Conan

Hoy es el primer día de escuela para Iris, espero que no vaya a hacer una de sus payasadas allá. Caminamos hacia el edificio cuando Iris se apoya en un muro, tocándose la cabeza y gimiendo.

-Iris ¿Qué te ocurre?- digo poniendo mi mano en su hombro.

- No... no es nada, Blassy, solo me dan unas puntadas en la cabeza, es normal- se incorpora y sigue caminando.

-¿Cómo que normal?- la miro más de cerca.

-Bueno, para mí es normal, desde pequeña, mas bien "más pequeña", he tenido estos dolores pero se me pasan.

-Tal vez deberías ir con el profesor, puede que tus jaquecas, afecten el veneno y te hagan algún daño- la detengo y me mira burlona.

-Cálmate,"doctor Blassy" estoy segura que no me va a pasar nada, ahora apresúrate, que no quiero llegar tarde- me toma de la mano y empezamos a correr.

Unos minutos después llegamos a la escuela, al entrar, la liga juvenil de detectives corre hacia nosotros y nos saludan.

-Hey Conan- me susurra dándome un empujoncito- ¿quién es ella?, no me ha dejado de ver, ya me empieza a asustar.

-Ja, no, ella es solo Ai, también es nuestra amiga- le dice Ayumi riendo.

Ai se acerca a nosotros con una sonrisa, saludando a los demás, pero cuando nos mira a mí y a Iris, se pone seria en un dos por tres.

-¿Quien es ella, Conan?- parece molesta.

-Soy su hermana, Verona, ¿y tú eres?- se acerca más.

-Yo creo que te lo dijeron ya, no hay necesidad de decirte quien soy- dice cortante.

-Entonces gaste saliva al decirte el mío- dijo alejándose de ella.

-¿Pueden acompañarme? Necesito ayuda con una tarea- muestra en sonrisa infantil y suave.

-Ok-

-Ok-decimos al unisonó.

Nos lleva a la pequeña plaza de atrás, me toma del cuello de la camisa y me levanta un poco en el aire.

-¿Cómo se te ocurre traer a esta desconocida a la escuela, y como que tu hermana?-me dice furiosa.

-Escucha, te lo explicare- me asfixia un poco.

-¡HEY!- Iris empuja a Ai al suelo, también cayéndome- no lo vuelvas a tomar así, o juro que te mato.

¡¿Qué diablos paso aquí?! La misma que me fastidia me... ¿defiende?, esto sí que me deja el cerebro frito.

-Vaya, si que tienes fuerza, niña- dice Ai levantándose.

-Tengo más que eso- Iris se acerco a Ai con los puños cerrados, obvio para golpearla.

Corro hacia ellas, para evitar el pleito, las dos tratar de apartarme pero me mantengo firme.

-Haibara, ella le paso lo mismo que a nosotros- le digo por fin deteniéndola.

-¿Qué?- quita mis manos de ella.

-Eso, ella es Iris- la saluda con un ademan- la encontré el viernes, cuando fuiste al campamento científico.

-Fue por culpa de esos hombres, ¿verdad?- me da la espalda.

-Si-contesta Iris acercándose a mí.

Entonces Ai sale corriendo, dejando su mochila, sus cuadernos y todo regado en el césped.

-Tengo que ir a disculparme- me dice empezando a correr.

-No déjala- la detengo- le paso algo parecido que a ti, también los odia, le quitaron todo, necesita calmarse, es todo.

Me mira con culpa y agacha la cabeza, toca la campana y entramos a clases.

-¿Enserio esto es necesario?- entramos al salón.

-Aunque no quieras, si, tienes que hacerlo, no creas que a mí me gusto hacerlo, sentí vergüenza como nunca en viva, bueno excepto cuando a Claudia se le vio...- casi digo cuando la falda de Claudia en mi cara.

-¡¿Se le vio qué?! ¡¿Se le vio qué?!- me zarandeaba de un lado a otro.

-¡Nada, nada, nada, nada...- seguí así unas treinta veces, ahora este, era el momento mas vergonzoso de mi vida.

Llegan todos al salón, y yo dejo a Iris enfrente de la clase, a ver que se le ocurre ahora. Ayumi y Genta le tienen un lugar apartado, y Mitsushiko le llena de papeles y cosas así, con una cara de bobo, que era imposible no reírse al verlo.

-Niños...niños... ¡NIÑOS!-nos grita la maestra suplente, la señorita Sujusa- ella es una nueva alumna, espero que la reciban bien- le la un empujoncito para que hable.

-Este... este, soy Verona Blassy, la hermana de Conan, vivía en la ciudad de Taimusu, cerca de aquí, mi mamá tuvo que ir a un viaje, así que... me tendrán que aguantar por una temporada, espero agradarles.

