Siempre ha existido una extraña tensión sexual entre Jungkook y Hoseok. Era un desconocido sentimiento que J-Hope no podía explicar; su corazón se aceleraba por él; ver al maknae lo alegraba; y provocaba un revoltijo en su estomago. Era un sentimiento que comenzó a sentir cuando conoció al pequeño chico. El lindo adolescente, que lo volvió loco desde el momento en el que lo vió.

Jung luchó mucho con ese sentimiento, ya que esa atracción lo hacia sentir culpable porque consideraba que Jungkook era solo un niño.
Con el tiempo y gracias a los miles de acercamientos con doble sentido por parte de ambos, logró aceptar la innegable atracción sexual que sentía por él.

A Hoseok le excitaba ver su cuerpo; le gustaba escuchar su voz cuando estaba agitado; adoraba ver la sensual forma en la que bailaba; y amaba con locura sus piernas, esas hermosa piernas que lo enloquecian. Hoseok lo quería, lo deseaba, lo anhelaba de manera desesperada; quería perderse en ese hermoso y formado cuerpo que consideraba perfecto.

Ambos comenzaron a tener constantes acercamientos, que en un principio eran simples abrazos y leves caricias; y terminaron como toques algo subidos de tono por parte de Jungkook, que se había vuelto increíblemente cariñoso muy derepente; solía acariciar su cabello mientras le susurraba palabras al oido; cuando se sentaban juntos, acariciaba levemente sus muslos; lo incitaba a abrazarlo por la espalda rodeando con sus brazos su estrecha cintura; también se sentaba sobre su regazo moviéndose sobre él, fingiendo no saber lo que le provocaba. Pero esos eran solo simples roces que no pasaban a más, roces que Hoseok interpretaba como simple cariño por parte del pequeño.

Pero ninguna de esas acciones se comparó con el incidente que días después ocurrió. El desastroso momento en el que Hoseok interrumpió en la habitación del maknae sin previó aviso; encontrándose con Jungkook, saliendo de su baño con una simple toalla que rodeaba su cintura.

Jungkook al notar la presencia de su hyung se avergonzó por la situación en la que estaba y Hoseok solo le devolvió una agradable sonrisa, enternecido por su sonrojo.

—Lamento no haber tocado, Kook— dijó Hoseok cerrando la puerta detrás de él.

—No se preocupe hyung— le susurró en respuesta, se sentía bastante tímido de repente y a Hoseok le gustó ver eso —¿Paso algo?— le preguntó, sentándose en su cama con un claro nerviosismo.

—No, ¿por qué lo preguntas?

—Porque vino a mi habitación. Es raro, usted nunca viene a verme— e innegablemente el maknae tenía razón. Jamas iba a su habitación, a no ser que necesitase algo o ocurriera una urgencia. Pero ahora, no sabía el por qué de su visita, simplemente sintió la extraña necesidad de verlo.

—La verdad es que queria saber si necesitabas algo— mintió —Díme cualquier cosa y lo haré—  el maknae lo miró extrañado por tal proposición,
pero igual aceptó.

—Quiero que seque mi cabello— Hoseok lo miró sorprendido por un momento e intentó  buscar sarcasmo en sus palabras, pero no había nada parecido.

Sin responderle, se sentó atras de él en la cama y con otra toalla comenzó a secar su cabello, procurando no dejar ninguna gota de agua.
Se sentía extrañamente cohibido por tenerlo tan cerca; el ver su palida piel, brillante por el agua y escuchar los leves suspiros que escapaban de sus labios, provocó que comenzara a sentir calor por todo su cuerpo.

—Ya terminé pequeño...— le susurró al oido. Jungkook se estremeció al sentir su respiración tan cerca y dejó escapar un involuntario jadeo.

Al oírlo, Hoseok se atrevió a acercar con timidez su rostro al cuello del menor, aspirando el aroma a vainilla de su piel. Segundos después oyó nuevamente esa suave voz hablarle entre pequeños suspiros.

