Temen-Ni-Gru. La antigua torre del mal que Sparda había sellado hace milenios.

La torre en si era la entrada más directa al Mundo Demoníaco, y era donde Sparda perdió sus poderes.

Y ahora, dos mil años después de que el Caballero Oscuro la hubiera sellado, uno de sus hijos la guardo en su interior, siendo esta la representación más fiel de su propia alma.

Este, era el lugar donde el fin de Vergil comenzó, y es ahora el lugar donde Gilgamesh morirá.

Ambos hombres se veían el uno al otro con resolución. Después de tantas batallas había llegado la hora de su enfrentamiento final.

-Este no es el primer Reality Marble al que me enfrentó, y te aseguro que no será el último, Rey de los Demonios- comentó Gilgamesh desde su trono flotante.

Vergil solo lo veía impasible, no molestándole la lluvia que caía en su cara para nada, o el que Gilgamesh lo haya llamado por el título que una vez porto Virgilio.

-Entonces llegó la hora, Rey de los Héroes- dijo por su parte Vergil, antes de sacar a su siempre confiable [Beowulf].- Espero que tengas suficientes tesoros guardados.

-Te lo demostraré- fue la simple contestación hecha, antes de que un par de portales se abrieran a sus espaldas.

[Gungnir] y [Caladbolg] silbaron en el aire, dirigiéndose como misiles contra su objetivo.

Vergil hizo un rápido juego de pies antes de ir al encuentro contra el par de armas, estas mismas a ya casi nada de impactar contra su objetivo.

[Caladbolg] se adelantó un poco antes, así que Vergil fue capaz de dar una patada helicóptero contra la espada, desviándola completamente de su curso y hacer que impacte directamente contra [Gungnir].

CRASH

Ambas armas resonaron estrepitosamente al momento de impactar la una contra la otra, pero no es que alguien le pusiera atención a esto.

Un rayo láser salió disparado desde la parte inferior del trono de Gilgamesh, y para desviarlo Vergil reunió tanta luz como fuese posible en su guantelete izquierdo, para que con un gesto de como guantazo redireccionara el ataque lejos de su persona.

Con un simple gesto de sus manos, Gilgamesh libero una cantidad absurda de Hougus que iban desde el Rango E hasta el C, todos cayendo junto a la lluvia sobre Vergil.

-Así será- dijo para si mismo Vergil, sus propias [Espadas Convocadas] surgiendo a sus espaldas.

BOOM

BOOM

BOOM

El cielo oscuro se iluminó con las explosiones que los proyectiles producían al chocar entre sí.

Vergil empezó a aparecer y desaparecer en distintos lugares de la cima de la torre, haciendo que aquellos Hougus que lograron atravesar su defensa se le fueran más difíciles el darle.

Gilgamesh por su parte usaba las propias defensas de su trono para protegerse de los constructos de Vergil, aunque de vez en cuando teniendo que esquivar algunos demasiado escurridizos.

Gilgamesh decidió cambiar sus tácticas, y en lugar de disparar Hougus al azar lanzó una combinación de Hougus con atributo de agua y conductor.

Vergil simplemente se dedicó a esquivar todos cuantos pudiera, así como también destruir algunos el mismo, no dándose cuenta de que eso era lo que Gilgamesh quería.

-Hm- Gilgamesh sonrió satisfecho antes de cerrar de golpe su tesorería.

-¿Que es lo que está planeando?- pensó cauto Vergil, no gustándole para nada esta situación.

Nuevos portales empezaron a surcar los cielos, y todos sin excepción dispararon simultáneamente.

En cuanto Vergil vio que todos y cada uno de los Hougus que venían contra el empezaron a sacar chispas solo pudo maldecir.

BRAM

Todos los Hougus con atributo de electricidad o de rayos que Gilgamesh libero explotaron al mismo tiempo, supercargados en si por toda la humedad en el aire y el metal en tierra.