-Yo creo que no- me giro y veo a Ai en la entrada.

- señorita Haibara, ¿porque llega tarde?-

-Disculpe maestra, tuve que buscar mi mochila en el baño-

Paso junto a Iris, con una mirada que gritaba "te voy a matar a golpes", hasta sentarse al lado mío.

Las clases siguen y en todas pasaba lo mismo, Ayumi y Genta hablaban sin parar, Mitsushiko se pasaba suspirando viendo a "Verona", Ai también la miraba pero con una cara de desconfianza mezclada con enojo, y la niña que captaba la atención de todos, esta es su escritorio, roncando de lo lindo. Al tocar el timbre para irnos, casi se cae del asiento, me puse a reír, pero me jalo de las orejas, aun así valió la pena.

-¡POR FIIIIIN!, la tortura acabo, solo quiero llegar y dormir en la cama- caminamos por la escalera del edificio, ella levanta los brazos, y grita a los cuatro vientos.

-Aun quieres dormir, cuando en la clase te la pasabas roncando- Ai aparece caminando al lado mío.

-¿Acaso te importa?- Iris le dirigió una mirada fría hacia ella.

-Ok, no te enojes, solo quería pedir perdón, fue algo brusca-

-¿Algo?- levantando una ceja con sarcasmo.

-no me interrumpas, que dices, ¿amigas?-

Ai trata de darle la mano, pero Iris la aparta rápido, sabía que no quería hablar, sino las dos se ensañarían conmigo.

-No, amigas no, las personas no tienen mi confianza, se la tienen que ganar-me mira.

-Me agrada- ellas son bipolares.

Llegamos al final del edificio, pero no vi a los chicos seguirnos, al fin un poco de paz, las chicas empiezan hablar de no sé que, hasta que dejan de hablar y veo que Iris cae al suelo sostenida de Ai.

-¡Verona! Qué te pasa, háblame- empieza a gritar Haibara, pero no reacciona.

-No...no, no es nada, es solo dolor de cabeza, nada mas- se levanta con mi ayuda.

-Esto no es solo dolor de cabeza, tienes que ver a alguien-le tomo del brazo, para que se apoye.

-¡NO!, tengo esto desde siempre, puedo lidiar con esto y no me van a obligar a nada- se separa de mi gritándome.

Se escucha un grito desde el otro lado de la calle, vemos hacia todos lados pero no encontramos a la persona, siguen los gritos, es de una mujer, caminamos hasta que Iris se detiene frente a mí.

-Ayumi...- susurra y empieza a correr en dirección a la escuela.

Llegamos hasta llegar a la plaza del lugar, no la encontramos, un nuevo grito nos alerta, se dónde viene, seguimos y los gritos se escuchan más fuerte, hasta que Ai y yo nos detenemos en frente del cuarto de limpieza.

Estaba iris abrazando a Ayumi con mucha fuerza mirando al interior del cuarto, con una mirada de asco y odio a la vez, mientras que Ayumi decía cosas que no se entendían pues su voz era quebradiza por su llanto, la mire mejor y su rostro estaba manchado de sangre.

Me introduje mas en el cuarto, estaba oscuro, no podía ver nada, ¿Qué diablos había ocurrido?

-Ai, prende la luz, por favor-se acerca la interruptor, quería decirme algo pero se tapo la boca con una mirada de horror.

Mire al frente y vi la que aterro a todas, Ayumi soltó otro grito, más agudo y quebradizo que los otro, era la maestra suplente, la señorita Sujusa , en la pared con las manos clavadas a ella por clavos, de la cabeza a los pies con sangre y rasguños , los ojos abiertos y una expresión de dolor o miedo.

-Que... ¿Qué paso?- me pregunta Ai en un hilo de voz, y luego aclarándose la garganta.

-fue un asesinato, es obvio, pero porque, quien, ¿Quién quiso hacer esa... esa monstruosidad- Iris se separo de Ayumi, se levanta y ve con asco el crimen.

Creo que tengo una idea.

-Fue alguien que la conocía bien, mucho antes de llegar a la escuela, su anillo no está y en la clase lo tenía-dije viendo su mano derecha con rasguños en los dedos y la marca de un anillo.

-Sí, y en las paredes las machas de sangre tienen marcas de dedos, como tratando de escribir algo o dibujar- se acerca más, mientras Ai la ve abrazando a Ayumi- son unas iníciales, aquí hay una S, Y, D, estoy segura que la ultima letra es del asesino.

-No es muy precavido- lo digo en leve tono de burla- en fin... este puede ser un crimen pasional, y está en la escuela.