—Hobi... ¿qué hace?— la entrecortada voz de Jungkook logró asustarlo, provocando que se alejase de el, con miedo y vergüenza.

—Lo s..siento, no quería...— Hoseok vió como de repente Jungkook lo miró con un notorio sonrojo y con los nervios a flor de piel.

—¿Puedo besarte, Hyung?— preguntó decidido, recibiendo una mirada de sopresa como respuestas. Hoseok quería besarlo, niquiera se detuvo a pensarlo cuando ya estaba acariciando su rostro y juntando sus labios.

A pesar de sus muchos acercamientos, jamas llegaron a besarse de ese modo tan lasivo, juntando sus lenguas y creando un sonido morboso por su intercambio de saliva.
Jungkook se acercó más a el, sentándose sobre su regazo, ignorando que la única prenda que cubría su cuerpo había caído. Las manos de Hoseok, se posaron con timidez en sus muslos, hasta llegar a su espalda intentado acercarlo más a su cuerpo.

Hoseok besó toda la extensión de su cuello hasta sus clavículas. Comenzando a oír los suaves gemidos del menor, quien murmuraba su nombre pidiendo que siguiera con aquellos movimientos.
Las temblorosas manos de Jungkook viajaron hasta la camisa de su hyung, intentando desprenderla, botón por botón.
Jung se sentía excitado por la situación; por fin tenía a un caliente, desnudo y ardiente Jungkook solo para el. El único pequeño y gran problema era que, por tantos sentimientos juntos; no recordaron que no eran los únicos que vivían en esa casa.

—Jungkookie ¿ya estás listo para irnos?— preguntó Taehyung del otro lado de la puerta, logrando separar a ambos chicos.
 
Jungkook se alejó de el, volvió a cubrirse con la toalla de la que se había olvidado y se acercó a la puerta, abriendola levemente para poder hablar con el chico que estaba al otro lado, mientras que Hoseok lo esperaba sentado en la cama con una notoria erección, un sonrojo que abordaba desde su cuello hasta sus orejas y una notoria falta de aire.
Segundos después la puerta fue cerrada y Jungkook cubrió su rostro con ambas manos para no tener que mirarlo.

—Hyung, por favor vete.

—Pero no quiero dejarte—  le respondió, acercándose a el para poder abrazarlo por la espalda nuevamente  —Jungkookie, por favor... Quédate conmigo— suplicó, rodeando con uno de sus brazos su cintura y con la otra acariciando levemente su pierna hasta llegar a su trasero. Le era imposible dejar de tocarlo luego de lo que había pasado.

—En serio debo irme, Tae esta esperándome. Pero yo quiero... Verlo otra vez Hobi— murmuró entre suspiros por los suaves toques sobre en su cuerpo.

El maknae, alejó sus manos y lo empujó levemente hasta la puerta aún con un sonrojo en su rostro. Hoseok, rendidó, abrió la puerta con intensión de salir de su habitación pero una pequeña mano lo detuvo, lo sostuvo de la camisa y lo acercó para besarlo; un beso que sintió diferente a los anteriores, fue una mas leve, suave, lento, cariñoso y extrañó para el. Segundos después y sin darse cuenta, ya estaba en el pasillo y Jungkook ya había cerrado la puerta de se habitación dejándolo afuera.

Ya en el pasillo, dejó escapar un suspiro pesado y cubrió su rostro con sus dos manos apenado. No podía creer lo que había pasado hace tan solo unos segundos. ¿Qué fue eso?
Era demasiado en tan poco tiempo. No sabía cómo habían pasado de tener su extraña tensión sexual a casi tener relaciones.

