoung!"

TaeHyung parecía horrorizado, mirando a su amigo como si no pudiera creer lo que acababa de decir.

"Todavía puedo hundirte media cabeza de un puñetazo y no hay ninguna larva con alas que pueda impedirlo, ¿eh? Así que yo que tú me callaría."

Al instante, sus ojos se desviaron hacia el azabache, manteniendo el ceño fruncido.

No acababa de llamarle lo que acababa de llamarle...

"¡¿Y tú a quién narices le dices larva, pedazo de imbécil?!"

Jungkook no tardó en recular, aclarándose la garganta y negando, dando un par de pasitos hacia atrás, totalmente arrepentido. Tal y como Wooyoung señalaba, domado por un mosquito.

"No, a nadie, a-a... a San."

El doctor Choi San usó su dedo pulgar para señalarse justo después de que él lo hiciera, ajeno a todo. "¿A mí por qué? Si yo no he dicho nada."

Wooyoung rio más fuerte, sosteniéndose del doctor para no caer por la risa.

"Ay, TaeHyung, suéltale la correa a tu novio el grandullón que a este paso le dejas sin respiración... El pobre va a morir asfixiado antes de cruzar cualquier portal de regreso a casa, como sigas así." Continuaba burlándose, recibiendo un golpe en la nuca por parte de TaeHyung inesperadamente. "¡Oye! ¿Qué crees que haces?"

"Ya puedes ir callándote la boca si no quieres que el siguiente golpe te deje imbécil del todo."

"Serás..."

"Nos estamos desviando del tema inicial, chicos, vamos a centrarnos..." Tomaba la palabra Joowan, mientras Wooyoung fulminaba al pelirosa. "Hablábamos de Yim y de lo que planeamos hacer para su cumpleaños, TaeHyung había propuesto cocinarle algo todos juntos."

"Y hacer un pastel."

Joowan asintió. "Exacto, y el pastel."

"Mucho pedís vosotros..." Resoplaba Wooyoung, poniendo los ojos en blanco. "¿No es más fácil encargarnos de organizar la fiesta y que cada uno prepare sus propios regalos como hacemos siempre? Él es un friki de la cocina, no tendrá problema por encargarse de eso, le apasiona."

Meneando la cabeza de un lado a otro, TaeHyung suspiró. "No, no lo entiendes, Wooyoung, esta vez es diferente. Yim está muy desanimado desde lo que pasó con Tutor, hay que animarle."

"¿Todavía seguimos con eso? Ha pasado más de un mes."

"¿Y qué?"

"Pues que ya deberíamos habernos olvidado de él." Señaló como si fuese obvio. "Hemos pasado más tiempo llorando su pérdida que el que ha pasado él con nosotros aquí."

"Eres un insensible..." Le recriminaba el doctor Choi.

Wooyoung tan sólo se limitó a encogerse de hombros. "Soy realista."

"Corrección: eres gilipollas. Y de los grandes, además. Tus palabras no tienen sentido ni fundamento, no cuando fuiste el primero en pedirle a Tutor que te apoyara si este año participabas en el torneo."

Las palabras de TaeHyung, sacando a la luz el secreto a voces que Wooyoung luchaba por mantener oculto a oídos de un individuo en concreto, no pasaron desapercibidas para el doctor Choi, quién observó a su claro oponente con las cejas en alto. Claramente, aquello no le tomaba por sorpresa, mucho menos cuando Wooyoung se veía repentinamente atascado entre la espada y la pared.

"Pero te quieres callar, bocazas..." Gruñó entre dientes en dirección al pelirosa.

"No le hables así."

Jungkook, una vez más, salió en su defensa.

Por su parte, el doctor Choi seguía observando a Wooyoung, quien se mantenía tieso cual vela en su lugar, temiendo incluso pestañear, como si creyese que de esa forma no podría ser visto. Algo un poco complicado, teniendo en cuenta que sus hombros podían chocarse.

"Vaya... Así que planeas competir, ¿eh? No me lo habías dicho."

Tragando saliva, no dudó en plantarle cara (bueno, sí, pero sólo un poco). "¿Por qué tendría que decírtelo?"

"Para que yo también pudiera prepararme, ¿o es que acaso querías ir con ventaja?"

"¿Qué dices? Menuda chorrada..."

"No tendrás miedo de perder contra mí, ¿verdad?"

