Bruno se quedó atónito por el beso de su sobrino, pero por alguna razón, él no lo empujo ni nada, lo estaba disfrutando, pues en el fondo también sentía lo mismo, por eso le dolió tanto que él se alejara.

Bruno se acercó más a Camilo y continuo con aquel beso.

Ninguno pensaba separarse del otro por un buen tiempo, sus labios se habían juntado finalmente, algo que ambos habían anhelado hace mucho tiempo.

Después de un buen rato ambos se separaron de aquel beso, y ahora se miraban con una sonrisa.

Bruno- siento lo mismo, pero no sé si podamos ser algo

Camilo- talvez seamos tío y sobrino, pero no importa la vida es muy corta para no hacer lo que uno quiera.

Bruno- ¿lo intentamos?

Camilo- hagámoslo

Bruno- ¿Qué hay de la familia?

Camilo- vámonos lejos de aquí, así no nos molestaran

Bruno- ¿seguro que quieres dejar todo, solo por mí?

Camilo- lo haría mil veces, contigo aprendí muchas cosas y no quiero estará alejado de ti

Bruno- yo tampoco

Camilo- entonces, vámonos ahora, nadie jamás nos encontrara

Bruno- está bien, déjame alisto unas cuantas cosas.

Bruno tomo una especie de bolso y en este puso algunas cosas como su cepillo, su pequeño escenario para armar sus ratanovelas, unas fotos, y una lata que tenia monedas.

Luego de esto ambos salieron del pasadizo.

Pero al estar afuera se toparon con Mirabel.