Pero eso no fue lo que llamó la atención del rey.

Lo que sin duda alguna llamó su atención fue el tornado de fuego se liberó justo en medio de la zona de impacto.

El tornado en si se iba disipando en conjunto a los miles de voltios de electricidad que lo rodeaban, y cuando finalmente cesó reveló a un resguardo Vergil.

Gilgamesh no pudo evitar el alzar una ceja al ver las nuevas armas que su enemigo portaba en ambas manos.

Eran un par de hojas cortas, su filo estaba cerrado como si de cierras se tratase, y cada una tenía un color distinto. La de color rojo parecía emanar calor y la azul una ventisca fresca de aire. En el mango de cada una de las espadas, una cabeza en miniatura adornaba la punta.

-Interesante- comentó Gilgamesh.- Hace mucho que has roto la norma del limite de Hougus permitidos a un Espíritu Heroico...¡Y TODAVÍA TIENES MÁS POR MOSTRAR!- comentó contento con la situación.

Vergil por si parte solo sonrió con un tanto de burla ante las palabras de Gilgamesh.- Si de verdad quieres ver algo interesante, Rey de los Héroes, te recomiendo mirar hacia atrás.-

-Jajaja. ¿Por que clase de tonto me tomas, tu...?-

-GOOOOH- sonó una criatura a las espaldas del Rey de Uruk.

Gilgamesh volteo curioso hacia atrás, solo para ver insólito la monstruosidad que volaba hacia el, sus fauces abiertas de par en par.

Era el Leviathan, el "Guardián" de la Temen-Ni-Gru.

La criatura fue rodeada inmediatamente por las puertas de Gilgamesh, para ser acribillada sin piedad por multitud de tesoros antiguos.

-EEGGHH- chilló la criatura en sorpresa, antes de ver a Gilgamesh con una expresión de ira pura.

La boca del Leviathan empezó a brillar de un rojo intenso, y en una acción de fracción de segundo Gilgamesh hizo un barrido en su aerodeslizador, para esquivar por los pelos un potente rayo láser de parte del monstruo.

BOOM

Una explosión en el escudo que rodeaba su vehículo hizo desestabilizar un poco a Gilgamesh, y aún antes de que este mismo pudiera procesarlo sintió como algo lo golpeo más aún fuera de curso.

-HIIIINN-

El relincho de un caballo volvió a Gilgamesh de su pequeño mareo, y rápidamente enfocó a su agresor.

Jalando una carroza funeraria antigua, un enorme caballo de ojos azules le devolvió la mirada. Tanto la criatura como el vehículo envueltos en fuego fatuo.

Jalando de las riendas, Vergil lo veía con una sonrisa divertida.

-¡Veamos si tu silla es más que solo un perro de un solo truco, Rey de los Héroes!- exclamó Vergil, antes de tirar de las riendas de su bestial montura y subir aún más en los cielos.

-¡No subestimes el poder de [Vimana], Rey de los Demonios!- contraatacó el Rey de Oro, antes de ir en persecución de su rival.

Gilgamesh iba justo detrás de Vergil, tanto [Gate of Babylon] como las armas del mismo [Vimana] disparando a la retaguardia de su objetivo.

De la parte posterior de la carroza, orbes de energía de color gris salían como municiones, y junto a las [Espadas Convocadas] del mismo Vergil así como también un par de bolas de fuego fatuo lograban mantener a raya el asalto del enemigo.

Este proceso se repitió por un rato, alguno de los dos combatientes teniendo que hacer algún barrido o una vuelta forzosa de vez en cuando, pero finalmente lo hicieron. Ambos Espíritus Heroicos habían llegado al límite de la Troposfera.

-Todo lo que sube, tiene que bajar- murmuró Vergil, antes empezar a caer en caída libre.

Gilgamesh siguió su ejemplo poco después, esta vez estando al mismo nivel que su rival.