Su insinuación totalmente cierta (eso no tenía por qué saberlo) hizo que Wooyoung se sintiera atacado, ofendido y casi al borde del llanto (eso tampoco tenía por qué notarse, de hecho), apenas poniéndose rojo de la vergüenza.

"¿De qué estás hablando? ¿Quién podría tener miedo de ti?" Rio sin gracia, queriendo mantenerse impasible al respecto, aunque por dentro echaba fuego por la boca. "Ni que fueras más fuerte que yo."

San se encogió de hombros, no luciendo atacado en absoluto. "Bueno... Según los resultados del último año, se podría decir que lo soy, ¿no? Digo, por algo te gané."

Los demás se tensaron al instante en que mencionó aquello, viendo el caos avecinarse cuando Wooyoung enrojeció hasta el punto de que incluso su pelo estuvo a punto de tornarse rojizo, echando humo por las orejas, rechinando los dientes y temblando.

"Ay, por Aethee..." Los mellizos temblaron.

"Chicos, creo que volvemos a desviarnos del tema, decíamos que-"

Sin poder contener por más tiempo su enfado, el grito ensordecedor que Wooyoung dejó escapar, interrumpió lo que Joowan estaba a punto de decir.

"¡¿Tú más fuerte que yo?!" Señaló a ambos conforme hablaba.

Ni siquiera inmutándose ante la subida del tono de voz ajeno, asintió. "Así es, sí."

"¡Repítemelo a la cara si tienes narices, doctorucho de pacotilla!"

"Es justo lo que acabo de hacer." Midiendo la distancia entre su rostro y el de Wooyoung, comentó, sonando tan obvio y burlesco que el peli morado estaba al borde de escupir su propia lengua en llamas. "Soy más fuerte que tú, es un hecho. Todos lo saben."

El ojo izquierdo de Wooyoung comenzó a temblar. Jimin, Joowan, los mellizos y TaeHyung se miraron entre ellos.

"Oh, oh..."

"...aunque no tienes que sentirte acomplejado por ello, es normal." Trató de ser dulce con él. "Seguro que con práctica y mucho entrenamiento, logras alcanzarme."

"Aquí va a correr sangre, mucha sangre. Yo no quiero verlo..."

"Ni yo."

Los mellizos se taparon el rostro mutuamente, lloriqueando.

"Voy, voy a... Voy a..." Wooyoung trató de formular, ojos furiosos enfocados en aquel doctor.

"¿Vas a...?"

"¡Te voy a matar!"

Y acto seguido, se lanzó sobre él, ambos cayendo al suelo de forma estrepitosa. Hyeongjun y Woongki emitieron un chillido agudo, horrorizados ante la imagen.

"¡Wooyoung!"

"¡Voy a hacer sopa de sesos con tu cerebro!"

"¡Chicos, parad!" Chillaba TaeHyung, dando un paso en falso hacia ellos y siendo detenido al instante por Joowan, quién le empujó hacia atrás. "¿Qué vamos a hacer?"

El peliverde negó. "Nada, ¿tú los estás viendo? Son dos gorilas haciendo artes marciales, quienquiera que intervenga va a salir peor que cualquiera de ellos."

"¿Entonces...?" Jimin murmuró.

"Nada, vámonos, cuando terminen de resolver sus asuntos pendientes que nos busquen."

Los otros dos se encogieron de hombros.

"Bueno..."

Jungkook no podía creer lo que escuchaba. "¿En serio vamos a dejarlos ahí?"

"¿Tienes una idea mejor?"

Él se quedó en silencio, pues realmente no podía pensar en nada que no fuese intervenir. Y tampoco estaba por la labor de recibir un golpe, incluso si por sí mismo era igual de fuerte que los dos a la vez. No iba a meterse en peleas pseudomatrimoniales.

Finalmente, negó. "No, la verdad es que no."

"Pues vamos, venga." TaeHyung sostuvo su mano. "Vosotros dos, par de orangutanes en celo, nos vamos. Cuando terminéis vuestro ritual de apareamiento nos buscáis, estaremos por aquí cerca."

"Eso, adiós."

"Adiós... No os hagáis mucho daño..."

Los mellizos se despidieron con la mano.

"¡...y tú vas a aprender a no meterte más conmigo, rata inmunda!" Ajeno al hecho de que los demás estaban por irse, continuó atacando al doctor. "¡No os vayáis, esperad a ver cómo mato a este imbécil!"