Con el pasar de los días, ambos chicos no podían estar cerca del otro sin sonrojarse de la vergüenza, y a pesar de que hacían lo posible para evitarse, inevitablemente se quedaban solos. Y cada vez que hallaban esos momentos de intimidad, se encontraban entre los brazos del otro, besándose y dándose placer mútuo; entre besos humedos, masturbaciones y mucho sexo oral. El problema era que nunca llegaron a concretar sus encuentros, porque inevitablemente eran interrumpidos por alguien o algo en el momento menos esperado. Y tristemente para Hoseok, solo podía conformarse con los recuerdos del inexperto chico chupando y masturbando su miembro. Recordaba hasta lo sonrojado que estaba su rostro, lo profundo que llegaba a ser y lo húmedo y caliente de su boca. Verlo asi era como un sueño para el y aun más, cuando se dió cuenta de que seguía viendose torpemente adorable con el rostro cubierto de toda su esencia.

Jung se sentía como en un sueño por poder tener tal intimidad con el maknae; lo único que pedía ahora, era encontrar tiempo para estar solos, por várias horas y sin que nadie los interrumpiera.
Decididó, a estar solo con Jungkook, pensó que ir a su habitación en medio de la noche era algo necesario.

Exactamente a las tres de la madrugada, se levantó de su cama, intentando hacer el menor ruído posible para no despertar a su compañero de habitación; y salió del lugar, caminando de puntitas de pies por los pasillos de su hogar.
Cuando llegó a esa habitación casi llora de la emoción cuando notó que no tenía seguro. Al entrar cerró la puerta detrás de el y caminó hasta la cama de Jungkook, encontrándose con el chico más hermoso y sexy que había conocido. Aún dormía, con la boca ligeramente abierta, estirado por toda la cama y roncando despacio.
Hoseok encendió la lámpara que estaba a un lado de la cama y lo movió, despacio para despertarlo

—¿Hyung?— lo oyó murmurar mientras frotaba sus ojos con sus puños —No puede ser, ahora lo veo hasta en mis sueño— Hoseok se enterneció al verlo así e instintivamente se acercó a el para besarlo

—Hola pequeño ¿puedo dormir contigo?

—Hobi, se nota que es de madrugada ¿qué hacé aquí?

—Te extrañaba— murmuró, mientras se recostaba junto a el en la cama

Cuando ambos estuvieron acostados, Hoseok lo abrazó y besó su rostro adormilado hasta llegar a sus labios, mientras sus manos acariciaban levemente su espalda.
Sus besos comenzaron a ser más intensos al pasar los segundos y sus caricias comenzaban a espacirse por todo el cuerpo del menor. Cuando Jungkook sintió que no era suficiente, se sentó justo sobre su miembro, mientras Hoseok seguía recostado en la cama; moviendo su cintura de atrás hacia adelante provocando una abrumante y excitante fricción.

Y otra vez volvían a estar en la misma situación; entre besos calientes, caricias indecentes, sonrisas cómplices y leves sonrojos.
Poco a poco, Hoseok fue quitando el molesto pijama de Jungkook solo para poder ver nuevamente su cuerpo desnudo, mientras sus manos presionaban con cierta fuerza sus caderas, para ayudarlo a moverse más rápido sobre su miembro

Pero muy de repente, Jungkook paró sus movimientos, lo miró a los ojos, posó sus manos sobre sus mejillas y juntó sus labios. Nuevamente fue ese beso; suave, lento y cariñoso, el que provocaba un extrañó sentimiento en Hoseok, ese revoltijo en el estomago y una desconocida emoción que calaba por todo su cuerpo, que el suponía que era por la situación en la que se encontraban. Jungkook se separó de él segundos después mientras acariciaba su rostro y le sonreía con un cariño y brillo en los ojos único.

—Te amo hyung— susurró —Realmente te amo.

Cuando Hoseok lo escuchó, casi se ahoga con su propia saliva y sentía que su mandíbula se iba a caer de la sopresa. No tardo mucho en sentarse en la cama aún con el confundido chico sobre su regazo

—¿Q..Qué dijiste?