Una estela azul cubrió a Vergil, y una dorada a Gilgamesh.

CRASH

CRASH

CRASH

Ambos vehículos iban chocando el uno contra el otro en repetidas ocasiones, pequeñas explosiones de viento siguiendo todos y cada unos de los impactos.

En cierto momento Gilgamesh embistió con mucha potencia, seguro de derribar a Vergil...solo para golpear el mismo aire.

Vergil se encontraba justo detrás de el, [Espadas Convocadas] en modo de lluvia.

-Tsk- Gilgamesh tuvo que hacer un barrido de lado para esquivar los proyectiles, pero Vergil volvió a salir de la nada para embestirlo con fuerza.

El proceso en si se repitió en varias ocasiones, de vez en cuando un orbe gris siendo dejado como una mina en pleno aire.

-¡Esto se acaba!- exclamó fúrico Gilgamesh, tesoros Rango A siendo disparados de cada ángulo posible desde su [Gate of Babylon].

El corcel de Vergil galapo por los cielos, esquivando cuantos proyectiles estuvieran a por el, de vez en cuando desapareciendo para aparecer un par de centímetros detrás de los tesoros.

Justo cuando el ultimo de los tesoros dejó de perseguir a Vergil, este junto a su montura dieron una vuelta muy cerrada...y quedaron cara a cara con Gilgamesh.

-Debo de admitir, [Vimana] ha vivido su título de carroza de los dioses. Pocos son capaces de seguirle el ritmo a Geryon- admitió Vergil.

-Y yo debo de admitir que las habilidades de tu carroza son de admirar, Rey de los Demonios- dijo por su parte Gilgamesh.

Ambos rivales tenían unas enormes sonrisas en sus rostros, sonrisas llenas de sed de sangre.

Sin intercambiar palabras, ambos vehículos se cubrieron en auras hechas de Prana, muy similar al Prana Burst, antes de empezar su curso de colisión el uno contra el otro.

Ninguno de los dos le dio mucha importancia a su propia montura, optando por impactar contra el otro.

100 metros.

La velocidad de ambos aumentó, y una estela de fuego los cubrió señalando así cuánta velocidad llevaban.

50 metros.

A pesar de la distancia, cada uno podía ver la sonrisa por el reto que el otro portaba. Y solo aumentaba más sus propias sed de sangre.

20 metros.

Ninguno detenía su propia aceleración o daba algún indicio de virar.

2 metros.

La colisión era inminente.

KA-POOM

Una explosión que emulaba una supernova iluminó el cielo oscuro del Reality Marble por un momento, y una potente onda de choque sacudió un par de los pisos más altos de la [Temen-Ni-Gru].

CRASH

Un par de figuras aterrizaron estruendosamente en el techo de [Temen-Ni-Gru]. Cada uno tenía una lista a mano.

-¡[CALIBURN]!/¡[MERODACH]!- exclamaron ambos hombres.

El Pecado Original, [Merodach]. Era el prototipo para el concepto de las espadas que determinan a la realeza. Uno de los tesoros mejor guardados de Gilgamesh.

FUAMM

El torrente de energía sagrada de ambas armas se extendió hasta el cielo, pero ninguna parte puso mucha energía en el ataque.

Vergil lo había utilizado como un farol, y con [Agni & Rudra] se apresuró al encuentro con Gilgamesh.

El Rey de Uruk por su parte se apresuró a erigir el [Rho Aias]...

CLANG

...justo por los pelos a la hora de protegerse.

El escudo se disipó así de rápido como fue invocado, y Gilgamesh portaba nuevamente otra arma; otra arma que hizo a Virgilio removerse dentro de Vergil.

-[Excalibur...GALATINE]!-

Fuego sagrado luchaba contra fuego demoniaco, cada uno buscando el consumir al otro.

Tradicionalmente [Excalibur Galatine] hubiera tenido la ventaja sobre [Agni & Rudra] en cualquier momento debido a las propiedades de cada una, pero las reglas eran diferentes en [Temen-Ni-Gru].