"Claro, en eso pensábamos..."

"No tenemos nada mejor que hacer, di que sí."

Por supuesto, nadie le hizo caso, dándose la vuelta y desapareciendo entre los arbustos. Wooyoung estaba tan molesto y acelerado que ni siquiera era consciente de que el doctor Choi no estaba peleando de vuelta, sólo se cubría el rostro para protegerse de los golpes.

"¡Volved aquí!" Grillos sonaron cuando dejó de pelear para buscar a sus amigos, quienes habían desaparecido. "¡Chicos!" Más grillos sonaron, dejándole confundido. "¿Chicos...?"

Medio segundo después, menos incluso de lo que duraba un parpadeo, su chillido sonó por todo el bosque tras ser atrapado por un par de manos que se aferraron a sus antebrazos, jalándolo hacia el suelo. De un momento a otro, estaba de espaldas al suelo y tenía al doctor Choi sobre él, inmovilizándolo.

"¡¿Qué crees que haces?!"

"Hago lo que tú has estado haciendo conmigo desde que nos conocemos, Wooyoung, ¿no te das cuenta?" Pronunció en voz baja, aflojando el agarre y afianzándolo de nuevo una vez este amenazó con soltarse. "No, estate quieto."

"¡Suéltame, imbécil!"

"No."

"¡Que me sueltes!"

"He dicho que no."

Sus piernas intentaron alcanzar el estómago del doctor en tres fallidos intentos, haciéndole sentir desesperado "¡Socorro! ¡Chicos!" Chilló, una mano posándose en su boca repentinamente, silenciándolo.

"Cállate y escúchame de una vez, ¿quieres?"

Wooyoung balbuceó algo inteligible en respuesta.

"Muy bien, ahora hablemos como dos personas civilizadas que ya iba haciendo falta." Suspirando, murmuró. "A lo que iba, es que todo este tiempo, desde que básicamente nos conocemos, has estado viéndome como un enemigo cuando soy todo lo contrario."

Manteniendo su ceño fruncido, Wooyoung volvió a murmurar algo que San no pudo entender.

"Nunca he querido competir contra ti, ni ser una amenaza... Ni siquiera fue mi intención ganarte durante esa competición el año pasado, sólo pasó y ya." Siguió diciendo, luciendo angustiado. "Pero tú nunca me escuchas, sólo te empeñas en creer que te odio de la misma forma cuando no es así. No te odio, en primer lugar."

De nuevo, Wooyoung murmuró algo.

"Y ya estoy harto, no es justo tener que soportar siempre tus insultos, tus continuas faltas de respeto sólo porque me odias. No he hecho nada malo, nada más que intentar ser cercano a ti porque me gustas, pero eso tampoco parece importarte." Por cuarta vez, el pelimorado trató de tomar la palabra fallidamente. "Llevo intentándolo años, siendo rechazado una y otra vez incluso si sé que yo también te gusto."

Wooyoung se puso rojo como un tomate, su voz sonando como un alarido contra la mano del doctor.

"...y para serte honesto, me he cansado, Wooyoung, estoy harto." Mirándole a los ojos, le dejó muy claro que no bromeaba. Él dejó de quejarse. "Si sigues así, tratándome como a una mierda sólo porque odias que tengamos la misma habilidad, aún cuando eso no es algo que ninguno de los dos podamos elegir, y haciéndome sentir que lo único que te importa es quedar por encima de mí, esto se ha acabado."

Todavía en silencio, Wooyoung tragó saliva, siendo liberado cuando menos lo esperaba. De repente, ya no quería ser escandaloso ni gritar, manteniéndose en silencio, con sus ojos fijos en los de San.

"¿Qué quieres decir con que se ha acabado?"

"Que ya no te perseguiré más." Respondió. "No me esforzaré por ser cercano a ti, ni siquiera seguiré tratándote como a un amigo más. Aunque estemos en el mismo grupo, no te tomaré en cuenta."

Sin saber qué decir al respecto, Wooyoung masticó su labio inferior. No parecía ser consciente de la cercanía entre ambos, tampoco había notado que el doctor Choi ya no estaba reteniéndole en contra de su voluntad, sólo notó cosquillas por todo el cuerpo cuando este usó su dedo índice para liberar su labio inferior del agarre. Un escalofrío le recorrió el cuerpo de pies a cabeza.