—Que te amo,  Hyung.  Estoy enamorado de usted— Respondió, como si fuese algo obvio, pero estaba claro que para Hoseok no lo era

¿Enamorado? ¿Jungkook? ¿de mí?

Hoseok se sintió desorientado por unos segundos. El maknae no podía estar enamorado de el, era una locura. Su relación solo era sexo, nada de amor.

—Hyung ¿se siente bien?

—Si me siento bien, muy bien— Hoseok se levantó de la cama desorientado, dejando al confundido chico a un lado. Necesitaba salir de esa habitación —Debo irme, mañana tenemos que ensayar ¡Si! Ensayar. Nos vemos mañana Kookie— Al abrir la puerta para salir la adorable voz del maknae lo detuvo

—Pero aún no terminamos hyung... Por favor... No me deje asi...— susurró Jungkook, en un claro intentó de coqueteó, mientras lo mirada desde su cama, sentado sobre sus propias rodillas y acomodando suavemente su cabello; quería que su Hyung se quedase allí con el. Pero Hoseok, con una gran fuerza de voluntad, se alejó más de el.

Antes de salir, le dió un suave beso en los labios y escapó de aquella habitación, despidiéndose con un simple "descansa, pequeño". Al llegar a su cuarto se metió con prisa al baño y cerró la puerta detrás de sí.

Su erección le dolía y no podía pensar bien asi. Su mano viajó a su miembro, tocandolo despacio. No podía dejar de pensar en el lindo maknae, en lo suave de su piel, en su cuerpo bien formado, en su definido rostro, en su brillante sonrisa, en sus grandes ojos; en su simple existencia.

Cuando menos lo notó ya se había corrido solo pensando en él.

Lavó sus manos, mientras pensaba seriamente en lo que le había dicho Jungkook. Era amor, ahora entendía el por qué de sus acercamientos, caricias y besos tan cariñosos; eso explicaba muchas cosas; mientras para Hoseok era algo sexual para Jungkook era amor, y el, sin darse cuenta, le había dado esperanzas de que sentía lo mismo. Pero Hoseok no creía sentir amor por el, o al menos no de ese modo. El no lo amaba de forma romantica.
Porque amar se debe sentir diferente ¿verdad? No era solo sexo, el amor tiende a ser algo mucho más que físico. Supuso.
No es como si fuera un experto en el tema, realmente nunca ha llegado a enamorarse y no sabía identificar esos sentimientos y mucho menos diferenciarlos

Estaba confundido, Jungkook lo estaba confundiendo. Sus pensamientos estaban tan difusos, como la vez que comenzó a sentir esa extraña atracción sexual. Estaba mal, pero igual lo sentía y con el paso del tiempo lo aceptó; pero para él, el amor tenía que ser un sentimiento completamente diferente a ese

¿Qué sabía el del amor? El único amor que Hoseok conocía era el amor familiar, el que te da un padre, una madre, una hermana, un hermano...
Jungkook básicamente era como un hermano, pero no sentía lo mismo por él, que lo que sentía por Jimin o Taehyung o cualquier otro miembro. Siempre pensó que Jungkook era diferente porque le atraía sexualmente, no porque lo amase como pareja.

Respuestas, éso era lo que necesitaba; respuestas de terceros. Sus primeros objetivos; Kim Seokjin, Min Yoongi y Kim Namjoon.

—¿Cómo se siente estar enamorado?— repitió Jin a la pregunta de Hoseok —Bueno, creo que puedes saberlo por cómo te sientes cerca de esa persona. Tiene que hacerte sentir especial y llenó de felicidad con su sola presencia

—No pienso igual que hyung; el amor puede ser familiar o de pareja. La diferencia clara es que te sientes atraído sexualmente por quien tienes amor de pareja. Es algo más fisico— contradijo Suga, mientras Hoseok analizaba sus respuestas e intentaba recordarlas detalle a detalle

—HoseoK...— Murmuró Nam, en un intento de no interrumpir el pequeño debate amoroso que sus dos mayores habían comenzado —¿De quién estas enamorado?