La mismísima lluvia en el Reality Marble tenía la cualidad de potenciar todo aquello de Atributo Demoniaco, y en contraste debilitar todo lo que estuviera relacionado con lo sagrado.

Ergo, ambos ataques estaban empatados.

-¡[Vajra]!- grito Gilgamesh, desatando el rayo del mismísimo Indra.

PUAGHH

El rayo mismo desestabilizó el perfecto empate entre ambos ataques de fuego, creando una explosión que mandó a ambos un poco atrás.

Ambos Héroes se dieron una pausa, viendo detenidamente a su adversario.

La armadura de Gilgamesh tenía algunas partes al rojo vivo así como también raspones por aquí y por allá.

Vergil por su parte tenía quemada la manga derecha de su gabardina, así como también presentaba un poco de desgaste en los bordes inferiores.

-Gungnir, Caladbolg, Vimana, Merodach, Galatine, Vajra, Durandal, Harpe y Enkidu- enumeró Gilgamesh las armas de tan alto calibre que se ha visto obligado a utilizar en todo el combate.

»Todas son armas que componen la crema y nata de mi tesorería. Y tu eres el primero que me obliga a utilizar todos y cada uno de ellos- comentó con tono tranquilo.

-Todas armas de leyenda- concordó Vergil.- Hechas para los guerreros más grandes de la historia.

»Pero tu no eres un guerrero.

Gilgamesh lo vio curioso ante esto, y sin palabras le pidió a Vergil elaborar.

-Fuiste un héroe y un rey, pero jamás un guerrero- continuo tranquilo el Demonio.- Jamás tuviste la molestia de romper tus límites, ¿verdad?

»Eras la epitome de lo que un héroe aspiraba a ser, pero jamás aprendiste a luchar, tu solo habías sido creado así.

»Aunque no es que sea una debilidad para ti, siempre tienes tu As bajo la manga, ¿o no?-inquirió Vergil.- Tu mayor orgullo, el mayor tesoro que has tenido.

»Muéstrame, la Espada Más Poderosa.

»Muéstrame, Ea.

Un silencio ocurrió entre los dos.

Nadie dijo nada, el único sonido audible era el de la lluvia, pero aún así eso parecía que se iba acallando.

Gilgamesh cambio un poco su postura, y una sombre le tapaba la vista.

-¿Ea?- pregunto el Rey de los Héroes en un simple susurro, pero aún así la frialdad era palpable en su tono.- ¿Quieres presenciar...Ea?

La postura de Vergil era la misma, pero sus ojos denotaban su respuesta.

-Que ridiculez- comentó Gilgamesh.

Silencio nuevamente invadió la escena.

-Exiges el enfrentarte a Ea...exiges el enfrentarte al Poder del Rey- siseo el Rey de los Héroes.- ¡CUANDO NI SIQUIERA HAS PODIDO SUPERAR EL PODER DE ARCHER!

1

2

5

10

20

50

100

1,000

1,000,000

10,000,000

1,000,000,000

Infinito.

Una infinidad de portales dorados se abrieron dentro del Reality Marble, iluminando el cielo tormentoso como si fuese de día.

Vergil solo podía ver todo maravillado.

[Gate of Babylon] abarcaba todo el cielo, con sus portales hasta donde llegaba la vista. Había unos de tamaño sencillo, otros del tamaño de una persona, había incluso un par del tamaño de casas enteras

Todas y cada una de las compuertas del tesoro tenían cada tipo concebible de arma. Dagas, espadas, hachas, porras, jabalinas, lanzas, guadañas, flechas, arcos, bastones, escudos...cualquier tipo de arma.

-¡Y pensar que me has obligado usar todos mis tesoros!- exclamó Gilgamesh, el orgullo palpable en su voz ante su rival, trayendo de vuelta a Vergil de su trance.