"¿Y si no...?"

"¿Si no, qué?"

"Si no continuo de esa forma y hago lo que dices." Se atrevió a preguntar. "¿Qué pasará?"

El doctor Choi se encogió de hombros. "Eso dependerá de ti."

"¿De mí?"

San asintió. Wooyoung se sentía ansioso e inexplicablemente nervioso. Algo que no visualizaba cómo podía estar pasándole a él en presencia de alguien como él.

"Tú eres quién decidirá como comportarse con respecto a mí a partir de ahora. Si de una vez por todas aceptarás la realidad de que ambos somos igual de fuertes, no existe competición entre nosotros y sólo me tratas como la persona que te gusta, o..."

"Yo n-no he dicho que me gustes." Le interrumpió con las mejillas ardiendo.

El doctor Choi continuó hablando, ignorando aquello. "...o por el contrario continuas viéndome como tu enemigo público número uno y me tratas como tal. Está en ti determinar nuestra relación, tú decides."

"No puedes dejar algo así bajo mi responsabilidad." Susurró, totalmente incrédulo. Podía sentir su propio corazón latiéndole en la garganta. "No soy la persona más indicada y lo sabes."

"Pues deberías."

"No lo soy."

Levantando las cejas, San asintió, luciendo pensativo, un poco victorioso incluso, como si esperase esa respuesta por su parte, deseándola en lo más profundo.

"De acuerdo, ¿quieres que lo determine yo?" Cuestionó, mirándole a los ojos. Wooyoung asintió. "En ese caso, tienes tres segundos para apartarte o quedarte donde estás."

Él no pudo evitar fruncir el ceño, confundido. "¿Por qué...?"

"Voy a besarte. Si te quedas, significa que aceptas todo lo que he dicho anteriormente; si no, iremos cada uno por nuestro lado."

Wooyoung se puso rojo.

"¿Bien?"

"P-Pero..."

"Uno..."

Colocándose repentinamente nervioso, estuvo a punto de ponerse a llorar, sin saber cómo reaccionar. Su cuerpo estaba aferrado al suelo, sintiendo la humedad calando a través de la ropa. No podía moverse. Tampoco parecía querer hacerlo.

"Dos..."

"Doctorucho..."

"Y tres." Sentenció, mirándole a los ojos y acto seguido inclinándose sobre él, teniendo la clara intención de acortar la distancia entre ambos y besarle.

Sin embargo, Wooyoung le tomó del rostro, impidiéndoselo justo cuando sus labios se rozaron de manera superficial. Sintiéndolo como un claro rechazo, se separó para mirarle de nuevo, suspirando.

"Repítelo." Susurraba el pelimorado, confundiéndole aún más.

"¿Eh...?"

"Lo que dijiste sobre que ambos somos igual de fuertes, quiero escuchártelo decir otra vez. Hazlo."

Incrédulo, sintiéndose parte de una broma de mal gusto, el doctor Choi mantuvo su ceño fruncido, cediendo al final. "¿Somos igual de fuertes...?" Titubeó.

"Afírmalo."

"¿De verdad es necesario?"

Wooyoung simplemente se encogió hombros. "Yo voy a aceptar tus condiciones, acepta tú las mías también."

"No se trata de ninguna condición, Wooyoung, sino una realidad. No necesitas que yo te confirme que ambos somos igual de fuertes, sin excepción, para que así sea."

"Dilo."

Otro bufido abandonó sus labios, terminando por ceder. Como siempre.

"De acuerdo, como quieras. Tú y yo, Wooyoung, somos igual de fuertes, no hay diferencia alguna. Ganar una absurda competición en base a eso no significa nada." Le dijo, viendo la satisfacción en su mirada. "¿Ya está? ¿Eso querías escuchar?"

Esbozando una sonrisa de oreja a oreja, Wooyoung se mordió el labio, afianzando el agarre en el rostro ajeno y jalando de San hacia abajo, siendo él esta vez quién acortase la distancia que los separaba y atrapara sus labios.

El corazón del doctor se detuvo por unos instantes, jadeando ante la incredulidad del momento. Ni siquiera titubeó a la hora de seguirle el beso, empujándole la barbilla hacia abajo para tener un mejor acceso a su boca. Sólo él mismo y sus pensamientos eran testigos de cuánto había deseado que algo así sucediera alguna vez en la vida.