—No estoy enamorado... eso creo. La verdad es que, también quisera saberlo— Hoseok estaba frustrado, no sabía bien lo que sentía y Namjoon notó esa preocupación

—Hope, cuando estas enamorado hay algo muy dentro de ti que te lo dice. Es como dice Jin hyung, te hacé sentir especial y querido. Claro también creo lo mismo que Suga, tienes que tener atracción fisica. Que tu corazón palpite al ver su sonrisa o cuando te abraza o  si te besa. Tu lo sabes, muy dentro de ti y de forma extraña, sabes que es amor.

Al salir de la habitación donde los tres chicos estaban, Hoseok casi comenzó a llorar por lo acertadas que eran las palabras de Namjoon, y por lo detallado que llegaba a ser con su situación. Debía pensar sobre ello, pero aún era poca información.

Una semana después de la conversación con sus dos mayores y Nam, fue por sus segundos objetivos; Park Jimin y Kim Taehyung.

—El amor te llena de colores la vida, hyung. puede ser increíblemente doloroso o la mejor experiencia de tu vida, en algunos casos ambos. El punto es que si esa persona te corresponde ¡La felicidad es tan grande!— respondió un eufórico Jimin a su pregunta

—Concuerdo con Jimin hyung. Aunque yo agregaría que el amor, cada persona lo vé de manera diferente. Algunos no quieren enamorarse, otros estan confundidos, otros no son correspondidos, otros son amados, y la lista sigue y sigue— agregó Taehyung con cierta seriedad

—Entiendo... Gracias por su ayuda chicos— Estaba a punto de salir de aquella habitación, hasta que la dulce voz de Jimin lo frenó

—¿Acaso esta enamorado Hobi hyung?—

Pensó en aquella pregunta por algunos segundos y decidido respondio con una sonrisa —Si, y ahora quiero saber si esa persona también lo esta— salió de la habitación al terminar y cerró la puerta detrás de el, sintiendo una gran alegría recorriendo su cuerpo —Solo una respuesta más

Ya había pasado exactamente un mes;  cuatro semanas y media; treintaiun días; setecientas cuarenta y cuatro horas; y Jungkook aun no hablaba con Hoseok.

Le  dijó que lo amaba, y él solo huyó ¿porqué? ¿había hecho algo malo?
Lo pensó  por mucho tiempo, pero no encontró respuestas a sus dos constantes preguntas.

Se suponía que Hoseok también lo quería ¿no? El lo besaba, lo tocaba, sabía que todo era más sexual pero creía que había amor en esa pequeña y extraña relación que tuvieron. Lo peor era que Jungkook nisiquiera podía preguntárselo, ya que todo ese tiempo Hoseok lo evitó y no encontró nisiquiera un momento en donde estuvieran solos. Esa situación le irritaba.

"Te amo hyung"

¿por qué le dije eso? Pensaba frustrado, mientras volvía a cubrir su rostro con su almohada. Estaba enojado con su hyung, y con todo el gran cariño que sentía por él.

—Que te jodan Hoseok— murmuró en el silencio de su cuarto intentando no gritar de rabia. Su celular comenzó a sonar de repente y aún molesto tanteó por su cama buscándolo para poder responder —¡¿Quién es?!— gritó enojado y luego cubrió su boca con pena por su sorpresiva y agresiva acción —Lo siento no debí gritar, yo...

Una leve risa se oyó al otro lado de la línea y su corazón pálpito al oirlo de nuevo —Tranquilo Kookie. Queria saber si podia verte ahora. Estoy en mi estudio y quiero hablar contigo.

Lo pensó por un segundo, ¿debía ir? Estarán a solas luego de un mes. Seguramente lo golpearía por ignorarlo tanto tiempo y luego lo besaría repitiendole lo mucho que lo amaba. Eso seria vergonzoso.

