Con esas miradas risueñas en sus brillantes ojos, ambos padres, veían a su pequeño Huang. Él se encuentra batallado en poder levantarse del suelo y dar su primer paso, era como ver un pollito moviendo su colita indeciso de levantarse.

Quería ir con sus padres, quiénes lo están viendo con grandes espectativas. Eso le daba fuerza a Huang, ver a sus padres así de sonrientes le hacía sentir feliz.

Pese a, los temeroso de caerse al primer intento, él siguió adelante hasta quedar de pie con sus piernitas regordetas todas temblorosas.

Se mantuvo así por un minuto entero antes de animarse a caminar en dirección a sus padres, con cada paso sus piernitas temblaban todavía más. Cerraba y abría sus ojos con nerviosismo, como si estuviese caminando en una cuerda sobre el aire.

Huang sigue caminando con su mirada fija en la de sus padres, levantado ligeramente las esquinas de su labios. "Miren, lo logré." Es lo que su mirada te decía.

—Eso ese—Xiao aplaude—Nuestro pequeño Huang, es sorprendente.—Sonríe con sus brazos extendidos, esperado la llegada de su hijo.—¡Huang, Huang!—Lo anima dulcemente.

—Solo un poco más, pequeño.—Pavel, ánimo a su hijo—Un paso más y estarás con nosotros.—Pavel se encuentra arrodillado detrás de Xiao, con sus manos también extendidas al rededor de las de su esposa.

—Oh-oh—Dejo salir un balbuceo de sus finos labios.—pa..pa—Sonríe tiernamente.

—¡¿Lo escuchastes?!—Cubre su boca con asombro.—¡Dijo papá!—Xiao limpia las esquinas de sus ojos, se había cristalizado un poco.

—Sí, lo escuché.—Besa dulcemente la nuca de Xiao.—Nuestro Huang es muy inteligente.

En está ocasión Huang, tiene un gran parecido con sus dos padres, es una bella mezcla entre frialdad y seducción por esos grandes y coquetos ojos violetas.

<Para ser más específico, dijo "papa" no "papá"> Corrige, 015. {¿Qué importa si no resaltó esa tilde?} Lo ve con su mirada entrecerrada. <Importa, y mucho.> {Tengo ganas de comer carne asada de panda.} 015, se calló y se alejó unos cuantos metros lejos de Xiao.

—¡SII!—Fue abrazado por sus padres.—Eres tan genial.—Besan toda la carita de Huang, haciéndole cosquillas.

015, si pudiera llorar lo haría, le parecía demasiado hermosa esa escena familiar. Escuchar las risas risueñas de su anfitrión.

—En unos meses más podrá ponerse de pie sin tambalearse.—Expresa Pavel.—Podra llevar la pequeña canasta y tirar los pétalos de rosas para la boda de su tío, Hegoi.

Hegoi y Eugene querían casarse desde hace un buen tiempo, antes de que naciera Huang. Sin embargo, Eugene estuvo aprueba por unos cuantos meses, porqué los padres de Hegoi, no quería que su hijo luego de un tiempo se divorciara.

Por eso prefería que primero se conociera lo suficientemente bien, sobre todo sus imperfecciones porqué de esa manera ellos dos, estarían sabedores y no estarían peleado por eso cuando convivieran juntos.

—Sí, tienes razón—Xiao, cariñosamente arregla los cabellos desordenados de Huang.—¿Quieres crecer rápido?—Preguntó como si pudiera entenderle, y así fue.

Huang, negó con su cabecita, que no quería crecer y tampoco que pasará el tiempo tan rápido, aunque todavía no pudiera hablar, Huang sentía miedo de crecer.

—Eres tan inteligente y eso me da un poco de miedo—Frota su rostro en el pecho de su hijo. Xiao no quería que Huang, recordara esas vidas pasadas—Te amo tanto mi pequeño, no te preocupes.—Lo pone sobre su pecho, con su rostro escondido en el cuello de su papá, haciendo conectado visual con su padre.

—Gracias por venir con nosotros.—Mi dedo fue sostenido por esa pequeña manito.—Eres nuestro mayor regaló.—Los ojos de Pavel, eran completamente negros.—Tal vez no te lo digo, pero quiero que sepas que te amo mucho, hijo.

Xiao giro un poco, una gran sonrisa pinto su rostro. Esa voz y esos ojos le hicieron saber que Pavel, había tomado control por completo de ese cuerpo.

—Estoy vuelta.—Beso la frente de Huang y de su esposa.—Me disculpó por la espera.