La luz que caía sobre ambos revelaba la verdadera naturaleza de Gilgamesh. Un ser que pertenecía a los cielos, pero era rehusado. Un ser que iba más haya de la humanidad, pero sin ser una divinidad.

El hombre con dos tercios de sangre de los Dioses.

El héroe y rey más antiguo del mundo.

El Rey de los Héroes, Gilgamesh de Uruk.

-Solo si eres capaz de vencer el poder de Archer, podría considerar mostrarte el poder del Rey- declaró serio Gilgamesh.

Todos los tesoros vibraban con anticipación. Y desde el más pequeño e insignificante hasta aquellos que son reconocidos mundialmente apuntaban hacia un solo objeto.

Vergil.

El Dark Slayer veía a su adversario directamente.

-Si vas a pelear como Archer...¡ENTONCES YO PELEARÉ COMO BERSERKER!- exclamó a todo pulmón, [Yamato] lista en su mano.

La expectativa era palpable.

La fuerza imparable que era la tesorería de Gilgamesh se estaba por enfrentar contra el objeto inamovible que era la voluntad de Vergil.

Solo uno saldría vencedor de este choque.

-¡EIYU-Ō!/¡AKUMA-Ō!-

Con ese grito simultáneo, todos y cada uno de los tesoros de Gilgamesh silbaron en el aire.

Fuego, agua, viento, rayo, hielo, madera, luz y oscuras. Todos y cada uno de los elementos de los tesoros se activaron al unísono.

Algunos tesoros se adelantaron, otros se quedaron un tanto rezagados en la retaguardia.

La respiración de Vergil era tranquila y medida. Prana circulaba por su cuerpo paulatinamente. Sus músculos no hacían ni el más leve movimiento.

Estaba calmado.

En sus manos, [Yamato] brillaba más y más en una luz celeste, misma que empezaba a rodear a Vergil también.

-Le prometí que enfrentaría a Archer como Berserker- pensó para sí el Hijo de Sparda, una sonrisa mordaz en su rostro.- Y planeo cumplirlo.

Todo pareció fluir en cámara lenta.

Los tesoros estaban cada vez más cerca de Vergil. Gilgamesh se había asegurado que ninguno lo tocara a el mismo, expectante de lo que haría su rival.

Más rápido que incluso aquellos tesoros reconocidos por su velocidad, un solitario relámpago azul cayó desde el cielo.

Más que para causar daño o algo, ese relámpago representaba una liberación.

Una liberación en la sangre de Vergil.

Justo donde antes se ubicaba Vergil, se encontraba un ser de color azul. Su piel era completamente escamosa como si se tratase de un reptil. Por pies tenía talones negros y afilados. En su cabeza tenía un par de cuernos orientados hacia abajo, y sus ojos eran de un azul neón. Una funda orgánica se encontraba fundida sobre su brazo, y una muy conocida katana seguía ahí.

-Demonio- comentó Gilgamesh simplemente.

-Berserker- contestó el ser simplemente.

Las armas se iban acercando cada vez más y más, todas y cada una con la intención de matar a este Demonio como lo hicieron los Héroes que las portaron en la antigüedad.

-[Judgement Cut...- dijo el ser, su espada lista para ser desenvainada- ...END]!

BRAAAAAAAAAAK

Cortes azules de energía iluminaron esta vez es el cielo.

Tesoro tras tesoro era destruido sin miramiento alguno. Sean armas comunes creadas por los más humildes de los artesanos hasta poderosos símbolos de Dioses portados en alguna ocasión por sus hijos.

Todos y cada uno de ellos eran reducidos a nada indiscriminadamente.

Metralla llenaba el aire, energía bailaba sin control, explosiones ocurrían aleatoriamente. La misma torre se agitaba estrepitosamente.

Todo era un pandemonio.