—Hyung, si te veo voy a golpearte— admitió y sonrió cuando escucho una risa como respuesta.

—Sera un golpe merecido asi que lo dejare pasar. Ahora ven aquí, quiero ver a mi maknae favorito.

La llamada se corto y minutos después, Jungkook ya estaba en la puerta del estudio, con un notable sonrojo en todo su rostro y con su mano temblando en un intento de llamar a la puerta. Cuando por fin lo hizó, Hoseok lo dejó pasar invitandolo a sentarse en el acogedor sofá de su estudio.

—¿Por qué crees que estas enamorado de mi?— la pregunta fue demasiado directa y Jungkook se removió en su lugar apenado al oírla.

—¿Por qué quieres saber eso hyung?

—Porque, luego de pensarlo por mucho tiempo, me dí cuenta de que estoy enamorado de ti, y quiero saber si te sientes igual— dijó, mientras lo miraba desde su silla de escritorio —Quiero saber que es lo que sientes  por mi.

—Hoseok— murmuró, pensando unos segundos en sus palabras, ya que no quería arruinar es oportunidad —Ahora mismo mi corazón esta palpitando con fuerza; mis manos tiemblan por que sienten la necesidad de tocar tu rostro; quiero besarte y poder acariciar tu cabello mientras me sonríes; quiero verte bailar por que eres feliz cuando lo haces y yo amo verte feliz; quiero oírte decirme que me amas y que estas enamorado de mi, de nuevo; me pone feliz escucharte cuando cantas; y cuando sonries... Yo me siento tan dichoso de presenciar ese pequeño gesto. Pero también quiero golpearte y gritarte por ignorarme tanto tiempo y por hacerme sentir tan mal por ello. Me dí cuenta que el amor es hermoso cuando me besaste y tocaste, pero que también duele; dolió cuando no me dirigiste la palabra por días y cuando lo hacías solo era por algo importante. Y yo solo podía pensar; Vaya, estar enamorado si que apesta...

Los ojos de Jungkook comenzaron a arder y sus lágrimas cayeron una trás otra por sus mejillas. Estaba dolido, pero no quería descargarse con la persona que había provocado ese dolor.

Sin darse cuenta, los brazos de Hoseok ya lo habían rodeado, mientras que con una de sus manos limpiaba las lágrimas que caían por sus mejillas.

—También te amo— Hoseok se acercó a el, le sonrió y luego lo besó mientras peinaba sus cabellos, quitandolos de su lindo rostro —Lamento mucho haberte lastimado, no fue mi intención. Fui egoísta y solo pensé en mi, y no en tus sentimientos— y volvió a abrazarlo, aspirando el suave aroma a vanilla de su cuello.

Jungkook dejó un pequeño beso en su cuello riendo casi imperceptible, luego agarró su rostro y lo besó, esta vez tocando levemente los labios contrarios con su lengua, sosteniendose con fuerza del cuello de su camisa. Hoseok posó sus manos en la cintura del menor y lo recostó sobre el gran sofá mientras se acomodaba entre sus piernas y metía sus manos por debajo de su ropa dejándose llevar por el momento y por ese caliente beso.

—Espere, espere. ¿Lo v..vamos a hacer? ¿nosotros? ¿ahora y aquí?— preguntó Jungkook, intentando regular su respiración sin dejar de mirarlo sorprendido.

—Bueno, si tu quieres si. Te dejare pensarlo con tranquilidad.

—¡¿Con tranquilidad?! ¡Pero si su... cosa está rozando entre mis piernas!— Le gritó apenado —Se siente extraño, hyung...

—No decías eso cuando te tocaba en la sala de prácticas.

—Eso se sentía bien— susurró —Me gusta cuando me toca de ese modo.

—¿De este modo dices?— una de las manos de Hoseok tocaron su entrepierna, frotando levemente en aquella zona.