Chupó su labio inferior, jalándolo de él sutilmente y formando una fina línea de saliva antes de adentrar la lengua. Bajo su cuerpo, Wooyoung se estremeció, aferrándose a San como pudo, sus manos temblorosas, encontrando que ya no lideraba aquel beso y que, ciertamente, no podía importarle menos; no cuando estaba demasiado ocupado y centrado en devolvérselo con la misma intensidad, usando ambas manos para acunarle el rostro y batallando contra su lengua.

Tan concentrados se encontraban ambos, que ni siquiera escucharon el ruido de pasos acercándose, mucho menos una voz, proveniente de alguien a quien conocían muy bien.

"Chicos, chicos, menos mal que estáis aquí, llevo más de quince minutos buscándoos por todo el bosque y..."

Yim, (o más bien, la persona más idónea para verlos en una situación de tal calibre) se encontraba de pie tras ellos, con sus zapatos rozando la cabeza pelimorada de Wooyoung. Tenía una cara de espanto (como era de esperar) en la que sus ojos amenazaban con salírsele de las cuencas. Lo siguiente que hizo, una vez fue consciente de lo que realmente estaba pasando, su grito resonó por todo el bosque.

"¡¿Pero qué demonios es esto?!"

Wooyoung quiso incorporarse, pero la vergüenza, tener a Choi San encima y sus piernas temblorosas por el evidente nerviosismo se lo impidieron.

"¡¿Por qué siempre soy yo el que tiene que encontrarse con estas cosas?!"

"Yim, Yim, para, cállate." Trató de impedir que siguiera gritando y así evitar la atención no deseada. Claramente, tampoco surgió efecto.

"¡¿...es que no he tenido ya suficientes traumas a lo largo de mi vida como para tener que añadir uno más?!"

Wooyoung parecía a punto de llorar. "¡Yim, cállate, va en serio!"

"¡¿Qué he hecho yo para merecer esto, Aethee?!"

"¡Yim!"

Medio segundo después, lo que tanto temía que sucediera, sucedió. Jimin, Joowan, los mellizos, Jungkook y TaeHyung aparecieron entre los arbustos a toda prisa.

"¡Yim!"

"Yim, ¿qué ha pasado? Te hemos escuchado gritar desde la otra punta."

"¡No me digas que se han matado!"

Wooyoung se frotó el rostro con una mano. Todo tenía que salirles mal.

"¡¿Matado?!" Exclamó el castaño, tan horrorizado como se sentía. "Preferiría mil veces haberme encontrado con una masacre que ver lo que he tenido que ver."

"¿Por qué?"

Esta vez, Wooyoung tapó toda su cara, rezando internamente por no ser delatado a manos de su propio amigo. Por favor, que no diga que el doctorucho de pacotilla y yo nos hemos besado, por favor... Suplicaba para sí mismo, juntando unas manos metafóricas. Pero, una vez más, las cosas no salían como él quería.

"Se han besado." Señalaba Joowan.

De inmediato, un muy molesto Wooyoung levantó la cabeza, furioso y avergonzado. "¡Oye! ¿Qué habíamos dicho sobre escuchar pensamientos ajenos, oreja con patas?"

"¿De qué pensamientos hablas? El doctor Choi y tenéis los labios hinchados y del color de ese bálsamo que siempre sueles usar. Es pura lógica."

"Ow..."

Viendo a su amigo sonrojarse de pies a cabeza, sin molestarse siquiera en negarlo, TaeHyung dejó escapar un alarido, incrédulo. "¡¿Os habéis besado en serio?! ¡¿El doctor Choi y tú?!"

"Pues sí, ¿qué pasa? El doctorucho de pacotilla y yo estábamos besándonos... ¿Algún problema?" Wooyoung levantó la barbilla, decidido a dar la cara.

"Yo tengo un problema, imbécil, ¿cómo que doctorucho de pacotilla?" El doctor Choi lo fulminó, su tono de voz haciéndole estremecer. "¿En qué habíamos quedado?"

Él tembló. "Eh... Lo siento..."

"¡¿Lo sientes?!"

TaeHyung se echó las manos a la cabeza. Wooyoung enrojeció aún más. El brazo de Choi San pasó por sus hombros sutilmente.

"Cómo bien habéis podido ver, oír y deducir aquí mi amigo Wooyoung y yo, hemos limado asperezas."

Yim resopló. "Ya lo creo, ya... Con la lengua."