—Bienvenido.—Se arrullan en los fuentes y confiables brazos de Pavel.

Gentilmente cubrí los ojos de nuestro hijo, no quería que nos viera dándonos mucho amor, quería besar los jugosos labios de mi esposa. Aunque, no estamos casados aún, en este mundo. Esos no importa porqué somos esposos desde hace más de cien años se podría decir, por lo años vívidos en esos diferentes mundos.

Aparte, mi mano izquierda en el dedo anular llevo ese anillo de compromiso y a la vez matrimonio, no me lo he quitado ni me lo quitaré nunca.

Tanto mi Xiao como yo, llevamos algo que nos pertenece mutuamente, él ese collar que le regalé cuando, su papel era ser un doctor y el me obsequio este anillo cuando estuvimos en ese mundo de cuando éramos humanos que nos podíamos transformar en animales.

—Bien, bien, me disculpo.—Retiro su mano de los ojitos de Huang, se encuentra molesto por esa acción, mordiendo así, el dedo de Pavel.—¡Eso duele!

Pavel fingió que dolía, sin embargo lo único que había sentido era un masaje por sus suaves ansias, a Huang todavía no le han salido los dientes, a penas le empieza a salir quizas.

—¿Qué tal si salimos a caminar?—Sugiere Xiao.—El día está agradable, ¿Tal vez encontremos algún consejo?

—Sí.—Pavel sostiene a su hijo en un solo brazo y con el otro rodea la cintura de Xiao.—Es un buen día para ver alguna ardilla.

—Veo que le gusta la idea.—Xiao presionó levemente la mejilla de Huang, sus ojos muestran emoción por salir.

Después de que Huang naciera, nosotros dos nos vinimos a vivir a este lugar rodeado de solo naturaleza, me recordó los años que vivimos en una cabaña en uno de eso otros mundos atrás.

La verdad, me encanta vivir en lugares así de hermosos, levantarte con el cantó de las aves aunque aveces me irrita su cantar. Pero, bueno.

Lo mejor de todos es que, no tenemos que lidiar con la miradas de esas personas y mucho menos ser acosados por los paparazzi que siguen de cerca a Pavel, después de todo, es hijo de unas personas incluyentes.

¿Cómo no amor a este hombre? Están malditamente sexy y todo lo que hace lo hace por mi comodidad y la de nuestro hijo.

Renunció a todas las cosas materiales todo para que Huang y yo, viviéramos nuestro día a día sin preocupaciones alguna. Sin pensarlo dos veces, Pavel tiró su prestigio y decidido convertirse en un hombre de hogar, dedicado a su esposa e hijo las 24/7.

Si estuviera en su lugar también haría lo mismo sin pensarlo. Aquí tener un buen nombre o prestigio sale sobrado después de cumplir la misión. Porqué lo único importante es vivir felizmente con mi familia hasta el momento en que tenga que partir nuevamente.

En está ocasión tendré mucho tiempo para disfrutarlo con mi esposo e hijo, sin embargo me sigue doliendo hacerle sufrir a Huang, hacerlo pasar por ese dolor de perder no a uno si no qué a sus dos padres, casi al mismo tiempo.

Solo espero que en este mundo no recuerde tan rápido esos recuerdos dolorosos, no quiero que se ahogue en preocupación, aunque nuestro pequeño Huang, es mucho más fuerte que Pavel y yo juntos.

—Mira, ahí va una ardilla.

Huang, sigue detenidamente el dedo de su padre, abriendo sus ojos en grande al ver esa ardilla, cuidado de la ardilla bebé y después se les unió al parecer el padre.

—Son un familiar de tres como nosotros...

{Bueno, una familia de cuatro ya que hay un perro blanco y negro con nosotros.} <¡Soy un panda!> Le da la espalda a Xiao, ocultado su sonrisa. No podía ocultar que de alguna forma se sintió feliz de ser llamado su familia.

Sistema: la felicidad de mi anfitrión al ver caminar a su hijo, es más inmensa en cada mundo. Esa mirada solo puede brillar así de extraordinario cuando los tres están por fin reunidos. Ya solo quedan tres mundos para que ese martirio de separación ya no vuelva a suceder.

Sin embargo, ¿qué pasará cuando la existencia de Xiao, vuelva a resonar en ese lugar? ¿Está vez podrán vencer la furia del señor Dios, su padre? Esperó que sí, o se desatará la guerra que desde un principio fue detenida con la muerte de mi anfitrión, hace más de miles años.