Jungkook jadeo al sentir esos toques, mientras que, sin darse cuenta, Hoseok lo despojó de sus prendas, una a una, hasta dejarlo en ropa interior.
Un escalofrío le recorrió todo el cuerpo, cuando las frias manos de su hyung, tocaron por debajo de la fina tela, frotando directamente su miembro, gimió suavemente al sentirlo; le gustaba ser tocado por su Hyung y por sus grandes manos.

Hoseok intento ser tierno y delicado con sus caricias y toques; quería que su lindo Jungkook se sintiera bien y cómodo con lo que estaban por hacer.
En una rápido movimiento quitó la única prenda que le quedaba y comenzó a masturbarlo con cierta velocidad, mientras besaba levemente sus labios. Podía sentir ese hermoso cuerpo tener espasmos bajo su toque y escuchar esos melódicos gemidos maldiciendo su nombre justo en su oido.

Jungkook comenzó a sentir un agradable hormigueo abajo de su abdomen y no tardo mucho en llegar a un gratificante orgasmo del que se sintió muy apenado; era vergonzoso para el, ver a Hoseok lamiedo los dedos de su mano de forma tan sexy y morbosa, y lo fue aún más cuando vió a su Hyung acercar sus dedos hacia el.

—¡Deténte hyung!— gritó, asustando a Hoseok, quien se detuvo al momento al pensar que lo había lastimado.

—Lo... Siento, ¿hice algo qué te hizó sentir incómodo? Voy a detenerme

—No, no. Le dije que me gusta... Cuando me toca. Yo solo... Su ropa... No se la quitó— Murmuró un sonrojado Jungkook, recordando que nunca había visto a su Hyung desnudo.

—Eres muy tierno, aún en una situación asi...

Hoseok se quitó su camisa blanca, luego sus pantalones junto con su ropa interior, arrojandolas a un punto no específico de su estudió y volvió a su posición inicial, entre las hermosas y largas piernas de su maknae favorito.

—¿Puedo continuar ahora, lindo?— habló a su oído, provocandole un pequeño escalofrío mientras asentía.

Comenzó nuevamente a besarlo, mientras le susurraba dulces palabras al oído, Jungkook apenas notó la intromisión de dos de los dedos del manor en su interior. Estaban humedos, resbaladizos y se sentía extraño. Segundos después sintió las simuladas embestidas de los dedos de su hyung, tocando justo en un placentero lugar de su interior, provocando que se retorciera de gozo sobre el. 
Al sentirse listo, Hoseok alejó sus dedos, dejandolo con una extraña sensación de vacio.

"Voy a hacerlo", le murmuró al oido, segundos antes de comenzar a sentir como su cuerpo de abría, dando lugar a esa gran intromisión y a una incómoda sensación de ardor. Ahogó un jadeo al sentir como todo el miembro de su hyung había entrado en el, provocando que sus piernas flaquearan y que su cuerpo se estremciera por el repentino toque a ese exquisito punto en su interior.

—¿Te sientes bien?— le preguntó Hoseok, tratando de no moverse demasiado, no quería herirlo en ningun sentido. Solo se permitió moverse cuando Jungkook asintió.

Lentamente comenzó un suave vaivén, entrando y saliendo de ese hermoso cuerpo que tanto deseó, disfrutando de la deliciosa y caliente estrechez que envolvía su miembro en cada estocada.
Jungkook sintió una fuerte y placentera corriente recorrer por su cuerpo cuando Hoseok embistió nuevamente en ese punto específico de su interior.

—Se siente bien... Cuando golpeas allí— logró decir, con la voz agitada y entrecortada.

Hoseok casi muere de ternura al verlo asi de vulnerable; con las mejillas rojas y los ojos llorosos. Hermoso era la única palabra que podría usar para describir esa mirada de ojos grandes —¿Aquí dices?— susurró a su oido, volviendo a embestir en su próstata

Jungkook gimió y se retorció de placer con cada movimiento de su Hyung; le gustaba esa sensación, estar abajo de Hoseok, ver su rostro sudado y sonriente, sostenerse de sus hombros mientras era penetrado de forma tan brusca e irregular, le era tan excitante.