"Lo cual, quiere decir que de ahora en adelante nuestra relación será diferente. Muy diferente." San le observó, sus cejas alzadas. "¿Verdad, Wooyoung?"

Este simplemente asintió.

"No, pero dilo, hombre, que todos puedan escucharte."

"San y yo somos bastante más cercanos ahora... Ya no nos llevamos tan mal."

"¿Tan mal?"

"Mal a secas." Se corrigió, viéndole sonreír con orgullo. "P-Pero tampoco somos pareja, que quede claro... Somos simplemente amigos."

"De momento."

"Amigos que se besan." Puntualizaba el pelirosa.

Ellos asintieron. "Correcto."

"Creo que me va a costar un poquito asimilarlo..."

"Y a mi.."

"Y a nosotros..."

"De todos modos, Yim, ¿cómo es que estás aquí?"

Señalando la presencia de su amigo, quien por nada del mundo debía estar allí, considerando que ellos habían acordado juntarse a escondidas para planear su fiesta sorpresa de cumpleaños, Joowan murmuró, sólo así logrando que los demás fuesen conscientes también.

TaeHyung no tardó en entrar en pánico. "¡E-Eso! ¿Por qué has venido? Se supone que hoy estabas hasta arriba de trabajo y no te veríamos el pelo hasta pasado mañana."

"Pues venía para contaros que Yeonjun llamó hace un rato y me dijo que planea venir dentro de un par de meses..." Explicó, logrando sentirse tan solo un poquito rechazado por ellos en base a sus reacciones exageradas.

Un "Oh..." conjunto sonó, todos asintiendo a la vez.

"Ah, y también para que supierais que ya tengo todo el menú de mi cumpleaños planeado, pastel incluido. Mi madre y yo nos pondremos manos a la obra en los próximos días. Os va a encantar."

Claramente estaba muy equivocado.

"¡¿Qué?!" Ocho voces distintas gritaron al unísono, sobresaltando a Yim. El doctor Choi y Wooyoung incluso se incorporaron del susto.

"Eso..."

Sus amigos se miraron entre sí, viéndose horrorizados. En especial, TaeHyung, quién parecía estar a punto de entrar en pánico.

Sin embargo, todos se pusieron de acuerdo en actuar lo mejor posible, forzando sonrisas.

"¡Qué emoción, Yim!" Exclamó TaeHyung, su voz especialmente fingida.

Los mellizos asintieron. "Sí, nosotros nos morimos de ganas por probarlo."

"Yo lo estoy deseando."

"Y yo." Wooyoung dijo.

"Voy a empezar a contar los días que faltan a partir de hoy." Jungkook se lastimó las mejillas al sonreír. "Estoy impaciente."

"Y yo." Repetía Wooyoung.

La sonrisa que Yim les dio no pudo evitar ser tensa e incluso un poco extraña, pues no era tonto. Tener una visión extremadamente dotada no era en lo único que destacaba, él también tenía un sexto sentido infalible. Y algo le decía que sus amigos ocultaban algo.

Aunque afortunadamente para ellos, la voz de la señor Chopra sonó en todo Ae-Dexian-Thee gracias al parlante enorme situado en la pastelería, reclamando la presencia de su hijo.

"¡Yim Pharinyakorn, te quiero aquí en menos de cinco minutos! ¡Rápido!"

Y el susodicho tembló, siendo víctima de un escalofrío que también alcanzó al resto.

"Uy... Creo que debo volver al trabajo..."

Ocho cabezas asintieron inmediatamente.

"Será lo mejor, sí, o tu madre te matará." TaeHyung bromeó. "Y no queremos quedarnos sin nuestros querido cocinero en la semana de su cumpleaños."

"Cierto, sería un fastidio total."

"Horrible, horrible..."

Yim frunció el ceño, confirmando que había algo extraño con ellos cuando estos prácticamente hablaron a la vez, el nerviosismo siendo más que notorio en sus voces, como si tuvieran prisa por deshacerse de él.

¿Acaso debía estar alerta?

"¡Pharinyakorn, que vengas ahora mismo!" El grito de su madre, el parlante chirriando debido a la intensidad y su enfado traspasando murallas, fueron mas que suficientes para que este reaccionase.

Wooyoung, TaeHyung, Jungkook, los mellizos, Jimin y el doctor Choi se taparon los oídos.