El [Devil Trigger] era una de las cartas del triunfo de Vergil junto a la [Temen-Ni-Gru]. En ningún momento de la Guerra se había visto obligado a utilizar alguno de ellos, y ahora aquí había un oponente que lo obligaba a utilizar ambos al mismo tiempo.

Sin duda alguna el Rey de los Héroes era su rival. Y solo ponía una sonrisa en su rostro.

Gilgamesh por su parte observaba con fascinación la escena ante sus ojos.

Su rival solo superaba sus expectativas cada vez que estos dos chocaban.

Sus hazañas eran comparables a las suyas propias, y logró algo que ni siquiera una bestia creada por deidades había conseguido.

¿Y ahora?

Aquí ante sus ojos destruía sin piedad el legado de cada héroe que hubiera pisado el planeta. Estocada tras estocada, demostraba el por qué era digno del título de Rey de los Demonios.

Solo un monstruo así merecía ser acabado con el arma más poderosa que un héroe haya empuñado.

[Yamato] hizo un sonido muy audible a la hora de ser envainada nuevamente, y conforme su hoja se perdía en el brazo de su portador, los últimos restos de los tesoros que habían bombardeado desde el cielo desaparecían en motas de luz.

WIUSHHH

Una ventisca sopló en la torre, Gilgamesh y Vergil viéndose detenidamente el uno al otro.

-Je- esa simple risa resonó con potencia entre la lluvia que seguía cayendo.

Un solitario portal se abrió sobre la mano extendida de Gilgamesh, solo dejando notar una manija de oro.

-Jajajajajaja- Gilgamesh se empezó a reír levemente, su cabello soplando con el viento.

Más del arma se fue yendo revelando. Una guardia hecha de oro.

-JAJAJAJAJAJAJA- riéndose a plena carcajada ahora, el Rey de los Héroes reveló finalmente su última arma.

Tenía una estructura parecida a la de un cono, dividida en tres secciones con inscripciones rojas a lo largo.

Hecha de un material ahora perdido para la humanidad, es el pináculo de todas las espadas, hecha mucho antes de que naciera el concepto de una espada.

La Espada de la Ruptura, [Ea].

-Tu solo aplastas héroe tras héroe, justo como el Demonio que eres- comentó tranquilo Gilgamesh.- Es solo justo qué tal bestia sea acallada por el héroe más grande de todos, con el arma más poderosa que existe.

-Y es solo justo que un Demonio como yo acabe con el más grande de los Héroes- dijo por su parte Vergil.

Vergil soltó el mango de [Yamato] y una nueva arma se había presentado para esta ocasión.

El Filo de Fuerza, [Force Edge].

La Espada que demostró estar por encima de la Espada Sagrada Definitiva; aquella arma que le permitió a Sparda el sobreponerse a tantas adversidades en el pasado; el arma por la cual Vergil despertó la Temen-Ni-Gru original.

Ahora, esta tan singular espada estaba por medirse contra la Espada que Separa el Cielo y la Tierra. Aquella arma que estuvo presente en el Génesis del mundo.

-Así que ese es la espada que pudo vencer a [Excalibur]- observó Gilgamesh, antes de ver a Vergil con una sonrisa de competividad.- No tienes de que preocuparte, Rey de los Demonios, me aseguraré de darle los más grandes honores a la hora en el que la agregue a mi colección.

-Lo mismo debo de decir de [Ea] Rey de los Héroes- comentó por su parte Vergil.

La lluvia perpetua que había [Temen-Ni-Gru] nuevamente fue el único sonido audible en el lugar.

Ninguno de estos orgullosos guerreros decía alguna palabra, no movían algún músculo, ni siquiera pareciera que respirasen.

Lenta y misteriosamente, la sección más arriba de la "hoja" de [Ea] empezó a rotar, trayendo consigo un sonido como de un taladro.

[Force Edge] por su parte empezó a pulsar en poder en las manos de su portador.