Intentó sostenerse mejor de su Hyung rodeando su cuello con sus brazos, al sentir ese agradable cosquilleo bajo su abdomen nuevamente. Su cuerpo se estremeció cuando al orgasmo, y sus brazos amenazaron con caer, pero se negó a soltar a su Hyung hasta que sintió un cálido líquido en su interior, y un agotado cuerpo caer sobre el. Ambos se mantuvieron en silencio mientras intentaban recuperar el aliento.

—Eso fue... Realmente...

—¡Increíble Hyung! Se sintió muy bien... Hay que hacerlo de nuevo...

—¿De nuevo?

—Si, pero qusiera que vayamos a mi habitación, su sofá es demasiado incómodo...— Hoseok rió al oírlo, mientras le ayudaba acomodando su camisa y besando su rostro

—No dijiste que era incómodo hace unos minutos mientras lo hacíamos, mentiroso—Jungkook sintió su rostro, orejas y cuello arder de la vergüenza muy de repente por esas palabras —Pero tienes razón, es un lindo sofá pero muy incómodo.

Ambos chicos limpiaron el desastre que había hecho en ese estudio, luego se vistieron entre besos y sonrisas, y salieron del lugar aún sonrojados, despeinados y abrazados, encontrándose con cinco sonrientes y curiosos chicos en el pasillo

—Asi que era Jungkook de quién estabas enamorado— Habló Namjoon al verlos, con una divertida sonrisa

—¿Cuanto tiempo estuvieron aquí?— Hoseok quería morir de vergüenza, hasta sus palabras salían involuntariamente cortadas por la repentina sorpresa.

—Yoongi y Seokjin hyung están aquí desde que Jungkook pregunto si lo ibán a hacer. Nam hyung y yo estamos desde que dijiste "Eres muy tierno, aún en una situación asi"— imitó Jimin entre risas —Y TaeTae llegó casi al final— Ambos chicos intentaron ocultar su rostro de vergüenza, en un abrazo entre ellos

—¿Por qué se quedaron a oírnos? ¿No tiene vergüenza acaso?— murmuró Hoseok molesto —Bien, ya que estan aquí quiero dejarles en claro que amo a Jungkook y que ahora somos una feliz pareja. Fin del comunicado, ahora pueden irse, es incómodo saber que todos nos escucharon hacer el amor— los cinco chicos asistieron y felicitaron a la nueva pareja del grupo, antes de retirarse dejandolos solos

—¿Pareja?— se atrevió a preguntar Jungkook alejándose algunos centímetros de el

—Supuse que estaba claro, te dije que estoy enamorado de ti, y tu estas enamorado de mi. Creo que hasta deberíamos casarnos— Jungkook comenzó a reir por esa propuesta tan repentina y divertida

—Me parece bien, hyung. Pero ahora solo quiero quedarme más tiempo junto a usted—  sus brazos rodearon el cuerpo de su Hyung, presionandolo con fuerza y quitándole el aire mientras le sonreia como un niño prequeño

Hoseok solo atinó a besarlo para que dejase de abrazarlo con tal fuerza; sintiendo nuevamente esa sensación extraña de felicidad y el agradable palpitar de su corazón solo por tener asi de cerca a Jungkook. Ese lindo chico de encantadora sonrisa que tanto lo confundió.

💐

Este libro originalmente iba a tener vários OS's del Hopekook, con Jungkook pasivo (por los pocos que he encontrado en wattpad) pero lo he cambiado a simplemente un One shot, pero eso no significa que dejare de escribir Hopekook, tengo más Fics en mente y también otros ya publicados.

Y también me gustaría adaptar este OS con otra shipp, acepto sugerencias ♡

Eso es todo, gracias por leer