"Joder..."

"Por la mismísima Aethee, creo que me he quedado sordo..."

"¿Tú nada más?"

"M-Me voy, me voy ya... Nos vemos, chicos, adiós." Se despidió con rapidez, ni siquiera esperando a que hicieran lo mismo para correr de vuelta a la civilización.

Una vez no hubo rastro de él, TaeHyung se llevó una mano al pecho, aliviado.

"Eso ha estado muy cerca..."

Joowan asintió, compartiendo su terror. "Demasiado..."

"Bueno, ¿y ahora qué vamos a hacer? Porque él ya ha planeado todo el menú para su cumpleaños y nosotros aún no sabemos ni el primer snack que haremos."

"No tengo ni idea..." Jimin torció el gesto ante la pregunta de Wooyoung.

Una bombillita simbólica se encendió sobre la cabeza pelirosa de TaeHyung, quién sonrió de oreja a oreja. "¡Ya sé!" Exclamó, sobresaltando a dos pensativos mellizos. "Nos aliaremos con la señora Chopra para que ella se encargue de distraer a Yim y no pueda ni tocar la cocina en toda la semana."

"Una idea brillante..." Comentó Wooyoung, causando un inmenso orgullo en él. Aunque no duró demasiado. "...de no ser porque trabaja en una, claro."

TaeHyung bufó.

"Me refiero a cocinar para su cumpleaños, Wooyoung, pedazo de bruto."

"Ah, bueno... Es que si no específicas..."

"No pensé que hiciese falta, aunque viniendo de ti tampoco me extraña." Le devolvió el ataque con el mismo tono burlesco, desganado. "Con esa pedazo de cabeza que te ha dado la madre naturaleza y tú desaprovechándola en almacenar tonterías..."

La carcajada del doctor Choi resonó por todo el bosque. Wooyoung le fulminó ipso facto.

"¡¿Y tú de qué te ríes?! ¿No se supone que teníamos un acuerdo, gilipollas?"

San se aclaró la garganta. "Tienes razón, perdona."

"Perdona..." Imitó su tono de voz bajo con notorio desagrado. "Imbécil."

"Bueno, ¿pues a qué estamos esperando? Vamos a ponernos en marcha para preparar ese menú. Jungkook ya tiene las flores que necesitaba para su regalo, así que volvamos al taller. Hay un montón de cosas en las que pensar." Joowan se frotaba las manos, ansioso.

Los demás asintieron. "Vamos, vamos."

Encaminándose uno tras otro entre los arbustos de nuevo, TaeHyung fue el antepenúltimo en salir, por delante del doctor Choi y Wooyoung, a quienes señaló cuando Jungkook avanzó, dejándolo atrás.

"De lo vuestro ya hablaremos..." Advertía.

Wooyoung se estremeció.

"¡Mosquito, vamos!" Por fortuna, la voz de Jungkook sonó, llamando al pelirosa.

"¡Voy, voy!"

TaeHyung salió corriendo poco después. Ambos suspiraron con alivio, compartiendo una mirada cómplice, incluso si Wooyoung aún parecía avergonzado.

"Lo de hoy no volverá a pasar, que lo sepas." Aseguraba. El doctor Choi sonrió.

Y, ni lento ni perezoso, este no tardó en tomarle del rostro con ambas manos, empujándolo hacia sí y cortando la distancia que los separaba, atrapándolo los labios en un beso corto, húmedo y sonoro. Las mejillas de Wooyoung enrojecieron al mínimo contacto, aclarándose la garganta cuando se separaron.

"Lo que tú digas."

"Imbécil..." Masculló, dándose la vuelta, dispuesto a salir de allí también.

Para su sorpresa, se topó de lleno con seis pares de ojos que observaban aquella escena completamente ensimismados, llenos de sorpresa.

"Wow..." Susurraron a la vez.

Él enrojeció aún más. "¡Vámonos ya!" Chilló, pisando fuerte cuando pasó junto a ellos sin mirar atrás.

No cabía en sí mismo de la vergüenza.

San dejó escapar una carcajada, siguiéndole de cerca. "Espérame, amor mío..."

"¡Ni se te ocurra llamarme así otra vez!" Su voz horrorizada sonó demasiado aguda, retumbando entre los árboles.

Varias risas sonaron, enfureciéndolo aún más, si es que eso era posible.

"¡Iros todos a la mierda!"