04
-¡¿Por qué tanta confianza de repente con la princesa, Sasha?!
La rubia observó a la castaña caminar de un lado a otro en la habitación. Sasha rodó los ojos y se quitó las botas.
-Hablas como si no hubieras hecho lo mismo.
-¡Yo no le hice tantas preguntas!
Sasha suspiro y se dejó caer en la cama.
-Pero si trajiste varios libros de su alcoba, Anne.
Anne se sonrojó al instante, se sentó en su cama y se empezó a quitar las botas.
-¿Una rata?
-¿Ah?
Sasha se levantó de la cama y se acercó a la ventana, Anne la siguió y observó a la rata que estaba fuera de la ventana, llevaba un papel envuelto en un lazo verde consigo.
-¿Y esto?
La rata le entregó el papel a Sasha y esta lo tomó al instante, la rata no se fue, como si esperara algo.
Sasha tiró el listón al suelo y empezó a leer lo que decía el papel. Anne observó confundida como de poco a poco, una sonrisa comenzaba a aparecer en el rostro de la rubia.
-¿Que es eso?
-Es un mensaje de Marcy.
-En primera, es la princesa Marcy — Anne corrigió — y en segunda... ¡¿Cómo?!
Anne le arrebató la carta de las manos a Sasha y empezó a leer. Sasha recogió el listón de suelo y lo guardó en su bolsillo sin que Anne se diera cuenta.
-¿Nos... Nosotras nos quedaremos?
Anne observó a Sasha, sorprendida.
-Al parecer si — Sasha rió — considerate importante, Anne, le caímos bien a la princesa de Newtopia.
𖡼.𖤣𖥧𖡼.𖤣𖥧
Marcy observó por su ventana, apoyó la cabeza en sus rodillas y suspiró. Escuchó golpes en su puerta y volteó hacia esta.
Olivia entró a la habitación, detrás de ella, Anne y Sasha la siguieron. Marcy sonrió y caminó hacia ellas.
-Princesa Marcy — Olivia empezó — según órdenes del rey, desde ahora, Anne Boonchuy y Sasha Waybright serán sus guardias.
-Gracias, Lady Olivia. Creo que la general la estaba buscando.
Olivia sonrió facilmente mientras mataba a Marcy con la mirada.
-La buscaré.
Olivia caminó hacia la puerta y dejó finalmente al grupo solas. Marcy suspiró.
-Ay, el amor prohibido, igual a los libros, esperemos que el final no sea parecido — Marcy comentó llamando la atención de Anne y Sasha — oh, eso me recuerda, ¿Leyeron alguno de los libros que les di?, ¡Así les recomiendo más!
-¿En una noche?
-¿Qué no es lo normal?
Anne y Sasha negaron con la cabeza. Marcy las observó, confusas.
-Supongo que soy solo yo.
-Pero, si leí uno de los que me regaló, princesa Marcy — Anne dijo ante la desilusión de Marcy.
El rostro de la pelinegra se iluminó y le empezó a preguntar a Anne sobre el libro. Sasha observó a ambas chicas frente a ella con una sonrisa en el rostro.
Creía que Marcy era bonita.
Pero, siempre creyó que Anne era linda.
Las dos lo eran, ambas eran hermosas.
Sasha siguió a Anne y Marcy, las cuales empezaban a caminar entre los estantes. Anne le explicaba su opinión sobre el libro a Marcy y esta la escuchaba atentamente. Los sonidos de sus pasos junto con la voz de Anne y Marcy llenaban el lugar.
Marcy disfrutaba de tener compañía. Luego de un tiempo, empiezas a odiar el silencio y la soledad, odias el encierro y los pensamientos en tu mente a lo largo de tu día.
Anne creía que la princesa Marcy era agradable y bonita, le gustaba mucho hablar con ella mientras escuchaba los pasos de Sasha detrás de ellas.
Las tardes en los días siguientes no fueron muy diferentes a esa. Anne y Sasha le llevaban la comida a la cama a Marcy y luego empezaban a hablar sobre cualquier cosa.
Las guardias le contaban a la princesa sobre el reino y las atracciones que este tenía, después de todo, Marcy nunca había salido del castillo.
Y entre risas y suspiros, los días pasaron, pronto convirtiéndose en semanas y luego en meses.
El trío no se separaba nunca, ni siquiera en la noche, Marcy enviaba a Sullivan, su rata mascota, con cartas y mensajes para las guardias, así seguían hablando durante las noches.