La segunda sección de [Ea] empezó a rotar también, del lado contrario a la primera. Energía carmesí se empezó a presentar sobre la hoja.

Un brillo dorado invadió por su parte a [Force Edge]. Un aura antagónica empezó a llenar la espada Demoniaca.

La última sección de [Ea] empezó a rotar también, la energía carmesí ahora se encontraba en cantidades exorbitantes.

-Llegó la hora- pensaron ambos al mismo tiempo.

Era hora de terminar con esto.

-¡Este es el poder detrás del Genesis mismo!- exclamó Gilgamesh.

-¡Este es el poder que el Kaleidoscope le concedió a este humilde Servant!- exclamó por su parte Vergil.

-¡Separa el Cielo y la Tierra!-

-¡Protege a aquellos que no pueden luchar por si mismos!-

La energía que emanaban ambos guerreros era inconmensurable. Ambos portando poder cercano al infinito.

La lluvia se había empezado a evaporar entre ambos, pero una solitaria gota alcanzó a caer, señalando consigo el inicio del fin.

-¡[Enuma Elish]!/¡[Heilig Getsuga Tensho]!-

Una onda de viento carmesí chocó contra un pilar de luz pura. Un choque de titanes monumental.

Alrededor de ambos, todo empezó a ser destruido por la onda de choque.

El cielo se fracturaba, la humedad en el aire se evaporaba, los pisos más bajos de la [Temen-Ni-Gru] se empezaron convertir a nada.

Incluso el poderoso Leviathan fue destruido sin ningún miramiento u aviso.

Sin embargo, ambos combatientes se mantenían férreos. Bloqueados en un empate entre sus ataques.

Gilgamesh sostenía a [Ea] tan firmemente como le fuera posible con su solo brazo. El sudor resbalaba por su frente, sus músculos quemaban.

Vergil por su parte apretaba el mango de [Force Edge] con desespero. Su voluntad no flaqueaba en ningún instante, pero su cuerpo ya se encontraba a su límite.

Ambos podían ver sus respectivas vidas pasad ante sus ojos.

Gilgamesh veía el día en el que fue coronado, el amor que su pueblo le transmitía y el cariño que el les transmitía a cambio. Vio como su paso a la madurez lo fue transformando hasta ser el hombre orgulloso por el que fue conocido. Como Enkidu llegó a su vida y no se sintió solo por primera vez en mucho tiempo. Cuando su amigo perdió la vida y como realizó su viaje en busca de la juventud eterna para finalmente darse cuenta de que su búsqueda fue inútil en el final.

Vergil por si parte vio su infancia. Destellos de su padre antes de que este abandonara a su familia, como Eva los crió a el y Dante. Vio el ataque de los Demonios, como el peleó intra estos mientras Dante se ocultaba, solo para que al final su madre pereciera también. Dio a Dante por muerto antes de iniciar su propio viaje, buscando poder, poder para jamás volver a perder a alguien. Un leve episodio de su vida cuando, cubriendo su cara en vendas, le hizo la vida imposible a Dante, su paso por Fortuna y el momento en el que se topó con Arkham.

Pero más que nada, Vergil la recordó a ella. La verdadera razón por la que busco poder, no para su uso personal, sino para proteger a alguien amado.

-¡Gana, Berserker!-

-¡NO PUEDO PERDER!-

Con esa exclamación, el mundo perdió todo color.

SLASH

-PUAGH-

XXX

Eh aquí, la batalla final. Eh aquí, el desenlace.

Para los que no entendieron como Vergil fue capaz de utilizar [Agni & Rudra]: su Reality Marble le permitía tener acceso a todos los demonios que residían dentro la torre, y con ello también podía utilizar sus Devil Arms.

El próximo...será también el último. El viaje ha sido largo, y me alegro de haberlo recorrido con todos ustedes.

Ahora, las estadísticas finales de Vergil.

Clase: (Grand) Berserker

Master: Illyasviel von Einzbern

Verdadero Nombre: Vergil Sparda

Títulos: Hijo de Sparda, Dark Slayer, Faker(Gilgamesh), Nelo Angelo

Genero: Masculino

Altura/Peso: 1.80m/68Kg

Alineación: Mal Caótico

Fuerza: B

Resistencia: A

Agilidad: A++

Mana: A

Suerte: C-

Hougu: A++

Habilidades de Clase:
-Mejora de la Locura: Bloqueada(el sistema del Santo Grial bloqueo esta habilidad debido al peligro que representaría).

-Cúspide de la Locura: EX (habilidad única de Vergil al ser el Grand Servant de la Clase Berserker. Es capaz de usar los Hougus de todos los Espíritus Heroicos que alguna vez hayan sido elegibles en la Clase Berserker. Los rangos de estos son disminuidos en uno y solo es capaz de utilizar 3 por día).

-Manifestación Independiente: A+ (una habilidad que permite manifestación sin soporte alguno en la realidad. Dada a Vergil al convertirse en Grand Servant, le permite seguir combatiendo sin un Master que le supla Prana).

Habilidades Personales:
-Regeneración: A+(debido a su herencia demoníaca, Vergil heredó una regeneración que lo cura de heridas fatales en cuestión de segundos)

-Memoria Muscular: A(a pesar de su categoría, Vergil no pierde su habilidad con la espada, velocidad o agilidad e inteligencia).

-Herencia Demoniaca: A+(el símbolo de la procedencia de Vergil; debido a su sangre de Demonio este mismo obtiene Resistencia Mágica, Valentía y Fuerza Monstruosa a pesar de no pertenecer a su lista de habilidades).

-[Espadas Convocadas]: A(construcciones de energía que Vergil usa para atacar enemigos a distancia o también para aumentar su defensa como una forma de escudo).

-Nelo Angelo: A(transformación oscura de Vergil. Se activa cuando Vergil sucumbe a la ira en su interior. Su patrón de ataques cambia, concentrándose ahora en destruir al enemigo, no dándole mucho cuidado a sus alrededores).

-[Dark Slayer]: A(habilidad que le permite a Vergil cambiar de locación con una de sus espadas durante la batalla).

-[Devil Trigger]: A++(la carta del triunfo de Vergil. Activado es capaz de aumentar todas sus estadísticas diez veces así como revela su verdadera forma demoníaca. En este estado es más vulnerable a aquello que posea propiedades sagradas).

Hougus:
-[Ebony](anti-unidad) Rango C (originalmente de Dante, es la única arma de fuego que Vergil ha utilizado en toda su vida. Debido a que Vergil tiene un voto de nunca usar armas de fuego, este Hougu solo puede ser usado una vez, para luego destruirse).

-[Beowulf](anti-unidad) Rango B+(forjado a partir del poder de un poderoso demonio, da a su usuario un aumento en fuerza y velocidad y ataques tan precisos como la luz).

-[Amuleto de Eva](anti-personal) Rango B+(amuleto usado por Sparda para sellar la puerta al mundo demoniaco, dado a Vergil por su madre, es capaz de negar cualquier maldición dirigida a quien lo porte).

-[Yamato](anti-ejército) Rango A+(espada que se dice lo corta todo, es capaz de cortar entre las dimensiones anulando así cualquier técnica espacio-tiempo que su usuario decida).

-[Force Edge](anti-fortaleza) Rango A++(arma personal del caballero oscuro, contiene la mitad del poder de Sparda en su forma normal, siendo capaz de aumentar el poder de quién la porte).

-[Temen-Ni-Gru](anti-humanidad) EX(Reality Marble, representación de la torre del mal donde concluyó la leyenda de Vergil. Contiene todos los demonios que alguna vez reposaron ahí, todos bajo las órdenes de Vergil, aguardando el momento para terminar con la raza humana).

Hasta la próxima.