Marcy disfrutaba de leer los mensajes con comentarios tontos de Sasha y bonitas frases de Anne.
Tal vez podían llegar a ser algo más que un par de peones en su plan. Ellas eran las únicas amigas que había tenido desde que nació, literalmente.
Pero, a diferencia de cómo ella creía que sucedería, esa idea no le molestó en lo absoluto.
𖡼.𖤣𖥧𖡼.𖤣𖥧
-¿Entonces ellas están atrapadas en un mundo de anfibios?
-¡Si y la principal es acogida por una familia de agricultores! — Marcy explicó una vez más a la rubia frente a ella.
-Marcy, con todo el respeto que te mereces como persona y princesa, no entiendo ni mierda.
Anne le pegó en la nuca a Sasha y la miró mal. Marcy rió ante esto.
-Se nota, eres como los malos que están en las cantinas, pura fuerza y músculo pero nada de cerebro.
-Buena referencia, Anne — Marcy sonrió.
La castaña ocultó su evidente sonrojo de la pelinegra, Sasha le devolvió el golpe aprovechando la oportunidad.
-Es un buen libro, una vez que lo lees, no será tan difícil entender su mundo y todo eso.
-Confiaré en tu palabra.
-Estás obligada a hacerlo.
-A veces se me olvida que eres parte de la familia real y que soy una guardia — Sasha rió.
-No me lo recuerdes, me gusta pensar que no lo soy cuando estoy con ustedes.
-¿Quién no querría esto, por qué olvidarlo así?
Marcy rió y desvió la mirada de los ojos azules de la rubia.
-No lo sé, estar encerrada en este lugar no es demasiado llamativo, la verdad.
-Nunca comprendo ni la mitad de lo que dices.
Marcy observó a Sasha.
-Por eso te lo digo.
Anne pareció reaccionar, volteó hacia Sasha, ofendida ante el golpe que esta le había dado.
-Ni se te ocurra quejarte, que has empezado vos.
-Ugh — Anne se quejó.
Sasha y Marcy rieron ante la indignación de la castaña. Golpes se escucharon en la puerta llamando la atención del trío. Anne y Sasha se levantaron de la cama rápidamente, seguramente era Lady Olivia.
Por obligación, Sasha fue a abrir.
Lady Olivia entró y recorrió la habitación de Marcy con la mirada hasta que esta se topó con la princesa.
-Princesa Marcy, el rey Andrias la espera en la sala de tronos — dijo.
Marcy arregló su cabello y caminó hacia Lady Olivia.
Marcy fue la única que entró en la sala por órdenes de rey, así que, lamentablemente, Anne y Sasha se quedaron afuera, junto al resto de guardias.
Porque eso eran, un par de guardias.
Marcy se acercó al rey, sus zapatillas resonaron en la alfombra llamando la atención del hombre frente a ella.
La princesa hizo una pequeña referencia y observó al rey esperando a que este hablara.
-¿Qué opinas?
-Quiero que se queden, ya pasaron 2 meses desde que llegaron, rey Andrias. La general Yunan nunca se equivoca.
Los ojos del rey se posaron en Marcy, la princesa no palideció y mucho menos dejó su postura firme ante esto.
El rey Andrias se levantó del trono y caminó hacia Marcy, se arrodilló frente a ella y los ojos de ambos se encontraron.
-Espero estés siendo sincera, Marcy.
-Claro que lo soy.
El rey Andrias suspiró.
-Puedes llevarlas si eso es lo que quieres.
Marcy sonrió.
-¿De verdad?
El rey Andrias sacó una llave de su bolsillo y se la entregó a Marcy, la princesa observó la llave con ojos brillantes y emocionados.
-¡Gracias, gracias, gracias!
-Espero se diviertan.
-¡Claro que lo haremos!
-Descansa, maestra Marcy, ha sido todo por hoy.
Marcy salió de la sala, emocionada.
Esto sería un gran avance en su plan, a pesar de que le había prometido al rey ser sincera.
Pero... ¿Qué no la vida se trata de retos y tomar los riegos que se te ponen al frente?
Si Marcy quería salir del castillo y dejar de escuchar aquella etiqueta que odiaba tanto, tenía que mentirle de vez en cuando a su superior.
Pero no importaba, nada se compararía con poder sentir finalmente el grandioso sabor de la libertad.
𖡼.𖤣𖥧𖡼.𖤣𖥧
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro